Según los datos de la citada fundación, el coste de mantener a un bebé roza los 352,7 euros al mes, que se dividen en 68 euros mensuales en gasto de leche maternizada, 15 euros en pañales, 60 en potitos y 10 en cereales. A esto hay que añadir cerca de 50 euros por gasto de ropa y calzado, un desembolso muy frecuente en estas edades en las que crecen muy rápido. Además, están los gastos en educación o guardería, unos 150 euros mensuales, y las vacunas no obligatorias, que representan 120.
“Si incluimos la inversión de un porteador (100 euros mínimo) y un carrito de bebé (al menos 200 euros), la inversión inicial sube a 300 euros, y el coste anual se podría disparar hasta los 4.532,4 euros en el primer año de vida del menor hasta los 2 años.
En cuanto al coste de mantener los niños desde los 2 hasta los 7 años, expone la Fundación Madrina, crece un 23,7%, hasta los 448 euros al mes. Esto incluye 146 mensuales en gasto de alimentación, 92 en higiene y enseres, 20 en ropa y calzado, 30 en ocio y juguetes, a lo que se suma gasto escolar de 150 al mes.
“Si suponemos que el salario base en España es de 1.323 euros al mes, en 12 pagas, el coste total de criar un menor supone un 118% del salario total”. Es decir, 1.567 euros. Esto hace que existan familias, advierte la Fundación Madrina, “que deben decidir entre pagar el alquiler que supone el 60% del salario, o pagar los alimentos del menor”. Por su parte, la educación y material escolar restan el 26% de los costes, y la sanidad y el transporte suman el 3% de los costes.
“Esto explica que las familias con un solo trabajo no llegan a final de mes, con una especial tensión de los precios de los alquileres y de los alimentos”, asegura. En este sentido, remarca que “las dificultades y cargas económicas que presentan para las familias la crianza de sus hijos, supone que para muchas de estas familias, al menos 1 de cada 4, tengan que decidir mensualmente entre alimentar a sus hijos o pagar el alquiler de la vivienda”.
Frente a esto, la mencionada fundación aboga por aumentar las prestaciones por nacimiento e hijo a cargo, sin limitación en edad materna ni tiempo de empadronamiento; reducir los precios de productos infantiles de alimentación e higiene infantil; garantizar el acceso a plazas en escuelas infantiles de calidad y ampliar la oferta de servicios de conciliación laboral y familiar, entre otras cuestiones.