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Otra vez dando caña a los jóvenes, esta vez por machistas

Donde está el problema es en los hombres supuestamente maduros, los que son el modelo donde se miran y referencia de masculinidad para los jóvenes, los que son los responsables de los contenidos que consumen en las redes sociales


elDiario.es

Violeta Assiego @vissibles

8 de marzo de 2024


Jóvenes en la plaza Mayor de Salamanca. EFE/JMGARCIA

Nadie puede negar que algo les pasa a los chicos jóvenes y a su percepción y vivencia del machismo y el feminismo. Diferentes encuestas vienen poniendo el foco en las creencias que predominan en un grupo significativo de jóvenes, varones, que tienen entre 16 y 26 años, la llamada Generación Z. Los datos parece que hablan por ellos y nos dicen que casi la mitad no se siente feminista, según 40dB; que la mitad cree que se ha llegado muy lejos en la promoción de la igualdad de las mujeres y ahora se los discrimina a ellos, según el CIS; e incluso, uno de cada diez piensa que ser un hombre de verdad implica que deben tener la última palabra en su relación o matrimonio y que está justificado el uso de la violencia si se necesita, según el Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud de la Fundación FAD Juventud.


¿Acaso son más machistas los jóvenes que sus abuelos? Eso lo que parecen sugerir todos los análisis que se hacen de estos datos. Otra encuesta, esta de IPSOS, señala que una quinta parte de los chicos de la generación Z cree que un hombre que se queda en casa para cuidar de sus hijos e hijas es menos hombre. Sin embargo, la misma encuesta viene a reafirmar un dato que se entrevé en la de 40dB, y que pasa desapercibido: más de la mitad de la población (55%) se define como feminista, –11 puntos más que el año pasado– , algo que sitúa a España como el segundo del mundo y el primero en Europa en esta autopercepción. 


¿En qué quedamos está en vaso medio lleno o medio vacío? Realmente ¿son los chicos jóvenes más machistas ahora que antes? No sé si tenemos una serie de datos lo suficientemente amplia para poder llegar a esa conclusión tal y como se plantea en muchos foros, entre otros aspectos porque no es desde hace tanto tiempo desde cuando se desagregan los datos por género, hasta para las encuestas la opinión de las mujeres ha sido invisible hasta hace muy poco. Si se echa la vista atrás y se analiza, por ejemplo, la percepción de la violencia machista en 2007, año en el que se aprobó la Ley de Igualdad, una encuesta realizada a universitarios por el Grupo de Mujeres CREA:SAFO de la Universidad de Barcelona ponía de relieve que una cuarta parte de los universitarios no consideraba violencia machista impedir que la mujer hable con otras personas, imponer la manera de vestirse y comportarse en público o que se la persiga insistentemente. Los datos no difieren tanto, y lo que sí es evidente es la polarización entre feminismo y machismo. Una polarización que alimenta y avivan los neomachistas desde la machoesfera, la fachoesfera y la terfesfera, el mayor negocio que han encontrado los movimientos reaccionarios anti-derechos humanos en años, el negocio del odio contra las mujeres, las disidencias sexuales y las personas migrantes y también racializadas.


Si nos preguntamos qué les pasa a los chicos más jóvenes sería bueno que dejáramos de analizar la información desde el adultocentrismo y la generalización. Si miramos los datos de todas esas encuestas veremos que significan algo, pero ¿son representativos del machismo entre los jóvenes o del machismo entre los hombres? Eran los amigos del presidente Sánchez los primeros que se sentían discriminados, y no creo que estos tengan 18 años.


Si trascendemos de nuestra necesidad de alarmar sobre los comportamientos de los jóvenes veremos que estos son solo el reflejo de lo que sucede en el mundo adulto que permea en ellos sus frustraciones, sus creencias, sus prejuicios y sus dogmas. Sin ir más lejos, la reciente encuesta de 40dB resulta mucho más inquietante si nos fijamos en los hombres que tienen más de 26 años que no se sienten feministas, su dato es mayor que el de la generación Z. Es aquí donde está el problema, en los hombres supuestamente maduros, los que son el modelo donde se miran y referencia de masculinidad para esos jóvenes, los que son los responsables de los contenidos que consumen estos jóvenes en las redes sociales que son su modo de informarse. Por ejemplo, El Xocas tiene 34 años, Roma Gallardo tiene 35, UTHB tiene 35, Alvise Pérez tiene 34… Todos ellos millennials venidos a más gracias al lucrativo negocio de esparcir bulos y odio con el apoyo (económico) de la extrema derecha. 


Si realmente nos preocupan los jóvenes y queremos llegar hasta ellos, preguntémosles y dejemos de contribuir a su victimización con análisis que no van a la raíz sino al síntoma, análisis que les empujan a refugiarse en esa “tribu” machista que los está esperando con los brazos abiertos para darles la identidad que les falta: la del hombre machista. En el Estado español hay muchos consejos de participación de la infancia, de la adolescencia y de la juventud que tiene las claves de cómo hacer para que los más jóvenes sean la generación menos machista de la historia. De hecho, en muchas de esas encuestas, y comparados con el resto de las franjas de edad, los chicos son menos machistas. También esas encuestas reflejan otro dato que es otra de las claves de la polarización actual, las chicas, y esto es muy importante, cada vez son más feministas. 


Esa brecha es en la que tenemos que poner foco desde los feminismos porque ellos, los chicos, programados por el mandato patriarcal desde la cuna, no saben qué hacer, ni cómo actuar, ni qué se espera de ellos cuando se encuentran con chavalas empoderadas que identifican perfectamente las violencias, quieren relaciones igualitarias (aunque todavía sueñan con un amor para toda la vida) y les ponen delante un espejo que da un reflejo que les desconcierta. No se sienten tan machistas como los ven porque se ven mejores que sus mayores, de hecho, lo son, aunque también son machistas, menos machistas, pero lo son. 


Quizá es momento de que empecemos a analizar las encuestas viendo a estos jóvenes (y adolescentes) como seres que están en proceso de madurar y crecer, de aprender, están en construcción. Quizá, seamos así capaces de distinguir a aquellos que son también víctimas de un patriarcado que los necesita para sobrevivir. Un patriarcado que se siente amenazado porque no es nada si no hay hombres violentamente machistas, especialmente ahora que cada vez hay más conciencia feminista y feministas. Prestemos atención a los marcos de debate y análisis sobre la adolescencia y la juventud, porque el patriarcado sabe perfectamente que las personas adultas tendemos a menospreciar y juzgar a los jóvenes, con eso cuenta para llevarlos a su terreno. Y cuando lo que necesitan esos jóvenes son referentes y espejos que les ayuden a encontrar una identidad no lo vamos a lograr si les reafirmamos en una condición de machistas que, por ahora, tiene más de rebeldía que de personalidad.

"La Dieta Audiovisual en la programación infantil televisiva". Estudio, Presentación.


El informe ‘La dieta audiovisual en la programación infantil en televisión’, elaborado por la doctora de la Universidad Complutense de Madrid, Fátima Arranz, con la colaboración de las investigadoras Virginia Fernández Hernanz, Carolina Herrero Schell y María Sánchez Román, revela que las mujeres y la feminidad siguen estando marginadas en las series infantiles. 

CIMA te invita a su presentación: “LA DIETA AUDIOVISUAL EN LA PROGRAMACION INFANTIL EN TV”

El 9 de febrero de 17-19pm, 
en la Oficina del Parlamento Europeo de España, 
c/ Paseo de la Castellana 46 (Madrid)

Para asistir hay que rellenar este formulariohttps://forms.gle/SkjhVaL4pXE6a5ef6
 
El informe, que se completa con las opiniones de los agentes sociales, analiza el contenido de las series de ficción con perspectiva de género. Algunos datos que se revelen en el son:

Solo un 1,8% de guionistas en las series infantiles son mujeres
Solo hay un 3,3% de mujeres en los puestos de dirección de series infantiles
El 77% de los personajes femeninos reproducen roles típicos de la feminidad
Solo un 7% cumple el Test de Bechdel modificado
El informe demuestra que:
-Las mujeres y la feminidad siguen estando marginadas en las series infantiles
-La representación que se hace de las mujeres y de los hombres sigue anclada a los estereotipos de género: los varones, líderes o héroes; las mujeres, en el ámbito familiar o romántico
-Se margina a los grupos humanos mayores de 50 años, a los que integran la diversidad funcional, a las personas pertenecientes al colectivo LGTB +, a los grupos raciales no caucásicos o los que tienen
sobrepeso u obesidad
-Existen una alta representación de la violencia (psicológica y física) sobre todo dirigida al público infantil masculino

Para CIMA era absolutamente necesaria la realización de este estudio al ser la infancia uno de los grupos que mayor consumo hace de los medios audiovisuales y, sin duda, el colectivo más vulnerable a los mensajes que estos emiten.

Los datos televisivos de 2022 sobre la infancia confirman  que “los niños y niñas españoles de entre 4 y 12 años que realmente  ven la televisión tradicional  pasan una media de 2 horas y 43’ al día, y es importante señalar que  está aumentando progresivamente el porcentaje de otros usos de las pantallas (media de 40’/día) por parte de esta franja de edad”.

El programa de presentación del próximo día 9 es el siguiente:
.- Bienvenida de Juergen Foecking (PE España), e Isabel Raventós Vicepresidenta de CIMA. 
.- Presentación del Estudio, autora Fátima Arranz.  Alejandro Perales, Presidente AUC 
.- Debate:
Políticas culturales y audiovisual con perspectiva de género. Con las eurodiputadas Lina Gálvez (Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas), Diana Riba (Grupo de los Verdes/Alianza Libre Europea) y la diputada Soledad Cruz - Guzmán (G.P. Popular)
.- Cierre: Cristina Andreu, presidenta de CIMA

Para asistir hay que rellenar este formulario: https://forms.gle/SkjhVaL4pXE6a5ef6



El niño asesinado no es “parte del decorado” sino que es la víctima principal de la violencia machista.

 Pesa un sesgo adultocentrista por el que aún cuesta reconocer a las niñas y niños como sujetos de derecho”.
Casi 900 maltratadores siguen viendo a sus hijos e hijas: las grietas de la ley de infancia.
Tras el asesinato del niño en Sueca a manos de su padre, que ha destapado una falta de coordinación entre juzgados, expertas piden que se desplieguen con urgencia los mecanismos de coordinación que incluye la nueva normativa. 


Concentración contra los asesinatos machistas en Sol.
Álvaro Minguit
En septiembre de 2021, la reforma del Código Civil, incluida en la nueva Ley O. de Protección Integral a la Infancia, pretendía recoger lo que ya era un clamor entre víctimas y colectivos en lucha contra la violencia machista: los padres incursos en un proceso por maltrato no podrían recibir visitas de sus hijos e hijas menores, tal y como queda recogido en el reformulado artículo 94. Así mismo, y en una revisión del artículo 92 también promulgada por dicha ley, los progenitores que están siendo investigados por violencia machista tampoco podrán conseguir la guardia y custodia de sus hijos e hijas.

Un triunfo para las asociaciones en defensa de los derechos de la infancia que aún no ha cristalizado al 100%. Según datos recabados por la fiscalía, que hacía públicos recientemente El Periódico de España, 879 maltratadores que cumplen condena siguen recibiendo las visitas de sus hijos e hijas. Este domingo en Sueca (Valencia) un padre asesinaba a su hijo de once años mientras se encontraba con él y tras haber amenazado a su ex mujer con acabar con su vida. Entre los dos mediaba una orden de alejamiento impuesta por el Juzgado de Primera Instancia número 4, el de violencia contra la mujer, después de que el padre fuera condenado por malos tratos. Sin embargo, un mes después, el Juzgado de Primera Instancia número 5, con competencias en familia, ratificaba el divorcio de la pareja en el que se incluía la custodia compartida. Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) explican a El Salto que no existe un sistema de alertas entre juzgados que coordine ambas decisiones.

Y precisamente para coordinar a todos los actores que intervienen en la protección de la infancia nació la nueva ley aunque aún no se han materializado algunos de sus mecanismos, tal y como explica la abogada experta en derechos de la infancia Violeta Assiego. “Hay muchos aspectos de la ley de infancia que faltan por desarrollar e implementar. Uno es el registro central de información que trata de que todas las administraciones que intervienen en el caso de un niño y o una niña, estén coordinadas y vuelquen ahí la información. Es un elemento bastante relevante”, explica Assiego, mientras añade que tras la aprobación de la ley, el pasado 4 de junio de 2021, debería haberse materializado una estrategia de implementación de cada artículo que permita que se evalúe.

“Pesa un sesgo adultocentrista por el que aún cuesta reconocer que las niñas y niños como sujetos de derecho".

La ley recoge que tiene que haber una comisión de seguimiento formada por Justicia, Interior y Derechos Sociales, elemento fundamental para que la comunicación y la coordinación se subsane. También tiene que haber formación y capacitación en perspectiva de infancia en la judicatura y en todos aquellos profesionales que intervienen”. En cuanto a los motivos, Assiego se muestra contundente: no se está tomando suficientemente en serio esta normativa. “Pesa un sesgo adultocentrista por el que aún cuesta reconocer a las niñas y niños como sujetos de derecho”, incide quien remarca que en un caso como en el de Sueca, el niño asesinado no es “parte del decorado” sino que es la víctima principal de la violencia machista.

Historias que se repiten
Paloma Delgado Bavai tiene tres hijos de 16, 14 y 10 años. Los cuatro han recibido malos tratos por parte de su ex y padre de los tres menores, reconocidos por la vía penal. Un juzgado de Huesca impuso contra el padre en abril de 2019 cuatro condenas por maltrato, una por cada uno de ellos. Además se dictó orden de alejamiento y suspensión de visitas durante cuatro años. “La orden de alejamiento estaría ya finalizada y las visitas con el padre se tendrían que reanudar antes del año que viene (primando una vez más los derechos del progenitor frente al de los menores). Todo esto a pesar de no haber mostrado arrepentimiento alguno, ni reconocimiento de los hechos por su parte ni de su entorno”, explica Delgado en una petición de change.org que ha recogido más de 88.000 firmas.

“La ley incluye una excepción: el juez puede determinar que a pesar de que haya violencia si analiza la relación paterno-filial y la ve como beneficiosa puede haber visitas. Si estableces esa excepción la ley es papel mojado".

  El caso de Delgado, en el que unos hijos se encontrarán de nuevo con un padre que carga con cuatro condenas por violencia machista, ilustra desde otra perspectiva como el problema aún no se ha resuelto. Y, si la madre decide incumplir el régimen de visitas, las consecuencias legales sobre ella recaerán con fuerza, tal y como ha pasado en el caso de María Sevilla, que hoy cumple pena de prisión por sustracción de menores, tras negarse a entregar a su hijo a su padre después de que el menor refiera abusos sexuales, o Juana Rivas, que acaba de conseguir la suspensión de su pena, después de una larga lucha que también la ha hecho pasar por prisión. Esta misma semana el Juzgado de lo Penal número seis de Sevilla requería la entrada en prisión de María Salmerón tras incumplir la custodia compartida con su ex, condenado por maltrato.

Estrella Gómez, portavoz de la Asociación Gallega contra el Maltrato a Menores (Agamme) avisa: la nueva ley tiene una gran grieta. “Nosotras ya lo advertimos en su tramitación, una y otra vez, la ley incluye una excepción: el juez puede determinar que a pesar de que haya violencia si analiza la relación paterno-filial y la ve como beneficiosa puede haber visitas. Si estableces esa excepción, la ley es papel mojado y queda a merced del juez que pueda haber suspensión o no”, explica Gómez.

Para la portavoz de Agamme es muy peligroso dejar esta decisión en la bandeja de los jueces en un contexto en el que algunas figuras de la judicatura acusan a las madres de alienar a sus hijos e hijas, utilizando la figura del Síndrome de Alienación Parental que el propio CGPJ ha desaconsejado utilizar y que la nueva ley de infancia prohíbe. “Hay una jurisprudencia que marca una dirección perniciosa por lo que debe de haber una vigilancia de los jueces, han de dar cuentas. El juez debe dar cuenta a la sociedad, deben de poder ser fiscalizados”, expresa la portavoz de Agamme. “Por supuesto—añade—respetando la independencia. Pero ser independiente no significa que no tengas que dar cuentas, que tengas unos deberes que cumplir con tu función. Al final son situaciones que acaban con vidas”, expresa.

Hasta 2015 los niños y niñas expuestos a una situación de violencia de género no eran considerados víctimas de ella.

¿Cambio de paradigma?
Hasta 2015, los niños y niñas expuestos a una situación de violencia de género no eran considerados víctimas de ella. Desde 2013, fecha en la que comienzan a recabarse cifras, 47 niños y niñas han sido asesinados víctimas de violencia vicaria extrema: la que ejerce el agresor para causar el máximo daño posible a la madre.
Antes de la entrada en vigor de la nueva ley, de las 30.000 órdenes de protección contra las mujeres, los jueces solo retiraban las visitas al padre maltratador en el 3% de los casos. Hoy, y en palabras de la fiscal de sala contra la Violencia sobre la Mujer, Teresa Peramato, a la Cadena SER, “en el 81% de las ocasiones se ha suspendido el régimen de visitas o no se ha acordado, y solo en un 19% se ha mantenido”. “El cambio de paradigma introducido por la ley ha dado sus frutos“, expresaba.

No obstante, y tras el crimen de Sueca, que ha dejado al descubierto la ausencia de coordinación entre juzgados, la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, incidía en la necesidad de revisar todos los regímenes de visitas. “Siempre será mejor reparar un régimen de visitas que tratar de reparar una infancia rota o de reparar un asesinato”, aseguraba.

Mª Ángeles Jaime de Pablo, presidenta de Mujeres Juristas Themis, explica a El Salto que en noviembre participaron en unas jornadas organizadas por el CGPJ y propusieron una mejora de la coordinación entre juzgados. “Propusimos que  al incoar un procedimiento de familia, el letrado de administración del juzgado de familia debe comprobar al admitir a trámite cualquier procedimiento civil que no existen antecedentes por un procedimiento penal por maltrato”, explica.

Y lamenta que algunos jueces están cuestionando la necesidad de esa protección para la infancia. Así las cosas, recientemente una jueza de familia ha planteado la primera cuestión de inconstitucionalidad contra la reforma del artículo 94 del Código Civil. A la pregunta de si la deriva negacionista de la violencia machista, ahora contra la infancia, sigue instaurada en la judicatura, la presidenta de Themis es clara: “En parte sí, no se puede decir que todos los jueces y juezas actúen así, pero hay una fuerte resistencia”.

Situación de urgencia
Para Cristina Sanjuán, experta en prevención de la violencia hacia la infancia de Save The Children, la nueva ley es una nueva oportunidad que hay que aplicar con urgencia.

”Tenemos que hablar de oportunidades urgentes, seguimos viendo casos de violencia contra la infancia. Empecemos a actuar contra los mismos porque ya hemos llegado tarde. El domingo vimos la peor cara que es la muerte”

 “Se dice que las leyes no cambian mentalidades, pero esta ley pone mucho foco en la prevención, dedica mucho espacio a hacer este trabajo de pedagogía. Por eso es tan importante la parte de la formación de los profesionales. Esta ley pretende una transformación social para que todos los actores consideren a los niños y niñas como sujetos de derechos”, incide para quien falta mucho trabajo por hacer y uno de los principales es formar a todos los operadores jurídicos y que la justicia se especialice en violencia contra la infancia.

"Tenemos que hablar de oportunidades urgentes, seguimos viendo casos de violencia contra la infancia. Empecemos a actuar contra los mismos porque ya hemos llegado tarde. El domingo vimos la peor cara que es la muerte. Y tenemos que hablar de oportunidades y de urgencia para aplicar la ley que tenemos para protegerles frente a cualquier forma de violencia”, concluye.

@WmMondo, ¿lo conoces?.


 @WmMondo

Únete a una iniciativa que tiene como objetivo abordar retos 
en materia de igualdad de género por parte de los clubes.  

Mondo es una plataforma de innovación social y sostenibilidad desde la queramos dar respuesta, entre todos los clubes, a los desafíos más inmediatos en materia de igualdad de género en el ámbito del deporte y en concreto en el fútbol.

Acceso a video de presentación.



En Mondo apostamos por la igualdad.

Desde la Asociación GSIA damos la bienvenida a esta iniciativa, 
y nos ponemos a su disposición para la colaboración que sea precisa.

Educación, cuentos y mucha comunicación: así hay que hablar a la infancia para prevenir el abuso sexual,

'Tu cuerpo es tuyo', 'Kiko y la mano' o 'Estela grita muy fuerte' 
son algunos de los cuentos para abordar la prevención de los abusos.

“Tu cuerpo. Ese sitio donde suceden todas las cosas que te pasan”. Con esta frase comienza un cuento infantil especial. Sus autoras son Helena Torija, fisioterapeuta de profesión, y sus dos hijas, Eva y Julia. La primera, de 5 años, pone título al proyecto: 'Tu cuerpo es tuyo. El mensaje de Eva'. El verano pasado sufrió un episodio de abuso sexual en su entorno próximo, como la inmensa mayoría de casos que suceden. Ante esa experiencia, la familia se puso manos a la obra para escribir y dibujar el cuento. Construyeron así una herramienta más para prevenir el abuso sexual en la infancia.

La idea fue al principio escribirlo para ayudarnos a nosotros mismos porque lo necesitábamos”, destaca Helena Torija. A la madre de Eva le salió de dentro la necesidad de contarlo y desterrar el tabú que puede existir alrededor de casos como el de su hija. “A mí casi lo primero que me comentaron fue que lo que había pasado no iba a salir de ahí y nadie se iba a enterar. A mí me chirrió muchísimo. Sí que intentamos nombrar el tema, hablarlo, que nuestros hijos lo hicieran también. Las cosas que no se nombran no existen, y como no existen no se les puede poner nunca solución. Para mí es una manera de liberar un dolor y ayudar a otros. Lo que quiero es que se hable del tema, lo que quiero es que se nombre”, añade.

Portada el cuento.
El cuento se ha hecho de manera muy artesanal pero ha ido creciendo poco a poco. En un primer momento se distribuyeron apenas 300 cuentos. Luego se realizó un crowdfunding para financiar el reparto de otros 3.000 más. A día de hoy lo están usando ya profesores o educadores en algunos centros educativos y muchas familias. Ha recibido muchas llamadas que le cuentan “historias impresionantes” de abusos sexuales en la infancia. “He conocido familias que querían tratar este tema y no tenían cómo hacerlo y a raíz de leerlo sus niños han soltado algunas cosas. También he recibido testimonios de madres que querían contar sus propias experiencias de abusos sexuales a sus hijas y a raíz de contar el cuento habían iniciado el proceso”, explica.


Habla Helena de una “amalgama” de sentimientos desde que se lanzó el cuento. "Desde el primer minuto dije que si el cuento servía para ayudar a un solo niño o niña, ya era válido mi esfuerzo. Pero, por otro lado ves que hay gente muy dañada”, comenta.

Toda la familia colaboró en la creación. Desde el padre, Víctor, hasta los otros dos hijos de la familia. “El dibujo en la infancia es súper poderoso”, señala Helena. Y el lenguaje utilizado, clave. “Las niñas te sorprenden porque ellas mismas participaron para decir qué tipo de palabras funcionarían mejor para explicarlo a otros niños”, añade. Eva pensaba titular su libro así, según cuenta su madre: “Hay gente mala, pero no te preocupes, este es tu cuerpo y este es tu cuento para que lo sepas”. “Es largo. Al final cambiamos el título, pero la idea es tan potente que yo no tengo nada más que añadir”, señala.

El cuento se puede adquirir actualmente contactando con la plataforma Mejorando Infancias, habilitada para ello. La idea, además, es ceder los derechos a la Fundación Lydia Cacho, para darle más impulso a la iniciativa.

El silencio y la desinformación, aliados del abusador

Helena forma parte de la comisión de violencia del hospital en el que trabaja, por tanto, tenía ya cierto conocimiento previo sobre protocolos o herramientas a usar en este tipo de casos. Nos pone como ejemplo a Aspasi (Asociación para la sanación y prevención del abuso sexual infantil). Entre otras actividades, realizan charlas y talleres. La psicóloga Margarita García Marqués es su fundadora. “Para trabajar la prevención lo primero que hay que hacer es informar a los niños. Si ellos no están informados, no saben lo que les está ocurriendo. Los mayores aliados del abusador son el silencio y la desinformación”, afirma. Los primeros que tienen que estar informados, añade, son obviamente los padres y madres.

Entre las cosas concretas que destaca se encuentran saber distinguir las distintas partes del cuerpo y ponerles nombre y decirles que no se deben tocar por nadie salvo excepciones como consultas médicas. Para ello, hay un trabajo general que consiste en que los niños sepan que cuando algo no les gusta tienen que decir que no. “Que sepan poner los límites”. García Marqués ha escrito dos cuentos infantiles, '¿De qué color son tus secretos?', y 'Tu cuerpo es tu tesoro', además de un libro, 'Stop Abusos', dirigido a los adultos.

Portada del cuento.

Por su parte, la psicóloga Maribel Gámez señala que “es importante hablar de las realidades que nos rodean”. Y considera de utilidad destacar una serie de síntomas en niños y niñas que pueden ser indicadores de estar sufriendo abuso sexual: cambios en el comportamiento como, por ejemplo, irritabilidad o retraimiento, conocimiento de temas sexuales que no corresponden a su edad, alteraciones en el sueño y la alimentación, autolesiones y, por supuesto, irritación e infecciones en la zona genital. “Sin información, esas claves pueden pasar desapercibidas o ser mal interpretadas y, por lo tanto, perder la oportunidad de ofrecer la ayuda que el niño necesita”.

Entre los recursos recomendados por Gámez destacan cuentos como 'Kiko y la mano' o 'Estela grita muy fuerte'. “Son cuentos que ayudan a detectar situaciones incómodas o de malestar en los niños. Siempre recomiendo adaptar los cuentos a la realidad concreta de cada pequeño. No todos los niños son coaccionados cuando sufren algún tipo de abuso sexual ni todos lo interpretan como algo negativo, sobre todo, cuando el abuso viene de un pariente de primer orden, en el que confía plenamente. Y eso es algo a tener en cuenta. Cada caso es diferente".

La psicóloga Elisenda Pascual publicó hace unos años otro cuento destinado a trabajar la prevención. Se llama 'Clara y su sombra' y cuenta además con una extensa guía metodológica para ayudar a padres y madres. “Primero, los adultos tienen que hablar consigo mismos. A veces también cuando nos suena la campana como madres y padres es porque hay algo en el baúl de la memoria y que no ha salido a la luz”, afirma.

Esta profesional, que asesora a escuelas públicas en materia educativa sobre sexualidad, argumenta que “venimos de una educación judeocristiana donde hay un yugo de represión encima de la sexualidad sana”. “En psicología tenemos una frase, que todo lo que reprimimos lo pervertimos. Si no lo ponemos encima de la mesa y no lo hablamos, seguiremos reproduciendo la educación del silencio”, comenta.

La nueva ley y la importancia de la educación

Desde organizaciones como Save The Children ponen en valor la importancia del desarrollo de la educación afectivo-sexual dentro de los centros educativos. “Es una de las herramientas más eficaces para poder proteger y prevenir a la infancia”, explica Lucía Martínez, responsable de incidencia política. Y en este sentido destacan el impulso que puede suponer la nueva Ley Integral de Protección a la Infancia, en la que también han colaborado y que está a pocos pasos de aprobarse en el Congreso. “Es una oportunidad magnífica que permitirá poner en práctica una estrategia que aterrice muchas cuestiones”, señala mientras pone de relieve el gran consenso que ha suscitado la ley.

Entre las herramientas con las que cuenta esta organización se encuentra una “Escuela de Padres” con contenidos audiovisuales sobre sexualidad. “En centros educativos, nuestra apuesta es que este tipo de educación se haga desde las edades más tempranas posibles porque es cuando empieza a construirse la sexualidad de los niños y niñas. Cuanto antes se empiecen a facilitar herramientas que les permite conocerse y conocer al resto, van a estar más empoderados ante cualquier posible situación de acoso o abuso”, afirma.

Desde el Ministerio de Igualdad destacan respecto a la nueva ley que por primera vez se diseñan “itinerarios de acompañamiento específicos para los niños y niñas que sufren violencia sexual”. Fuentes del Ministerio explican que “la clave también es el enfoque con el que se trabaja”. “Prevenir y atender la violencia sexual en la infancia debe realizarse desde un enfoque de género y derechos humanos, que sitúe los derechos de las niñas y niños en el centro. Por ejemplo, con el derecho a ser escuchados por las instituciones públicas y organismos judiciales”.

Para Helena Torija, que ha vivido una demora judicial en su caso familiar, lo relevante es que la ley vaya dotada de medios y recursos económicos. “Si no hacemos todos un poco de pedagogía social para sacar esto de debajo de la alfombra y ponerlo por encima, nunca vamos a cambiarlo”, insiste 

Varones y masculinidad(es).


Agostina Chiodi, coordinación, y otros.
Instituto de Masculinidades y Cambio Social,

Para acceder a la herramienta clic aquí.

¿Cómo repercuten los cambios producidos por los feminismos y las diversidades sexuales y de género en la vida cotidiana de las/os adolescentes y jóvenes?. ¿Qué lugar deben ocupar los varones cisgénero heterosexuales en estos cambios?. ¿Cuáles son sus responsabilidades frente a la puesta en cuestión de los mandatos de masculinidad normativa?.....

El presente documento, elaborado por el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), propone la prevención de la violencia de género y la discriminación a partir del cuestionamiento a los mandatos de la masculinidad patriarcal y sus costos para los varones y las personas con las que se relacionan.

Para ello, apela a la necesidad de promover masculinidades libres y diversas y brinda herramientas de trabajo para problematizar los mandatos, los privilegios y las relaciones de desigualdad y de complicidad.

Jornadas sobre menores en el contexto de las violencias machistas. 12 y 13 Noviembre, Gobierno de Canarias...

 12 - 13 de noviembre 2020, 
Casa de Colón, 
Las Palmas de Gran Canaria, 
Participación presencial y online. 

Acceso al Programa.

Inscripción.

La Consejería de Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad del Gobierno de Canarias y el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Las Palmas organizan anualmente, en el contexto de las medidas formativas del Pacto de Estado contra la Violencia de Género, unas jornadas que en 2020 centran el foco de atención sobre los menores como víctimas directas de la violencia de género y otras formas de violencia machista.

El objetivo de las jornadas (Información gral.) es dar un espacio para la visibilización y el análisis del impacto físico, psíquico y social que las diferentes formas de violencia deparan a las niñas, los niños y adolescentes.

El programa se ha construido desde un enfoque multidisciplinar, comenzando por ofrecer un encuadre jurídico de la protección al menor desde los convenios internacionales hasta las reformas legislativas que se están realizando para luchar contra la violencia hacia la infancia y adolescencia.
Contaremos con profesionales que trabajan con menores víctimas de la violencia de género, abusos sexuales y otras formas de violencia desde el campo de la pediatría, la psicología, el trabajo social y la investigación victimológica.
Se abordará el problema también desde el ámbito de la actuación policial y forense analizando la respuesta de las instituciones en la lucha y prevención de la violencia hacia el menor.
Es pertinente también hacer una revisión crítica de la situación de la intervención institucional y su repercusión sobre el menor, exponiendo las principales líneas de investigación y de trabajo a la luz de los conocimientos actuales.
Las jornadas, por su enfoque multidisciplinar, están dirigidas a profesionales de muy diversos ámbitos: derecho, medicina, psicología, educación, servicios asistenciales especializados, trabajo social y en general a todas aquellas personas interesadas en la protección a la infancia y adolescencia.


Día Internacional de la Mujer. Declaración ONU Mujeres.



a cargo de Phumzile Mlambo-Ngcuka, Directora Ejecutiva de ONU Mujeres.
2020 es el año de las mujeres.

Mientras tanto, las niñas no ocultan su decepción con la gestión de nuestro planeta, la incesante violencia ejercida contra ellas y la lentitud del cambio en cuestiones esenciales como la educación.
domingo, 8 de marzo de 2020.


2020 es un año crucial para la igualdad de género. Y los beneficios de la igualdad de género no sólo son para las mujeres y las niñas, sino para todas las personas cuyas vidas cambiarán con un mundo más justo donde no se deje a nadie atrás. Es el año de lo que llamamos la "Generación Igualdad". Con el liderazgo de la sociedad civil, nos estamos movilizando para garantizar el ejercicio de los derechos de las mujeres y conmemorar los 25 años de la implementación de la Plataforma de Acción de Beijing.

Estamos permitiendo que las mujeres participen en las decisiones sobre su futuro. La Generación Igualdad aborda cuestiones relacionadas con las mujeres de todas las generaciones, desde los primeros hasta los últimos años, pero se centra, sobre todo, en las mujeres jóvenes y las niñas.

En la actualidad, no tenemos un mundo igualitario, y las mujeres están enojadas y preocupadas por el futuro. Están radicalmente impacientes por lograr un cambio. Es una impaciencia que tiene raíces profundas y que se ha estado gestando por años.
Tenemos algunos cambios positivos para celebrar. Por ejemplo, disminuyó un 38 % el índice de mortalidad materna desde el año 2000. Un total de 131 países realizaron reformas legales para apoyar la igualdad de género y abordar la discriminación. La discriminación contra las mujeres se legisló en muchos países hace 25 años. Hoy en día, más de tres cuartos de los países aplican leyes contra la violencia doméstica. Por otra parte, el número de niñas que asisten a la escuela es mayor que nunca, y a nivel mundial participan más mujeres que hombres en la educación terciaria.
Si bien hubo avances, ningún país ha logrado la igualdad de género. Aún no hemos puesto lo mejor de nosotros. En todos los países, siguen existiendo problemas, aunque muchos de ellos no son insuperables.

Mientras tanto, las niñas no ocultan su decepción con la gestión de nuestro planeta, la incesante violencia ejercida contra ellas y la lentitud del cambio en cuestiones esenciales como la educación. Por ejemplo, pese al aumento de la matriculación escolar, en la actualidad, una de cada 10 mujeres jóvenes no sabe leer ni escribir. Esta situación debe cambiar para que las niñas sean dueñas de todo su poder, ocupen su lugar en el mundo y desempeñen su papel vital en la tecnología y la innovación.

Otra meta prioritaria que agudiza nuestra impaciencia es la falta de mujeres en los cargos de poder. Tres cuartos de todos los miembros parlamentarios en el mundo son hombres. Una solución probada es introducir cuotas de cumplimiento obligatorio para la representación de las mujeres. Cerca de 80 países ya lo han hecho con éxito, y algunos Estados tienen gabinetes con equilibrio de género y políticas explícitamente feministas. Esta es una tendencia deseable que debemos ver más tanto en los sectores públicos como privados, donde el porcentaje total de mujeres en los puestos directivos sigue siendo de un 27 %, incluso cuando hay más mujeres que se gradúan de la universidad.
Lo mismo sucede con las mujeres que participan en las negociaciones de paz, donde la gran mayoría de los negociadores y signatarios son hombres. Sabemos que las mujeres logran acuerdos de paz más duraderos, pero siguen siendo marginadas. Los grupos de mujeres y los defensores y defensoras de los derechos humanos sufren persecución, sin embargo, están preparados para hacer mayores esfuerzos. Por este motivo, necesitan con urgencia más seguridad, financiación y recursos.
Lo que más impaciencia me genera es la desigualdad económica que permanece inalterada. Las mujeres y las niñas dedican tres veces más de tiempo y energía que los hombres y los niños a ocuparse de las tareas del hogar. Esto no les permite tener las mismas oportunidades en la educación, el mercado laboral y el poder adquisitivo. Es un motor generador de pobreza. Las mujeres jóvenes que mantienen una familia tienen un 25 % más de probabilidades que los hombres de vivir en la pobreza extrema, lo que afecta a millones de niños y niñas pequeños, con consecuencias que repercuten a lo largo de la vida de la madre y el niño y la niña. La solución incluye la aprobación de políticas adecuadas que fomenten una mayor igualdad en las responsabilidades de cuidado infantil y proporcionen apoyo estatal a las familias y a quienes trabajan en la economía informal.

Si bien estamos radicalmente impacientes, no nos rendimos y tenemos esperanzas. Contamos con un creciente apoyo de los aliados y socios que están dispuestos a eliminar las barreras contra la igualdad de género. Somos testigos de la voluntad impulsora de cambio en todas las generaciones y países. Estamos encontrando los problemas que nos unen y que ofrecen oportunidades para romper el statu quo. El aprendizaje adquirido en los últimos 25 años nos demuestra lo que se necesita para acelerar las acciones en pos de la igualdad. La Generación Igualdad es una de nuestras respuestas, y entre todos y todas conformamos esa generación.

«El cerebro refleja la vida que ha vivido, no el sexo del propietario".

La neurociencia rompe el mito del cerebro femenino.

La experta en neuroimagen dice que la cultura sexista (las mujeres cuidadoras y los hombres fortachones) 
es lo que produce que los cerebros de las mujeres y de los hombres se desarrollen de forma diferente.
A ella lo que le interesa es descubrir cómo afecta al cerebro de una niña el rosa de los vestidos y las cocinitas que les dan para jugar; 
cómo inciden en el cerebro de un niño los Legos para montar castillos que les traen los Reyes Magos. 
«El cerebro es plástico y maleable. Va amoldándose al entorno 
y a lo que una persona cree que los demás esperan de ella».... 
Cada persona es valiosa por ser quien es, no por el grupo al que pertenece....
Gina Rippon. Foto de James Waller
                                                                                                                                 Mar Abad, YOROKOBU.
   
"Acababa de nacer una de sus hijas. Gina Rippon estaba en el hospital y hablaba con otras madres mientras esperaban a que les trajeran sus bebés. Una enfermera apareció al fondo con dos criaturas que llenaban el pasillo con sus llantos y su griterío.

Se acercó a una mujer y le entregó un bebé vestido de celeste:
— Tiene un par de pulmones estupendos —dijo la enfermera, por la fiereza de los gritos del nene.
Después puso en los brazos de Rippon a su niña recién nacida, que lloraba con el mismo ímpetu, y comentó, quejosa:
— Es la más ruidosa de todos. No es muy femenina.

Apenas tenía diez minutos de vida y ya esperaban de ella que se comportara como una señorita: calladita, modosita, discreta. Mientras el niño de al lado berreaba como un campeón y lo jaleaban por ello. ¡Qué pulmonazos!

Tenemos los roles de género metidos hasta el tuétano. Arrastramos desde hace tantos siglos la idea de que las mujeres y los hombres han de actuar de un modo distinto que hemos dejado de cuestionarlo. Está tan dentro de nuestras cabezas y tan pegado a nuestra piel que hasta la ciencia, muchas veces, ha dejado de poner esta premisa en duda. 

Muchos estudios parten de la base de que el comportamiento y el temperamento de los hombres y las mujeres es distinto. Pero ese hecho, ¿lo prueba la ciencia o lo impone la educación?". 
 Esta pregunta llevó a la experta en neuroimagen cognitiva Gina Rippon a investigar el asunto y a contarlo ahora en su libro El género y nuestros cerebros (Galaxia Gutenberg, 2020).


¿DESDE CUÁNDO HABLA LA CIENCIA DE «CEREBRO FEMENINO» Y «CEREBRO MASCULINO»?

La ciencia del siglo XVII asignó un sexo al cerebro: uno «femenino» para las mujeres y uno «masculino» para los hombres. Los valores culturales y científicos empezaron a mezclarse hasta el punto de que en la actualidad se da por sentada esa ridícula frase de que «los hombres son de Marte y las mujeres son de Venus». Todos son del planeta Tierra, dice, riendo, Rippon.

Muchos piensan que esa máxima de Venus y Marte es la conclusión de cientos de investigaciones rigurosas. Ven obvio que si los genitales son distintos, el cerebro también lo sea. Aunque entonces, ¿por qué no lo es el riñón? ¿Y el corazón? Por esta lógica, el órgano del amor tendría que ser mucho más rosa y mucho más grande en las mujeres. ¿Cómo, si no, habrían de caberles tanta empatía, tantos cuidados y tanta dulzura a las madres y abuelas? 

«Es un concepto equivocado que ha regido la ciencia del cerebro durante varios siglos, que sirve de base a muchos estereotipos perniciosos y que, en mi opinión, representa un obstáculo para el progreso social y la igualdad de oportunidades», escribe la investigadora honoraria de la Asociación Científica Británica en El género y nuestros cerebros.

Gina Rippon cuestiona en este libro muchos de los mitos asumidos por la sociedad: que los hombres son unos cracks leyendo mapas y las mujeres, un peligro al volante; o que las mujeres cuidan de los bebés que es un amor y los hombres no saben ni doblar un pañal.

La catedrática honoraria de Neuroimagen Cognitiva en el Centro del Cerebro de la Universidad de Aston, en el Reino Unido, analiza los estudios en los que se basan esas creencias y desmonta muchas de ellas. Algunas las califica, incluso, de extravagantes. Por ejemplo, que las mujeres son inferiores porque su cerebro pesa 140 gramos menos o que no tienen sentido de la orientación porque su cerebro tiene conexiones distintas a las de los hombres.

Esa idea de que las diferencias anatómicas implican diferencias en el cerebro es la que lleva a dar por sentado que las mujeres y los hombres tienen distintas aptitudes cognitivas, distintas personalidades y distintos temperamentos. Incluso distintos lugares en la sociedad. Aunque, según Rippon, en la actualidad todo esto está en cuestión: «No solo se han puesto en duda las viejas respuestas. También se cuestiona la pregunta, la búsqueda de la diferencia».

— Muchas mujeres, hartas de que les pidan que sean discretas, hoy exigen su «derecho a la ira». A los hombres se les permite expresar su enfado mucho más que a las ellas.

— Sí. Cuando una mujer se irrita le dicen que eso es muy poco femenino —contesta, riendo— Si hiciéramos un test a todas las mujeres del mundo, encontraríamos grandes diferencias de temperamento. Es más: si hiciéramos un estudio a una sola mujer, veríamos diferencias de un día a otro. Muchas mujeres no se ven representadas con esa idea de la esposa dócil. Estos estereotipos ahogan a muchas personas.

¿HAY UN CEREBRO ESPECÍFICO PARA CADA SEXO O UNO PARA CADA PERSONA?

Gina Rippon lleva décadas estudiando el cerebro humano. En sus investigaciones sobre el espectro autista en niños y adolescentes ha observado miles y miles de imágenes cerebrales. Y eso le ha hecho ver que, por la foto de un escáner, sería incapaz de decir si un cerebro pertenece a una mujer o a un hombre.

Hay diferencias entre uno y otro, por supuesto, pero porque hay diferencias entre todos y cada uno de los cerebros humanos. Así lo dice Gina Rippon, con una sonrisa y mucha convicción, en la Residencia de Estudiantes de Madrid. Lo que habría que estudiar es la incidencia de los valores culturales y los roles de género en el cerebro de los individuos: «Cómo afecta el ambiente en el cerebro y cómo responde el cerebro a los estímulos culturales y sociales. Qué viene de nacimiento y qué es aprendido».

Hasta ahora la mirada habitual ha sido la que busca una diferencia biológica. La que no se conforma con las distinciones en los genitales, las gónadas, los genes y las hormonas. También las buscan en el cerebro y pueden dar con el hallazgo que quieran, porque, según Rippon, «podemos usar la información en función de la respuesta que estemos buscando». 

A ella lo que le interesa es descubrir cómo afecta al cerebro de una niña el rosa de los vestidos y las cocinitas que les dan para jugar; cómo inciden en el cerebro de un niño los Legos para montar castillos que les traen los Reyes Magos. «El cerebro es plástico y maleable. Va amoldándose al entorno y a lo que una persona cree que los demás esperan de ella», indica Rippon.

Esto podría explicar la creencia general de que los hombres tienen mejor sentido de la orientación o son mejores en ciencia y tecnología. Si de pequeños jugaron más a construir castillos, es lógico que de mayores se les dé mejor la construcción de edificios. Ocurre lo mismo con los cuidados. Aún no se ha encontrado el gen cuidador con lacito rosa. Pero lo que aún abunda son niñas que con solo cinco años ya van tirando de un carrito y llevando un muñeco pelón para jugar a ser mamás. 

Décadas de investigación llevan a Rippon a afirmar que los cerebros reflejan las vidas que han vivido, no el sexo de su propietario. «Ver las impresiones que dejan para toda la vida  las experiencias y las actitudes en nuestros cerebros plásticos nos hace comprender que necesitamos examinar más de cerca lo que ocurre fuera de nuestra cabeza, no solo dentro», escribe en El género y nuestros cerebros.

En los dos primeros años de vida, los niños absorben muchísima información. Bastante más de la que los adultos imaginan. En estos 24 meses ya aprenden los roles de género y actúan en función de ellos. Ya empiezan a interiorizar frases del tipo «los niños no lloran», «las niñas no hacen esas cosas» o «¡Mira qué tío machote!». 

Esta primera educación es fundamental para entender la brecha de género que llega después. «Parece que comienza desde el nacimiento o incluso antes», explica Rippon. «Los recién nacidos absolutamente dependientes tienen unas habilidades sociales mucho más sofisticadas de lo que pensábamos. Están reuniendo a toda velocidad informaciones sociales útiles, además de datos esenciales como qué rostro y qué voz indican la llegada de alimento y consuelo».

— Del hartazgo de las cadenas que impone una sociedad dividida en dos géneros, han aparecido dos conceptos muy interesantes: el género neutro (personas que no quieren identificarse con lo femenino ni con lo masculino) y el género fluido (individuos que quieren ir definiendo su identidad cambiante según la sientan en cada momento).

El problema es la idea de que tu sexo biológico determina tu género social. Hay muchas presunciones que deben ser cuestionadas. Lo importante es saber qué entendemos por género: ¿es tu identidad? Una de las soluciones es lo que llamo irrelevancia de género. Liberarnos del significado de ese término. Cada vez tenemos más etiquetas para el género. Puede haber tantos géneros como personas en el mundo. Pero ¿por qué no prescindir de él?—ríe—. Es solo un experimento. 

‘NEUROSEXISMO’ Y ‘NEUROBASURA’

La experta en neuroimagen dice que las similitudes entre los cerebros de una mujer y de un hombre son inmensas. Por eso no tiene sentido buscar las diferencias remotas. Pero es lo que ocurrió cuando apareció la primera tecnología que mostraba imágenes cerebrales: «Los estudios se hacían basándose en la antigua lista de las marcadas diferencias entre hombres y mujeres». 

Parte de la neurociencia de aquellos años 90 incluía en sus estudios los estereotipos de género como un dato válido más y eso dio origen a lo que la psicóloga Cordelia Fine ha llamado neurosexismo: la justificación del sexismo por la neurociencia.

Aquellas primeras imágenes del cerebro que aparecieron a finales del siglo XX entusiasmaron al público. Pronto salieron de las consultas del hospital y fueron publicadas en libros, prensa y manuales de autoayuda. El inconveniente, dice Rippon, es que pocas veces les acompañaban explicaciones rigurosas y científicas. Lo que destacaba esta literatura divulgativa eran las diferencias entre el género femenino y el masculino. Algo que resultaba anecdótico para la ciencia se convirtió en el big issue de la cultura popular. 

Todo el conocimiento nuevo que podía haber obtenido la sociedad sobre el cerebro se redujo a los asuntos de siempre: por qué las mujeres son más sensibles y los hombres, más racionales. Para eso se utilizaron la mayor parte de estas sofisticadas imágenes de colores. Y eso dio lugar a la neurobasura y las neurotonterías. Así denomina Rippon a estas imágenes que aparecen en las revistas de sala de espera y libros de autoayuda, y advierte que puede desacreditar el trabajo profesional que hacen los neurocientíficos en sus laboratorios.

— Dices que después de varias décadas estudiando el cerebro humano no has visto dos iguales. Cada cerebro es único y no podemos presuponer unas habilidades por una etiqueta ni de género ni de raza ni de nada.


— Eso significa que cada persona 
es valiosa por ser quien es, 
no por el grupo al que pertenece.



ATENCIÓN: CSW64 / Beijing+25 (2020) se cancela parcialmente por la crisis COVID-19.

Update: CSW 64 Advisory
Following the UN Secretary-General’s recommendation to Member States to amend the format of the 64th session of the UN Commission on the Status of Women in light of the current concerns regarding coronavirus disease (COVID-19), an informal meeting took place today. The Commission decided that the 64th session of the Commission will convene on 9 March, at 10.00 a.m. (EST), for a procedural meeting. The meeting will include opening statements, followed by the adoption of the draft Political Declaration and action on any other draft resolutions. The session will then suspend until further notification. No general debate will take place and all side events planned by Member States and the UN system in conjunction with CSW 64 will be cancelled.

Siguiendo la recomendación del Secretario General de la ONU a los Estados Miembros de enmendar el formato de la 64ª sesión de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer de la ONU a la luz de las preocupaciones actuales con respecto a la enfermedad por coronavirus (COVID-19), hoy se celebró una reunión informal. La Comisión decidió que la 64ª sesión de la Comisión se reunirá el 9 de marzo, a las 10.00 a.m. (EST), para una reunión de procedimiento. La reunión incluirá declaraciones de apertura, seguidas de la adopción del proyecto de Declaración Política y la acción sobre cualquier otro proyecto de resolución. La sesión se suspenderá hasta nueva notificación. No se llevará a cabo un debate general y se cancelarán todos los eventos paralelos planeados por los Estados miembros y el sistema de la ONU en conjunto con CSW 64.


En 2020, la comunidad internacional celebrará el vigésimo quinto aniversario de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer y la adopción de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing (1995). Se celebran igualemnte cinco años de Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. 2020 es, por lo tanto, un año crucial para acelerar la realización de la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres y niñas en todo el mundo.
El sexagésimo cuarto período de sesiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer se celebrara en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York del 9 al 20 de marzo de 2020. Representantes de los Estados miembros, entidades de las Naciones Unidas y organizaciones no gubernamentales acreditadas por ECOSOC (ONG)de todas las regiones del mundo están invitadas a asistir a la sesión.

Temas

El objetivo principal de la 64a sesión es la revisión y evaluación de la implementación de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing y los resultados de la 23ª sesión especial de la Asamblea General. La revisión incluirá una evaluación de los desafíos actuales que afectan a la implementación de la Plataforma de Acción y el logro de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, así como de su contribución a la plena realización de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

Mesa

La Mesa de la Comisión desempeña un papel fundamental a la hora de facilitar la preparación del periodo de sesiones anual de la Comisión y asegurar sus buenos resultados. Los miembros de la Mesa ocupan su cargo durante dos años. En 2002, a fin de mejorar su trabajo y asegurar la continuidad, la Comisión decidió celebrar la primera reunión del periodo de sesiones subsiguiente, inmediatamente después de la clausura del periodo ordinario de sesiones, con el único propósito de elegir a la/al nueva/o Presidenta/e y a otros miembros de la Mesa (decisión 2002/234 del Consejo Económico y Social).
La Mesa para la 64ª sesión (2020) está compuesta de los siguientes miembros:
  • S.E. Sr. Mher Margaryan (Armenia), Presidente (Grupo de Estados de Europa oriental)
  • Sra. Zahraa Nassrullah (Iraq), Vicepresidenta designada (Grupo de Estados de Asia y el Pacífico)
  • Sra. Jo Feldman (Australia), Vicepresidenta (Grupo de Estados de Europa occidental y otros Estados)
  • Sra. Ahlem Sara Charikhi (Argelia), Vicepresidenta designada (Grupo de Estados de África)
  • Sra. Devita Abraham (Trinidad y Tobago), Vicepresidenta designada (Grupo de Estados de América Latina y el Caribe)

Preparaciones y Participación de ONGs


Haga clic aquí para visitar la página de CSW64 (solo en inglés) y obtener información completa y actualizada sobre estos y otros temas relacionados con la sesión.