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El clamor de la infancia en la Cumbre por un nuevo pacto mundial de financiación: “sustituyan el actual modelo económico colonial”.

“Frente a un sistema mundial que a menudo silencia a los vulnerables y desatiende a los marginados, presentamos esta declaración como un clamor colectivo a favor de un pacto financiero mundial más equitativo, que garantice un futuro justo y sostenible para todos los niños y niñas del mundo”, dice el mensaje. 

“Vemos la urgencia de una transformación profunda y sistémica, que haga hincapié en la estrecha relación entre la justicia financiera, el cambio climático y la sostenibilidad”.

"Debemos sustituir el actual modelo económico colonial —caracterizado por una extracción implacable y la degradación irresponsable del medio ambiente— por un modelo que respete a las personas y al planeta”.

“El afán de lucro no debe ir en detrimento de los derechos humanos ni de los derechos de la infancia. Sin duda, un modelo económico justo y equitativo debe garantizar el respeto de los derechos de la infancia”.

“No olvidemos que nosotros, los jóvenes, no somos solo el futuro; también somos el presente”.

Accesos documentación Cumbre Nuevo Pacto Mundial Financiación:
.- Financiamiento responsable con el clima: un imperativo moral para con la infancia (en inglés y alemán)
.- Salvar las vidas de niños y niñas: guía de supervivencia sobre banca responsable

Los adolescentes, representantes de diversos orígenes y regiones, se reunieron del 21 al 23 de junio en París en un acto convocado por Ellyanne Wanjiku, la más joven embajadora climática de África, con el apoyo del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) y la Red Jesuita de Justicia Ecológica en África.











Los niños y niñas que se reunieron antes y durante la Cumbre por el nuevo pacto mundial de financiación, celebrada los días 22 y 23 de junio en París, transmitieron un mensaje claro al presidente Macron y a los dirigentes mundiales: 

el actual modelo económico colonial debe ser sustituido por otro que priorice la humanidad sobre los beneficios.

Los adolescentes, representantes de diversos orígenes y regiones, se reunieron del 21 al 23 de junio en París en un acto convocado por Ellyanne Wanjiku, la más joven embajadora climática de África, con el apoyo del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) y la Red Jesuita de Justicia Ecológica en África. Orando a Dios para que los ayudase, Ellyanne y su equipo superaron las restricciones de seguridad y fueron admitidos en la sala exclusiva para jefes de Estado y ministros de la cumbre, en el Palais Brognard.

“Frente a un sistema mundial que a menudo silencia a los vulnerables y desatiende a los marginados, presentamos esta declaración como un clamor colectivo a favor de un pacto financiero mundial más equitativo, que garantice un futuro justo y sostenible para todos los niños y niñas del mundo”, dice el mensaje. “Vemos la urgencia de una transformación profunda y sistémica, que haga hincapié en la estrecha relación entre la justicia financiera, el cambio climático y la sostenibilidad”.

Los jóvenes activistas agradecieron a los líderes mundiales reunidos en la cumbre la creación de un nuevo pacto financiero mundial que priorice a la humanidad sobre los beneficios.

Este pacto, advierte el mensaje, “solo dará sus frutos si va acompañado de un cambio profundo de nuestro sistema económico. Debemos sustituir el actual modelo económico colonial —caracterizado por una extracción implacable y la degradación irresponsable del medio ambiente— por un modelo que respete a las personas y al planeta”.

“El afán de lucro no debe ir en detrimento de los derechos humanos ni de los derechos de la infancia. Sin duda, un modelo económico justo y equitativo debe garantizar el respeto de los derechos de la infancia”, instan los jóvenes; “solo entonces podremos allanar el camino hacia un pacto financiero mundial verdaderamente sostenible y equitativo”, afirma el mensaje.

Los jóvenes destacaron las desigualdades en el Sur Global,
Subrayando en su mensaje “las flagrantes disparidades en la asignación de recursos para educación, sanidad, nutrición y protección social, especialmente en el Sur Global”, afirman que “las prácticas financieras desiguales perpetúan el ciclo de desigualdad y dificultad socioeconómicas, limitando el acceso de los niños y niñas a los servicios sociales básicos”. “Exigimos un sistema financiero mundial que sea transparente, que rinda cuentas y sea equitativo, un sistema que elimine los obstáculos en el acceso de los niños a la educación y la sanidad y que, por tanto, les permita prosperar”.

Los jóvenes exigen justicia: “Afirmamos enérgicamente que la reforma del sistema financiero mundial es un acto de justicia que debe garantizar la capacidad de todos los niños y niñas para ejercer nuestros derechos sin impedimento alguno”, prosigue el mensaje; “la crucial inversión en el desarrollo de la infancia debe ser asignada de forma eficaz y debe llegar a los más marginados”.

El mensaje insiste en la necesidad de un sistema financiero que premie la transparencia, la rendición de cuentas y la equidad.

“Por ello, nosotros, los abanderados del cambio, hacemos un llamado a los dirigentes mundiales, a los inversores y a los ciudadanos a corregir los desequilibrios y las injusticias sistémicas. Les suplicamos que adopten estas políticas e iniciativas que cultivan un mundo en el que todos los niños y niñas, cualesquiera que sean su nacionalidad o circunstancia, tengan las mismas oportunidades para prosperar”, insta el mensaje.

El sufrimiento de millones de personas
El mensaje insta a los dirigentes mundiales a recordar el sufrimiento de millones de niños y niñas; “detrás de los sistemas financieros hay seres humanos reales que sufren y carecen de acceso a servicios básicos” … “otórguenos la capacidad de convertirnos en ejemplo de desarrollo sostenible”, piden los jóvenes.

El mensaje también destaca la dura realidad del encuentro entre la injusticia financiera y el cambio climático.

Este es un llamado urgente a crear un nuevo pacto financiero mundial”, “para permitir el desarrollo sostenible de las economías en el siglo XXI, les instamos a ustedes, en calidad de dirigentes, a incrementar de forma significativa el gasto para cumplir con los objetivos de desarrollo relacionados con el clima”, insta la misiva.

Los niños y niñas pidieron la prohibición inmediata de la financiación de nuevos proyectos de perforación en busca de combustibles fósiles. “Es preciso desactivar las enormes reservas de carbono que encierran estas “bombas de carbono” procedentes de la extracción incesante de combustibles fósiles”, advierten. “No olvidemos que nosotros, los jóvenes, no somos solo el futuro; también somos el presente”.

Señalando que los niños y niñas se encuentran en una encrucijada de vida o muerte, el mensaje concluye con la siguiente petición: “Elijamos el camino de la justicia, la igualdad y la sostenibilidad”,transformemos nuestro mundo para que todos los niños y niñas, independientemente de su nacionalidad o circunstancias, puedan vivir en un mundo justo, equitativo y sostenible”.

El proceso de redacción del mensaje
Este histórico mensaje vio la luz gracias al trabajo de los niños y niñas que se reunieron en los eventos paralelos previos a la Cumbre por un nuevo pacto mundial de financiación.

Bajo el lema “Que reine la justicia”, los jóvenes amplificaron sus propias voces para configurar activamente el futuro de la justicia financiera mundial.

En consonancia con el objetivo de la cumbre de forjar un nuevo acuerdo entre el Norte y el Sur del planeta para hacer frente al cambio climático y a la crisis mundial, los eventos sirvieron de plataforma para que los niños y niñas abordaran la acuciante necesidad de un sistema financiero mundial renovado que garantice la justicia en la financiación del desarrollo y el clima.

Parte de sus debates se basaron en el informe del CMI “Una Tierra más fría, más beneficios” (Cooler Earth - Higher Benefits), que proporciona detalles sobre el efecto de la elección bancaria sobre el cambio climático y, por consiguiente, sobre la infancia.

Jóvenes y adultos trabajaron juntos en pequeños grupos para concebir proyectos e iniciativas que abordaran los problemas identificados.

La obispa Marika Markovits, de la Iglesia de Suecia, Corinne Bitaud, responsable de Justicia Ecológica de la Iglesia Reformada Unida de Francia, y Frederique Seidel, asesora principal del CMI sobre Derechos de la Infancia, fueron algunos de los adultos cuyas ideas inspiraron a los niños y niñas y que apoyaron su iniciativa.

Markovits sugirió formas de inversión financiera basadas en la mayordomía y la dignidad humana, instando a las personas a invertir su dinero de forma coherente con sus creencias. Las conversaciones del evento paralelo y la declaración resultante serán incorporadas a la próxima Cumbre de la Juventud sobre el Clima (31 de agosto a 2 de septiembre) y a la Cumbre Africana sobre el Clima (4 a 6 de julio).

Los niños y niñas también tienen previsto presentar su declaración 
a la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York 
y a la COP 28 en Dubai.

“Se está negociando nuestro futuro y deberíamos ser parte”

 Chicos y chicas comparten experiencias y propuestas 
de procesos de acción climática y activismo medioambiental.
“Si damos un panorama general a los niños y niñas por medio de la educación, 
ya saben cómo actuar”, dice el joven activista de UNICEF Francisco Vera.

Foto de Markus Spiske en Unsplash

Pablo comenzó a tomar conciencia de los problemas ambientales desde los consejos locales de infancia y adolescencia de su ciudad (Granada). Ana aprendió sobre el cambio climático de forma teórica y comenzó a verlo de cerca a través del voluntariado. En el grupo La Liga por la Tierra, Erika llegó a la conclusión de que el tema medioambiental preocupa mucho a la juventud. Amnah tuvo la oportunidad de asistir a la COP27 celebrada en Sharm el-Sheikh (Egipto) en 2022.

Como ellos, miles de niños, niñas y adolescentes han tomado conciencia y se involucran en las acciones contra el cambio climático: el desafío medioambiental afecta al futuro de todos y todas y no quieren quedar fuera de la toma de decisiones.

Algunos han compartido en un seminario online celebrado el pasado 6 de julio sus experiencias y activismo: desde encuentros locales e internacionales hasta su actividad en sensibilización e información adaptada a la infancia.

 

La infancia en las negociaciones

Las Conferencias de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP) son encuentros anuales donde generalmente no se cede altavoz a la infancia. “Han sido espacios muy técnicos durante muchos años, donde solo iban funcionarios de ministerios a negociar sus emisiones de carbono”, cuenta Pablo Morente Acale, responsable de Cambio climático y Cooperación al Desarrollo del Consejo de la Juventud de España. Sin embargo, “el cambio climático afecta a nuestro futuro y al futuro de generaciones, no puede ser que todas las decisiones se tomen en un sitio súper lejano y súper técnico sin mucha transparencia”.

Lucía, del Grupo asesor de UNICEF España, coincide: “Es muy importante que se tome en cuenta lo que la infancia tiene que decir, se está negociando nuestro futuro y deberíamos ser parte de esas negociaciones”.

“El cambio climático afecta a nuestro futuro, no puede ser que todas las decisiones se tomen en un sitio súper técnico y sin mucha transparencia”

Por eso, la juventud empezó a salir a la calle de forma masiva (“la COP celebrada en Madrid fue la primera vez que este espacio fue visible para la sociedad”, dice Pablo). Después, niños y niñas comenzaron a ir a estas cumbres internacionales como observadores.

El siguiente paso, para Pablo, es que la infancia y adolescencia estén en las negociaciones sobre clima, donde se están tomándose las decisiones. “Para eso tienes que ser parte de la delegación de tu gobierno”, dice. “Y necesitamos que el lenguaje se traduzca para que los tecnicismos lleguen a la sociedad”.

 

Críticos con la COP27 

Francisco Vera, joven activista de UNICEF España, ha participado en actos como la Cumbre para un Nuevo Pacto Financiero Mundial o la Conferencia de los Jóvenes Defensores de Derechos Humanos en Viena, y promueve la conciencia ambiental desde la campaña Guardianes de la Vida.

Coincide con Pablo en que los niños y niñas no deben estar en estos espacios solamente “para la foto”, sino dentro de las negociaciones climáticas. Algo que él consiguió en la COP27 de 2022: “Logré intervenir en una de las negociaciones, la de balance global. Fue un gran avance. Los menores de 18 años no pueden hablar en las negociaciones, eso es limitante”, cuenta.

El logro que destaca de la cumbre fue la creación de un fondo financiamiento climático: “Se hizo hincapié en cómo los países deben financiar las pérdidas y daños. Pero hizo falta concretizar”.

Ana y Amnah también estuvieron en la COP27. Ana, de Plan Internacional, destaca la existencia de un pabellón para la juventud: “Se habilitaron espacios para que nosotras hablásemos. Pero no sé hasta qué punto se llegó a implementar lo que dijimos, si se incluyó en las políticas”, dice. “Por ese lado sentí que cojeaba un poco”.

“Lo más bonito fue representar a un grupo de gente”, recuerda Amnah, del Grupo asesor de UNICEF España. Pero se muestra crítica con la organización: “Egipto no es para nada un país donde estén impulsando la transición ecológica. Es contradictorio que se celebre ahí la COP. ¡El pabellón de Emiratos parecía una nave espacial! Todo eso requiere un gran consumo eléctrico”.

“Las próximas COP deberían ser mucho más ambiciosas respecto a combustibles fósiles”, opina Ana, que cree que se debería enfocar no en “crecer verde” sino en el concepto de decrecimiento.

“Hay que estar presente para seguir exigiendo y haciendo esfuerzos, que podamos ver que los combustibles fósiles no son el futuro”

Respecto a la COP28, que tendrá lugar en 2023, Francisco critica que se celebre en Dubái, cuyo presidente lo es también de la industria de petróleo del país: “Uno de los objetivos de las organizaciones internacionales es precisamente el cambio de uso de combustibles fósiles a energías limpias. Que quien esté presidiendo esta cumbre sea una persona que lo más lógico es que defienda sus intereses (que el combustible fósil siga adelante) es una cosa grave”.

Señala, aún así, que hay que estar presente “para seguir exigiendo y haciendo esfuerzos, que podamos ver que los combustibles fósiles no son el futuro. Hay que hacer una transición energética justa”.

 

Información y educación como herramientas de cambio

Una parte importante del trabajo de estos chicos y chicas es aproximar la información medioambiental a sus pares de forma adaptada. “No hay una educación como tal a nivel de cambio climático y sostenibilidad en institutos”, dice Lucía. Ella hace talleres de educación medioambiental con niños y niñas; Amna comparte información sobre los ODS de forma amigable; Jordi, desde la campaña Youth for change de Plan Internacional, elabora documentos y campañas relacionadas con activismo juvenil.

“Tenemos un problema, no sabemos comunicar las oportunidades a los jóvenes. Esas oportunidades de participar en foros existen”, dice Jordi. Cree que la infancia y juventud tienen un doble rol activista: es capaz de movilizarse y generar un cierto cambio, como Greta Thunberg, pero también hacer activismo desde el papel de consumidores.

Los chicos y chicas del seminario comparten algunas de las dificultades en el camino del activismo medioambiental. Amnah reconoce que a veces cuesta que se les tome en serio por su edad: “De ahí viene que no se nos dote de recursos, al no confiar en nosotros. Yo esto lo he vivido a nivel local: hemos tenido ideas de talleres, cosas que hacer, y se nos dice, no sabemos cómo vais a gestionarlo. No nos dan la oportunidad”.

“Jóvenes y adolescentes nos enfrentamos a un discurso derrotista y catastrofista. Pero no está todo perdido”

Otro obstáculo es la ecoansiedad que sufren muchos niños, niñas y adolescentes, que puede llevar al desánimo: “Jóvenes y adolescentes nos enfrentamos a un discurso derrotista y catastrofista”, advierte Ana. “Muchos dicen, qué más da, para lo que voy a hacer yo, para qué hacerlo”, coincide Lucía. Ana anima a actuar contra el discurso de que no hay nada que hacer: “No está todo perdido, hay que intentar dar un discurso positivo porque si no la gente se queda paralizada”.

¿Cómo incentivar a que los más jóvenes se involucren? “Eso se logra por una parte con educación climática y medioambiental”, dice Francisco. “Desde la escuela y los colegios. Que los niños puedan participar en sus municipios y sus localidades, puedan incidir en los problemas que hay en su entorno. Que el colegio sea un apoyo”. Y opina que el acceso a la información de los niños y niñas es algo importante. “Yo creo que si les damos un panorama general a los niños (por medio de talleres, espacios pedagógicos…), ya saben cómo actuar. Es la mejor manera de hacer, con la educación”.

La transmisión intergeneracional de la pobreza y la desigualdad de oportunidades en España.

En los últimos cuarenta años, España ha progresado sustancialmente en materia de redistribución y protección social. A pesar de haber experimentado esta transformación, nos seguimos enfrentando en el presente a niveles de pobreza y desigualdad muy por encima de los estándares europeos. 

Este informe tiene como objetivo mejorar nuestra comprensión de algunos de los desafíos que tiene nuestro país en este frente. 
Lo hace apuntando a dos cuestiones claves: 
.- la pobreza intergeneracional 
.- y la desigualdad de oportunidades​.

Sara Ayllón, Pablo Brugarolas y Samuel Lado,
Departamento de Economía, Univ. de Girona.


La ministra ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, inaugura el acto de presentación del estudio ‘La transmisión intergeneracional de la pobreza como clave en la evolución de la pobreza y la desigualdad en España’. 
La jornada fue clausurada el pasado 29 de junio 2023 por el secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez.
Vídeoconferencia de la conferencia y presentación del informe (Samuel Lado, Carlos Usías, Joaquín Corcobado, Andrés Carbonero...)


Otros Investigaciones relacionadas





Descolonizando Discursos Infantiles, una Orientación Posthumanista y Crítica desde la Educación Superior.

 Hasta ahora se ha prestado poca atención a la edad como categoría de exclusión. Se trata de deconstruir barreras del pasado que se han impuesto a la infancia y la adolescencia con daños lamentables para el colectivo.
Los conceptos de niño e infancia no han sido incluidos en los discursos descolonizadores sobre la transformación de los espacios educativos y los currículos, incluso desde la educación en y para la primera infancia.


Este proyecto pretende estudiar cómo el realismo activo, el posthumanismo y el nuevo materialismo podrían contribuir a una reconfiguración de la infancia en el diseño y contenido de los planes de estudios y proyectos de investigación poscualitativos y poscoloniales. 

Reúne a miembros nacionales e internacionales de todas las disciplinas, incluidas las artes creativas, las humanidades, la medicina, el derecho, las ciencias sociales y naturales. El enfoque transdisciplinario se centra en cómo los conceptos de niño e infancia incluyen y excluyen, y continúan marginando, no solo a los humanos jóvenes, sino también a los académicos de la primera infancia en el mundo académico y en naciones y continentes enteros (por ejemplo, África). Los miembros de este colectivo investigan cómo los marcos poscualitativos basados en el realismo existente, el poshumanismo y el nuevo materialismo pueden relacionarse de manera diferente con los llamados "pueblos perdidos" tanto del humanismo como del poshumanismo, e informar sobre teorías y prácticas descolonizadoras y posdesarrollistas en todas las fases de la educación. 

En el corazón de este proyecto está la noción de una educación infantil en un esfuerzo por descolonizar la educación (superior). Desde 2016, el proyecto ha apoyado con éxito a muchos investigadores de maestría y doctorado y ha generado una gran cantidad de publicaciones, incluidas publicaciones multimedia, artículos revisados por pares, capítulos y libros (ver recursos). También ha recibido a varios miembros en Sudáfrica, incluidos Karen Barad, Fikile Nxumalo, Affrica Taylor, Karen Malone y muchos más de forma virtual. Más de 40 miembros del equipo interactúan, comparten y colaboran entre sí a través de grupos de lectura, desarrollo de propuestas de subvención, cosupervisión, presentaciones de conferencias, coloquios, talleres de escritura y otras iniciativas de colaboración. Las redes sociales y los espacios de reunión virtuales sincrónicos permiten la colaboración continua entre continentes y espacios geopolíticos.

Investigación

Después de la desaparición del apartheid, la educación superior se ha preocupado por el género, la raza, la clase, la sexualidad y la capacidad, pero hasta ahora se ha prestado poca atención a la edad como categoría de exclusión. En particular, los conceptos de niño e infancia no han sido incluidos en los discursos decoloniales sobre la transformación de los espacios educativos y los currículos. A pesar de décadas de crítica académica sostenida y contestación en la investigación de la primera infancia, los programas de estudio actuales a nivel mundial y las pedagogías promovidas en sus cursos aún tienden a asumir el niño occidental esencializado y universal que se desarrolla de acuerdo con un proceso lineal de formación similar a una etapa de acuerdo con su /su/su potencial innato (desarrollismo).

Además, el concepto de niño tiende a referirse a un ser niño cronológico en el mundo y a la infancia como una etapa de la vida del ser humano con poca o ninguna relevancia para las pedagogías y metodologías de la educación superior. Desde conceptos binarios y por tanto excluyentes de las distintas variables intervinientes, se continúa haciendo su dañino trabajo de exclusión, como Cultura/Naturaleza, Adulto/Niño, Educación Superior/Educación de la Primera Infancia. El proyecto DECD continúa desconstruyendo nociones como 'indígena', 'postcolonial' y 'descolonizador' mediante temporalidades unilineales problemáticas y una meta/física del individualismo. Teorizar la diferencia de manera diferente abre estos (y otros) conceptos para incluir el filosofar animista de los niños pequeños y la creación de sentido discursivo material. Las filosofías de la cultura de la naturaleza se necesitan con urgencia en el (polémico) llamado Antropoceno: el tiempo geológico de un planeta dañado por los humanos como resultado del capitalismo industrial global, la estandarización del tiempo universal, la mecanización del trabajo y la extracción de combustibles fósiles.

El proyecto DECD proporciona espacios intelectuales solidarios, tanto presenciales como virtuales, para que filósofos, teóricos y profesionales interactúen en diversos contextos geográficos para participar en la investigación y la deliberación sobre la realidad actual, el posthumanismo, el nuevo materialismo y el impacto que tienen estas filosofías. para descolonizar la primera infancia, en particular desarrollando enfoques que tengan resonancia para las perspectivas y contextos del sur. 

Una de las críticas en las que se basa el posthumanismo es el carácter occidental no problematizado de los conocimientos -blanco, masculino, heterosexual, capaz- que se supone que son aplicables en todos los contextos y que se han utilizado para subyugar otras prácticas de conocimiento en su dominio. Lo que distingue a este proyecto es su interés también en cómo el posthumanismo mismo tiende a ignorar cómo la edad a menudo se pasa por alto en su teorización. Los investigadores de este proyecto son muy conscientes de estas prácticas de conocimiento y uno de los objetivos del proyecto es investigar y problematizar los conocimientos de los contextos del Norte y del Sur, para cuestionar el adultocentrismo, con miras a desarrollar y evaluar marcos posthumanistas poscoloniales para pedagogías innovadoras, prácticas de investigación y programas académicos en todas las fases de la educación.

Contacto: decdproject@gmail.com

Ley de Bienestar para las Generaciones Presentes y Futuras, Ley sobre la justicia intergeneracional, Islas Baleares

El trabajo conjunto de la sociedad civil y el Parlamento Balear saca adelante la primera Iniciativa Legislativa Popular de la democracia. 
La ley se centra en la justicia intergeneracional ante la emergencia climática.
El Parlamento Balear ha aprobado en el cierre de legislatura la primera 

Próxima parada: generaciones futuras
Ley 10/2023, de 5 de abril, de bienestar para las generaciones presentes y futuras de las Illes Balears.
Publicado en BOIB de 13 de Abril de 2023, BOIB, butlletí oficial.
Vigencia desde 14 de Abril de 2023

Acceso al contenido de la Ley, por  Noticias Jurídicas.

Una norma que llega a la Cámara desde la Iniciativa Legislativa Popular impulsada por el movimiento ecologista liderado por el GOB, la asociación ecologista de referencia en las Islas que este año cumple medio siglo. 

En estos últimos años, y a raíz de las declaraciones institucionales de emergencia climática en 2019 y luego el devenir de la pandemia, los movimientos sociales y concretamente el ecologismo han sentido la necesidad de replantear y revisar sus propuestas y acciones. La declaración de emergencia climática dejaba en evidencia la distancia entre discursos y declaraciones institucionales y las políticas efectivas que, a pesar del reconocimiento explícito de la urgencia de actuar frente al cambio climático, seguían, mayoritariamente, su camino sin más, sin cambio alguno. Llevados por la inercia institucional y una verdadera falta de voluntad de revisar estos instrumentos para adaptarlos a los diversos y preocupantes retos que presenta la crisis climàtica y ecológica global, las políticas de infraestructuras, agrícolas, urbanísticas y de ordenación del territorio, por poner algunos ejemplos, seguían sin cuestionarse y seguían, por tanto, ejecutándose, a pesar de contravenir claramente la urgente necesidad de un cambio radical de planteamiento por responsabilidad y pensando en las generaciones futuras. La pandemia fue, sin duda, otro aviso. Los desequilibrios ecológicos, más allá del climático o la dramática pérdida de biodiversidad, generan otras situaciones hasta ahora desconocidas. Una pandemia global paró el mundo y sus cadenas globales de producción, y todo ello requería un ejercicio de responsabilidad para hacernos cargo no solamente del hecho de ser parte del problema, sino, sobre todo, de hasta qué punto estamos preparados como sociedades para afrontar situaciones desconocidas y tanta incertidumbre. 

Vienen tiempos en los que estar cómodos en la incomodidad será necesario, generar ciertas seguridades en las incertidumbres también, y garantizar el futuro desde un presente que a veces se nos antoja tan amargo, un deber. 

Con esta intención, en el grupo ecologista GOB estuvimos dando vueltas a la idea de plantear un nuevo marco conceptual para las políticas públicas. Un marco que introdujera un nuevo concepto: el de la justicia intergeneracional que, habíamos leído, había introducido Gales con su Ley de Bienestar de las Generaciones Futuras*. Y para ello, utilizamos una herramienta, la Iniciativa Legislativa Popular, que nos permitía plantear una propuesta legislativa y que además, y sobre todo, exigía calle, colectivizar la propuesta, incitar el debate social y político en torno a la propuesta, con cuatro meses de campaña intensa para conseguir las firmas necesarias para poder defenderla ante el Parlamento de las Islas Baleares. 

El objetivo era generar un nuevo marco jurídico que garantizase el derecho fundamental a la vida

Así, después de dos años de trabajo de un grupo de personas para elaborar el texto, inspirados en la mencionada Ley de Gales y dispuestos a aterrizar su filosofía, principios y objetivos a nuestro marco normativo e institucional, en junio de 2021 presentamos el texto de la Propuesta de Ley de Bienestar para las Generaciones Presentes y Futuras de las Islas Baleares, junto con un documento de justificación y la constitución de la Comisión Promotora. Contamos para su redacción con profesionales en derecho ambiental europeo, en derecho internacional y litigios climáticos, en filosofía del derecho y en derecho público que trabajaron voluntariamente con nosotros en la propuesta. Contamos con la Clínica Jurídica de la URV (Universitat Rovira i Virgili), que aportó asesoramiento jurídico en relación a posibles problemas competenciales de la Ley propuesta y su conexión con otra normativa aplicable; experiencias con instituciones en otros países para las futuras generaciones y su posible encaje en Baleares, y la identificación de los indicadores de bienestar que pudieran ser de mayor utilidad para su inclusión a la ley.

El objetivo de la ley era claro: llevar al Parlamento de las Illes Balears el debate de una norma que generase un nuevo marco jurídico que garantizase que cualquier acción política presente tenga en cuenta el cumplimiento de los objetivos de bienestar de las generaciones presentes y futuras, asegurando así el derecho fundamental a la vida; es decir, por responsabilidad y desde la conciencia colectiva del reto mayúsculo que afrontamos como humanidad, garantizar que las instituciones actúen para la salvaguarda de los intereses de las generaciones futuras, atenuando así los problemas vinculados al cortoplacismo político. Y, a la vez, teníamos otro objetivo en el marco de la legislatura 2019-2023: marcar la agenda política, social y mediática, meses antes de las elecciones, previstas para mayo de 2023, para que este tema entrara en la agenda política.

En noviembre de 2021, la propuesta fue admitida a trámite y se iniciaron los cuatro meses de campaña en la calle, en todo el territorio del archipiélago, con una campaña de comunicación muy pensada para generar optimismo, que instara a la acción y a formar parte, a la responsabilidad y al activismo: la campaña “Avui per Demà”, elaborada en coordinación con La Pera Coop y Ágora Social. Cuatro meses en los que se generaron debates, material gráfico y canales de difusión, reuniones políticas, ruedas de prensa, artículos de opinión y presencia en los medios, dinamización de redes sociales, actos informativos, alianzas con entidades y actores multiplicadores (colectivos y movimientos sociales y culturales, entidades vecinales, asociaciones de jóvenes, de gente mayor, universidad, sectores profesionales específicos, entidades de ámbito estatal, etc), manifiestos, talleres, etc. hasta culminar con un gran mosaico humano con el lema de la campaña el 28 de marzo de 2022 en la Plaza Mayor de Palma. Todo ello para inducir y estimular la acción y el debate social y político en torno a los motivos y la pertinencia de la propuesta, y de esta nueva mirada y herramienta de control de las políticas públicas por parte de la ciudadanía, que introduce los conceptos de justicia intergeneracional y de responsabilidad en relación al bienestar de las generaciones futuras. Así conseguimos una respuesta social colectiva que dio apoyo a la iniciativa, de tal modo que se recogieron hasta casi 12.000 firmas que permitieron que el Parlamento realizara el posterior debate y votación para la toma en consideración, que fue aprobada por mayoría absoluta el mes de noviembre de 2022. 

Superada esta fase, conseguimos reforzar el compromiso social con el ecologismo como agente de movilización e incidencia social y política. Quedaba ya tan solo la tramitación parlamentaria: la presentación de enmiendas por parte de los partidos políticos con representación parlamentaria, y los trabajos de debate y votaciones de la ponencia, comisión y pleno del Parlamento. Un trabajo dentro y fuera del Parlamento, con los diputados de los partidos en el Govern – PSIB-PSOE, Podemos, Més per Mallorca y Més per Menorca–, miembros de la Comisión Promotora que habíamos trabajado en la redacción del texto, y en el que se involucró además, la Abogacía de la Comunidad Autónoma y la Consejería de Presidencia, dando mayor relieve y encaje a la propuesta, poniendo en valor el trabajo hecho desde la sociedad civil y enriqueciendo y apuntalando jurídicamente la propuesta.


* Ley de Bienestar de las Generaciones Futuras de Gales. En el año 2015 fue aprobada en Gales la Ley para el Bienestar de las Generaciones Futuras. Esta norma, en vigor desde el año 2016, cuyo objeto es garantizar el bienestar de las generaciones futuras, instituyó el Comisionado para las Generaciones Futuras de Gales como órgano encargado de supervisar y auditar que las políticas llevadas a cabo por las administraciones públicas se orientaran hacia unos objetivos de bienestar previamente acordados y fundamentados en el principio de desarrollo sostenible. En el cuarto año de su instauración, el Comisionado ha publicado su primer informe de evaluación (2020) sobre el cumplimiento de los objetivos de bienestar de las generaciones futuras. Este trabajo pretende analizar la ley galesa para el bienestar de las generaciones futuras, el Comisionado, y las posibilidades que abre este tipo de instituciones para la salvaguarda de los intereses de las generaciones futuras y atenuar los problemas vinculados con el cortoplacismo político.

"Efectos del medioambiente en la infancia y adolescencia". Cifras y Datos nº 18, año 2023. OIA-A

Para conocer los efectos que la degradación ambiental y el cambio climático tienen en la vida de la población infantil y adolescente sería necesario disponer de más datos en las encuestas de organismos oficiales.
Por ello, es importante contar con información desglosada por sexo, nacionalidad, nivel  socioeconómico, etc. en las estadísticas oficiales, así lo pone de manifiesto el Consejo de Derechos Humanos y el Comité de los Derechos del Niño en múltiples observaciones generales.
Los datos disponibles en estadísticas de organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS) o Eurostat nos hacen centrarnos en dos de los principales problemas relacionados con el medioambiente: la contaminación y el cambio climático...

Autor: Ruiz, Berta

Resumen:

Optar a un ambiente saludable es un derecho fundamental de la infancia y adolescencia, como lo es el derecho a la salud, y así queda recogido en múltiples tratados. Por ello, el deterioro del medioambiente como consecuencia del cambio climático es un tema de especial atención por las mayores consecuencias que tiene en la población infantil y adolescente.

La protección ambiental se ha situado en las agendas políticas como un tema de interés prioritario, debido a los efectos adversos que provoca la disminución de la calidad medioambiental en la salud de las personas menores de edad.

En este sentido la Asamblea General de Naciones Unidas ya expresó a través de la Resolución 32/33 del Consejo de Derechos Humanos su preocupación por la vulnerabilidad de la población infantil y adolescente frente al cambio climático y las repercusiones que puede tener en su vida: en la salud física y mental, acceso a la educación, a una alimentación adecuada, a una vivienda adecuada, etc.

Por todo ello, en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático se redacta el Acuerdo de París un tratado internacional jurídicamente vinculante donde quedan reconocidos explícitamente estos derechos. Este acuerdo internacional es el primero sobre medioambiente que incluye la importancia de integrar en los planes de acción climática la protección de la infancia.

También ha mostrado un especial interés el Comité de los Derechos del Niño, que ha determinado que el cambio climático es una de las mayores amenazas para la salud infantil, considerando que la actividad humana (uso de la tierra, contaminación, sobreexplotación, etc.) ha aumentado la pérdida de biodiversidad.

En 2021 el Comité de los Derechos del Niño decidió redactar un comentario general sobre los derechos del niño y el medio ambiente, donde se especificaba la realización de consultas con niños, niñas y adolescentes en diversos contextos a través de múltiples países, también con los Estados parte, así como con expertos de los campos pertinentes para elaborar la Observación General nº 26, sobre Derechos del Niño y el medioambiente, con un enfoque especial sobre el Cambio Climático, con la finalidad de instar a los Estados a ejercer la responsabilidad de proteger a los niños y niñas de los daños ambientales.

Cumbre Inaugural de los Niños de África, Abril 2023: "Una Conferencia dirigida por Niños"

 La Cumbre de los Niños de África es un foro continental 
que busca brindar a los niños una plataforma para la participación.

Impulsada por niños de Kenia y amplificada por Mtoto News
el objetivo de la Cumbre es empoderar a los niños africanos 
y crear un espacio donde se sientan vistos, escuchados e involucrados 
por sus pares y la comunidad.

La Cumbre reúne a niños de toda África y más allá para compartir sus experiencias en materia de derechos y protección de los niños; los desafíos únicos que enfrentan; intervenciones de sus gobiernos y compartir recomendaciones o soluciones.

La Cumbre está dirigida por niños y será organizada por niños en Nairobi, Kenia, el 11 de abril de 2023. 
La Cumbre inaugural estará presidida por el Vicepresidente del Comité de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, Prof. Phillip D. Jaffè, y el Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas sobre la Violencia contra los Niños Dra. Najat Maalla M'Jid.

Objetivos
El propósito de la Cumbre es reunir a los niños de todo el para discutir entre ellos sobre asuntos de la infancia en África; 
. Dialogar sobre lo que hay que hacer para que los Niños de África quieran; 
. Generar y compartir preocupaciones y desafíos sobre los derechos del niño basados ​​en evidencia en África.
. Proponer recomendaciones de políticas clave sobre cómo África puede abordar los desafíos de protección infantil.
. Documentación y presentación de temas clave, solicitudes de promoción y recomendaciones en una declaración de resultados
. Reconocer a los Estados partes, organizaciones e individuos que contribuyen al bienestar de los niños en África; y
. Proponer un plan de acción para los niños para hacer el África que quieren.

Metodología.
Diálogo intergeneracional auténtico e improvisado 

La conferencia está diseñada para ofrecer un diálogo auténtico y sin guión entre los responsables políticos y los niños. El objetivo del evento es compartir y abordar los desafíos que enfrentan los niños en una era de riesgos emergentes, como las pandemias y el cambio climático. La discusión será sobre los aspectos positivos, lo que podría ser preocupante y cualquier cosa que deba cambiar para permitir que el niño esté más seguro. Los participantes, incluidos niños, figuras públicas, expertos y funcionarios gubernamentales, discutirán y mostrarán nuevos riesgos y nuevas oportunidades en un mundo que cambia rápidamente. Se prestará especial atención a las formas en que los niños pueden ser agentes de cambio frente a los desafíos clave... 

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Informe de la 1ª consulta a niños y jóvenes para la elaboración de Observación General, nº 26: Medio Ambiente.

En este proceso han participado casi 7.500 niños y jóvenes.

Un proceso de participación que  continuará entre noviembre de 2022 y febrero de 2023 como segunda fase de consulta con los niños... 

Este informe es un resumen de los resultados de un cuestionario global para niñas y niños, que fue diseñado conjuntamente con el Equipo Asesor Infantil y distribuido entre las niñas y los niños de todo el mundo entre el 31 de marzo y el 20 de junio de 2022.

El Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas está escuchando los llamamientos de las niñas y los niños, dando un paso importante para hacer que los Estados parte se responsabilicen de garantizar que las niñas y los niños puedan crecer y vivir en un mundo limpio, verde, sano y sostenible, creando una Observación General sobre los Derechos del Niño y el Medio Ambiente con especial atención al Cambio Climático (Observación General Nº 26).

El derecho a un medio ambiente saludable es un requisito previo para la implementación efectiva de todos los demás derechos recogidos en la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño (CDN).

Para garantizar que la Observación General Nº 26 sea representativa de las diversas experiencias y del interés superior de las niñas y los niños de todo el mundo, debe adoptarse un enfoque colaborativo e intergeneracional para su desarrollo. Una parte esencial del desarrollo de la Observación General Nº 26 es la participación de las niñas y los niños. Las niñas y los niños tienen derecho a expresar libremente sus opiniones sobre todos los asuntos y decisiones que les afectan y a que esas opiniones se tengan en cuenta en todos los niveles de la sociedad. Este derecho se describe detalladamente en la Observación General Nº 12 sobre el derecho de la niña/niño a ser escuchado, disponible en CRC/C/GC/12.

El Comité reconoce la importancia de trabajar con las niñas y los niños en asuntos de tanta importancia y relevancia para sus vidas. Por ello, el Comité, con el apoyo de Terre Des Hommes, estableció su primer Equipo Asesor Infantil a nivel mundial para apoyar el desarrollo de la Observación General Nº 26. El Equipo Asesor Infantil es un grupo de 13 niños expertos, de entre 10 y 17 años, de diferentes regiones, orígenes y con diversas experiencias vividas. 

El Equipo Asesor Infantil es fundamental para informar del proceso de consulta a las niñas y los niños y garantizar que éstos tengan oportunidades significativas de contribuir con sus opiniones, experiencias e ideas al desarrollo de la Observación General Nº 26.
 
Este informe es un resumen de los resultados de un cuestionario global para niñas y niños, que fue diseñado conjuntamente con el Equipo Asesor Infantil y distribuido entre las niñas y los niños de todo el mundo entre el 31 de marzo y el 20 de junio de 2022. 

Este informe resume las opiniones de las niñas y los niños y sus experiencias sobre los siguientes temas:
1) Impacto del cambio climático y daños medioambientales.
2) Pensamientos y sentimientos sobre el cambio climático y los daños medioambientales.
3) Acceso a la educación y al apoyo.
4) Tener voz y ser tomado en serio.
5) Acceso a la información.

Por último, el informe proporciona los mensajes clave compartidos por las niñas y los niños en el cuestionario.

Los resultados del cuestionario informarán al Comité en su trabajo para desarrollar el primer borrador de la Observación General Nº 26, que se pondrá a disposición del público para su revisión en noviembre de 2022. 
Entre noviembre de 2022 y febrero de 2023 tendrá lugar una segunda fase de consulta con las niñas y los niños. 

"El cambio climático es el mayor desafío a los derechos humanos de nuestra era", Bachelet, Alta Comisaria de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

 La Alta Comisionada reconoció que el “mundo no ha mejorado” en los últimos cuatro años y que ha recibido “fuertes presiones” tanto de Gobiernos como de la sociedad civil. En la parte positiva de su mandato, Bachelet citó el reciente reconocimiento al derecho universal a una medio ambiente limpio y sano y los avances contra la pena de muerte.



En su última aparición ante la prensa antes de dejar su cargo, la Alta Comisaria de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha destacado este jueves los logros y los retos que quedan en esta materia “que nunca termina”, asegurando que “el mundo ha cambiado sustancialmente en el transcurso de su mandato.

Ahondó en esa idea diciendo que el profundo impacto de la pandemia del COVID-19, los efectos cada vez mayores del cambio climático y las repercusiones de la crisis alimentaria, energética y financiera derivada de la guerra contra Ucrania han sido los tres principales problemas.

A eso añadió, el hecho de que “la polarización dentro de los Estados y entre ellos ha alcanzado niveles extraordinarios y el multilateralismo está bajo presión”.

Pero de entre todos los asuntos, señaló el cambio climático como el mayor desafío para todos en este momento.

“Los fenómenos meteorológicos extremos de los últimos meses han vuelto a poner de manifiesto, de forma contundente, la necesidad de actuar urgentemente para proteger nuestro planeta para las generaciones actuales y futuras. Satisfacer esta necesidad es el mayor reto en materia de derechos humanos de esta época, y todos los Estados tienen la obligación de trabajar juntos en este sentido, y de cumplir con lo prometido, para aplicar plenamente el derecho a un medio ambiente sano”, aseguró Michelle Bachelet.

Para la alta funcionaria, cuyo último día como Alta Comisaria será el 31 de agosto, “la respuesta a la triple crisis planetaria de la contaminación, el cambio climático y la pérdida de biodiversidad debe centrarse en los derechos humanos, incluidos los derechos a la participación, al acceso a la información y a la justicia, y abordando el impacto desproporcionado de los daños ambientales en los más marginados y desfavorecidos”.

En este sentido, dijo sentirse orgullosa del esfuerzo y del fuerte apoyo que su Oficina ha brindado a la cuestión medioambiental y que ha culminado con el reciente reconocimiento al derecho universal a un medio ambiente sano y limpio por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas

Los niños son el futuro, ¿o no?. Explorando las complejidades de la relación entre los derechos de los niños y las generaciones futuras.

¿Qué son los derechos del niño y 
los derechos de las generaciones futuras (GF)?

Este artículo aborda un tema de creciente importancia en el derecho internacional de los derechos humanos (DIDH): la relación entre los derechos del niño y los derechos de las generaciones futuras. 

Este asunto es particularmente apremiante en el contexto del creciente conjunto de normas, estudios y prácticas en las áreas de justicia climática y protección ambiental. Sin embargo, también ha sido una preocupación de larga data (aunque a menudo de menor perfil) en el contexto del desarrollo sostenible y otros trabajos en DIDH que abordan cuestiones de equidad y justicia intergeneracional.

Si bien los derechos del niño son un área bien establecida y desarrollada del DIDH, los derechos de la GD se encuentran en una etapa mucho más incipiente. La relación hasta ahora poco explorada entre los derechos del niño y las generaciones futuras plantea una serie de preguntas clave sobre la aplicación, el alcance y el contenido del DIDH. Esta publicación explora algunos de estos.


Derechos del niño y/o derechos de las generaciones futuras (FG): ¿por qué es importante?

Pero, ¿por qué deberíamos preocuparnos por la relación respectiva entre los derechos del niño y los derechos de la GF?

Está claro que existen opiniones divergentes sobre la medida en que se delimitan los derechos e intereses respectivos de los derechos del niño y los derechos de la GF en el DIDH. Por un lado, hay apoyo para la opinión de que 'los niños, por definición, encarnan y representan tanto a las generaciones actuales como a las futuras' (Arts), lo que sugeriría que es apropiado y legítimo centrarse en cuestiones de derechos de FG intergeneracionales a través de la lente de los niños y sus derechos. Por otro, como se abordará más adelante, el uso de los niños como apoderado o (como Bottini Filhose ha referido a él), un 'atajo' para las generaciones futuras puede correr el riesgo de subestimar los derechos de las generaciones futuras en áreas clave del DIDH. Otra preocupación es que una ecuación inadecuadamente matizada de estos dos grupos de derechos también tiene implicaciones potencialmente negativas para los niños y los derechos de los niños, un punto que se considerará más adelante en este artículo.

Cualquier consideración de la interrelación y las divergencias entre los derechos de los niños y los derechos de GF a los efectos del DIDH requiere que se aborden dos preguntas clave de definición: Primero, quiénes son los titulares de los derechos de los niños y los derechos de GF, respectivamente, en términos de DIDH. ? Y en segundo lugar, en relación con esto, ¿hasta qué punto estas categorías o grupos o titulares de derechos se superponen y divergen en términos del ámbito de aplicación de esos derechos? (Cabe señalar que algunas de las preguntas planteadas en este artículo también se han discutido hasta cierto punto en la erudición y el debate sobre la justicia y la equidad intergeneracionales, en particular más allá de la ley. Sin embargo, el enfoque principal de este artículo es el DIDH. Debe ser señaló, sin embargo, que este cuerpo de trabajo más amplio tampoco proporciona una definición definitiva y uniforme de FG).

Encontrar respuestas a estas preguntas se ha vuelto urgente por dos iniciativas recientes en DIDH: el próximo comentario general del Comité de los Derechos del Niño de la ONU (ComRC) sobre el medio ambiente y los derechos del niño con un enfoque especial en el cambio climático y el del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la ONU (CESCR) sobre el desarrollo sostenible y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales .

La nota conceptual de la primera iniciativa establece que el objetivo principal del comentario general es '[arrojar] luz sobre las implicaciones sociales, legales y de otro tipo de conceptos tales como... "generaciones futuras", "equidad intergeneracional", etc. para mejorar las medidas legislativas, administrativas y de otro tipo que los Estados y otras partes interesadas adopten para defender los derechos del niño en el contexto del medio ambiente y el cambio climático'. Sin embargo, al hacerlo, el comité no define las generaciones futuras y ha quedado claro a partir de varias consultas temáticas en torno a ese comentario general que el comité no está trabajando con una comprensión claramente definida de FG.   

El Documento Temático desarrollado por el equipo de redacción del Documento General del CDESC vincula implícitamente los derechos del niño y los derechos de las generaciones futuras en el contexto de una serie de preguntas centradas en el principio de equidad intergeneracional: '¿Hay espacio en el Pacto para considerar la posición de ¿generaciones futuras? ¿Cuál es el papel de la igualdad y la no discriminación en este sentido? ¿Cómo pueden ayudar los derechos del niño a informar esta visión a largo plazo de los impactos ambientales en los derechos humanos?' Además, habiendo señalado que 'el acceso a recursos efectivos a menudo se ve socavado por normas restrictivas de legitimación activa, que no reconocen las acciones de interés público, las acciones colectivas o los litigios representativos en nombre de las generaciones futuras', el documento temático plantea una pregunta sobre qué tipos de otros mecanismos legales e institucionales promoverían el acceso efectivo a la justicia y la rendición de cuentas en el área del desarrollo sostenible y los derechos ESC. Al hacerlo, señala la posibilidad de reconocer la capacidad legal de los niños 'cuyo futuro disfrute de los derechos del Pacto está en riesgo debido al cambio climático y la degradación ambiental'. Esto refleja una opinión (cada vez más confirmada en el contexto de la práctica de litigios sobre el cambio climático) de que los reclamos de los derechos de los niños pueden servir como una vía para los reclamos de derechos de las generaciones futuras.

Por lo tanto, está claro que existe un reconocimiento creciente del vínculo potencial entre los intereses y las reivindicaciones de derechos de los niños y las generaciones futuras por parte de los organismos que trabajan al frente del DIDH. Sin embargo, este vínculo no es sencillo e indiscutible: como afirmó el Comité de los Derechos del Niño en su reciente presentaciónal Grupo de Trabajo sobre el proyecto de convención sobre el derecho al desarrollo (sobre el cual este autor asesoró): 'dadas las posibles complejidades en la definición y la relación entre los niños y las generaciones futuras, un mayor enfoque en las "generaciones futuras" en el proyecto de convención en ausencia de un reconocimiento específico de los derechos del niño no será suficiente para remediar la actual casi invisibilidad de los niños dentro del proyecto de convención'. Esto fue en respuesta a un borrador de la Convención que no mencionaba la palabra 'niño' ni una sola vez (aunque sí se refería a 'niñas' (borrador de artículo 16) y discriminación por edad (borrador de artículo 8)), pero que enfatizaba que los Estados Las partes 'individual y conjuntamente, se comprometen a garantizar que:Doc. ONU A/HRC/WG.2/21/Add.1 ).

Definiciones: ¿Qué son los derechos del niño y los derechos de la GF?

Entonces, ¿qué son los derechos del niño y los derechos de la GF?

Los derechos del niño en virtud del DIDH tienen su forma más clara y autorizada en la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño (UNCRC). La cuestión de quién es un 'niño' en términos de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño se aborda principalmente en el artículo 1 de la Convención, que establece que 'a los efectos de la presente Convención, se entiende por niño todo ser humano menor de dieciocho años, a menos que la ley aplicable al hijo, la mayoría de edad se alcanza antes». (El artículo 38 sobre los derechos de los niños en los conflictos armados constituye una notable excepción al favorecimiento general de los 18 años como el final de la niñez dentro de la Convención. Sin embargo, dada su aplicación restringida así como las implicaciones del contenido del Protocolo Facultativo sobre la Participación de niños en conflictos armados, esta disposición no se discutirá en detalle aquí).

El artículo 1 de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño prevé dos pruebas para la infancia. En primer lugar, establece que un niño es cualquier persona menor de 18 años. En segundo lugar, establece que, en virtud de la legislación nacional que se aplica al niño, la mayoría de edad se puede alcanzar antes. Por lo tanto, mientras que la UNCRC favorece la edad de 18 años como el 'corte' para los propósitos de la niñez, reconoce explícitamente que puede haber, y hay, variaciones significativas en la práctica de los estados signatarios. En general, sin embargo, se puede entender que los derechos del niño se adhieren a las personas menores de 18 años a los efectos del DIDH.

Dado el marcado desacuerdo estatal sobre la cuestión de cuándo comienza la vida y, por lo tanto, la infancia a los efectos del disfrute de los derechos de la Convención, no sorprende que la Convención no mencione el comienzo de la infancia (o la "edad mínima"). La única breve referencia a la posición del niño por nacer en la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño se encuentra en el Preámbulo, que cita una sección de la Declaración de los Derechos del Niño de 1959 que reconoce que el niño "debido a su inmadurez física y mental, necesita salvaguardias especiales y atención, incluida la protección jurídica adecuada, tanto antes como después del nacimiento». En la práctica, el Comité ha centrado su trabajo en los derechos del niño nacido. El artículo 24(2)(d), que requiere que los estados 'garanticen una adecuada atención médica prenatal y posnatal para las madres' plantea implícitamente la cuestión del niño por nacer. Sin embargo,

Por lo tanto, podemos generalizar que los derechos del niño bajo el DIDH se aplican a los niños nacidos, no a los no nacidos. Si bien los niños del futuro calificarán para esos derechos al nacer, no lo hacen antes de eso (aunque obviamente se puede hablar de los derechos de los niños en términos de describir los derechos que tendrán los futuros niños al nacer). Sin embargo, los niños que aún no han nacido no son niños sujetos de derechos en el aquí y ahora en términos del DIDH.

¿Qué pasa con las generaciones futuras? Hasta el momento, no existe una definición específica de 'generaciones futuras' a los efectos del DIDH. (De hecho, incluso la base normativa del reconocimiento de los derechos humanos de las generaciones futuras en el DIDH es poco clara y cuestionada en la actualidad). Algunas interpretaciones postuladas de 'generaciones futuras' abarcan explícitamente generaciones ya existentes/actuales/nacidas y, por lo tanto, niños en el aquí y ahora. Skoglyhabla del concepto de GF como 'refiriéndose a los derechos de los jóvenes y niños actuales cuando lleguen a la edad adulta, así como de otras personas que vivirán en el futuro'. En tal entendimiento, los niños nacidos califican para los derechos sobre la base o el estado de su pertenencia a dos grupos: a saber, los niños en el aquí y ahora (y por lo tanto, los niños titulares de derechos actuales) y como adultos en el futuro. Otros comentaristas que trabajan en el ámbito del DIDH consideran a los grupos como totalmente separados y conceptualizan a las generaciones futuras como 'aquellos que aún no han nacido' ( Daly 2022) – es decir, generaciones que nacerán en el futuro. Aquí, los niños nacidos y las generaciones futuras son grupos discretos con niños portadores de derechos (niños nacidos) que no caen dentro de la categoría de 'generaciones futuras' a los efectos de la protección de los derechos al llegar a la edad adulta. Otros enfatizan el vínculo entre los reclamos de derechos existentes y futuros al considerar las interacciones potenciales de los derechos de los niños y las generaciones futuras. Knox, por ejemplo, sugiere definir una generación futura "como aquellas personas que estarán vivas en un momento específico en el futuro, como el año 2100" ( Knox 2020). En términos de este enfoque, 'muchas personas que vivirán entonces ya llegaron y heredaron su asignación completa de derechos humanos' y el enfoque debe ser garantizar sus derechos a lo largo de sus vidas, tanto como niños como futuros adultos.

El objetivo de este artículo no es pronunciarse a favor de una definición particular de GF o evaluar en profundidad los argumentos a favor y en contra de esas definiciones esbozadas. Más bien, el problema que se señala aquí para señalar aquí es que donde no hay una definición clara de 'generaciones futuras' para el DIDH, entonces no puede haber una respuesta clara a la pregunta de quién califica para reclamos de derechos de GF en el contexto del DIDH. Y la falta de una definición de GF también hace que sea imposible evaluar hasta qué punto los niños y la GF y sus derechos divergen o deberían divergir o converger en términos de alcance y contenido, o aplicación en la práctica. Experiencia en estudios y práctica de DIDH centrados en derechos grupales, incluidos los derechos de los niños, deja en claro que la atribución de derechos a (o la asociación de derechos con) un grupo en particular tendrá implicaciones sobre cómo se definen esos derechos en la práctica. Esto se debe al papel que desempeñan los entendimientos (o malentendidos) de los titulares de derechos y su experiencia vivida en la delimitación y aplicación de las protecciones de derechos. Cuando uno no puede definir el grupo de manera significativa, esto tiene efectos colaterales inevitables en términos de la capacidad de aplicar los derechos que podrían pertenecer a ese grupo.

¿A dónde vamos desde aquí?

Entonces, ¿dónde vamos desde aquí?

Hay una serie de iniciativas importantes en marcha que contribuirán a una definición de los derechos de la GF a los efectos del DIDH. Además del trabajo de los órganos de tratados de la ONU mencionado anteriormente, un esfuerzo particularmente significativo es el proyecto en curso para desarrollar Principios de Maastricht expertos sobre los derechos humanos de las generaciones futuras, cuyo resultado debería hacerse público a finales de este año. Estos Principios, por supuesto, no serán normas de derecho estricto en el sentido del derecho de los tratados. Tampoco constituirán una interpretación legal autorizada en la forma en que lo haría un comentario general de un órgano de tratado de la ONU. Sin embargo, dada la brecha preocupante en esta área, así como la parte persuasiva de que los Principios de Maastricht anteriores (por ejemplo , sobre obligaciones extraterritoriales ) y las Directrices (por ejemplo,sobre violaciones de los derechos económicos, sociales y culturales ) han jugado en términos de dar forma al discurso legal internacional y al trabajo de los organismos internacionales de derechos humanos responsables de interpretar y aplicar el DIDH, es probable que estos nuevos principios desempeñen un papel muy influyente en este espacio.

Una cuestión clave que el DIDH deberá abordar es hasta qué punto los miembros del grupo FG pueden hacer valer los derechos de los FG como derechos individuales o si pueden ejercerse únicamente como colectividad o en su nombre. Si bien los derechos de los niños son específicos del grupo (en el sentido de adherirse a los niños porque son miembros de un grupo específico, legalmente reconocido/definido), pueden ser ejercidos por los niños de manera individual o colectiva. ¿Ocurrirá lo mismo con los derechos de las generaciones futuras tal como se describen en los Principios o el DIDH en términos más generales? Dado el creciente enfoque en el acceso a la justicia y los recursos en el DIDH, incluso en las áreas donde los derechos de la GF son un tema candente (por ejemplo, la protección del medio ambiente), parecería crucial que los individuos puedan hacer valer tales derechos. (o un grupo de individuos). Que no, entonces, es probable que la atención de quienes hacen valer sus derechos a nivel internacional en el contexto de mecanismos y procesos de quejas centrados en el individuo permanezca centrada en los derechos del niño como vehículo para abordar cuestiones de justicia intergeneracional. Esto, a su vez, representa un riesgo para los derechos del niño como un conjunto de protecciones legales para los niños ya nacidos, ya que tal enfoque puede llevar a que esos derechos sean cooptados o instrumentalizados (ciertamente de buena fe) por aquellos que emplean y aplican el DIDH para promover los derechos de otros más allá de los niños nacidos. También puede dar lugar a que los órganos responsables de aplicar el DIDH desarrollen una comprensión cada vez más amplia de los derechos del niño para abarcar cuestiones relacionadas con la GD, potencialmente a costa de un marco coherente centrado en los daños a los derechos y las necesidades que enfrentan los niños aquí y ahora.  

Los derechos del niño tampoco estarían necesariamente a la altura de la tarea de abordar adecuadamente los derechos de la GF. Si bien la toma de decisiones sobre los derechos del niño ciertamente puede implicar equilibrar los intereses actuales y futuros de los niños relacionados con los derechos (por ejemplo, al equilibrar los derechos relacionados con la autonomía del niño y el interés superior), los estudios y la práctica en esta área no se han centrado en detalle en equilibrar los derechos de los niños aquí y ahora con los de otros niños en el futuro, o incluso con los derechos de esos mismos niños como futuros adultos. Es cierto que el tiempo juega un papel clave en términos de los derechos del niño dado que tales derechos están por definición limitados en el tiempo y dicho límite de tiempo se cita a menudo como una justificación para la acción urgente en cuestiones de derechos del niño. Sin embargo,McNeilly y Warwick ). El trabajo por los derechos del niño tampoco se ha involucrado de manera significativa con el tema de los derechos colectivos o grupales en el sentido que probablemente se requerirá en el contexto de los reclamos de derechos de las generaciones futuras. Además, como se señaló anteriormente, dado el alcance y la especificidad limitados de los derechos del niño, la dependencia de ese marco para explorar cuestiones clave relacionadas con un grupo que en algunos casos puede tener derechos e intereses significativamente diferentes para los niños puede conducir a una distorsión indeseable de la desarrollo de los derechos de FG.

Conclusión

Los derechos del niño y los derechos de las generaciones futuras son temas candentes. Esta publicación se ha centrado en preguntas sin respuesta sobre la relación entre los niños, las generaciones futuras y sus derechos, bajo el DIDH. Para que ambos conjuntos de derechos alcancen todo su potencial en términos de su delimitación e implementación a través del DIDH, las complejidades de sus vínculos, superposiciones y desconexiones deben abordarse de frente.

*Aoife Nolan, LL.B (Dublín), PhD (EUI) es profesora de Derecho Internacional de los Derechos Humanos y codirectora del Centro de Derecho de los Derechos Humanos de la Universidad de Nottingham.  Aoife es vicepresidenta del Comité Europeo de Derechos Sociales del Consejo de Europa, el principal mecanismo europeo de seguimiento de los derechos económicos y sociales, y se unió al Comité en 2017.  Es experta académica en Doughty Street Chambers, donde es codirectora del Grupo de Derechos del Niño.