Mostrando entradas con la etiqueta CDN. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta CDN. Mostrar todas las entradas

La guerra de Israel contra Gaza y la violación de los derechos del niño.


 La guerra de Israel contra Gaza y la violación de los derechos del niño.

Para citar este artículo: 
Karen Wells, Susana Cortés-Morales, James Esson, Deirdre Horgan, 
Fikile Nxumalo, Ann Phoenix, Pauliina Rautio & Rachel Rosen.
Children´s Geographies, 
Publicado online: 20 Feb 2024

La intensificación de la actual guerra de Israel contra Gaza ha matado a más de 25.000 personas en menos de cuatro meses; la mitad de ellos niños. Casi 60.000 personas han resultado heridas, casi todas civiles y muchos de ellos niños (UNICEF 1 ).  Muchos miles más están desaparecidos bajo los escombros causados ​​por las 25.000 toneladas de explosivos que se han lanzado sobre Gaza desde el 7 de octubre, el equivalente a dos bombas nucleares. El IPC ha informado que toda la población de 2,2 millones de personas enfrenta inseguridad alimentaria aguda y que esta "es la proporción más alta de personas que enfrentan altos niveles de inseguridad alimentaria aguda que la iniciativa IPC haya clasificado jamás para un área o país determinado". Uno de cada cuatro hogares se enfrenta a "condiciones catastróficas", incluida la hambruna.2   Todos los menores de cinco años de Gaza, 335.000 niños, corren ahora un alto riesgo de sufrir "desnutrición grave y muerte evitable".3

Escribimos este punto de vista porque no es sostenible como académicos críticos de estudios de la infancia permanecer en silencio ante estas violaciones graves y sistemáticas de los derechos de los niños debido a las acciones de Israel en los territorios palestinos ocupados y especialmente en Gaza. La violencia, la destrucción, el hambre y el despojo que están sufriendo los niños de Gaza en el momento actual es casi imposible de comprender. Es precisamente debido a la vulnerabilidad de los niños al trauma, físico y emocional, que los niños tienen protecciones especiales en el derecho internacional. Estas protecciones están siendo violadas diariamente por las acciones de Israel en Gaza.

La guerra israelí contra Gaza no sólo viola la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, sino también los siguientes aspectos del derecho internacional 4 que se relacionan directamente con los derechos de los niños:

· El Cuarto Convenio de Ginebra sobre la protección de civiles durante la guerra y sus protocolos adicionales que prevén el cuidado y la protección de los niños, incluidos sus derechos a "su entorno cultural, su educación y el ejercicio de su religión" (GCIV Arts. 24, 50). ' y especifica que

o     'Los niños serán objeto de especial respeto y serán protegidos contra cualquier forma de atentado al pudor. Las partes en conflicto deberán proporcionarles los cuidados y ayudas que requieran, ya sea por su edad o por cualquier otro motivo (API Art. 77.1).

o     Las mujeres embarazadas y los recién nacidos entran en la categoría de "personas heridas" y, por tanto, se benefician de la misma protección prevista para los heridos y los enfermos en virtud del derecho humanitario (API Art. 8).

o     En la distribución de suministros de socorro se dará prioridad a las personas a las que se deba otorgar un trato privilegiado o protección especial, como niños, mujeres embarazadas, casos de maternidad y madres lactantes (GCIV Arts. 38.5, 50; API Art. 70.1). .

o     En las zonas sitiadas o en los territorios ocupados, los Estados partes en los Convenios deben permitir el libre paso de todos los suministros de alimentos, vestidos y tónicos esenciales destinados a los niños menores de quince años y a las mujeres embarazadas y lactantes (artículo 23 del Código Civil).Nota5

· Tres de las 'seis violaciones graves' de la ONU (asesinatos y mutilaciones; ataques a escuelas y hospitales; y denegación de acceso humanitario).

· La destrucción de escuelas también viola derechos interrelacionados conferidos por la CDN: el derecho a relajarse y jugar (artículo 31); el derecho a la libertad de expresión (artículo 13); el derecho a estar a salvo de la violencia (artículo 19) y el derecho a la educación (artículo 28).

Además del impacto directo de la campaña militar contra los habitantes de Gaza y en violación de las protecciones antes mencionadas, Israel también ha negado la entrada a Gaza de alimentos y medicinas y ha destruido hospitales e interrumpido el suministro de agua y electricidad, causando muertes por hambre y enfermedades. El bloqueo actual es una intensificación de la restricción israelí de alimentos y medicinas a Gaza que ha estado en vigor desde 2007.6   La infraestructura educativa también ha sido objeto de ataques: nueve de cada diez escuelas han sufrido daños importantes7   y la última universidad de Gaza fue destruida por el ejército israelí el 17 de enero de 2024. La mayor parte de la población ha sido desplazada y ha visto sus casas arrasadas y ahora vive en tiendas de campaña o al aire libre.

Muchos gobiernos han condenado esta guerra. En la Asamblea General de las Naciones Unidas del 27 de octubre de 2023, se aprobó una resolución que pedía "una tregua humanitaria inmediata y sostenida y el cese de las hostilidades"8   fue adoptado por 121 votos contra 14 y 44 abstenciones. Bolivia ha roto relaciones diplomáticas con Israel, Chile y México han solicitado a la CPI que investigue posibles crímenes de guerra cometidos por Israel, y varios otros países han retirado a sus embajadores. El presidente del Gobierno español ha pedido sistemáticamente un alto el fuego inmediato y permanente. Lo más significativo es que Sudáfrica llevó un caso ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) acusando a Israel de genocidio, citando muchos de los pronunciamientos del propio gobierno israelí en apoyo de su caso. La CIJ dictaminó el 26 de enero de 2024 que es "plausible" que los palestinos corran riesgo de genocidio debido a las acciones de Israel en Gaza y que debe informar a la Corte en el plazo de un mes para explicar cómo está cumpliendo las decisiones del tribunal.9

Sin embargo, muchos otros gobiernos se han negado a pedir un alto el fuego o condenar a Israel. El Reino Unido ha apoyado activamente a Israel con acceso a las bases británicas en Chipre. Una coalición de Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Bahréin, Canadá y Países Bajos ha bombardeado Yemen en un intento de obligar a los hutíes a poner fin a su bloqueo de los barcos que transportan cargamentos israelíes en el Mar Rojo.10   Alemania apoya a Israel en la CIJ y ha prohibido el uso de la palabra "genocidio" en relación con Israel, calificando esta acusación de "antisemita". Estados Unidos continúa suministrando a Israel ayuda militar por valor de 14.300 millones de dólares (¿referencia?) y ha autorizado la venta de emergencia de 147,5 millones de dólares en equipo militar para continuar su guerra genocida, evitando al Congreso en el proceso.

A menudo se defiende al gobierno israelí con el argumento de que sus acciones son en defensa propia en respuesta a la incursión de Hamás en Israel el 7 de octubre. Ese día, Hamás tomó aproximadamente 240 rehenes y asesinó a 695 civiles, incluidos 39 niños.11   No debería ser necesario decir que estamos en contra del asesinato o el secuestro de civiles, pero, para que conste, no defendemos que los civiles sean asesinados o capturados en conflictos. Dicho esto, debemos señalar que la afirmación de que la guerra en Gaza comenzó el 8 de octubre simplemente no es cierta. En primer lugar, hay que reconocer que el establecimiento de las líneas del Armisticio de 1949, en las que Europa desempeñó un papel fundamental, supuso la catástrofe/Nakbade la expulsión forzosa de 750.000 palestinos y el asesinato de 15.000 palestinos entre 1947 y mayo de 1949. por las fuerzas militares sionistas.12   Además, lo que ha ocurrido desde el 8 de octubre es una intensificación de la ocupación por parte de Israel de tres áreas protoautogobernadas –Jerusalén Oriental, Gaza y Cisjordania– que fueron establecidas por los Acuerdos de Oslo en 1995. Un elemento clave de los Acuerdos de Oslo, firmado por representantes israelíes y palestinos, fue la retirada de las fuerzas israelíes de estos territorios; esa retirada nunca ocurrió. Desde que se firmaron los Acuerdos de Oslo, Israel ha matado a unos 6.000 palestinos, la mayoría en ataques a Gaza; el más largo, de 50 días, en 2014. En Cisjordania y Jerusalén Este, 203 palestinos murieron en 2023 y un promedio de 1.130 resultaron heridos cada mes de 2023.13   Si bien las muertes de israelíes e internacionales el 7 de octubre han sido noticia en todo el mundo, las muertes y el sufrimiento de los palestinos en Gaza pasan en gran medida desapercibidos para gran parte de los principales medios de comunicación, y así ha sido durante muchos años. Por último, hay que reconocer que el bombardeo indiscriminado de una población civil que ha provocado la muerte de más de 25.000 personas en los primeros 100 días de guerra es una forma de castigo colectivo del Estado israelí al pueblo palestino. 

 

Conclusión

En oposición a la complicidad de sus gobiernos en la guerra de Israel, cientos de miles de personas en todo el mundo se han movilizado en apoyo de Palestina.14   y más de 2.400 académicos y estudiantes de estudios sobre la infancia firmaron una declaración exigiendo un alto el fuego.15   Una pequeña pero significativa oposición a la guerra se ha ido construyendo lentamente en Israel, incluida una manifestación contra la guerra celebrada el 21 de enero de 2024.16

¿Cómo deberían responder los geógrafos infantiles a estos acontecimientos? Nuestra opinión es que, como mínimo, debemos exigir un alto el fuego inmediato. Permanecer en silencio ante el asesinato en masa y la discapacidad de niños es ser cómplice. Como académicos, no debemos dejarnos silenciar por afirmaciones de que es "complicada" o que el análisis de la guerra, sus causas e impactos requieren "matices" o que, a menos que Israel o Palestina sean el centro de nuestra investigación, no lo somos. "calificado" para hablar en una plataforma académica. También tenemos un papel crucial que desempeñar en el fomento de espacios de análisis y crítica, con y para colegas, estudiantes y niños. Debemos resistir los intentos actuales de impedir que las voces propalestinas se escuchen en las universidades y escuelas.17   Si bien hablar abiertamente no pondrá fin a este conflicto, aumentar el peso de la opinión pública mundial puede persuadir a Estados Unidos a dejar de apoyar incondicionalmente las acciones de Israel y a dejar de financiar su poder destructivo. En el pasado, ha sido precisamente el temor de Estados Unidos al efecto aplastante de su violencia sobre su (autoproclamada) reputación como hegemón benigno del orden internacional lo que finalmente cambió el rumbo de la política exterior (Vietnam) e interior (derechos civiles). movimiento). Si bien Estados Unidos no es el único país cómplice de las acciones genocidas de Israel, desempeña un papel decisivo. Sin el apoyo financiero y la ayuda militar de Estados Unidos, Israel no podría continuar esta guerra. Como se mencionó anteriormente, Estados Unidos brinda más apoyo financiero y militar a Israel que cualquier otro estado. Estados Unidos sigue siendo una potencia hegemónica mundial. Ejerció su derecho de veto para bloquear una votación a favor de un alto el fuego humanitario en la reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU el 8 de diciembre de 2023.18   Si no lo hubieran hecho, se habría producido un alto el fuego.

Reconocemos que los estudiosos de la infancia difieren sobre lo que consideran posibles soluciones para garantizar la libertad y la igualdad de los palestinos. Sin embargo, independientemente de lo que uno piense sobre el futuro de Palestina e Israel, corresponde a todos los estudiosos de la infancia apoyar el fin de las violaciones de la protección de los niños en el derecho internacional, incluido un alto el fuego inmediato, la restauración de escuelas y hospitales, y la inmediata suministro de ayuda humanitaria, incluidos alimentos, agua y medicinas. Instamos a los académicos a utilizar sus plataformas académicas para oponerse ruidosamente al actual asesinato, incapacidad y duelo de niños por parte de Israel, no sólo en Gaza, sino también en la Cisjordania ocupada, Jerusalén Oriental y el resto de Palestina-Israel.

Declaración de divulgación: Los autores no informaron de ningún posible conflicto de intereses.

Notas
1. https://www.unocha.org/news/gaza-children-under-attack  
2. https://www.ipcinfo.org/ipcinfo-website/alerts-archive/issue-94/en/
3. https://www.unicef.org/press-releases/statement-unicef-risk-famine-gaza-strip
4. Para una lista completa del derecho internacional que se refiere específicamente a la protección de los niños en la guerra, véase el apéndice de Amann, Diane Marie, International Child Law and the Settlement of Ukraine-Russia and Other Conflicts (2022). 99 International Law Studies. Disponible en SSRN: https://ssrn.com/abstract=4232165)
5. https://guide-humanitarian-law.org/content/article/3/children/
6. https://www.bbc.co.uk/news/world-middle-east-19975211
7. https://www.bbc.co.uk/news/world-middle-east-68023080
8. https://press.un.org/en/2023/ga12548.doc.htm
9. https://www.icj-cij.org/case/192
10. https://www.whitehouse.gov/briefing-room/statements-releases/2024/01/11/statement-from-president-joebiden-on-coalition-strikes-in-houthi-controlled-areas-in-yemen/
11. https://www.france24.com/en/live-news/20231215-israel-social-security-data-reveals-true-picture-of-oct-7-%20deaths
12.https://www.aljazeera.com/news/2022/5/15/nakba-mapping-palestinian-villages-destroyed-by-israel-in-1948
13. https://www.aljazeera.com/news/longform/2023/12/12/know-their-names-palestinians-killed-by-israel-inthe-occupied-west-bank-2
14. https://www.aljazeera.com/news/2024/1/13/pro-palestine-demonstrations-around-the-world-as-gaza-warnears-100-days
15. https://mondoweiss.net/2023/10/childhood-researchers-call-for-an-end-to-the-western-backed-israeligenocide-in-gaza/
16. https://www.aljazeera.com/editorial/2024/1/21/reporters-notebook-covering-an-first-antiwar-protest-inisrael
17. https://www.opendemocracy.net/en/prevent-counter-terrorism-palestine-gaza-students-schools-universities/
18. https://news.un.org/en/story/2023/12/1144562

 

Observación General 26, su acceso para los más pequeños a través de láminas. Plataforma de Infancia.

 La Plataforma ha elaborado 10 láminas ilustradas que adaptan el contenido de la 
para que las niñas y niños más pequeños puedan también 
tener acceso a este contenido. 

Plataforma de Infancia material adaptado para niños sobre la Observación General

A través de las láminas se pretende, además de trasladar lo establecido en la Observación, que las chicas y chicos puedan interactuar con su contenido, trabajando también sus propios derechos mediante esta interacción.  

Se trata de un total de 10 láminas distribuidas en 2 franjas de edad (de 6 a 8 años y de 9 a 12 años) para colorear e interactuar con ellas con diferentes técnicas que generen creatividad, reflexión, debate y propuestas.  

Cada lámina recoge un mensaje principal de la adaptación de la Observación General 26, en relación al derecho a un medio ambiente saludable, a la participación infantil, a la información adaptada, a la cooperación y a las medidas que los gobiernos deben tomar. 

El Comité de los Derechos del Niño ya publicó la Observación adaptada a chicas y chicos y desde la Plataforma de Infancia nos sumamos a que esta Observación llegue a todas las niñas y niños, independientemente de su edad. Proteger y cuidar del medio ambiente, así como contribuir a tener un mundo más sostenible es tarea de todas y todos.   


Equipo Asesor OB26

El Equipo Asesor Infantil, además, ha creado una Carta Mundial (por el momento, solo disponible en inglés) que refleja las principales demandas y mensajes de niños, niñas y jóvenes de todo el mundo sobre sus derechos, el medio ambiente y el cambio climático. 

La Observación General nº26 (OG26) trata sobre cómo los derechos de la infancia se ven afectados por la crisis medioambiental y establece qué deben hacer los gobiernos para defender estos derechos. Este instrumento será, de aquí en adelante, una guía de referencia para que los Estados hagan efectivo el derecho de la infancia a un medio ambiente seguro, limpio y sostenible. 

La OG26 es el primer instrumento internacional en materializar este tipo de derechos. Para ello, establece el vínculo entre la degradación ambiental, el cambio climático y las obligaciones de los Estados de acuerdo con la Convención sobre los Derechos del Niño.   

El Comité de los Derechos del Niño ha implicado especialmente a la infancia y adolescencia en esta Observación. Un proceso en el que han participado más de 16.000 niños y niñas de 100 países compartiendo sus ideas, opiniones y preocupaciones. La OG26 es la respuesta institucional al llamamiento realizado por la infancia y la juventud para que proteja sus derechos en materia de cuestiones ambientales. 

Desde la Plataforma de Infancia, chicas y chicos de entidades miembro, se sumaron a participar de estos talleres en los que aportar a la Observación y también poder revisarla antes de su publicación.   

Las cuestiones sobre las que dieron su opinión y expresaron sus ideas y preocupaciones fueron, por un lado, sobre cómo las niñas, niños y jóvenes pueden intervenir en las decisiones que el gobierno y empresas toman sobre el medio ambiente y el cambio climático; por otro lado, sobre de qué forma se sienten escuchados y tomados en serio cuando se expresan; y, por último, qué opinan que deben hacer los gobiernos para mantener seguras a las niñas, niños y jóvenes cuando se expresan, actúan o defienden sus derechos. 


Veinteenes.




Ese otro país es el que, cada año, ve llegar su veinteene y se congratula de que, aunque sea por un mísero día, niñas y niños pasen a ser un elemento del primer plano informativo (y eso, las más de las veces, por los pelos). Porque ese día de cada noviembre no se celebra sólo el día de la Infancia sino –el matiz es importante- el de sus derechos que, además, tienen como apellido humanos.


Pido disculpas por anticipado. Por jugar al equívoco con un título que en la gran cámara de resonancia del contexto político español probablemente haya despertado expectativas que no voy a satisfacer. Al fin y al cabo, mientras escribía estas líneas he visto desplegarse la semana más convulsa de la política nacional que recuerde en mucho tiempo: incluyendo hordas de poco disimulado neofranquismo, ruido de sables jubilados y a un señor con un peinado muy raro al que se le ha petrificado en la cara una sonrisa de satisfacción con la que corre el riesgo de envenenarse. Todo tan normal como siempre, en la plena democracia de esta España nuestra.

Pero no, ese no es mi tema. Yo quería, más bien, dar la turra con aquello de las dos Españas. Porque aquí somos de realismo sucio y no nos basta con lo conceptual: el corazón se nos ha de helar también en la práctica y en días inverosímiles. Así que cada año nos es dado por solapar, un poco sin quererlo, esas dos Españas en dos celebraciones antitéticas que no pueden representar mejor todas nuestras contradicciones.

Hay una España que encuentra en su veintene el momento de sacar del armario sus mejores galas para defender un ideario que parecía apolillado, pero al que cada vez con más frecuencia le están saliendo voluntarios prestos al remiendo. Y así, lo que creímos una anécdota con tintes del folclorismo sepia que duraba lo que duraba la dichosa efeméride, se nos está convirtiendo en un brote de sarpullido nacionalsocialista agudo con vistas a –y en esto espero equivocarme- cronificarse en nuestra política cotidiana.

Pero a ese veintene de la España que vive por y para el pasado se le superpone, como en un zurcido tosco inventado por un aprendiz de costurero, el de otra España que quiere confiar en el futuro. Ese otro país es el que, cada año, ve llegar su veinteene y se congratula de que, aunque sea por un mísero día, niñas y niños pasen a ser un elemento del primer plano informativo (y eso, las más de las veces, por los pelos). Porque ese día de noviembre no se celebra sólo el día mundial de la Infancia sino –el matiz es importante- el de sus derechos que, además, tienen como apellido humanos. Y ya estamos con eso que tanto enciende a nuestras huestes carpetovetónicas, a las que la simple idea de que seamos fulanos y menganos, pero con derecho a algo, les resulta irritante; tanto más si quien reclama ese derecho es alguien a quien todavía no consideran adulto.

Creer en los derechos de la población infantil es creer en la posibilidad de un futuro por partida doble: porque cuando escuchamos con atención a niñas y niños se hace mejor su presente (y nuestro presente) y sin eso es difícil creer en las bondades de un mañana; pero también porque en el futuro no seremos nosotros, sino ellos, quienes heredarán esta piltrafa de mundo que nos empeñamos en construir, así que hay que hacer algo porque el legado les llegue en mejores condiciones de las que lo encontramos. Justicia generacional, se llama. Y es un reto, si hay que creer en los hechos que este lunes 20 se empeña en recordarnos: porque seguimos viendo enquistada la pobreza infantil; porque en las mentes de muchos adolescentes crece el mal de la incertidumbre a crecer en un mundo a peor; porque es posible que, según nos dice una encuesta reciente encargada por el Defensor del Pueblo, haya más de cuatro millones y medio de personas adultas en este país que portan en su interior un niño que ha sido vejado y abusado por quien debía protegerle. Y estaría dispuesto a hacer un recuento más exhaustivo, si no fuera tan deprimente.

¿Qué ocurrirá este año? ¿Conseguirá la España zombie de las marrullerías parlamentarias, las estrategias electorales y los programas escritos en tablas de piedra donde nunca es posible leer la palabra Infancia eclipsar el protagonismo debido a los niños? ¿Seguiremos hablando de política o empezaremos a hacerla desde los derechos y los intereses de todas esas personas que aún no son adultas[1]?

A estas alturas de la vida he entendido ya que el bienestar de toda una sociedad es imposible si no empieza en la Infancia, y me refiero también al bienestar de toda esa gente sobrada que la mira como al sarampión, congratulándose de haberla pasado hace mucho tiempo. Si alguien me lee y piensa como yo, igual es buena idea recordar que esa España que no ha renunciado todavía al futuro tiene una fecha de la que congratularse, aunque nos invite a estrellarnos una y otra vez contra la realidad. O igual que hay que felicitarse porque -oh, primicia del día- parece que tendremos al fin un Ministerio para la infancia (y la juventud). Y sí, quizás nos venza el griterío bronco de la otra España, esa que blande muñecas hinchables como cimitarras, pero habrá que intentarlo. Yo, por si acaso, voy a quedarme mirando atentamente desde mi atalaya prestada en la Enzina, a ver si hay suerte y mañana es un día mejor.

[1] Admitamos que es un pobre consuelo pero, al menos, mientras aquí seguiremos tarifando por otras cosas “más importantes”, el parlamento europeo pondrá un poco de decencia y dedicará su pleno a debatir sobre los derechos de los niños europeos, como informan desde su propia web.

*Iván RodríguezAhora soy sociólogo y antes de eso la gente me parecía muy rara: bueno, igual no era en ese orden. También escribo: para entenderme y para entender. Sin la música, el cine y la literatura sería como un náufrago que no tiene madero al que asirse para salvar el pellejo. Creo que, de verdad, el mundo puede ser mejor si ponemos un poquito de parte de todos. Cuando me pongo a pensar que me tengo que morir, toco la guitarra. 
Profesor Titular de Universidad de Huelva. Área de Sociología, Vicedecano de Calidad; asociado GSIA.

Día de los Derechos del Niño. Aniversario de la CDN.

 Desde la Asociación GSIA saludamos a todos los niños y niñas del mundo en su día,
 aquel 20 de noviembre de hace 34 años, cuando todo el mundo aprobó 
la Convención sobre los Derechos del Niño: 
La Convención internacional más ratificada 
en todo el ordenamiento jurídico mundial.

Por ello hay que felicitaros: 
porque los niños importan al mundo y el mundo os importa mucho: porque participáis en él, porque lo hacéis aunque no lo parezca, porque lo sabéis hacer a pesar de cómo os tratamos.
Hoy podemos felicitarnos porque en España se ha creado el 1º Ministerio de la Infancia y Juventud.

Desde GSIA seguiremos peleando porque vuestra presencia en el mundo sea cada vez más potente y visible; porque, por otra parte, los mayores, a los que se nos supone que tenemos más juicio, no parece que lo hagamos tan bien: ahí están las guerras, los desastres climáticos, el hambre y la violencia en todas sus formas. 
Vuestra aportación, seguro que está más centrada en la soluciones consensuadas y colectivas, y no en los intereses particulares...
En esta fecha no podemos olvidar a la Infancia que no está de fiesta, ni para fiestas. 
Infancia que aún hoy día muere por enfermedades claramente prevenibles, por la hambruna, contra la guerra que asola la vida de tantos niños.

Queremos captar y dar valor al discurso de la infancia y adolescencia sobre la vivencia de la sexualidad y propiciar un debate social en el que se incorporen sus ideas y puntos de vista sobre todo para lograr entender cuáles son las claves en las tomas de decisiones que afectan a los niños, niñas y adolescentes.

¡¡Felicidades en vuestro día!!


Siluetas de pavor.


Observación General nº26, Versión para niños.


 ¿Qué deben hacer los gobiernos 
para proteger los derechos de los niños y las niñas, 
incluido su derecho a un medio ambiente limpio, sano y sostenible?


Los daños medioambientales son una amenaza importante para los derechos de la infancia en todo el mundo. Los niños y las niñas exigen que se tomen medidas inmediatas y que se protejan sus derechos. Un medio ambiente limpio, sano y sostenible es un derecho humano en sí mismo y es necesario para que los niños y las niñas disfruten de sus derechos. 

Esta Observación General explica por qué es necesario tomar medidas urgentes en materia de medio ambiente y clima y qué deben hacer los gobiernos para proteger todos los derechos de la niñez. También deja claro que los gobiernos deben proteger los derechos de los niños y las niñas de hoy, así como los de las generaciones futuras.

Los esfuerzos de los niños y niñas por defender sus derechos medioambientales motivaron al Comité a crear esta Observación General. 
Los niños han desempeñado un papel muy importante en la elaboración de esta Observación General: 16.333 niños y niñas de 121 países compartieron sus opiniones e ideas en las consultas diseñadas con los miembros del Equipo Asesor Infantil para la Observación General N.º 26. 
Las citas de los niños y niñas que aparecen en la Observación General proceden de las consultas realizadas...

La nueva Constitución chilena no parece que vaya a reconocer ni a asegurar los derechos de niñas, niños y adolescentes.

 Por rechazo de Iniciativa Popular de Norma que garantiza los Derechos de la Niñez.




El viernes por la noche el Consejo Constitucional rechazó la Iniciativa Popular de Norma 9247* que proponía que la nueva Constitución reconozca y asegure los derechos de niñas, niños y adolescentes y que el Estado promueva la protección de la niñez, adoptando, sin discriminación, medidas para resguardar su supervivencia y desarrollo.

Hubo 5 votos a favor, hubo 7 abstenciones. 

La propuesta rechazada garantizaba constitucionalmente los Derechos de la Niñez, en línea con los acuerdos internacionales y los estándares de aquellos países a los que queremos parecernos.** 

A cambio, el texto propuesto por la comisión de principios es débil y confunde el interés superior del niño y las prioridades de las familias de origen. 
Esa confusión puede ser muy grave para la construcción de un sistema de protección y garantías para la niñez.

Quienes trabajamos en niñez vemos con pena y frustración cómo nuevamente Chile pierde una oportunidad de responder a las necesidades más básicas de niños y niñas que viven en el territorio nacional.


** Mi voz en la Constitución: Declaración pública de la Defensoría de la Niñez sobre el proceso constituyente 2023 y consideración de derechos de niños, niñas y adolescentes.

Hoy, en los 50 años del golpe de estado, 
Chile parece no querer garantizar 
los derechos de sus niños y adolescentes.
Veremos en qué acaba. 

"La crisis climática es una crisis de derechos de la infancia" El CDN ha ratificado explícitamente el derecho de los niños y las niñas a vivir en un medioambiente limpio, sano y sostenible.

Por primera vez, el CDN (Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas) 
ha ratificado explícitamente el derecho de los niños y las niñas 
a vivir en un medioambiente limpio, sano y sostenible, 
emitiendo una interpretación exhaustiva de las obligaciones 
de los Estados miembros en virtud de la Convención sobre los Derechos del Niño.


Esta Convención, nacida en 1989 y ratificada por 196 Estados, establece los derechos universales de los niños y las niñas, como el derecho a la vida, a la supervivencia, al desarrollo y a la salud. Una Observación General proporciona orientación jurídica sobre lo que implican estos derechos en relación a un tema o ámbito legislativo específico.


La recién publicada Observación General nº 26 sobre los derechos del niño y el medioambiente, con especial atención al cambio climático
 aborda explícitamente la emergencia climática, el colapso de la biodiversidad y la contaminación generalizada, proponiendo medidas para proteger la vida y las perspectivas vitales de los niños. Philip Jaffé, miembro del Comité de los Derechos del Niño, ha afirmado que “los niños y las niñas de todo el mundo han liderado la lucha contra el cambio climático, pidiendo a sus gobiernos y a las empresas que tomen medidas para proteger el planeta y su futuro. Con su Observación General nº 26, el Comité de los Derechos del Niño no sólo se hace eco y amplifica las voces de los niños y las niñas, sino que también define claramente sus derechos en relación con el medioambiente que los Estados Partes deben respetar, proteger y cumplir... ¡colectiva y urgentemente!".

Ver traducción, no oficial, de la Obervación Gral. nº 26 desde aquí.

Por su parte, el Relator Especial de la ONU sobre Derechos Humanos y Medioambiente, David Boyd, ha explicado que "esta nueva Observación General supone un avance fundamental en el reconocimiento de que todos los niños de la Tierra tienen derecho a vivir en un medioambiente limpio, sano y sostenible. Los gobiernos deben tomar medidas urgentes para hacer frente a la crisis medioambiental global con el fin de hacer realidad estas inspiradoras palabras", ha declarado.

Paloma Escudero, Asesora Especial de UNICEF para la Promoción de los Derechos del Niño y la Acción Climática, dijo: “La crisis climática es una crisis de los derechos del niño. Cada gobierno tiene la obligación de proteger los derechos de todos los niños en todos los rincones del planeta, especialmente aquellos niños y niñas que viven en países que han contribuido menos a este problema pero que están soportando las inundaciones, sequías, tormentas y calor más peligrosos”.

La Observación General nº 26 especifica que los Estados son responsables no sólo de proteger los derechos de los niños y las niñas frente a daños inmediatos, sino también frente a violaciones previsibles de sus derechos en el futuro debido a los actos -o la inacción- de los Estados en el presente. Además, subraya que los Estados pueden ser considerados responsables no sólo de los daños medioambientales que se produzcan dentro de sus fronteras, sino también de las repercusiones perjudiciales de los daños medioambientales y del cambio climático más allá de ellas, debiendo prestar especial atención a los daños desproporcionados que sufren los niños en situaciones desfavorecidas.

La Observación General nº 26 insta a los 196 Estados que han ratificado la Convención sobre los Derechos del Niño a que tomen medidas inmediatas, como emprender la eliminación progresiva del carbón, el petróleo y el gas natural y el cambio a fuentes de energía renovables, mejorar la calidad del aire y garantizar el acceso a agua limpia, transformar la agricultura y la pesca industriales para producir alimentos sanos y sostenibles, y proteger la biodiversidad.

Además, el documento recuerda que las opiniones de los niños deben tenerse en cuenta en la toma de decisiones sobre el medioambiente y subraya el papel fundamental de la educación medioambiental en la preparación de los niños para actuar, defender y protegerse de los daños medioambientales. La propia Observación General nº 26 es el resultado de un compromiso mundial e intergeneracional, que incluye amplias consultas con los Estados miembros, organizaciones internacionales y regionales, entidades y organismos especializados de las Naciones Unidas, instituciones nacionales de derechos humanos, organizaciones de la sociedad civil y los propios niños y niñas.

Joshua Hofert, director ejecutivo de Tierra de Hombres Alemania, ha afirmado: "Los niños son los menos responsables de la crisis climática, pero los que más sufren sus consecuencias: cada año, 1,7 millones de menores de cinco años pierden la vida debido a daños medioambientales evitables. Y, sin embargo, los niños y los jóvenes están infrarrepresentados en prácticamente todos los procesos de toma de decisiones sobre política medioambiental. Con la Observación General nº 26, hemos intentado cambiar esta situación: con más de 16.000 contribuciones de niños de 121 países, este ha sido uno de los procesos de participación infantil más inclusivos a nivel de la ONU hasta la fecha. Como Tierra de Hombres, estamos orgullosos de haber coordinado este extraordinario proceso de Observación General con el Comité de los Derechos del Niño de la ONU."

Tierra de Hombres, aliado oficial del Comité para la elaboración de la Observación General nº 26, dirigió un proceso con actores multinivel, en el que los niños y niñas participaron de forma significativa a través de consultas online para dar forma y contenido al texto. La organización internacional de defensa de los derechos del niño coordinó una Junta Asesora mundial de expertos y un equipo de 12 niños asesores de edades comprendidas entre los 11 y los 17 años para apoyar al Comité. El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), como miembro de la Junta Asesora, aportó más conocimientos técnicos y ayudó a recabar opiniones de niños y niñas de todo el mundo como parte del proceso de consulta.

Una de las niñas asesoras, Āniva, de 17 años, activista por el clima y los derechos de la infancia de las Islas del Pacífico, ha comentado: "Para mí, la Observación General significa un cambio mundial que es necesario a medida que avanzamos en la lucha contra los problemas medioambientales y tomamos medidas globales para proteger nuestro planeta para nuestra generación y las generaciones venideras. Proporciona a los niños una base más sólida en el derecho internacional para hacer valer nuestros derechos a un medio ambiente saludable. Globalmente, estamos viendo más acciones para que la gente proteja el medio ambiente a través de los Derechos Humanos y la CG26 constituye una parte importante de esto".

La Observación General n.º 26 ayuda a interpretar el compromiso de los Estados en virtud del Acuerdo de París de respetar, promover y tener en cuenta sus obligaciones en materia de derechos de la infancia al adoptar medidas para hacer frente al cambio climático. También deja claro que las evaluaciones de impacto sobre los derechos de la infancia deben llevarse a cabo para toda la legislación relacionada con el medio ambiente, políticas y proyectos, reglamentos, presupuesto u otras decisiones. Los Estados tendrán que informar periódicamente al Comité de la ONU sobre los progresos relevantes que hayan realizado en la protección de los derechos medioambientales de los niños y niñas.

"La financiación y las decisiones políticas sobre el clima siguen desatendiendo las necesidades de los niños y niñas", ha declarado Paloma Escudero, asesora especial de UNICEF para la promoción de los derechos de la infancia y la acción por el clima. "Esto debe cambiar. La Observación General es un llamamiento urgente para que los países den prioridad a la acción en todos los aspectos de la infancia afectados por el cambio climático, como el derecho de los niños a la educación, al agua potable y a un medio ambiente saludable. La crisis climática es una crisis de derechos de la infancia. Todos los gobiernos tienen la obligación de proteger los derechos de todos los niños y niñas en todos los rincones del planeta, especialmente de aquellos niños y niñas que viven en los países que menos han contribuido a este problema pero que están soportando las inundaciones, sequías, tormentas y calor más peligrosos".

Notas para editores

La Observación General nº 26 puede consultarse AQUÍ.

Las versiones adaptadas a los niños y niñas de la Observación General nº 26 se publicarán el 18 de septiembre de 2023 como parte del lanzamiento oficial de la Observación General durante el próximo periodo de sesiones del Comité en Ginebra, Suiza.

Más información sobre la Observación General nº 26 en: childrightsenvironment.org