"Para cada infancia, todas las oportunidades"
"Para cada infancia, todas las oportunidades", Informe Anual UNICEF 2022.
"Para cada infancia, todas las oportunidades"
La situación de la Infancia en España 2022. Plataforma de Infancia.
"Tiempos inciertos, vidas inestables: configurar nuestro futuro en un mundo en transformación". Informe IDH 2021/2022
El Informe sobre Desarrollo Humano, titulado "Tiempos inciertos, vidas inestables: Configurar nuestro futuro en un mundo en transformación", dibuja un panorama de una sociedad global que va de crisis en crisis y que corre el riesgo de dirigirse hacia un mayor estado de penurias e injusticias.
La pandemia del COVID-19 y la invasión rusa de Ucrania lideran la lista de sucesos que están causando importantes perturbaciones en el mundo, a los que se suman los profundos cambios sociales y económicos, las peligrosas transformaciones en el planeta y el enorme aumento de la polarización.
1) Primer descenso consecutivo en tres décadas
Por primera vez en los 32 años que el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) lleva calculándolo, el Índice de Desarrollo Humano, que mide la salud, la educación y el nivel de vida de una nación, disminuyó a nivel mundial durante dos años consecutivos.
Este dato refleja una crisis cada vez más profunda para muchas regiones, especialmente para América Latina y el Caribe, el África subsahariana y el sur de Asia.
El desarrollo humano retrocedió a niveles de 2016 tirando para atrás gran parte de los avances obtenidos en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible que conforman la Agenda 2030, el programa de la ONU para lograr un futuro más justo para las personas y el planeta.
El administrador del PNUD, Achim Steiner, afirmó que "el mundo está luchando en la respuesta a las sucesivas crisis" y que con las dificultades “asociadas al aumento del coste de la vida y del sector energético hemos visto que, aunque es tentador centrarse en soluciones rápidas como subvencionar (a la industria) de los combustibles fósiles, las estrategias de ayuda a corto plazo están retrasando los cambios estructurales que debemos introducir a largo plazo".
Steiner pidió una mayor solidaridad mundial para enfrentarse a los "retos comunes interrelacionados", pero reconoció que la comunidad internacional está actualmente "paralizada a la hora de efectuar estos cambios".
El estudio apunta a la inseguridad y a la polarización de opiniones, como los grandes obstáculos para avanzar en la consecución de la solidaridad que permita afrontar los grandes retos mundiales.
2) El COVID-19 abre "una ventana a una nueva realidad”
El informe describe la pandemia, que ha entrado en su tercer año, como la aparición de una “ventana a una nueva realidad", más que desvío de las formas convencionales de actuar.
Además, considera que el despliegue de vacunas efectivas contra la enfermedad representó “un logro monumental” que salvó las vidas de unos 20 millones de personas, y que también sirvió como muestra del enorme potencial que nace al juntar la innovación con la voluntad política.
En cambio, resaltó que el reparto de las vacunas puso al descubierto las enormes desigualdades de la economía mundial, que su acceso fue ínfimo en muchos países de bajos ingresos, y que las más perjudicadas por la pandemia fueron las mujeres y las niñas, al tener que asumir más responsabilidades domésticas y de cuidado y enfrentarse a un aumento de la violencia.
3) Estamos viviendo un nuevo "conjunto de incertidumbres”
Las oleadas de nuevas variantes del COVID-19 y las advertencias sobre futuras pandemias contribuyeron a agravar una atmósfera de incertidumbre generalizada que iba creciendo en respuesta al vertiginoso ritmo de los cambios tecnológicos, sus efectos en los puestos de trabajo y los temores cada vez más profundos relacionados con la crisis climática.
Los autores del estudio advierten que el trastorno global causado por la pandemia no es nada comparado con lo que experimentaría el mundo si se produjera un colapso de la biodiversidad y las sociedades se encontraran con el reto de cultivar alimentos a gran escala, sin insectos polinizadores.
"Por primera vez en la historia de la humanidad las amenazas existenciales antropogénicas [provocadas por el hombre] se ciernen sobre las naturales", dice el informe.
Las tres capas que plantea el actual “conjunto de incertidumbres" son: los peligrosos cambios planetarios, la transición a nuevas formas de organización de las sociedades industriales y la agudización de la polarización política y social.
4) La incertidumbre brinda nuevas oportunidades
Aunque el cambio es inevitable, no lo es la forma en que reaccionamos ante él. Pese a que hay un gran temor respecto al uso creciente de la Inteligencia Artificial, la tecnología también puede aportar muchas ventajas cuando ayuda a simular los impactos del cambio climático, a mejorar el aprendizaje personalizado y al desarrollo de medicamentos.
Uno de los resultados del mundo post-COVID es la creación de una nueva categoría de vacunas, las que usan tecnología de ARN mensajero, y que auguran grandes avances en el tratamiento de otras enfermedades.
5) Podemos fijar un nuevo rumbo
Los últimos tres años nos pueden servir para demostrar de lo que somos capaces, cuando vamos más allá de las formas convencionales de actuar, y nos permiten transformar nuestras instituciones para adaptarlas mejor al mundo actual.
Según Steiner, el estudio puede ayudar a trazar un nuevo rumbo que nos permita salir de la actual situación de incertidumbre mundial. "Tenemos un estrecho margen para reiniciar nuestros sistemas y garantizar un futuro construido en base a una acción climática determinante y con nuevas oportunidades para todos", afirmó
Los niños y los adolescentes en el informe anual del Defensor del Pueblo 2021.
Informe anual al Parlamento Vasco 2021: Ararteko, Oficina de la Infancia y la Adolescencia
6º INFORME ESTADO DE LA REGIÓN CENTROAMERICANA Y R.DOMINICANA (2021), Invitación a la Presentación del
Informe FOESSA 2022
Retos y propuestas:
La crisis de la Covid-19 está dejando una profunda huella que incide en los lastres de la Gran Recesión de 2008-2013 que no fueron plenamente resueltos en el siguiente periodo de recuperación.
Frente a situación, el informe Foessa y Caritas Española consideran necesario perfeccionar el sistema de protección social a futuro con las siguientes propuestas:
1. Mantener de manera estable para el futuro las medidas provisionales tomadas en el caso de la salud, la vivienda o la protección social con las necesarias adaptaciones a periodos de estabilidad económica. El reto del sistema de protección social es evitar que estas nuevas situaciones de vulnerabilidad e intensificación de la exclusión severa se transformen en crónicas.
2. Mejorar la cobertura del Ingreso Mínimo Vital, ya que supone un notable avance social para corregir el desequilibrio entre la protección social de la población laboral estable y aquella que es precaria o en situación de exclusión social. De los 850.000 hogares beneficiarios previstos inicialmente, a septiembre de 2021, sólo 315.913 hogares, el 37% de los previstos inicialmente. Una media de 2 personas beneficiarias por cada 10 personas en situación de pobreza severa en España.
3. Reimpulsar el modelo de estado de bienestar en su conjunto, con una orientación clara hacia el acceso a los derechos como canal para la inclusión social y el “rescate” de los sectores más excluidos.
4. Implementar medidas que reduzcan la hiperflexibilidad, mejorando la organización social del tiempo de trabajo también en los empleos de sectores excluidos, no cualificados, en empleos temporales y precarios – los sectores llamados “esenciales” de la limpieza, la hostelería y las labores agrícolas entre otros -, y que acaben con las situaciones de irregularidad.
5. Deberían complementarse, así mismo, los salarios escasos con otras medidas redistributivas, a modo de estímulos al empleo, bien a partir de prestaciones complementarias para los trabajadores de bajos salarios, bien como deducciones fiscales reembolsables.
6. Entre los retos pendientes, también está el de garantizar un sistema de salud público de calidad y el de un cambio de estrategia y paradigma en el ámbito de la atención a personas en situación de dependencia y con necesidad de cuidados.
7. Poner en marcha políticas frente a la exclusión residencial, ya que desde 2018 se ha duplicado el porcentaje de hogares que residen en viviendas insalubres (hasta el 7,2% en 2021) o en situación de hacinamiento (hasta el 4% en 2021). Además, la COVID-19 ha hecho empeorar o tensionar la mayoría de los indicadores de acceso y mantenimiento de la vivienda. Casi se duplica el número de hogares, pasando de 1,1 a más de 2 millones, que sufrieron retrasos, o no tuvieron dinero suficiente, para el pago de alguno de los gastos relacionados con la vivienda, como el pago del alquiler o la hipoteca.
8. Superar la brecha educativa provocada por el apagón digital. Las políticas públicas deberán poner los medios necesarios para que todas las personas puedan superar la brecha digital. Por término medio, en 2020 un 15% de los hogares con menores de 15 años indican que sus calificaciones son peores que en 2019. Un porcentaje que aumenta de forma considerable en los hogares más vulnerables: el 31% de hogares en los que viven niños, niñas y adolescentes (NNA) de minoría gitana y el 25% de hogares del cuartil más bajo de ingresos.
9. Avanzar hacia servicios sociales adaptados a las realidades sociales del siglo XXI.
Ante los enormes retos globales que afrontan las políticas sociales como son, entre otros, el envejecimiento de la población, la lucha contra la exclusión social, la protección de personas menores vulnerables y la integración de la población inmigrante, precisamos de servicios sociales adaptados a las nuevas realidades sociales.
¿Es necesario mediar en las informaciones para las niñas y los niños?.
En mi familia recuerdo que siempre cenábamos con las noticias, nadie hablaba para que mi padre pudiera escuchar el telediario. Cuando había algo que decir, normalmente era para discutir o insultar al político de turno. Os podéis imaginar, un desastre en cuestiones pedagógicas, pero muy eficaz a la hora de tomar conciencia de clase. Entonces en casa nadie mediaba ni limitaba nuestro consumo informativo fueran coches bomba, cargas policiales en el astillero Euskalduna, el inicio de las rebajas o las mamá Chicho lo que pusieran en la tele.
¿Sentís ahora, como madres y padres, que es necesario mediar en las informaciones para las niñas y los niños?.
¿Os preocupa cómo responder ante noticias de gran impacto social, aterradoras para cualquier persona?
Para tratar de encontrar respuestas, hemos acudido a la Asociación Pediátrica Española y la Sociedad de Psiquiatría Infantil, al Grupo de Sociología de la Infancia y la Adolescencia (Asociación GSIA), y hemos hablado con la periodista y catedrática Carmen Marta Lazo y con las profesoras de nuestra hija, María Rivas Sevilla y María José Olmo García.
que extraemos para enmarcar e integrar las noticias en las dinámicas familiares:
El acceso a la información es un derecho, también para la infancia
El acceso a la información es un derecho para la infancia y, como plantea Kepa Paul Larrañaga, presidente del Grupo de Sociología de la Infancia y la Adolescencia (Asociación GSIA), es necesario incorporar a los niños y niñas en el debate actual sobre los derechos fundamentales de acceso a la información y de libertad de expresión.
La Convención sobre los Derechos del Niño recoge en su articulo 17 que serán los Estados quienes velen “por que el niño tenga acceso a información y material procedentes de diversas fuentes nacionales e internacionales, en especial la información y el material que tengan por finalidad promover su bienestar social, espiritual y moral y su salud física y mental”.
Evitemos fijar una edad
“Todas las edades pueden ser adecuadas, siempre teniendo en cuenta el nivel madurativo del niño”, considera el doctor Pedro Javier Rodríguez Hernández, portavoz de la Sociedad de Psiquiatría Infantil, integrada en la Asociación Española de Pediatría (AEP). Lo importante, expone, es adaptar la edad a las intervenciones que, principalmente desde la familia, se deben realizar para ayudar en el procesamiento de la información.
Para Larrañaga, establecer una edad responde a una arbitrariedad que queda establecida en las culturas. “Hay países que permiten el voto de sus ciudadanos y ciudadanas a los 16 años, y otros en los que se puede firmar un contrato laboral, o dar permiso para una intervención quirúrgica a diferentes edades a partir de los 11 o 12 años. Por tanto, diferentes culturas pues diferentes arbitrariedades”, argumenta.
Las profesoras de nuestra hija tampoco marcan una edad concreta que condicione el acceso a las noticias. María Rivas Sevilla y María José Olmo García aseguran que ya en el ciclo infantil (de 3 a 5 años) son las propias niñas y niños quienes traen a clase preguntas sobre los más diversos temas que les preocupan, escuchan o despiertan curiosidad.
Sin censura de temas
Desde GSIA hablar de filtrar temas y que padres y madres decidan sobre cuáles sí y cuáles no vamos a hablar equivale a una censura. Rodríguez, por su parte, coincide en afirmar que todos los temas se pueden tratar y que más que en el qué tenemos que poner la atención en cómo lo vamos a contar.
En el campo del periodismo, Carmen Marta Lazo, toda una referente en educación, competencias mediáticas y comunicación digital, defiende la importancia de tratar todos los temas con nuestros hijas e hijos, muy especialmente aquellos que despiertan su interés.
“Lo importante es comentar esas imágenes o noticias que se escapan o impactan a los ojos de la infancia más que imposibilitar que las vean o escuchen”, considera Marta. Por ejemplo, las imágenes relacionadas con la violencia u otros temas de impacto pueden apelar a las familias para hablar en casa de lo que nos muestran esas imágenes pero también para sensibilizar en lo doloroso y positivizar su impacto. “Igual podemos hacer con las imágenes sensibleras con las que se trata de edulcorar y adornar en exceso la realidad. La realidad tampoco es así”, subraya.
Larrañaga no cree que los niños y las niñas sean los mayores consumidores de ese tipo de informaciones, tal como ha evidenciado en estudios recientes para el Centro de Internet Segura, donde se constata que niños y niñas usan internet y las redes sociales para socializarse y entretenerse, en su mayor parte. Para este etnólogo comprometido con el avance, promoción y consolidación de los derechos de los niños y las niñas la alerta hay que establecerla en la normalización de la violencia en ciertas informaciones. “Se requieren acciones colectivizadas entre todas las generaciones para lograr un internet más seguro, acciones colaborativas y de apoyo mutuo. Y ser más activistas en la búsqueda de soluciones a esta normalización de la violencia”, reclama.
Mediar la información
Rivas y Olmo, que llevan trabajando juntas una década, aconsejan acompañar a los niños y las niñas cuando comienzan a consumir noticias, para resolver o atender sus dudas y evitar que una malinterpretación o comprensión les genere sentimientos de ansiedad.
“Es importantísimo mediar” reafirma Marta, quien reconoce que a la hora de asumir esta responsabilidad los diferentes agentes se pasan la pelota: la escuela dice que le toca a la familia, la familia que la culpa es de los medios y los medios que la responsabilidad es de la escuela. “Pero todos debemos ser copartícipes en esta tarea: familia, escuela y medios”, zanja la catedrática, investigadora y autora de numerosos artículos y publicaciones, entre ellas «Comunicación Digital: Un modelo basado en el Factor R-elacional.» (Editorial UOC, 2016) y «La televisión en la mirada de los niños» (Fragua, 2005).
Para la Sociedad de Psiquiatría Infantil “lo principal es saber que los hijos van a procesar toda la información de su alrededor aunque parezca que no están atendiendo” y que nuestra labor es “intentar educar y realizar prevención primaria en todo el proceso de recepción e interpretación de la información”. Rodríguez aporta algunos consejos. “El adulto debe servir de modelo desde edades tempranas a partir de visualizaciones compartidas con los niños y comentarios de los contenidos añadiendo, según la edad, interpretaciones comprensibles y opiniones de valor”.
Los impactos de la crisis climática se acentúan y amenazan con hipotecar la salud de los niños. #30añosCDN.
Refugiados del campo Dadaab, en Nairobi (Kenia). (Getty Images) |
El calentamiento global afectará a su salud "desde la infancia y la adolescencia hasta la edad adulta y la vejez", advierte un artículo publicado este jueves en la revista The Lancet. "En todo el mundo, los niños se encuentran entre los más afectados por el cambio climático", añade. El texto recoge las conclusiones de la revisión anual que un grupo de expertos de 35 instituciones científicas y agencias de Naciones Unidas realiza desde 2015.
Estos especialistas, agrupados bajo la iniciativa Lancet Countdown, monitorizan 41 indicadores de impacto de la crisis climática, especialmente en la salud. "Las cosas siguen empeorando", señala pesimista a EL PAÍS Hugh Montgomery, copresidente de Lancet Countdown y director del Instituto de Salud Humana del University College de Londres. "Y no hay ninguna acción significativa para abordar el problema", prosigue Montgomery sobre la lentitud, cuando no parálisis, de la mayoría de los Estados a la hora de actuar ante este problema y reducir las emisiones.
"Pequeñas Grietas, Grandes Brechas,
El informe identifica dónde los gobiernos individuales y la comunidad internacional, en su conjunto, deben ser más ambiciosos para habilitar la legislación, además de estrategias eficientes y efectivas para proteger a un número alarmante de niños contra daños.
La realidad de la infancia y la adolescencia vasca en cifras, Informe 2018.
Acceso al Informe La realidad de la infancia y la adolescencia vasca en cifras 2018 (PDF, 5 MB).
El presente informe diagnóstico recoge un análisis global de la realidad de la infancia y la adolescencia en la CAPV a partir de una serie de datos estadísticos que, entre los disponibles, se ha considerado que resultan más significativos de cara a describir y predecir el bienestar infantil y adolescente desde la perspectiva de sus derechos y la calidad de vida.
En línea con lo recogido en la Ley 3/2005, de 18 de febrero, de Atención y Protección a la Infancia y la Adolescencia y también la Convención sobre los Derechos del Niño , la información incluida en este estudio se refiere a la población de entre 0 y 17 años.
Los datos que se exponen y comentan en este informe invitan a la reflexión sobre aquellas cuestiones que en la actualidad se pueden considerar más relevantes o de carácter más crítico y necesitan de una mayor atención y seguimiento. Así mismo, pueden ayudar a hacer visibles progresos y avances en relación con las distintas dimensiones en la que se ha ordenado la información recogida: demografía, familia, salud y sexualidad, educación, bienestar material, cultura, ocio y tiempo libre, infancia vulnerable y entorno.
Los datos principales van acompañados de múltiples desagregaciones por sexo, edad y otros factores, que ayudan a dar cuenta de la diversidad y las especificidades que se dan dentro de un colectivo heterogéneo como el de la población infantil y adolescente. Además, los datos más recientes se complementan y comparan con los de años anteriores y los de otros ámbitos territoriales a fin de dotar el análisis de un marco contexto, temporal y geográfico, más amplio.
Con el fin de facilitar la lectura, se ha optado por mostrar las muy diversas fuentes secundarias de las que proceden los datos del informe mediante notas a pie de página a lo largo del documento.
En último lugar, indicar que los datos recogidos en este informe forman parte de un sistema de indicadores diseñado específicamente para monitorizar la realidad infantil y adolescente en la CAPV y cuyo proceso de elaboración se detalla en otro informe complementario a éste (“Sistema de indicadores para el seguimiento de la realidad de la infancia y la adolescencia en la CAPV. Nueva versión 2018”). En este segundo informe se puede consultar, además, información detallada en relación con las fuentes de datos y desagregaciones de cada uno de los indicadores que componen el sistema.
Los niños más expuestos a la naturaleza tienen mejor salud mental de adultos.
Ver más en: https://www.20minutos.es/noticia/3647603/0/ninos-expuestos-naturaleza-mejor-salud-mental-de-adultos/#xtor=AD-15&xts=467263
Dos niños montando en bicicleta por un camino forestal. ARCHIVO |