Prácticas y guía de buen trato a la Infancia en la Administración de Justicia del partido judicial de Las Palmas de Gran Canaria.
From a children’s rights perspective, Spain, Country Profile on the European Semester and COVID-19 crisis...
En este informe está el referido a España:
Prevención y detección de la violencia en niñas, niños y adolescentes. Dos Cursos Formación Especializada en Canarias.
CURSO 2º: FORMACIÓN JURÍDICA ESPECIALIZADA PARA PROFESIONALES QUE TRABAJAN CON LA INFANCIA. CAPACITACIÓN COMO DELEGADO O DELEGADA DE PROTECCIÓN JUSTIFICACIÓN.
La nueva Ley Orgánica de protección integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia, que está a punto de aprobarse, señala como uno de sus fines: “Impulsar la detección precoz de la violencia sobre la infancia y la adolescencia mediante la formación multidisciplinar, inicial y continua de los y las profesionales que tienen contacto habitual con los niños, niñas y adolescentes”. Además, impone la especialización y capacitación de los y las profesionales que tienen contacto habitual con niños, niñas y adolescentes para la detección precoz de posibles situaciones de violencia. Y, en su apartado 5 (Formación), indica: “Las Administraciones Públicas, en el ámbito de sus respectivas competencias, promoverán y garantizarán una formación especializada, inicial y continua en materia de derechos fundamentales de la infancia y la adolescencia a los y las profesionales que tengan un contacto habitual con las personas menores de edad”. Al mismo tiempo establece que las entidades que realizan de forma habitual actividades deportivas o de ocio con personas menores de edad están obligadas a aplicar los protocolos de actuación que adopten las Administraciones Públicas y a designar la figura del “Delegado o Delegada de protección”, al que las personas menores de edad puedan acudir para expresar sus inquietudes y quien se encargará de la difusión y el cumplimiento de los protocolos establecidos, así como de iniciar las comunicaciones pertinentes en los casos en los que se haya detectado una situación de violencia sobre la infancia o la adolescencia.
Profesionales que ya trabajen y/o quieran cualificarse en Servicios sociales especializados de infancia: - Trabajadoras/es sociales - Educadoras/es sociales - Psicólogos y Psicopedagogos - Profesores, Educadores, etc.
"Mi regalo para todos los niños del mundo", Albert Bruce Sabin.
La lucha contra la pobreza infantil debe tener un enfoque local.
Ciudades Amigas de la Infancia, UNICEF.
La pobreza en la infancia y adolescencia supone uno de los mayores retos de la actualidad. En Europa, un total de 19,4 millones de niños y niñas (uno de cada cuatro) está en riesgo de pobreza o exclusión social en Europa, como ha recordado Olivier De Schutter, relator especial de las Naciones Unidas sobre la pobreza extrema y los derechos humanos, en un comunicado. En España hoy, 3 de febrero, el presidente del Gobierno ha presentado la Alianza de país Pobreza Infantil Cero, formada por 75 entidades, para realizar avances en la lucha contra esta lacra y que parte de la idea de que la pobreza infantil es un problema estructural.Pero la pobreza infantil tiene, además, una fuerte dimensión territorial. Es decir, que la oportunidad de un niño o niña de realizar todo su potencial o bien de sufrir riesgo de pobreza y exclusión está muy ligada a aspectos como su situación socio-económica y, también, la ciudad, el vecindario o las características del hogar donde vive.
Las ciudades tienen una tasa de pobreza infantil más alta que el resto del país, según el estudio de Eurocities Fighting child poverty in European cities, Lessons from cities for the EU Child Guarantee, publicado en diciembre de 2020. Nueve de cada 10 ciudades encuestadas para este informe confirmaron tener una mayor proporción de niños que viven en la pobreza que el promedio de su país. Esto se debe a que las familias que viven en ciudades enfrentan desafíos urbanos específicos que aumentan su riesgo de pobreza, como un coste de vida más elevado, falta de vivienda asequible y de lugares de cuidado infantil, etc. Para los autores del informe esto es, en parte, el resultado del crecimiento dinámico de los núcleos urbanos, que ahora albergan al 75% de la población europea.
Además, dentro de las propias áreas urbanas también hay fuertes desigualdades: casi todas las ciudades encuestadas para el estudio (32 de 35) señalan que en algunos de sus distritos urbanos la pobreza infantil es considerablemente más alta que el promedio de la ciudad, y en la mayoría existen grandes disparidades entre sus distritos o vecindarios.
Qué pueden hacer las ciudades: aprendizajes de la pandemia
Esta dimensión territorial de la pobreza infantil tiene, en la otra cara de la moneda, un aspecto esperanzador: las ciudades y municipios juegan un papel clave en la lucha contra la pobreza en la infancia y en la ruptura del ciclo intergeneracional. Al ser el gobierno más cercano a la gente, las autoridades locales son las primeras en ver y responder a las necesidades de sus habitantes: es algo que quedó patente durante la crisis del COVID-19.
Para hacer frente a esta realidad, muchos gobiernos locales están llevando a cabo una estrategia local integrada para reducir la pobreza infantil, combinando a menudo un enfoque sistémico de apoyo a las familias con medidas específicas para abordar las necesidades concretas de los niños de grupos particularmente vulnerables (familias monoparentales, inmigrantes, romaníes, necesidades especiales).
¿Qué se ha hecho en esta línea desde la llegada de la pandemia? Las ciudades han actuado para mitigar el gran impacto que esta está teniendo en la infancia y adolescencia, especialmente desde el cierre de escuelas y guarderías en 2020. Lo han hecho con medidas como proporcionar ayuda alimentaria, equipos y dispositivos digitales para ayudar a los niños a seguir las clases en línea, e incluso apoyo a los ingresos, asesoramiento psicológico y recursos de juego, etc.
Estrategias municipales para luchar contra la pobreza infantil
De acuerdo con el informe de Eurocities, todas las ciudades encuestadas trabajan activamente para prevenir o reducir la pobreza infantil y la mayoría de tienen una estrategia específica para reducir la pobreza infantil a nivel municipal. Estas son las más comunes:
1. Un enfoque holístico, integrado y transversal: es, según el informe, especialmente efectivo para mejorar la situación de las familias (por ejemplo, mejorar el acceso a la vivienda, el empleo y los ingresos dignos para los padres). Entre los ejemplos de este enfoque, el informe menciona el Plan Local de la Infancia y la Adolescencia de Madrid, que incluye la participación infantil, el mantenimiento de un entorno urbano saludable y una línea de acción estratégica para la evaluación de las intervenciones en curso. También, el ejemplo de «Thriving«, estrategia contra la pobreza infantil de la ciudad de Leeds (Reino Unido), centrada en la creación de «asociaciones» entre todos los actores locales relevantes que trabajan con la infancia, incluyendo niños y jóvenes, para fomentar la responsabilidad conjunta y la propiedad compartida para abordar los problemas que afectan la pobreza infantil.
2. Otra tendencia es centrarse en mejorar el acceso a la educación y el cuidado de la primera infancia y la educación escolar (por ejemplo, aumentar el número de plazas en el cuidado de los niños, reducir las tarifas para las familias de bajos ingresos, proporcionar beneficios en especie como comidas escolares gratuitas, o apoyar el acceso a los deportes, la cultura y el ocio). El informe aporta el ejemplo de la ciudad de Liubliana, en Eslovenia, donde el cuidado infantil y la educación preescolar son asequibles y accesibles para todos.
3. Adoptar un enfoque local. La mayoría de las ciudades del informe, tres cuartas partes de la muestra (26 de 35), aplican un enfoque territorial basado en el lugar para abordar las necesidades específicas de los niños en los vecindarios con las tasas más altas de pobreza. Algunas han puesto en marcha planes territoriales integrados para cerrar las brechas en las condiciones de vida entre las diferentes áreas urbanas. Otras ciudades han desarrollado programas específicos para la regeneración urbana de sus zonas más desfavorecidas, que incluyen acciones para reducir la pobreza infantil.
Un ejemplo de esto último es la estrategia ‘Pla de Barri‘ de Barcelona para 2016-2020, consistente en «planes de vecindario» con acciones para mejorar las condiciones sociales de los niños y cuyo objetivo es reducir las desigualdades sociales en 16 barrios de la ciudad.
4. Prevención e intervención temprana. Las ciudades pueden adoptar mecanismos para identificar los factores de riesgo, como la vulnerabilidad económica debido a bajos ingresos familiares, las dificultades sociales familiares (estrés de los padres, conflictos familiares, violencia doméstica, etc.) o las dificultades educativas. Un ejemplo: para prevenir la vulnerabilidad económica, muchas ciudades han implementado ayudas como comidas escolares gratuitas, subsidios para familias, becas sociales, etc.
5. Promover la participación infantil. Los responsables de la formulación de políticas a nivel local, nacional y de la Unión Europea deben involucrar a los niños y niñas en las decisiones que los afectan directamente. Para ello, es importante garantizar que las voces de los niños y niñas se escuchen y representen la diversidad de la infancia. Un elemento clave para esta estrategia son los consejos infantiles y juveniles.
De acuerdo con el informe, tres cuartas partes de las ciudades consultadas han establecido estructuras o procesos específicos para la participación de niños y jóvenes en sus políticas. Los enfoques más comunes son los Parlamento y consejos de infancia, los procesos participativos (encuestas, grupos focales de niños y niñas para co-crear ideas para nuevas políticas…), o los presupuesto participativos.
“El tratamiento informativo de la trata de niñas y niños con fines de explotación sexual: Decálogo de buenas prácticas para medios de comunicación”.
En el marco el Programa Tejiendo Redes Seguras, PROTEJERES, una estrategia integral para proteger a niños, niñas y adolescentes frente a la trata con fines de explotación sexual, FAPMI-ECPAT España y Fundación EDUCO, publicamos el DECÁLOGO “El tratamiento informativo de la trata de niñas y niños con fines de explotación sexual. Decálogo de buenas prácticas para medios de comunicación”, acceso digital. Este decálogo se ha diseñado como una guía de buenas prácticas para el tratamiento desde los medios de comunicación, de una de las más terribles vulneraciones de los derechos de las personas, y en concreto de niños, niñas y adolescentes: la trata de seres humanos. A pesar de que la trata puede manifestarse de diferentes formas, por su impacto en todas las esferas de la vida de las personas que la sufren, en este caso nos hemos centrado en la trata de niños, niñas y adolescentes con fines de explotación sexual, una problemática que, a pesar de los esfuerzos invertidos para hacerle frente, sigue siendo invisible en nuestras sociedades, victimizando a millones de personas en todo el mundo. En nuestro país la trata con fines de explotación sexual también afecta a decenas de personas menores de edad cada año. Y para combatirla es fundamental que todos los sectores implicados, incluidos los medios de comunicación, aunemos esfuerzos en su prevención. Siendo conscientes de la influencia del sector mediático y su papel fundamental en cuanto a la visibilización de la problemática y, por tanto, en el cambio social, este decálogo pretende precisamente eso: contribuir a la promoción de la participación proactiva de los medios de comunicación como agentes clave en la lucha contra esta problemática. |
Todos los materiales y avances del Programa están disponibles en la página web: |
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Las niñas y niños de Cañada Real y sus derechos, objeto de disputa.
En los últimos años, y erosionando desde diversos frentes la legitimidad de los Derechos Humanos (niñas y niños son seres humanos, por si aún alguien pueda albergar alguna duda al respecto), se ha acentuado la disputa (al hilo de cuestiones como el pin parental o los debates entre la educación concertada y privada, además de un largo etcétera) sobre si las niñas y los niños “son de los padres”, o “son del Estado”. La infancia siempre se ha situado en el ámbito de lo privado, al margen de las cuestiones públicas, como si estas no afectaran a sus vidas (sobre esto ya debatimos en este mismo medio).
Esgrimir excusas competenciales ante una gravísima violación de los Derechos Humanos no es admisible. Utilizar a la infancia como objeto de disputa entre competencias no es admisible.
Sin perjuicio de lo ya defendido por otros especialistas en derechos de la infancia, que han reclamado una respuesta inmediata, la situación cobra ahora la insólita deriva de convertir a niñas y niños en objeto de disputa entre las competencias del Estado. Léase: “Estos niños no son de mi negociado” o “esta Dirección General o Ministerio no tiene competencias en la materia”. Las familias asisten a una nada edificante pelotera sobre a quién le corresponde actuar. Un áspero debate en el que se pretende “apagar” a la infancia de Cañada Real, aislarla en “territorio de nadie” ahora que, paradójicamente, la zona cobra un gran interés por la política del ladrillo. Poco importa que lleven cerca de 150 días sin acceso a la electricidad, que hayan visto sus derechos suspendidos de forma abrupta por la empresa responsable del suministro eléctrico y las diferentes administraciones públicas directamente implicadas. Niños de la Cañada Real piden electricidad a los Reyes Magos, Pablo 'Pampa' Sainz.
Ahora Naciones Unidas, a través del Relator Especial sobre la Extrema Pobreza y los Derechos Humanos, Olivier De Schutter, responde de nuevo inequívocamente al Estado español con el argumento que venimos defendiendo en reiteradas ocasiones: la protección de los derechos de niñas y niños de Cañada Real compete a las tres administraciones; esto es: gobiernos central, autonómico y local. Para ello se basa en argumentos claros del derecho internacional: España como Estado parte de los Tratados de Derechos Humanos y, por tanto, como sujeto de derecho internacional, tiene la obligación última del cumplimiento de dichos tratados. En román paladino: esgrimir excusas competenciales ante una gravísima violación de los Derechos Humanos no es admisible. Utilizar a la infancia como objeto de disputa entre competencias no es admisible.
Echar balones fuera, a modo de “estos niños no son de mi negociado”, no es nuevo en nuestro país y conviene recordarlo. El Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas, en el marco de su labor de velar por el adecuado cumplimiento de la Convención sobre los Derechos del Niño, de la que España tanto se vanagloria de ser parte, ha reiterado, desde hace años, en sus informes de Observaciones Generales (último en 2018) que el Estado firmante debe velar “por que la política y la estrategia tengan su fundamento en los derechos del niño, se conviertan en un componente integral de la planificación del desarrollo a nivel nacional y regional y abarquen los distintos contextos regionales”. Y si esto ahora no funciona, a lo mejor es otra señal de que necesitamos un ente rector que fortalezca un sistema de protección nacional en materia de derechos de la infancia y garantice la coherencia de políticas en todos los niveles. En el mismo informe, el Comité reitera la recomendación de que “el Estado firmante [España] siga fortaleciendo sus sistemas de coordinación en la administración central y entre las comunidades autónomas para aplicar políticas destinadas a la promoción y protección de los derechos del niño (véase también CRC/C/ESP/CO/3-4, párr. 12)“.
Ahora, tras cinco meses de pelea entre las distintas administraciones, a la que las niñas, niños y adolescentes de Cañada Real asisten con perplejidad y descorazonados, el Relator de Naciones Unidas reitera lo afirmado —nótense las numerosas reiteraciones— y eleva el tono. Se puede decir más alto, pero no más claro: ya no acepta las explicaciones y excusas del Gobierno de España sobre lo que interpreta como una dejación de responsabilidad en el conflicto abierto en el asentamiento madrileño de Cañada Real. En el ejercicio de sus funciones como Relator, acusa al Gobierno de España de incumplir sus obligaciones internacionales, de no atender a sus requerimientos y de anteponer argumentos basados en un reparto de competencias conforme al derecho interno, esto es: que si bien las competencias en políticas de Atención Integral para la Protección de los Derechos de la Población Infantil están en manos de las comunidades autónomas —ese entramado legislativo que se traspone en 17 leyes cuya antigüedad, por cierto, se sitúa entre 1998 y 2010 en función de cada CCAA—, este no es el único marco jurídico ni competencial que considerar, ni tampoco el más importante. Cañada Real, la vida bajo cero, Pablo 'Pampa' Sainz.
Una vez más Naciones Unidas se ha pronunciado, como debe hacer cuando los Estados atropellan derechos recogidos en diferentes instrumentos, porque esa es su función, instar al Gobierno a tomar “medidas urgentes” (llegan con cinco meses de retraso) y a dar cumplimiento al pacto firmado por las tres administraciones con el fin de resolver el problema: Pacto Regional por la Cañada Real Galiana. En su firma (mayo de 2017) se anunciaba como un “momento histórico: el de la unanimidad de todos los representantes políticos en la búsqueda de soluciones para Cañada Real, y un reflejo del esfuerzo conjunto de Administraciones, Entidades Sociales y ante todo Vecinos, protagonistas de este proceso histórico de cambio”. Un esfuerzo del que hoy nadie parece estar dispuesto a cumplir las responsabilidades que conlleva.
De Schutter argumenta que lo verdaderamente irresponsable está siendo “dejar a los niños sin electricidad en medio del invierno” e insiste, en este sentido, en algo que, después de tanto tiempo de peleas competenciales, debería ser ya una evidencia incuestionable, y es que el hecho que la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Madrid tengan unas obligaciones y unas competencias jurídicas en la Cañada Real —que están incumpliendo—, como ha venido justificando el Gobierno central para no intervenir en el conflicto, “no exime al Estado español, como sujeto de derecho internacional, del cumplimiento de sus obligaciones como Estado Parte”. Moncloa, dice el Relator, “debe tener esto en cuenta, máxime cuando se trata de satisfacer el deber de socorro en la situación de grave desamparo e indefensión que experimentan los habitantes de la Cañada Real Galiana”. O sea, está denunciando explícitamente que los derechos humanos de las niñas y niños no pueden ser objeto de semejante pelotera; esos derechos no se cuestionan, no se discuten; no cabe excusa alguna para que aquellos a quienes compete actuar se inhiban de asumir sus responsabilidades.
Se puede decir más alto, pero no más claro: el Relator ya no acepta las explicaciones y excusas del Gobierno de España sobre lo que interpreta como una dejación de responsabilidad en el conflicto abierto en el asentamiento madrileño de Cañada Real.
La ONU señala que sigue esperando con impaciencia (expresión poco habitual en un Relator) una respuesta adecuada del Gobierno a la situación de los niños y niñas en la Cañada Real. El mismo desasosiego se ha instalado en las vidas de Doua, Salma, Yasmine, Adam, Tarik, Omar, Hkadija, Saac, Amal, Ghalia, Reyan, Saber, Kulud y así hasta casi 2.000 biografías concretas. Una población infantil que, amparada en el artículo 15 de la Convención, que reconoce el derecho a la libertad de asociación y a celebrar reuniones pacíficas, está saliendo a las calles a defender sus derechos, participando en diferentes acciones reivindicativas, como han sido enviar 50 cartas a Naciones Unidas, acompañar a sus familias para concentrarse ante la sede de Naturgy; escribir cartas a “los Reyes Magos” y leerlas ante la sede del Ayuntamiento de Madrid o recordar el mismo día de Nochebuena al Gobierno Regional de la Comunidad de Madrid su obligación de actuar. Este mismo miércoles 17 de febrero, se concentraron ante la sede del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, para denunciar la pobreza energética en la ciudad en la que viven y recordar al Gobierno central y a la sociedad en su conjunto su derecho a unas vidas dignas de ser vividas. No piden privilegios, sino el cumplimiento efectivo de sus derechos, los mismos que el Estado español ha ratificado y asumido como parte de su ordenamiento jurídico y sus políticas públicas.
Estos niños y niñas viven en Madrid, una ciudad que en 2008 fue distinguida con el galardón de “Ciudad Amiga de la Infancia”, al igual que la Comunidad Autónoma de Madrid, que en 2018 obtuvo el sello de un programa cuyo objetivo es “que cualquier ciudad se comprometa con el cumplimiento de los derechos de niñas, niños y adolescentes, recogidos en la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas (1989)”. Cabe también recordar que el pasado 21 de enero el pleno del Ayuntamiento de Madrid aprobaba el IV Plan de Infancia y Adolescencia (2020-2023) atendiendo a uno de los requisitos formales para renovar este reconocimiento. Así las diferentes instituciones implicadas en el Programa CAI (la Federación Española de Municipios y Provincias-FEMP, el Instituto Universitario de Derechos de la Infancia y Adolescencia IUNDIA de la Universidad Autónoma de Madrid, la Vicepresidencia de Derechos Sociales y Agenda 2030, y el propio Comité español de UNICEF) deberían atender las exigencias de Naciones Unidas y escuchar las peticiones de las niñas y niños de Cañada Real y valorar la pertinencia de esa posible renovación, pues la misma no parece que cumpla con todas las garantías mientras no se restituyan con urgencia los derechos de la población infantil en Cañada Real: tienen que actuar de forma coordinada y el gobierno local de Madrid debería poner ahora el mismo empeño en su renovación (prevista para abril de 2021) para garantizar las condiciones merecedoras de este reconocimiento.
Es hora de poner en marcha una institución con carácter nacional, un Defensor de los Derechos de los/las Niños/as para actuar ante situaciones incorrectas o irregulares de las administraciones, instituciones y autoridades.
A estas alturas ninguno de los gobiernos puede eludir sus competencias, los argumentos que insisten en la idea de “estos niños no me corresponden” no son admisibles. En un contexto donde la pobreza que afecta a la infancia es evidente y donde se están violando gravemente los derechos de los niños y las niñas, no hay otra opción que actuar decididamente para restituir a todos los niños y niñas en el pleno ejercicio de sus derechos.
Tras tres décadas de ratificación de la Convención, es hora de poner en marcha una institución con carácter nacional, un Defensor de los Derechos de los/las Niños/as para actuar ante situaciones incorrectas o irregulares de las administraciones, instituciones y autoridades que afecten sus derechos y vele para que los responsables de formular las políticas públicas nacionales, autonómicas y locales, tengan en consideración los derechos de la población infantil. No son pocas las ocasiones en las que esperar las exigencias de los organismos internacionales conlleva un tiempo del que niñas y niños no disponen, aunque parezca lo contrario.
*Marta Martínez Muñoz, Socióloga. Acompaña a las niñas y los niños de la asociación Mujeres Tabadol y Juventud en Acción Cañada (JAC) en la Defensa de sus Derechos. @MMM_DDHH.
América Latina aspira a ser la primera región del mundo libre del trabajo infantil.
ILO/Marcel Crozet |
Este es el Año Internacional para la Eliminación del Trabajo Infantil en las Américas. Gobiernos de la región, organizaciones de empleadores y de trabajadores y la sociedad civil, se unen para avanzar hacia el logro de la meta 8.7 de la Agenda 2030, que busca a poner fin al trabajo infantil en todas sus formas para el 2025.
En un acto oficial celebrado este jueves, se lanzó el Año Internacional para la Eliminación del Trabajo Infantil en las Américas, siguiendo así la estela de la Asamblea General de la ONU que proclamó el 2021 como el año para tomar conciencia de la necesidad de acabar con esta lacra.
El director general de la Organización Internacional del Trabajo, Guy Ryder, dijo durante el acto, que se celebró de forma virtual, que se trata de una oportunidad histórica para dar respuesta a una de las peores crisis de los tiempos modernos, la del COVID-19, que tiene consecuencias dramáticas para el presente y futuro de niñas y niños.
Ryder añadió que se requieren acciones urgentes y eficaces por parte de los gobiernos, las organizaciones de empleadores y de trabajadores, y la sociedad civil en su sentido más amplio.
También señaló que ha habido avances importantes en la materia. En el año 2020, el Convenio 182 sobre las peores formas de trabajo infantil alcanzó la ratificación universal y en todo el mundo.
Otro avance es el hecho de que, en el periodo comprendido entre el año 2000 y el 2016, se redujo en 100 millones el numero de niñas, niños y adolecentes que trabajan.
Sin embargo, alertó que los efectos de la pandemia de COVID-19 tiene el potencial de revertir gran parte del progreso alcanzado por el aumento de la pobreza, la caída de los ingresos familiares y el cierre de las escuelas. De ahí la urgencia de impulsar acciones efectivas que pongan a salvo a este sector de la población.
El trabajo infantil en la región de América Latina.
De acuerdo con Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la CEPAL, el trabajo infantil es producto y origen de cadenas de desigualdad.
Derivado de la pandemia, puede haber un importante aumento de la tasa de trabajo infantil en la región, lo que implica que al menos entre 109.000 y 326.000 niños niñas y adolescentes podrían ingresar al mercado de trabajo sumándose a los ya 10,5 millones que están en esta situación.
Por ello, dijo que es indispensable universalizar el acceso a la protección social y a la salud y otorgar un ingreso básico de emergencia a los niños, niñas y adolescentes en la región y sobre todo garantizar educación para todos sin discriminación con estándares de calidad y con adaptación a nuevas tecnologías.
“Ahora más que nunca los niños, niñas y adolescentes deben estar en el centro de las prioridades de acción y por ello es urgente revitalizar las alianzas entre los gobiernos, los empleadores, los trabajadores, la sociedad civil y la cooperación internacional para intensificar los esfuerzos para que en un futuro muy cercano América Latina y el Caribe sea la primera región en el mundo en poner fin al trabajo infantil”.
Por su parte, Youssouf Abdel-Jelil, director regional adjunto del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia en América Latina y el Caribe, señaló la importancia de que los países detecten a niños, niñas y adolescentes que están atrapados en algunas de las peores formas de trabajo infantil analizando sus casos y reestableciendo sus derechos.
“Estamos comprometidos a trabajar con todos ustedes, gobierno, sociedad civil sector privado, para poner fin al trabajo infantil en las Américas”, aseguró.
David Longstreath/IRIN |
Las niñas, niños y adolescentes deben tener una infancia feliz.
Durante el evento de lanzamiento Sofía Mauricio, extrabajadora doméstica infantil, activista peruana por los derechos de las trabajadoras y trabajadores del hogar y representante de la Asociación Grupo de Trabajo Redes, ofreció su testimonio de cuando estuvo obligada a trabajar como niña.
Comenzó a trabajar a los 7 años y fue víctima de maltrato, explotación y violencia sexual. Ella salió de la zona rural de Perú para ir a trabajar a Lima con la finalidad de ayudar a su madre y a sus hermanos.
“El maltrato y la violencia y el dolor me hacía sentir que no valía para nada y cuando mi madre venía a verme y me preguntaba cómo me sentía, yo le decía que estaba bien por dos razones: una para que ella no se fuera triste y otra porque era amenazada”.
Por ello Sofía hizo un llamado a todos los sectores involucrados para eliminar el trabajo infantil y garantizar que las niñas, niños y adolescentes de la región puedan tener “una infancia con recuerdos felices, no una cómo la que tuve yo”.
Sí es posible.
Kailash Satyarthi, Premio Nobel de la Paz, señaló que sí es posible eliminar el trabajo infantil.
“Tenemos el conocimiento del problema, conocemos las soluciones, tenemos mucha más tecnología. ¿Entonces qué nos detiene?”, explicó.
Este lanzamiento es sumamente importante porque la respuesta a la pandemia ha sido tan injusta, al igual que inadecuada y desigual. No podemos darnos el lujo de retroceder, dijo antes de añadir: “Tenemos que salir con una promesa y decididos de que no permitiremos que esto ocurra más”.
América Latina une esfuerzos.
El evento contó con la participación de Iván Duque, presidente de Colombia; Alejandro Giammattei, presidente de Guatemala; Francisco Sagasti Hochhausler, presidente de Perú; Marvin Rodríguez Cordero, vicepresidente de Costa Rica; y Cícero Pereira da Silva, secretario de Políticas Sociales de la Confederación Sindical de las Américas (CSA).
Todos ellos reiteraron su compromiso con tomar medidas como cambios en la legislación, formación de los servidores públicos y aplicación de las herramientas existentes, como el sistema de información para la identificación registro y caracterización del trabajo infantil y las acciones de prevención y erradicación.
Los empleadores deben hacer su parte
Alberto Echevarría, representante de la Organización Internacional de Empleadores (OIE), señaló que este año trabajarán con el sector en dos frentes: con una campaña para que líderes empresariales trabajen en el objetivo 8.7 de la Agenda 2030 y a través del monitoreo de buenas prácticas para que se puedan intercambiarlas entre distintas organizaciones.
“Estamos involucrados decididamente en colaborar como miembros de la comunidad internacional y como empleadores en este tipo de iniciativas impulsadas en buena hora por Naciones Unidas y también por la Organización Internacional del Trabajo”, afirmó.
Atención Temprana, otra más de las brechas de la infancia en España.
Las diferencias entre CC.AA. y clases sociales determinan la posibilidad de recibir tratamiento de atención primaria. THINKSTOCK |
Hablando de Infancia y Adolescencia, Revista GSIA, mes de Febrero 2021.
En este número, la sección Escaparate GSIA tiene dos escaparates a cúal más interesante:
.- Nuestro compañero y Magistrado, Tomás Luis Martín Rodríguez elaborado la muy valorada y premiada guía: "Prácticas y guía de buen trato a la Infancia en la Administración de Justicia del partido judicial de Las Palmas de Gran Canaria".
También en la web puedes encontrar Documentación relativa a la infancia y la adolescencia: artículos, documentación, investigaciones, estudios, legislación, etc.