El matrimonio deja a los niños sin infancia".
"Los adolescentes varones
casados se ven obligados a asumir responsabilidades de adultos
para las
que tal vez no estén preparados".
Henrietta Fore, Directora ejecutiva de UNICEF.
Euronews.
La lucha contra el matrimonio infantil no ha sido fácil, sin embargo,
en la última década se han evitado 25 millones de matrimonios y su
prevalencia se ha reducido de un 50% a un 30%, según datos de la UNICEF.
Pero todavía queda camino por recorrer. Una de las tareas
pendientes de la Agencia de las Naciones Unidas para la protección de la
infancia era el reconocimiento de los hombres como víctimas en esta
práctica ilegal.
Su
último informe publicado este viernes 7 de junio confirma que el
matrimonio de menores no solo concierne a las chicas: se calcula que 115
millones de hombres han contraído nupcias siendo niños, de estos, 23
millones se han casado antes de cumplir los 15 años.
El documento
que recoge los datos de 82 países concluye que estos casos son
frecuentes en el África subsahariana, América Latina y el Caribe, Asia
meridional y Asia oriental y el Pacífico.
Estas cifras no apacigua
la urgencia que posee el matrimonio infantil femenino con más de 650
millones de niñas y que, si los esfuerzos no aumentan, para el 2030
alrededor de 150 millones más se casarán antes de los 18 años, según las
proyecciones de UNICEF.
Con estas nuevas estimaciones, se eleva a 765 millones el número total de niños que se casan.
Pero
el reconocimiento también hace parte de los esfuerzos, "si bien se han
estudiado ampliamente la prevalencia, las causas y los efectos del
matrimonio precoz entre las niñas, se han realizado pocas
investigaciones sobre el matrimonio precoz entre los varones", dice la
publicación.
"El matrimonio roba la infancia"
Las causas
pueden variar dependiendo del país y su contexto, aunque la tendencia
indica que los menores pertenencen a entornos rurales y que tienen poco o
ningún acceso a la educación.
“Cuando tenía 13 años, mi
madrastra quiso que me casara con un hombre. Todavía era pequeña y
quería estudiar, así que me negué. Entonces, mi madrastra me llevó al
mercado y me abandonó. No volví, lo cual fue una buena decisión: pude
continuar con mis estudios y ahora estoy en mi último año de primaria.
Quiero ir a la escuela secundaria y luego ser comerciante”, contó
Florence de 14 años en Kinshasa, República Democrática del Congo para
UNICEF.
Muchas familias tienen como costumbre (religiosa o no) de
casar a sus hijos con el objetivo de recibir algún tipo de recompenza o
intercambio que genere un beneficio a su hogar.
"El matrimonio
roba la infancia", dijo Henrietta Fore, Directora Ejecutiva de UNICEF.
"Los novios se ven obligados a asumir responsabilidades de adultos para
las que tal vez no estén preparados. El matrimonio precoz trae consigo
la paternidad precoz, y con ello una presión adicional para mantener a
la familia, reduciendo las oportunidades de educación y empleo".
Asimismo,
UNICEF detalla que la República Centroafricana tiene la mayor
prevalencia del matrimonio infantil en los hombres (28%), seguido de
Nicaragua (19%) y Madagascar (13%).