HDIA, Hablando de Infancia y Adolescencia: Blog GSIA con información y reflexión sobre la realidad que viven millones de niñas, niños y adolescentes en el mundo.
"Hola, me llamo Lucas, y soy alumno de primero de bachillerato. Antes
de todo quisiera agradecer el tiempo que tome en leerse lo que escribo,
pues a muchos hoy en día no nos sobra, y sobre todo quisiera pedir ayuda
para que este mensaje que presento a continuación se comparta:
Escribo al periódico debido a que recientemente se ha dado la noticia de que el año que viene en 2º de bachillerato en Madrid se ofertará la asignatura de religión como una optativa a elegir,
la cual contará para la nota y para el acceso a la Universidad. Con
mucho respeto a cualquier persona que haya tomado esta decisión, me
gustaría aclarar que estamos en el siglo XXI, por si por algún casual
nos hemos confundido, no sé, de milenio. La enseñanza en un Estado, da
igual el que sea, debería ser laica, al menos la pública. No cabe en mi
cabeza el cómo no se ha opuesto nadie (que yo haya oído, al menos) a
esta propuesta.
Como ya he dicho antes, la enseñanza debe ser pura, laica. La
religión, aunque sea de gran peso en el día a día de muchas personas, no
debería acercarse lo más mínimo a la educación. Menos aun hacer media
para una nota que influye a la hora de entrar a una carrera. Yo no odio
la religión ni nada por el estilo. Valoro positivamente el cómo da
esperanza a muchas personas y las anima a ser más bondadosas.
Además, poniendo un ejemplo real, en el bachillerato que curso yo,
“Bachillerato de excelencia”, no se nos ofertan asignaturas optativas
que sí se pueden dar en otros bachilleratos normales, como la de dibujo
artístico. Y sin embargo, adivinen con qué asignatura puedes conseguir
un 10 fácil (QUE CUENTA PARA NOTA A LA HORA DE HACER MEDIA, REPITO, NO ES BROMA) por no hacer prácticamente nada. Si su respuesta ha sido "religión”, ha dado usted en el clavo. Religión sí, pero artes no.
Quizás lo más difícil de explicar de todo es el hecho de que, aun
protestando sobre la educación pública y su deplorable estado, la
mayoría de mis compañeros de clase la cogerán el año que viene, así
podrán tener un bonito 10 en el boletín. Predicamos con el ejemplo aquí
en este país. No es fácil ir contracorriente, desde luego, sobre todo si
sentencias tu media a estar por debajo de la de los demás por no querer
alimentar más esta locura (todo hay que decirlo, es una locura).
Por estas razones y más (ya escribí una carta en 1º de la ESO protestando por un tema similar), he empezado una petición en change.org que tiene como objetivo apelar al uso de razón del Ministerio de
Educación, al Gobierno del país o a cualquier persona que pueda hacer
algo para mejorar un poco el estado en el que estamos ahora los
estudiantes. Sin duda agradecería su apoyo y su colaboración, pues
además esto que yo cuento prácticamente no ha tenido ningún impacto
mediático y por lo tanto la gente no es consciente de lo que ocurre.
Muchas gracias de nuevo por leer mi mensaje. Me despido afirmando una
cosa: No sé cuánta gente va a apoyarme, o a cuántas personas llegará
esto, pero a veces hay que oponerse a estas barbaridades, y aunque
parezca que uno solo no puede hacer mucho, siempre puede tener la
esperanza de que algunas personas piensan igual, solo que a lo mejor no
han sabido decirlo".
* Lucas Álvarez Rodríguez es estudiante de Bachillerato.
'Quiéreme cuando menos lo merezca... por que es cuando más lo necesito', aborda la adolescencia desde una premisa simple:
"para ayudarles a
construirse, tienes que estar a su lado cuando descubran",
afirmación
aplicable a tabúes como el sexo, las drogas o, incluso, el
adoctrinamiento.
Jaume Funes | Sandra Vicente
Y es que hablar de adolescencia es hablar de la infancia pero también
de la edad adulta. De contradicciones y de descubrimientos, de rebeldía
y del amor. Así, hablamos de sexo y drogas, de nuevas tecnologías, influencers e, incluso, de adoctrinamiento, en la misma conversación. Todo ello, con un único hilo conductor: la adolescencia.
Es hablar de adolescencia y mucha gente se estresa: ¿por qué
es una etapa tan convulsa, tanto para los propios jóvenes, como para los
adultos que les rodean?
Hace más de cuarenta años que trabajo esta etapa vital: empecé en el
año 73 del siglo pasado. He visto muchas adolescencias, incluso cuando
éstas no existían como concepto universal, hasta las adolescencias
online que tenemos hoy. En estos años ha habido muchos cambios sociales
pero siempre se ha mantenido una constante: adultos desconcertados. La
primera reacción siempre es convertir el cambio en problema y tendemos a
construir el control. Pero no se puede intentar poner barreras ni leyes
a lo que es incontrolable.
Mi batalla como profesional siempre ha sido intentar que los adultos
aprendan a mirar a los adolescentes. No puedo decir que no generen
problemas: yo mismo he vivido intensamente la época de la heroína y
muchos de los chavales con los que he trabajado ahora están
muertos. Pero no aportamos nada si enfocamos esta etapa vital desde el
conflicto: debemos aprender a ayudar a unas personas que piden ayuda,
pero no de la manera que nosotros quisiéramos o entenderíamos. No son
drogatas ni delincuentes; antes que nada son adolescentes que se
complican, o no, la vida de una determinada manera y que nos la
complican, o no, a nosotros.
Habla de una época en la que no existía la adolescencia como
concepto universal, pero jóvenes en transición los ha habido siempre
Cualquier profesional de la educación y la salud ha estudiado la
pubertad y el cambio biológico y fisiológico que de ella se deriva. Pero
no es sólo físico, sino que está tremendamente relacionado con las
condiciones sociales. La manera cómo vivimos la primera menstruación o
el despertar sexual tiene que ver con el contexto. Piensa en estos
cambios en los años sesenta y setenta, cuando muchos chicos no tenían
tiempo de observar y reflexionar, sino que debían ocuparse de la casa,
ponerse a trabajar … La contemplación de estos cambios y , con ellos, la
posibilidad de vivir la adolescencia, sólo era posible para los jóvenes
con dinero y recursos.
¿La adolescencia no puede ser sin ocio?
Es una etapa que va ligada al tiempo para ser adolescente, un tiempo
no dedicado a ser un sujeto productivo explotado por el trabajo. Además,
también se caracteriza por unas dosis mínimas de consumo porque, aparte
de contemplar la adolescencia, también debes consumir como tal. La
lógica psicológica de la adolescencia pasa por sentirse diferente, no
querer ser un niño ni tampoco un adulto, y uno de los mecanismos para
salir de estas incertidumbres es identificar a los que son como tú y
compartir esa vivencia en comunidad.
Esta conformación de grupo se basa en comuniones de estilo de vida
que van desde las tribus urbanas a los lenguajes, pasando por las
maneras de vestir o la música. Las construcciones sociales se hacen a
través del ocio, que no debemos confundir con tiempo de diversión: son
espacios que no están destinados al trabajo. Y es que buena parte de los
mecanismos que los adultos interpretamos como diversión, son
simplemente cuestiones de relación. Uno de los más tópicos es el botellón: los adolescentes no se juntan para beber, sino para relacionarse en un espacio en el que no hay adultos.
Siempre que abordamos esta práctica desde la perspectiva del alcohol
olvidamos que es un mecanismo de relación. Así como el consumo no es lo
más importante de estos encuentros, tampoco debemos olvidar que nos
encontramos en una sociedad, precisamente, de consumo que aspira a
fidelizar adolescentes. Al igual que los partidos políticos y las
iglesias, el capitalismo intenta que los jóvenes comulguen con su manera
de consumir y entender el mundo. Porque el consumo relacionado a
determinados estilos de vida que se hacen fuertes a partir de la
adolescencia luego se hacen muy difíciles de cambiar. Tu consumo acaba
definiéndote así que, de alguna manera, los adolescentes acaban siendo
las grandes víctimas del mercado.
¿Los adultos tendemos a magnificar los conflictos resultantes de la adolescencia?
A veces me veo como un digestólogo, que ayuda a digerir adolescencias
difíciles a familias desconcertadas. Es vivir con una persona que te
cuestiona continuamente, pero es que los adultos tampoco asumimos que la
mayor parte de nuestras certezas son incertidumbres con seguridades
artificiales. Y en el fondo nos consolamos pensando que quien nos está
cuestionando es una criatura que no sabe lo que dice que sabe y que se
la pegará seguro.
Pero asumir esto no significa dejar de estar a su lado. Al contrario,
quiere decir estar dispuesto a enseñar a una persona que dice que lo
sabe todo -y que nunca reconocerá que no sabe algo- y conseguir que
aprenda -aunque no lo reconozca- para que cuando aprenda nunca te den
las gracias. La función del adulto debe estar detrás de las bambalinas:
debe ser quien le ayude a construir preguntas para buscar las
respuestas. Pero quien quiera dirigir la vida de un adolescente deberá
asumir demasiados conflictos.
Esta actitud requiere paciencia que, en su defecto, se sustituye por autoridad. ¿Qué piensa de la autoridad?
Quienes educan de manera sensata olvidan el poder o la autoridad, que
sería el equivalente al “te aguantas, la vida es dura”, “mientras vivas
en mi casa mando yo”, etcétera. El poder no es una herramienta, es un
desastre: debemos asumir que nosotros y nuestros conocimientos, valores y
criterios, dejan de ser un referente cuando los niños tienen 10 años. A
partir de entonces, usar la autoridad significa imponer, adoctrinar.
Más allá de las manipulaciones que pueda haber de las informaciones,
debemos saber que todos los poderes aspiran a adoctrinar a las nuevas
generaciones para que piensen de una determinada manera. No deben
cerrarse la puerta a estas informaciones, al contrario, lo que tenemos
que hacer es incentivar que las escuchen y guiarlos para que entiendan
que ellos mismos han de discernir y descubrir su criterio. Es un proceso
larguísimo que no se puede imponer.
Y esto ocurre en todos los ámbitos de la educación: tenemos un power point que
deben aprender. Tú te lo empollas, yo te evalúo, tú lo olvidas, yo te
doy un certificado y ya, partir de ahí, eres un buen ciudadano porque
vas asumiendo una serie de conocimientos. Pero si queremos que se
interroguen por lo que sucede a su alrededor, no podemos obligarlos a
aprender lo que creemos que se debe aprender, sino que debemos cultivar
sus propios intereses. Los adolescentes no son el proyecto de nadie.
¿Tendemos a infantilizar a los jóvenes cada vez que hablamos de adoctrinamiento?
Puedes montar un cirio hablando sobre que el día 1 de octubre pasaron
un montón de bestialidades pero tienes ante ti personas a las que, si
no has estado presente en su vida, si no te has preocupado de ellos y si
no les hablas continuamente sobre lo que ocurre a su alrededor, ya les
puedes meter el mitin que quieras, que será inútil. Sólo convencerás al
convencido. Quienes hablan de adoctrinamiento están dando poder a un
profe que, fíjate qué casualidad, hasta ayer era un inútil y hoy es un
adoctrinador.
Los maestros deben respetar pero explicar la desigualdad social: que
ha cerrado una fábrica echando a no sé cuántas personas, que los Mossos
han ido a no sé dónde y han hecho no sé qué, que el banco ha desahuciado
a una familia … con eso les dices a los chavales: vigilad, que hay algo
que se llama intereses económicos que afectan diferente a todos. Quien
explica esto de esta manera no adoctrina, sino que ayuda a leer la
actualidad de manera crítica.
¿Hoy deberíamos hablar de los palestinos masacrados por
Israel? Claro, y las escuelas que hablen de lo que pasa en la vida lo
harán. Y seguro que saldrá un filo-israelí diciendo que se adoctrina en
el antisemitismo. Pero el drama no es ese, el drama es que la mayoría de
chavales pasen de escuchar cuando se habla sobre chicos de su edad que
han sido asesinados. No debemos focalizar en si eres propalestino,
proisraelí, independentista o unionista. Tienes que ser pro-pensamiento,
porque las irracionalidades las encontramos partes.
Hablemos de los grandes tabúes de la adolescencia: por mucho
que cambien los tiempos, el sexo y las drogas siguen estando ahí. Y
continuamos afrontándolas mal. ¿Por qué?
El sexo siempre ha sido pecado mortal, enfocado desde la
moralidad. Siempre he tenido que hacer educación sexual y, así como en
los años 70 no podía hacerlo sin saber qué fotos de señoras del Interviú se pasaban bajo el pupitre, ni sin conocer los consultorios sentimentales del Pronto, hoy no puedes hacer educación sexual sin conocer las nuevas tecnologías ni la pornografía.
Estos elementos para descubrir y gestionar el despertar sexual
siempre estarán y el papel de los adultos siempre debe ser el mismo:
ayudar a construir una sexualidad feliz, atractiva y equilibrada para
que durante el resto de su vida una fuente significativa de placer y
felicidad venga de la sexualidad. Pero para que con cincuenta años
todavía disfruten follando, abrazándose y acariciándose, antes deben
haberse equivocado, preguntado …
Y para ello necesitamos adultos que no se escandalicen y que tengan
una vida equilibrada, porque la especialidad de los adolescentes es
desequilibrar al adulto. Si no se afronta esta etapa de manera serena,
ya les puedes decir lo que quieras, esto es como el adoctrinamiento: les
podemos decir que el sexo es malo, que deben mantenerse vírgenes … pero
ellos ya descubrirán qué piensan, nos guste o no. Y si los queremos
ayudar a construirse, debemos estar a su lado cuando descubran. Para que
te crean cuando les digas que el sexo no es sólo penetración, sino que
te lo puedes pasar bien acariciando, no les puedes ir diciendo “pobre de
ti que folles”, porque entonces no confiarán en ti.
Prohibir lo que los adultos hacen o consumen nunca ha sido una buena táctica
Las drogas y el sexo estarán siempre y parte del proceso de
maduración de los jóvenes pasa por ir descubriendo cómo relacionarse con
los riesgos. Los chavales tienen que ir descubriendo que hay una gran
diferencia entre un kalimocho Don Simón y un Gran
Reserva. Pero, aunque yo sepa que no vale la pena agarrarse un pedo
monumental con vino de un euro, no seré yo quién les diga que no lo
hagan. Porque es un pedo que se debe agarrar antes de llegar a la
conclusión de que no compensa.
¿Que el alcohol es malo? Desde el punto de vista neurológico es una
droga muy potente. Tú mismo, destroza tus neuronas como quieras, pero
debes saber que el alcohol también sirve para pasarlo bien. Yo disfruto
mucho con un buen whisky, pero no diré nunca que para pasarlo bien
necesito beber.
No podemos pensar que los adolescentes pasarán de la inocencia de la
infancia a la estabilidad de la edad adulta sin trasiegos. Esta etapa de
transición, al contrario, debe ser bastante entretenida y la deben
vivir intensamente, porque si no, los problemas vendrán luego. Hay que
tener en cuenta, eso sí, que es un proceso de aprendizaje terrible si no
se encuentra ningún adulto que ayude a hacerlo.
si pueden saber hasta que está mal puesto un botón?".
Los productos hechos por esclavos deberían ser como las drogas.
No se deberían importar, no debería permitirse venderlo.
Nadie debería comprar eso, debería ser ilegal.
Entrevista a Ehsan Ullah Khan, activista pakistaní
que lleva 50
años luchando contra la explotación laboral de adultos y menores
en
países empobrecidos-
El activista participó
en la liberación de Iqbal Masih,
un niño esclavo pakistaní que se
convirtió,
tras su asesinato en 1995, en un icono mundial contra la
explotación.
Iqbal Masih, su asesinato en 1995 lo convirtió
en un símbolo mundial contra la explotación infantil-
Icíar Gutiérrez,Desalambre,Eldiario.es.
El activista Ehsan Ullah Khan durante su visita a Madrid. David Conde
Ataviado con su característica
túnica blanca, Ehsan Ullah Khan recorre una de las principales calles
comerciales de Madrid. Se pasa las horas observando la ropa en las
tiendas, mirando con detenimiento los precios en sus etiquetas, los
'Made in'. Denunciar lo que a veces hay detrás de esos trozos de cartón
es parte de la lucha que desde hace medio siglo lleva a sus espaldas:
que no haya, en ninguna parte, ninguna persona trabajando en condiciones
de esclavitud.
A sus 70 años, este activista y
periodista de origen pakistaní sigue tan firme en su convencimiento como
el día en que empezó. Lo demuestran su serenidad y su contundencia al
hablar. La misma por la que ha recibido amenazas y por la que ha sido
encarcelado en varias ocasiones. Hoy vive exiliado en Suecia.
Ullah ha visitado España para presentar la plataforma Dignitex, formada por varias asociaciones internacionales que luchan
contra la explotación en la cadena textil. Entre ellas está Frente
Global de Liberación del Trabajo Forzado, fundado en 1988 por el
activista. Pero el primer paso lo dio 20 años antes, cuando puso en
marcha una organización para ayudar a los trabajadores de las fábricas
de ladrillos, uno de los focos de trabajo esclavo en Pakistán.
Otro era la industria de las alfombras. A uno de sus telares llevaba
años encadenado el pequeño Iqbal Masih cuando logró escapar de la
esclavitud gracias a la ayuda de Ullah.Iqbal Masih, su asesinato en 1995 lo
convirtió en un símbolo mundial contra la explotación infantil. Tenía 12
años. Hoy, 2 46 millones de niños y niñas como Iqbal siguen siendo víctimas del trabajo infantil, según Unicef.
¿Qué le trae a España?
La sociedad española está olvidando el mensaje de Jesús de que los
niños deben ser amados. Actualmente, en el mercado español, por todas
partes, hay productos hechos por niños esclavos. Se venden en las
calles, en las tiendas... particularmente en las grandes tiendas de
ropa.
Esto viola las leyes internacionales. Intento
que la sociedad, así como las multinacionales, se replanteen el mensaje
de Jesús. El Papa Francisco ha repetido también que los niños deberían
ser liberados de todo tipo de explotación. Yo quiero que esto se haga
realidad.
Lo ha mencionado. ¿Cuál es la responsabilidad de las empresas europeas y españolas en esta explotación que usted denuncia?
La industria textil, la segunda más potente del mundo detrás de la de
las armas, está muy implicada en la esclavitud. Se van a producir una
camiseta a un país empobrecido donde la situación económica y la de los
niños es peor. Muchos de estos países se han visto afectados por la
guerra.
Las grandes compañías como Mango o Inditex
quieren producir una prenda de ropa. En un sitio compran el algodón,
como Egipto, Etiopía o Pakistán. Van a teñir ese algodón a otro país. Lo
hilan en otro, como India. En otro lugar se elabora la prenda. Y luego
van a China. Es un sistema muy organizado, controlado por empresas que
explotan a muchas personas, sobre todo mujeres y niños, en enormes
partes del mundo.
Se produce un enorme abismo entre
los países que compran y los que producen. A veces, para fabricar una
prenda no se gastan más de 5 o 10 euros, y pueden venderla por más de
100 euros. Esto pone en peligro la paz en el mundo. Por eso viajo. No
tengo una manía especial contra ninguna multinacional en concreto. No es
un problema de que a mí me gusten o no, solo sigo unos principios.
Las compañías suelen atribuir estos abusos a los proveedores locales con los que trabajan.
El Máster Propio en Políticas Sociales de Infancia y Adolescencia tiene por finalidad ofrecer herramientas teórico-prácticas a profesionales o futuros profesionales e investigadores, que permitan conocer e intervenir en el campo social de la infancia, desde una comprensión global de la misma, que se apoya en las aportaciones de los nuevos estudios de infancia y en las orientaciones que emanan de la Convención sobre los Derechos del Niño, de las Naciones Unidas, para las políticas de infancia.
Objetivo general:
Proporcionar un conocimiento multidisciplinar acerca de la posición y el papel de los niños, niñas y adolescentes en el mundo actual, basado en la consideración de los mismos como verdaderos actores sociales, y como sujetos de derechos.
Objetivos específicos:
+ Formar profesionales (investigadores, docentes, técnicos de programación o intervención en organismos públicos y privados) capaces de afrontar programas e investigaciones dirigidas a la promoción y desarrollo social de la infancia.
+ Ofrecer herramientas teórico-prácticas a los profesionales o futuros profesionales o investigadores para conocer o intervenir considerando la globalidad del fenómeno social de la infancia.
– La influencia de las condiciones sociales, económicas, políticas y culturales en las características con las que se representa a la infancia.
– Los derechos de los niños como parte del discurso internacional de los derechos humanos, incluyendo sus fundamentos legales, filosóficos, sociológicos y antropológicos
– Las políticas dirigidas a la protección y a la participación de los niños en contextos locales, nacionales e internacionales.
– Los niños, niñas y adolescentes como sujetos competentes en sus manifestaciones sociales y culturales individuales y colectivas.
+ Promover la comprensión de:
Resultados esperados para los alumnos del curso:
+ Capacidad de aplicar conceptos teóricos a la intervención profesional con infancia.
+ Adquisición de capacidades analíticas críticas con respecto a la intervención y a la investigación corriente acerca de las situaciones y las vidas de la infancia.
+ Habilidad para manejar correctamente los problemas derivados de un enfoque del trabajo centrado en los niños y niñas de un modo que asegure tanto su protección como su participación.
+ Capacidad para diseñar estrategias, así como para dirigir instituciones y proyectos en ámbitos como la administración social, la cooperación internacional, la educación (formal o informal) de carácter intercultural, etc.
Formación bonificadaLa Universidad Complutense de Madrid está inscrita en el Registro Estatal de Entidades de Formación que
depende de la Fundación Estatal para la Formación en el Empleo
(FUNDAE), como entidad que puede impartir formación profesional para el
empleo, lo que implica que su empresa u organismo puede acogerse al sistema de formación bonificada, de
acuerdo con lo establecido en la Ley 30/2015, de 9 de septiembre, por
la que se regula el Sistema de Formación Profesional para el Empleo.
Todas las empresas disponen de un Crédito anualexclusivamente destinado a la formación de sus trabajadores que pueden hacer efectivo mediante la aplicación de bonificaciones a la Seguridad Social para
formar a sus trabajadores a coste cero (siempre que se cumplan
determinadas condiciones). Si esta cantidad no se utiliza, se pierde.
Aproveche el crédito del que dispone su empresa para matricularse en nuestra amplia oferta de títulos de Formación Permanente.
Con diverso grado de desarrollo, se han puesto en marcha iniciativas de reforma legislativa en materia de infancia, tanto en nuestra comunidad como en el ámbito estatal.
Como corresponde a nuestra vocación de servir de lugar de encuentro de los profesionales de todas las áreas del sistema de protección a la infancia, la APIMM convoca a profesionales en activo y académicos a debatir las insuficiencias actuales en nuestro marco legislativo y a poner encima de la mesa propuestas de mejora, desde el enfoque de los derechos del niño que debemos a la Convención de Naciones Unidas de 1989.
El programa se agrupa siguiendo las cuatro “P” con las que habitualmente se explica la Convención de Derechos de la Infancia: Prevenir, Proteger, Promover y Proveer.
9.30- 10.30 CONFERENCIA INAUGURAL: “LAS OBSERVACIONES FINALES DEL COMITÉ DE DERECHOS DEL NIÑO A ESPAÑA EN 2018”. Ricardo Ibarra, Director de la Plataforma de Organizaciones de Infancia.
10.30- 11.30 CONFERENCIA: ”EL MARCO GENERAL DE LA LEGISLACIÓN SOBRE INFANCIA. BASES PARA UNA REFORMA DE LA LEGISLACIÓN AUTONÓMICA”. Clara Martínez García, Directora de la Cátedra Santander de Derecho y Menores
11.30-12.00 Pausa
12.00-14.00. MESA REDONDA “PROPUESTAS PARA MEJORAR LA PREVENCIÓN”:
La declaración administrativa de riesgo
Violencia de género entre niños/as y adolescentes
Conductas de riesgo
Parentalidad positiva
14.00-16.00 PAUSA
16.00-18.00. MESA REDONDA “PROPUESTAS PARA MEJORAR LA PROTECCIÓN”
Acogimiento Familiar
Centros Residenciales Específicos
La atención a los MENAS
La coordinación inter –administrativa
JUEVES 14 DE JUNIO
9.00- 11.00: MESA REDONDA “PROPUESTAS PARA MEJORAR LA PROMOCIÓN DE DERECHOS”
La figura del defensor del menor
Empoderamiento infantil
Consejos de Infancia y participación
Aceptación de la diversidad
11.00-11.30 Pausa
12.00-14.00 “PROPUESTAS PARA MEJORAR LA PROVISIÓN DE SERVICIOS”
Salud mental
Discapacidad
Dificultades de aprendizaje
Trabajo comunitario
14.00: CONCLUSIONES Y CLAUSURA. Junta Directiva APIMM / Cátedra Santander de Derecho y Menores
Parte del cartel que realizó Nora para justificar la convocatoria.
La pequeña pidió a su madre que le ayudara a realizar la convocatoria tras ver actitudes de padres con sus hijos que le parecieron incomprensibles.
«Adultos escuchad, no nos gusta que nos amenacen, no nos gusta que nos griten, no nos gusta que nos peguen. Tratadnos con respecto». Con estas frases, pintadas dentro de un corazón, la pequeña Nora, de 7 años ha querido convocar una concentración ‘para el respeto de la infancia’ el 2 de junio a las 18:00 horas en el parque del Plantío de Ponferrada.
La madre explica que cuando fue a recoger a sus hijas al parque Nora le explicó, de camino a casa «que había visto a algunos adultos gritar, amenazar y pegar a sus hijos. Estaba triste e indignada. No lo entendía». Su madre le preguntó que ¿qué creía que podían hacer frente a esas actitudes que le habían disgustado?. Y Nora no lo dudó «¡hay que hacer una manifestación!» narra Lucía Costa que le contestó. «Empezó a preguntarme cómo se hacía una manifestación y a proponer un montón de ideas», cuenta.
Al día siguiente Nora había hecho un cartel para organizarlo todo «con la ayuda de familiares y amigos».
En la manifestación se repartirán pomperos para decorarla con pompas de jabón y se colocará una cuerda de árbol a árbol para que los niños que quieran cuelguen sus dibujos, frases, redacciones o poesías.
Además se instalará un pequeño equipo de megafonía para que los niños que lo deseen puedan expresarse desde él, explicando lo que les gusta o no. La convocatoria ha sido aplaudida desde las redes sociales por haber sido una iniciativa de la pequeña, que ya ha abierto, al menos, una reflexión.
El recorrido informativo del mes de abril pone de manifiesto la situación de vulnerabilidad que viven actualmente niños y niñas en lugares de todo el mundo.
Un sinfín de noticias resalta los atroces escenarios que enfrentan: guerras, pobreza, maltrato, explotación… Lejos nos encontramos de proporcionar un presente digno a la población más joven del planeta. Esperemos que este repaso no se quede en el desaliento y la impotencia, sino que fomente el deseo e impulso necesario para movilizar a la sociedad hacia la protección de la infancia.
Como ya os comenté hace unas semanas, el 5 de abril presenté mi último libro ¿Jugamos? Cómo el aprendizaje lúdico puede transformar la educación, un libro que he escrito pensando en los maestros y los equipos directivos que sienten inquietud por transformar la educación y curiosidad por conocer cómo el aprendizaje lúdico puede contribuir a esta transformación.
El libro se presenta mediante 10 puertas que el lector debe ir atravesando. Pero no lo hace solo… Durante todo este viaje va guiado por los personajes que acompañan a Alicia… sí, sí, recuerda… Alicia, la del País de las Maravillas. Vaya, que invito al lector a convertirse en la mismísima Alicia. Porque convirtiéndose en ella va a ser más fácil dejar salir a su niño interior y desde allí, el aprendizaje lúdico no solo se hace comprensible, sino que aparece como la única manera de aprender.
Como te decía, en cada puerta te acompaña un personaje, de forma que viajas por la historia del juego y los juegos, vas conociendo sus lógicas y también las lógicas de la motivación, y ves la importancia de marcar unos objetivos claros e indicadores para evaluarlos. Te adentras en el mundo de los «jugadores» y distingues entre estrategia, metodología y táctica. Pero el inicio y el punto de partida del libro, y de mi aproximación en general, como seguramente ya estás imaginando, está en la actitud lúdica.
Pero… ¿qué es la actitud lúdica?
Desde mi punto de vista, la actitud lúdica es aquella disposición del ánimo propia de la persona que juega. Y en ese estado de ánimo expresado se encuentra el alma del juego, su esencia. La actitud lúdica, tal y como yo la concibo, tiene que ver con la capacidad de asombrarnos, con la curiosidad, con las «ganas de…», con la creatividad y el tratamiento no convencional de ideas y objetos, vivir en el presente y saber disfrutar de la belleza. Es más que jugar, es una actitud ante la vida. ¡Puro apetito de vivir!*
Por eso, los propios juegos y juguetes no son sino puras herramientas al servicio de lo lúdico, del disfrute, del goce puro de jugar. ¿O acaso no nos hemos aburrido alguna vez jugando a una partida de cartas o al trivial y en cambio recordamos con intensa alegría aquella anécdota de uno de nuestros viajes o aquella primera excursión con botas de montaña? ¿Qué es lo que convierte a los juegos en juego y nos hace vivir una actividad como un juego? Mary Poppins era la reina de eso, y dejaba claro que el juego está en la persona y que ningún juego instituido garantiza en sí mismo el juego. Solo con nuestra capacidad de actitud lúdica podemos convertirnos en verdaderos facilitadores del juego. ¿Jugamos?
* El pasado día 5 de Abril se presentó el libro: Imma Marín. ¿Jugamos?. Cómo el aprendizaje lúdico puede transformar la educación, Ed. Paidós Educación.
En este libro propongo un viaje con Alicia —sí, sí, la del País de las Maravillas—, con quien recorreremos un camino lúdico en el que nos adentraremos adescubrir las claves para transformar la educación mediante el juego. Detrás de cada una de las diez puertas, un entrañable personaje del cuento de Lewis Carroll nos dará la bienvenida yencontraremos reflexiones teóricas, ejemplos prácticos y actividades para aplicar la transformación lúdicaen los centros e incluso en casa y, principalmente, en cada uno de nosotros. Porque lo que os propongo es que os convirtáis en Alicia y que, con ella, descubráis el país de las maravillas y crucéis el espejo y así transformaréis vuestra mirada.
De hecho, la pregunta a la cual he querido responder con esta nueva publicación es por quéy cómo el juego puede contribuir sustancialmente a mejorar la educación y si realmente el juego es la mejor manera de aprender, como sabéis que postulo.
Parto de la idea de que la escuela, hoy en día, está saturada, estresada y llena de obligaciones. Y es precisamente en este entorno en el que estamos sumergidos donde el juego puede tener la clave que abra las puertas de la innovación y el cambio, la clave que puede ayudarnos a superar muchas de las dificultades a las que se enfrentan madres, padres, profesorado y alumnos.
Como sociedad es nuestro deber entender que lo que esta mujer tecnológica (madre ?) está haciendo,
utilizar a una niña para lograr atención, "likes",
no solo es indecente e inmoral,
sino que vulnera todos los derechos de esta niña... y,
aquellas personas que dan "likes" se están equiparando ética y moralmente a ese "personaje! tecnológico.
Un vídeo de una mujer enseñando
a leer a una niña se ha hecho viral en redes sociales. Los errores de
la criatura provocan la carcajada de su presunta familia. La niña, humillada, llora las gracias de una madre que solo busca la risa y el
like fácil.
Reírnos de escenas como esta y compartirlas en nuestras
redes también nos hace cómplices de este nuevo tipo de maltrato infantil
digital.
Ningún vídeo viral vale la humillación de un niño Twitter
El vídeo es un éxito y llama a la realización de otros más para rentabilizar su viralidad. "Si a esa madre le ha funcionado el juego a mi también".
El 'oversharing' —así lo llaman los anglosajones— o esas ganas de
compartir compulsivamente en nuestras redes material gráfico de nuestros
hijos ya no es suficiente. Hay demasiada competencia si cada padre publica una media de 1000 fotos al año de sus hijos y para destacar hay que dar un paso más.
Que el niño se caiga, que la niña sufra, que el niño sea
humillado sutilmente te dará más relevancia y debate en las redes que si
la niña sabe multiplicar con 3 años. Al fin y al cabo solo es un juego.
Dicen muchos padres.
Y es que es mucho más fácil
conseguir el like cómplice por una caída imposible que por un esfuerzo
por el que tienen que pasar todos. Muchos padres buscan artificialmente
la escena dantesca o humillante del niño para fabricar un falso viral.
Un teatro funesto, un juego muy peligroso para los niños y para las
tendencias.
—¿La P con la E?
—PE
—¿La L con la O?
—LO
—¿La T con la A?
—TA
—¿Qué dice entonces?
¡¡¡TOMATE!!!
No
hay nada de pedagógico en este vídeo. En la escena hay una presión
desmedida hacia la niña, en tensión permanente, aterrorizada y que acaba
explotando al sentirse avergonzada por aquellos a los que más quiere.
Se nota que el vídeo está precocinado y busca llegar a ese desenlace,
probablemente ya experimentado con anterioridad.
Si el
vídeo te hace gracia eres parte del problema. Y el problema es grave.
La publicación original tiene más de medio millón de reproducciones,
20.000 retuits y casi el doble de likes. Cuarenta mil personas regalan
el corazoncito por disfrutar con la vergüenza de una niña sometida a una
presión pública y privada totalmente innecesaria.
"Es una broma sin importancia", "Es solo humor", dicen algunas respuestas. "Unas risas de vez en cuando no nos vienen mal",
comentan otros. La mayoría del hilo denuncia la crueldad del vídeo pero
este sigue compartiéndose a velocidad de vértigo. (La publicación
original es de mayo de 2017). Demasiadas veces
contemplamos la vida ajena como material producido para una telenovela
que caduca. La realidad que hay detrás no nos interesa si nos arranca
las risas fáciles de una comedia. Usar, tirar, y olvidar el daño colateral.
El psicólogo Alberto Soler Sarrió, especialista en crecimiento personal y crianza de los hijosy responsable del canal 'Pildoras de Psicología'
habla de por qué compartimos este tipo de material, el efecto de
tolerancia digital y del reforzamiento que produce la lucha por
conseguir el viral de turno:
"Cada
vez necesitamos mayor intensidad del estímulo en cuestión para que
despierte nuestra atención, ya no basta con compartir imágenes de
gatitos."
Otro factor que influye, es lo que se conoce como el "reforzamiento
aleatorio intermitente", que es el que está detrás de, por ejemplo,
las máquinas tragaperras: es el programa de reforzamiento más poderoso
que existe, porque no sabes cuándo vas a obtener el "premio". La red es
así, "como una caja de bombones", no sabes qué publicación va a
despuntar, lo cual lleva a una conducta compulsiva en busca de esa
recompensa, la viralidad."
Por
eso compartir el vídeo también nos hace cómplices de este maltrato 2.0.
La impersonalidad de la lejanía o el anonimato de los personajes no
sirve como excusa para promocionar un contenido que funcionará
tan bien en redes. Favorecer su difusión es contribuir a que el fenómeno
se perpetúe, se convierta en tendencia y favorezca que las pequeñas
burlas se transformen en grandes frustraciones.
Las consecuencias de este 'juego viral' de adultos irresponsables para con la niña pueden ser interminables:
"Afecta
a la autoestima del menor, puede generar problemas emocionales como
depresión, ansiedad, problemas de socialización, problemas académicos y
también, como hemos visto en diferentes ocasiones, puede incluso llevar al suicidio" nos comenta Alberto.
La
humillación nunca puede ser una herramienta de educación ni de
disciplina, y menos ejercerla públicamente en redes sociales.
Enseña a
los niños unos límites de adultos que aplicarán cuando lo sean,
exactamente igual que la violencia.
Un niño humillado en redes no solo
pierde la confianza en quien le humilla, también pierde el derecho a una
reputación construida con su voluntad, no con sus faltas o errores.
¿Que
ocurriría si, por ejemplo, la niña del vídeo fuera disléxica? (Si no
sabe leer a esas edad es una posibilidad nada desdeñable). ¿Sería un
agravante o un atenuante? Las risas se transformarían ahora en muecas.
¿Nos estamos riendo de una niña con un trastorno de aprendizaje? ¡No lo
sabía! ¡Tengo excusa!.
En realidad la falta de
información no exime la responsabilidad del espectador. Las evidencias
son suficientes para demostrar un desagravio, haya o no dislexia. No hay
nada de gracioso en construir chistes con realidades anónimas de carne y
hueso por unos cuantos likes o retuits.