Sira Rego defiende el voto a partir de los 16 años

 La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, defendió este lunes en el Fórum Europa rebajar la edad mínima del derecho de sufragio a los 16 años.


LA VANGUARDIA

SERVIMEDIA

22/07/2024



Rego manifestó en el encuentro informativo que organizó en Madrid Nueva Economía Fórum que “si tienen edad para trabajar deben de poder votar”, y señaló que esta propuesta será “uno de los vectores” de la futura Ley de Juventud que aún se encuentra en fase de discusión.


En su opinión, tal posibilidad supone un avance “en derechos” y, “por lo menos, servirá para abrir un debate público”. “Los jóvenes pueden trabajar desde los 16, con lo que al menos tienen que tener” el derecho de sufragio, y añadió que en un momento en el que la extrema derecha impone una agenda de retrocesos conviene “plantear una ampliación de derechos”.


A su juicio, “la juventud debe poder opinar sobre las políticas del país” y no solo sobre aquellas que le atañen de forma directa”. “Necesitamos un dispositivo claro que articule la participación política de la juventud y de ahí la conveniencia de dicha norma, sobre la que actualmente debaten distintos grupos de participación", indicó.


La ministra aseguró ser consciente de que “toda ampliación del derecho al voto va a encontrar resistencia”, igual que “a lo largo de la historia sucedió con el sufragio masculino universal y con el acceso al voto de las mujeres". “Queremos por lo menos abrir el debate y esperemos a ver qué sucede en los grupos de discusión”, declaró.


Asimismo, defendió que la futura Ley de Juventud recoja “elementos que hablen de los derechos de las generaciones futuras”, en referencia a “la crisis ecosocial que vive el planeta”. “Merece la pena que, por lo menos, se abra el debate respecto a la justicia intergeneracional”, insistió, y destacó como, “de nuevo, ha sido la juventud quien ha puesto sobre la mesa “ esta necesidad.


ENTORNOS DIGITALES


Preguntada sobre el anteproyecto de Ley de Entornos Digitales Seguros, la ministra se refirió a la urgencia de “regular un espacio donde nuestros jóvenes y niños desarrollan gran parte de su vida” y donde, hasta ahora, no había ningún control. “Es un primer paso para que Internet deje de funcionar con la ley de la selva”, zanjó.


Rego se mostró convencida de que el Plan Nacional de Alfabetización Digital puede estar listo “nada más volver del verano” y agradeció la colaboración de los 50 expertos y expertas que participaron en la elaboración del informe de recomendaciones.


“Gracias a este informe vamos a tener una serie de recomendaciones por tramos de edad que nos den las claves para proteger a nuestros niños y niñas en el entorno digital”, recalcó.


Asimismo, insistió en que “ya existen herramientas disponibles” para introducir en los dispositivos digitales sistemas de control parental. De hecho, el anteproyecto contempla “una multitud de medidas”, señaló, porque “somos conscientes de que no es posible” lograrlo con una sola.

Publicado el informe `Datos clave de infancia y adolescencia 2023´, del Ayuntamiento de Barcelona

El 14,3% de la población de Barcelona son niños y adolescentes de entre 0 y 17 años, pero teniendo en cuenta no sólo los niños y niñas sino también las personas adultas que viven con ellos, la realidad de la infancia y la adolescencia afecta cotidianamente a 4 de cada 10 personas de la ciudad (37,9%). 



Ayuntamiento de Barcelona

24/07/2024




En este sentido, el informe Datos clave de infancia y adolescencia que radiografía anualmente la situación de los niños, niñas y adolescentes de la ciudad con mirada evolutiva, coge una relevancia importante, por el alto volumen de población sobre el cual impacta la situación de niños y adolescentes y también por su mirada integral.


Una radiografía transversal y evolutiva, que pone en el centro a los niños y niñas y es que justamente, uno de los principales valores de este informe es el análisis transversal de las diferentes dimensiones de su vida, una mirada integral que supera la mirada temática de muchas investigaciones que se impulsan desde un ámbito o administración concreta. El informe Datos clave de infancia y adolescencia pone al niño/adolescente en el centro ya que analiza todos los entornos de la vida de los niños y niñas sin parcelar la mirada. Su carácter anual desde el 2017, nos aporta una mirada evolutiva sobre la mayoría de indicadores analizados y, siempre que es posible, con perspectiva de género y territorial (distritos).


El informe hace una radiografía del estado de la infancia y la adolescencia en la ciudad de Barcelona a partir del análisis de más de 200 indicadores clasificados por 6 dimensiones de la vida:


Contexto sociodemográfico (con datos de población entre 0 y 17 años por distritos, por características como el sexo, grupos de edad, origen o discapacidad, también datos sobre la tipología de hogares, y la evolución y tendencia demográfica)Educación (pequeña infancia, paso para la escuela y transiciones hacia la educación postobligatoria)


Tiempo de los niños y niñas, actividades fuera de la escuela, espacio público y ciudadanía (incluyendo la satisfacción de los niños y niñas con su tiempo, las actividades extraescolares, el verano y vacaciones escolares, los espacios de juego en el espacio público, la escucha adulta y el conocimiento de los derechos de la infancia)


Salud física, mental y emocional (incluyendo hábitos saludables, satisfacción con el cuerpo, adicciones, bienestar emocional y salud mental, y salud sexual, entre otros)


Pobreza, exclusión y desigualdades (desigualdades territoriales dentro de Barcelona, pobreza en el trabajo y sobrecarga de gastos de vivienda, inseguridad residencial y movilidad forzada, riesgo de pobreza y exclusión, carencias materiales, entre otros)


Relaciones interpersonales (seguridad, discriminaciones, violencias, protección de la infancia/adolescencia)


Los más de 200 indicadores que se utilizan para la publicación anual de este informe, provienen de un total de 21 registros administrativos y de 12 fuentes de encuesta (33 orígenes de datos en total), tanto de ámbito municipal como autonómico, estatal o supraestatal. Con la sistematización y actualización de estos indicadores, que solo es posible gracias a la implicación y colaboración de 19 servicios e instituciones públicas, se crea el Sistema Integral de Indicadores de Infancia y Adolescencia en Barcelona, que forma parte del Observatorio 0-17BCN, impulsado por el Área de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Barcelona y llevado a cabo por el Instituto Infancia y Adolescencia de Barcelona. 


Acceso al Informe "Datos clave de infancia y adolescencia 2023" (en Catalán)

Empiezan los Juegos Olímpicos, ¿seguro que esto "no será una cosa de niños"?



El informe de evaluación de la candidatura presentada por París para ser la sede de los Juegos Olímpicos de 2024, el Comité Olímpico Internacional (COI) observó que se ponía más énfasis en la sostenibilidad medioambiental que en los derechos de los niños (Global Child Forum, 2024). 

Todos los Estados miembros de las Naciones Unidas excepto Estados Unidos se han comprometido a cumplir con lo establecido en la Convención de los Derechos del Niño (CDN). Al hacerlo, los Estados miembros reconocen a los niños como una clase protegida imponiendo obligaciones a varias instituciones para garantizar la seguridad y el bienestar de los niños. Las organizaciones deportivas tienen la misma obligación legal de cuidar a los niños. 

No obstante, a diferencia de otras instituciones, las instituciones deportivas no tienen responsabilidad jurídica si no cumplen con esta obligación, ya sea por incumplimiento de las leyes de aplicación general o por la no existencia de leyes específicas que regulen el deporte. Las organizaciones deportivas son mayormente autónomas, autogestionadas y capaces de operar con una intervención estatal mínima. (Donnelly, Mazzucco, 2024). 

En un intento por mejorar la protección de los niños en el ámbito deportivo, las organizaciones deportivas internacionales han creado sus propias directrices, como, por ejemplo, las directrices del Comité Olímpico Internacional para proteger a los atletas del acoso y del abuso (Pavlogiannis et al., 2024). Además, UNICEF junto con el Comité de Japón para UNICEF desarrollaron en 2018 los Principios de los Derechos del Niño en el Deporte.

En este documento se establecen las pautas generales para proteger a los niños y promover su participación en los deportes, las cuales deben ser respetadas por las organizaciones deportivas, las instituciones educativas, los entrenadores, las empresas patrocinadoras, los atletas adultos, los padres y los tutores (UNICEF, 2018). 

UNICEF ha elaborado recientemente unas pautas generales con ejemplos tomados de la industria del fútbol mundial para ilustrar cómo los derechos de los niños recogidos en la CDN pueden ser reconocidos y prevalecer en el deporte (UNICEF, 2020). Finalmente, varias confederaciones deportivas nacionales (por ejemplo, Inglaterra, Noruega y Suecia) han incluido los derechos de la CDN en sus políticas deportivas (Pavlogiannis et al., 2024).


La 32ª edición de los Juegos Olímpicos es la primera en incorporar de forma específica los derechos humanos en su contrato con la ciudad sede (Infobae, 2021). Sin embargo, en el informe de evaluación de la candidatura presentada por París para ser la sede de los Juegos Olímpicos de 2024, el Comité Olímpico Internacional (COI) observó que se ponía más énfasis en la sostenibilidad medioambiental que en los derechos de los niños (Global Child Forum, 2024). 

Una vez más, en los Juegos Olímpicos de París se ha desaprovechado la oportunidad de incluir compromisos relacionados con los derechos del niño en las políticas y principios considerados para la planificación y el desarrollo de los Juegos Olímpicos, un importante legado heredado de los últimos Juegos Olímpicos celebrados en Tokio en 2020.

De hecho, los resultados demuestran que mientras que las autoridades japonesas suscribieron las convenciones internacionales sobre los derechos del niño e incluyeron algunas estrategias para la participación infantil en las actividades de los Juegos, hubo pocas evidencias de que los organizadores de los Juegos de Tokio en 2020 desarrollasen o implementaran prácticas, principios y políticas sólidas para garantizar el respeto, la protección y la promoción de los derechos del niño en la planificación de los Juegos.  

Según un estudio reciente, esta ausencia se debió a que no hubo ningún requerimiento para incluir compromisos relativos a los derechos del niño durante las fases de licitación y de planificación, ya que el COI aún tenía pendiente recoger los derechos humanos en su contrato con la ciudad sede cuando se eligió a Tokio por primera vez como ciudad anfitriona (Aina et al., 2021)... 



El Cermi aprueba un documento con su propuesta de agenda política para la infancia con discapacidad hasta 2030

El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), tras un amplio proceso participativo previo entre todos sus grupos de interés, aprobó un documento de posición con su propuesta de agenda política en materia de infancia y discapacidad hasta el horizonte de 2030.


discamedia

18 de julio de 2024



Foto recurso Equipo directivo Cermi


Con la adopción de esta toma de posición denominada ‘Documento Cermi de Agenda política de inclusión de la infancia con discapacidad 2024-2030’, la entidad pretende "actualizar y reforzar su plataforma propositiva en este relevante segmento de la discapacidad (la infancia), en desarrollo del mandato del nuevo artículo 49 de la Constitución Española sobre atención específica a las necesidades de los menores de edad con discapacidad".


Se elaboró en el seno del Cermi, con participación interna de las organizaciones y estructuras de la entidad y de los grupos e instancias de interés con los que tiene relación más estrecha en esta esfera, y con soporte de consultoría externa en la parte de elaboración técnica.


El documento fundamenta y propone cómo deben ser las políticas oficiales, la legislación y las estrategias públicas en ámbitos críticos para la inclusión, los derechos y el bienestar de la infancia con discapacidad, abordando campos como la prevención, la atención temprana y el desarrollo infantil, la educación inclusiva, la lucha contra la pobreza infantil y la exclusión, la protección social, el apoyo a las familias, la salud y la atención sanitaria, las niñas con discapacidad, la protección contra la violencia, los entornos digitales seguros y la eliminación del abuso y acoso, así como la promoción de la participación y el ocio inclusivo, entre otros. Para cada ámbito, se desgranan las líneas de acción y las medidas que deben concretarlos.

Con esta toma de posición, del Cermi, tanto en el nivel nacional como autonómico y local, el Movimiento Cermi explicó que comenzará a desplegar acciones de incidencia política para que los distintos poderes y administraciones asuman esta agenda en favor de la infancia con discapacidad.

Acceso al documento

La crisis climática es una crisis de los derechos de la niñez

La crisis climática amenaza directamente la capacidad de las niñas y los niños para sobrevivir, crecer y prosperar.



ANIMAL POLÍTICO

Save the Children en México

23 de julio, 2024



Imagen tomada de la web de Humanium

Quizá llevamos décadas escuchando y hablando del cambio climático, pero la realidad es que la crisis climática ya no es un problema del futuro, está aquí y ahora. La degradación ambiental se ha convertido en un factor que pone en riesgo los derechos de las niñas, niños y adolescentes en general, y sobre todo en su derecho a un ambiente limpio, saludable y sostenible.


La crisis climática amenaza directamente la capacidad de las niñas y los niños para sobrevivir, crecer y prosperar. Los fenómenos meteorológicos extremos ponen en riesgo sus vidas y destruyen la infraestructura para su bienestar, ya que son física y fisiológicamente más vulnerables a las crisis climáticas y ambientales que las personas adultas.


Las niñas y los niños son menos capaces de soportar condiciones climáticas extremas como inundaciones, sequías, tormentas y olas de calor, y en realidad, no tendrían por qué resistir estas condiciones. La mayor amenaza para nuestro planeta es la creencia de que alguien más lo va a salvar.


Desde Save the Children hemos observado que, gracias a la crisis climática a la que nos enfrentamos, 35 millones de niñas, niños y adolescentes están bajo amenaza en la temporada de huracanes más activa registrada en el Atlántico.


La temporada de huracanes en el Atlántico comenzó oficialmente este mes y se prolongará hasta finales de noviembre. Los investigadores de la Universidad Estatal de Colorado (CSU) prevén 23 tormentas con nombre esta temporada, de las cuales 11 se convertirán en huracanes y cinco alcanzarán la categoría de huracán mayor (categoría 3-5). Por su parte, el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos pronostica que el Atlántico Norte podría registrar hasta 25 tormentas con nombre y entre cuatro y siete huracanes de gran intensidad de aquí a finales de noviembre.


Según los investigadores de la CSU, este nivel de actividad es un 170  % superior a la media de la temporada de 1991-2020, debido principalmente a las temperaturas récord de la superficie del mar debido al cambio climático inducido por el hombre, el desarrollo de las condiciones de La Niña en el Pacífico, la reducción de los vientos alisios del Atlántico y la menor cizalladura del viento.  Las tormentas que se desplazan por aguas oceánicas más cálidas absorben más vapor de agua y calor, lo que acelera la velocidad del viento y puede causar más daños si la tormenta toca tierra.


A medida que la crisis climática intensifica la frecuencia y gravedad de los fenómenos meteorológicos extremos y las zonas costeras se van poblando, millones de niños, niñas y adolescentes de zonas propensas a las tormentas se enfrentan a mayores riesgos como inundaciones, corrimientos de tierra, daños en viviendas y escuelas, mayor exposición a enfermedades e incluso la muerte.


Para la niñez que ya está en desventaja, los riesgos del cambio climático son aún mayores. A medida que los eventos climáticos se vuelven más frecuentes e intensos, las familias más pobres enfrentarán dificultades cada vez mayores para recuperarse. Los efectos combinados del cambio climático y la degradación ambiental están exacerbando las desigualdades existentes y empujando a las niñas, niños, jóvenes y mujeres más pobres y vulnerables a la pobreza, lo que impulsa la migración y la tensión social.


La emergencia climática es una carrera que estamos perdiendo, pero es una carrera que podemos ganar. Como bien dijo Wangari Maathai, defensora y activista medioambiental (Premio Nobel de la Paz en 2004), “La generación que destruye el medioambiente no es la generación que paga el precio. Ese es el problema”.


En Save the Children mantenemos nuestro compromiso para que la niñez, sus familias y sus comunidades sean más resilientes; sin embargo, hacemos un llamado a la sociedad en general para que se haga consciencia, se informe y, desde sus acciones, sume a que el planeta sea un lugar seguro para el presente y el futuro.

No tendremos una sociedad si destruimos el medioambiente. El momento de actuar ya no puede esperar.



El compromiso de Cuba con su infancia

El deber de Unicef con la Isla será invariable porque, a pesar del complejo escenario que vive el país, el Gobierno y sus instituciones tienen un compromiso explícito con la protección de las infancias y las adolescencias, afirma Alejandra Trossero, quien lleva casi dos años y medio de trabajo en la Mayor de las Antillas



Juventud Rebelde

Raciel Guanche Ledesma

21 julio 2024



Cuba es hoy un modelo a seguir en materia de nuevas legislaciones, sobre todo en lo que respecta al derecho familiar y al desarrollo pleno de los niños, adolescentes y jóvenes. Así lo catalogó, en entrevista con Juventud Rebelde, la argentina Alejandra Trossero, representante del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en la Mayor de las Antillas.


Al decir de la destacada sicóloga de profesión, con más de 20 años de experiencia en promoción de derechos de la niñez y desarrollo en adolescentes, pese a los tantos obstáculos que atraviesa la isla caribeña atesora logros significativos en varios de los Objetivos de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible.


El Estado cubano, como signatario de la Convención sobre los Derechos del Niño desde 1991, siempre ha mostrado una fuerte voluntad política para garantizar el presente, futuro y el bienestar de los niños, niñas y adolescentes, especialmente —precisó Trossero— en el ámbito de la cobertura educativa y la atención a la salud materno-infantil. Además, prioriza el avance integral de la primera infancia con programas de educación y salud como el de Atención Materno-Infantil, Educa a tu Hijo y la atención en los círculos infantiles.


Destacó que otro punto ponderable desde la perspectiva de Unicef es la atención las personas con discapacidad. La política social del país resulta muy avanzada en este aspecto, pues va dirigida a elevarles la calidad de vida y hacia la igualdad de oportunidades. «Aquí un joven con discapacidad tiene garantizado derechos, y su limitante física en realidad no lo es para estudiar y crecer profesionalmente», comenta.


Pese a las complejas transformaciones que lleva a cabo el país, la representante aseveró que en todo momento sigue existiendo un compromiso explícito del Gobierno y sus instituciones de mantener los logros alcanzados en la protección de las infancias y adolescencias. Expresión de ello fue la aprobación en julio de 2023 de una nueva Política integral de niñez, adolescencias y juventudes, junto con su Plan de Acción 2023-2030.


En la línea correcta


La Constitución aprobada en el año 2019 ya introdujo aspectos relevantes en la protección de la niñez que están recogidos, incluso, en la Convención de los Derechos del Niño. Por eso, a juicio de Trossero existen principios muy importantes en la Carta Magna cubana, como considerar al niño un sujeto de derechos, al igual que una persona adulta. Lo único que los distingue —dice— es que el infante necesita de un sistema de protección específico para poder desarrollarse y crecer, y que los gobiernos tienen buena parte de la responsabilidad de garantizar ese desarrollo.


Y es lo que está realizando Cuba actualmente, agrega. Primero llevando a ley las voluntades colectivas con extraordinaria seriedad y sentido del deber como Estado, y luego, de forma progresiva, poniéndolas en práctica.


En ese marco, reconoce la Política integral de niñez, adolescencias y juventudes en la línea correcta, porque no solo hacen falta normas y leyes, sino que las naciones también deben llevarlas a estrategias y políticas específicas para implementarlas de la mejor manera posible.


Asegura Trossero que esta nueva Política se traza entre sus objetivos articular el cuerpo de estrategias que luego permita hacer cumplir, poco a poco, todo lo que está escrito en la nueva Constitución y en el Código de las Familias.


Sobre este último en particular, señala que tuvo la suerte de acompañar desde muy cerca la construcción del proyecto del Código de las Familias casi recién llegada al país y ello le permitió aprender a fondo del contexto nacional. Sin duda, esa norma jurídica constituye un referente no solo a nivel regional, sino también para el mundo, valora.


Cuba ha hecho un proceso muy interesante desde la consulta con las bases populares; pero, además, llamó a los mejores expertos para apoyar la definición de un Código de las Familias que tiene en el centro de sus prioridades el desarrollo pleno de los infantes, adolescentes y jóvenes, dice.


El apoyo será invariable


Para nuestro país el apoyo del Sistema de Naciones Unidas, del cual forma parte Unicef como una de sus agencias de trabajo, ha sido importante y, en algunos casos, resalta con mucha relevancia. El acompañamiento no solo va dirigido al asesoramiento legislativo en beneficio de la infancia desde cero a 18 años, sino que toca otros puntos de la vida cotidiana.


Durante el pasado año, por ejemplo, se fortalecieron con la ayuda de Unicef los servicios de neonatología en 19 centros especializados de todo el país, y fue posible obtener a través del mecanismo varias incubadoras, mantas térmicas e insumos indispensables.


Según explica Trossero, es conocida la gran capacidad de producción de vacunas del Archipiélago, admirada por todo el mundo, pero hay una en particular que los niños menores de un año requieren y que no se puede producir en el país. Desde Unicef, agrega, existe el compromiso todos los años de traer esa vacuna para proteger a los niños contra la rubéola, la parotiditis y el sarampión.


Nada de ello fuera posible sin un trabajo sólido interagencial del Sistema de Naciones Unidas en Cuba y las instituciones del Estado, las cuales Alejandra cataloga como relaciones de hermandad. «Hasta ahora estamos muy satisfechos con la labor realizada porque no se trata solo de Unicef, es un trabajo conjunto que parte de las instituciones cubanas», significó.


De nuestra parte, obviamente, nos gustaría hacer muchísimo más —comenta—, pues sabemos la situación difícil que atraviesa el país y las dificultades que vive, sobre todo en la adquisición de insumos y de equipamiento debido al bloqueo impuesto por Estados Unidos. «De ahí que a veces sintamos una gran frustración de no poder abarcar mayores cosas. Pero siempre intentamos hacer todo lo que está al alcance de Unicef, ya sea movilizando recursos para poder apoyar al país en esos esfuerzos».


Una de las preocupaciones que tenemos hoy —asegura— es la falta de medicamentos pediátricos. Y la urgencia va encaminada a buscar más financiamiento para poder traer los insumos que son esenciales en el caso de los niños.


Sin embargo, movilizar recursos para nuestro país resulta extremadamente complicado, incluso a través del Sistema de Naciones Unidas. Y es que, a diferencia de otros países, Cuba tiene un grupo reducido de donantes justamente por los problemas que conocemos con las sanciones y el bloqueo estadounidense, opina Trossero.


La dificultad está dada a la hora de articular esas donaciones hacia Cuba, por lo que, respecto a las demás naciones, está en situación de desventaja en relación con el financiamiento para el desarrollo. «Existe una limitante muy grande para conseguir fondos específicos hacia Cuba», aseveró.


Pese a todas las dificultades objetivas y muy reales que debe enfrentar nuestro país cotidianamente, nada congratula más a esta mujer argentina que el hecho de llegar a una institución de salud cubana y entregar algún tipo de insumos. «Satisface cuando el personal de primera línea, por ejemplo, sabe que puede contar con los medicamentos para la atención a un niño, niña o adolescente», precisa.


Si bien los avances han sido enormes, aún queda camino por recorrer para asegurar el pleno bienestar de cada infante. La pandemia de la Covid-19, que paralizó al mundo y al país durante dos años, dejó una marca de la cual nos cuesta recuperarnos. Para la mayoría de los niños —reconoce Trossero— esa etapa marcó el comienzo de la vida escolar de manera virtual, las relaciones a distancia, la falta de oportunidades de socialización y la pérdida de familiares cercanos.

De ahí que el trabajo dentro de la Isla —dice— también ha estado enfocado en los últimos tiempos, luego de la pandemia y con la crisis multifactorial, a la recuperación de los servicios esenciales y el apoyo sicoemocional a los niños, niñas, adolescentes y sus familias.