Reflexiones de la infancia camino a la nueva normalidad.

Para compartir lo que ha supuesto la cuarentena, el post-confinamiento y la desescalada, 
y en la que han hablado de temas elegidos previamente por los propios participantes.




Participantes en la asamblea online
Algunos de los participantes en la asamblea online

En el lento camino hacia la normalidad tras la crisis sanitaria del COVID-19 surgen miles de dudas e incertidumbres, y para hablar de todas ellas se le ha dado voz, generalmente, a los adultos. Pero, ¿cómo lo han vivido y lo viven la infancia y adolescencia? ¿De qué forma han enfrentado temas que afectan especialmente a los más jóvenes, como el educativo, y cómo prevén que será la desescalada y el verano?
Para hablar de estos y otros temas se ha celebrado una asamblea online el 18 de junio, moderada por miembros del grupo asesor de UNICEF y a la que se conectaron, a través de la plataforma Zoom, 195 chicos y chicas hasta los 18 años de diferentes grupos de participación infantil y adolescente: “Hemos decidido que en esta sesión no participaran adultos para estar más cómodos”, explica Rober, uno de los encargados de introducir los bloques temáticos, de temas elegidos previamente por los propios chicos y chicas.

Un verano marcado por la pandemia

A las puertas del verano, todos se muestran de acuerdo en que esta etapa va a estar marcada por la sombra de la pandemia, por el inevitable uso de mascarillas y por las normas de la distancia de seguridad y aforo en piscinas, playas y otros lugares. Los niños y niñas participantes en la asamblea tienen asumido que para disfrutar del tiempo libre de verano de manera responsable tendrán que seguir cumpliendo las medidas de seguridad a rajatabla, y que muchas actividades del periodo estival, como los campamentos, peligran. “Yo lo veo chungo”, confiesa Eva, una de las chicas participantes en la asamblea. “Todas las actividades que yo tenía programadas no van a poder ser”. Dependiendo de la comunidad autónoma y la zona o el tipo de municipio en el que viven, cuentan con distintas opciones de ocio; la cuestión es si en contexto de pandemia podrán realizarse de forma segura. “Muchos espacios en los que hacíamos actividades no están preparados”, opina Alba. “Los campamentos urbanos de verano no los han podido hacer y eran espacios que los niños y niñas necesitaban, eran espacios de evasión. Yo veo mi ocio limitado”.
Sin embargo, a pesar de las dificultades, los niños y niñas no quieren renunciar a sus actividades de verano, tan necesarias después de los meses de cuarentena sin salir de casa y pegados a las pantallas. Los profesionales que trabajan con la infancia, ayuntamientos y entidades tienen la tarea de crear entornos seguros para la infancia a fin de garantizar tanto su protección como el ejercicio de su derecho al juego y al tiempo libre. Algunos chicos y chicas se muestran optimistas: “Sigue habiendo tiempo para hacer muchas cosas”, sugiere Pablo. “Haber pasado por el confinamiento nos ha hecho descubrir muchos hobbies que podemos aplicar al verano”. Una de las participantes, de Madrid, reconoce que a va a ser difícil quedar y mantener la distancia de seguridad: “Ahora en vez de quedar para ir al cine o un centro comercial, vamos a un parque, así podemos mantener la distancia de seguridad y juntarnos igual”. Rosa, de Almería, señala que si durante el confinamiento han sido capaces de entretenerse, lo conseguirán ahora.

La experiencia de las clases online y la incertidumbre de septiembre

En cuanto a los meses de escuela desde casa durante la cuarentena, nadie mejor que los niños, niñas y adolescentes para hacer una evaluación. ¿Cómo han visto la transformación digital de la educación? Alba, por ejemplo, reconoce que llevó mal el cambio de las clases presenciales a las digitales a través de la plataforma educativa online: “En clase a mí me gusta consultar dudas, no sabía si lo estaba haciendo bien o mal, los profesores se habían desconectado”, explica.  Muchos, como Rosa, aseguran haber reflexionado sobre lo importante que es la presencialidad a la hora del aprendizaje: “Que haya un profesor dispuesto a ayudarte, la diferencia se nota”. Algunos creen que se ha mandado excesiva tarea durante estos meses: “Los trabajos han sido un poco abusivos”, opina Iker. “Al no tener clase entiendo que hay que intentar meter los contenidos de otra manera, pero creo que había formas de hacerlo en menos tiempo, con mayor efectividad y sin necesidad de escribir tanto”.
Otros chicos y chicas han tenido otros problemas, como dolores de espalda o problemas en la vista debido al uso excesivo de pantallas. También se muestran empáticos con los alumnos y alumnas que no contaban con ordenador o una buena conexión a internet, y en algunos casos han visto sus estudios afectados por problemas derivados del confinamiento, como estrés, ansiedad o depresión: “A mí me podían haber descalificado por dejadez, pero yo estaba super triste”, ha compartido Alba. “Que me dijeran ‘esfuérzate, trabaja’ no me sirvió, por mucho que lo intentase no bastaba”.
Pasada ya la incertidumbre de las clases online y de cómo iban a ser evaluados en este curso atípico, ahora se presenta otra preocupación: la vuelta a clase en septiembre. Los chicos y chicas asimilan que se producirá en un contexto de fuertes medidas de seguridad y cumplimiento del aforo, lo que plantea las dudas de si se impartirán las clases por turnos o se intercalarán clases online con las presenciales. Creen que la vuelta va a ser complicada, que los profesores van a tener que adaptarse, y algunos lamentan que habrá que reforzar los contenidos que se han dado durante la cuarentena: “El año que viene van a tener que volver a dar todo el temario, de la manera que nos han enseñado casi nadie ha aprendido casi nada, va a ser muy difícil”, dice Alejandra. Eva es más optimista: “Habrá que tener medidas de seguridad, pero la situación habrá mejorado”.

El derecho a participar y opinar durante la cuarentena y después

En la asamblea se han abordado otros temas de actualidad, como el ecologismo, la discriminación o las movilizaciones antirracistas que se han extendido al resto del mundo, y algunos niños han aprovechado el encuentro online para compartir experiencias de discriminación vividas por ellos mismos. “Yo sí he sufrido alguna agresión racista por mi color de piel”, cuenta Sandra, que ha señalado la importancia de controlar las redes sociales y de educar desde casa. Si en algo han estado de acuerdo todos y todas ha sido en la importancia de la empatía a la hora de abordar estos problemas.

Por último, niños y niñas muestran deseos de que se garantice su derecho a la participación. Durante el encuentro online, miembros de diferentes consejos de participación infantil y adolescente de todo el territorio español han compartido los proyectos y actividades que han seguido llevando a cabo durante la cuarentena gracias a las reuniones telemáticas, así como sus ganas de darles continuidad en la desescalada. Manuel ha contado que su consejo, de un pequeño pueblo de Toledo, se había formado poco antes de la entrada del estado de alarma, pero entre todos consiguieron continuar con el contacto durante la cuarentena. “En mi ciudad el consejo es una manera de dar la palabra a los niños”, explica Paula, del consejo de Palencia. “Antes al no haber el consejo no se sabían nuestras opiniones. Ahora hacemos un pleno al año con el alcalde. Creo que en mi ciudad se han ganado muchos derechos de la infancia gracias a este pleno”.

Todos y todas asumen que se tardará mucho en volver a la normalidad, puede que años. Que la pandemia va a marcar un antes y un después y que habrá otros aspectos aparte del sanitario, como la crisis económica. Hay quien es más positivo: “Tomando las medidas pertinentes ya estamos casi a la mitad, con un pie dentro de la normalidad”, dice Alejandro. Pero si algo queda claro es que todos tienen muchas ganas de volver a sus rutinas, sus escuelas, sus lugares de ocio y sus espacios de encuentro y participación, aunque tenga que ser con mascarilla.

Los años oscuros, Urte ilunak, película.


Dirección: Arantxa Lazcano
Reparto: Amaia Basurto, Carlos Panera, Eider Amilibia, Garazi Elorza, Klara Badiola, Txema Blasco
Título en V.O: Urte ilunak
Año: 1993 Duración: 92 Género: Drama Color o en B/N: Color 

Guión: Arantxa Lazcano 
Fotografía: Flavio Martínez Labiano 
Música: Iñaki Salvador
Producción: José María Lara P.C. y Euskal Media

Los años oscuros, película producida por José María Lara y Euskal Media en 1993, es una película rodada en euskera y castellano protagonizada por una niña víctima del asfixiante ambiente represivo del País Vasco posterior a la guerra civil española. 
La ausencia de maniqueísmo del film es uno de sus grandes alicientes. Y es que no es sólo la imposición de la ideología nacional-católica la causante de una infancia y adolescencia llena de amargura. 
En su propio entorno familiar la niña encuentra imposición y falta de afecto. Su padre es un nacionalista vasco que no encuentra coraje para luchar contra el fascismo impuesto por la dictadura de Franco y descarga toda su frustración sobre su hija sometiéndola a un régimen absurdo de castigos desproporcionados e injustos. 
La única vía de escape a esta ausencia de cariño familiar y a la intolerante educación impuesta por el bando vencedor se encuentra en su amistad con otra niña. Ambas se refugian en el monte, a la sombra de un árbol, en medio de una naturaleza exaltada que se contrapone al hábitat urbano regido por la intransigencia militar del gobierno de Franco. Urte ilunak es una película plena de sensibilidad y emoción. 

Puede fallar a lo mejor en aspectos de construcción narrativa pero su descripción de esa podredumbre que invade los ambientes habitados por la autoridad militar y el oscurantismo religioso es de una lucidez incontestable. 

Sin embargo, a pesar de los logros del film, el público dio la espalda a esta interesante producción vasca que obtuvo el Premio al Mejor Guión en el Festival Internacional de Pontevedra (1993), el Premio al Mejor Guión en la III edición de los premios al Cine Vasco de "El Mundo" (1994) y el Premio a la Mejor Película en el Foro Nuevos Realizadores de Murcia (1994).

Fuente ROLDÁN LARRETA, Carlos (2008)

La discriminación por razón de edad desde el enfoque de los Derechos Humanos del Niño: ¿una asignatura pendiente en la formación para el Trabajo Social?.

Los profesionales de trabajo social deben reconocer a niños y niñas 
como sujetos de derechos.

Eva Carrasco-Hierro, Iván Rodríguez-Pascual,
Vol. 10, nº 18, enero-junio 2020. 

Resumen(*)

Los profesionales de trabajo social deben reconocer a niños y niñas como sujetos de derechos. En esta investigación, nos centramos en la percepción por parte del estudiantado del Grado en Trabajo Social de la Universidad de Huelva de la discriminación contra niñas y niños. Nos basamos en los cuatro tipos de discriminación por razón de edad propuestos por Manfred Liebel (por conducta no deseada; por protección; por restricción de acceso a servicios y también la discriminación intergeneracional) con el objetivo de conocer en qué grado los y las estudiantes de Trabajo Social reconocen diferentes manifestaciones de la discriminación hacia niños y niñas tanto como los derechos de la población infantil. Los resultados muestran un bajo conocimiento de la Convención de Derechos del Niño (CDN) así como una baja sensibilidad hacia algunas de las formas de la discriminación ejercida contra la población infantil, datos que solo tienden a mejorar significativamente en el tercer curso y que aconsejan mejorar la cantidad y la calidad de formación obligatoria en materia de enfoque de derechos del niño en la formación universitaria de las y los Trabajadoras/es Sociales.

Accede al texto completo.

(*) El presente artículo está basado en el Trabajo Fin de Máster, del Programa Oficial “Máster Universitario en Investigación e Intervención en Trabajo Social” de la Universidad de Huelva (España), realizado por Eva Carrasco Hierro y dirigido por Iván Rodríguez Pascual durante el curso académico 2018-2019.

Licencia de Creative Commons
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional

Ágora, programa de democracia participativa destinado a chicas y chicos.


para el desarrollo del Pacto de Estado contra la Violencia de Género.

En diciembre del 2017, los distintos Grupos Parlamentarios, las Comunidades Autónomas y las Entidades Locales representadas en la Federación Española de Municipios y Provincias, ratificaron el Pacto de Estado contra la Violencia de Género.

Este Pacto de Estado supone la unión de un gran número de instituciones, organizaciones y personas expertas en la formulación de medidas para la erradicación de la violencia sobre las mujeres. Esta alianza implica incidir en todos los ámbitos de la sociedad y se estructura en 11 ejes de trabajo. Este compromiso además regula el destino de una parte de los fondos para el desarrollo de nuevas o ampliadas competencias reservadas a las Entidades Locales en el Pacto de Estado contra la Violencia de Género. Esto supone por una lado, la recuperación de las competencias sobre violencia de género por los Ayuntamientos y, por otra, la regulación de la distribución de los fondos destinados al cumplimiento del Pacto de Estado en materia de violencia de género asignados a los Ayuntamientos.

Ágora infantil por la igualdad

En el marco de esas iniciativas, Ágora Infantil, desarrolla una metodología específica para fomentar la igualdad entre escolares , tomando como especial referencia procesos infantojuveniles ensayados con el apoyo del Ayuntamiento y la Diputación de Córdoba.

El programa Ágora infantil, diseñado e implementado por Coglobal desde 2014 se ha desarrollado ya en 65 municipios de España y Uruguay, con grupos de realidades y características muy distintas que nutren y enriquecen el proceso a través de la visión de los más pequeños.

En esta ocasión la iniciativa persigue entre otros objetivos que los chicos y chicas reflexionen sobre las causas estructurales que conducen a la desigualdad de género, a la vez que indagan sobre los recursos y acciones que se impulsan desde la administración local en materia de género. Se va a desarrollar en el municipio sevillano de Los Palacios y Villafranca y en ocho municipios de la comarca malagueña de Costa del Sol Oriental – Axarquía.


“Dejad a los niños en paz”: Planeando un verano con hijos.

 Los especialistas coinciden en que los niños, niñas.... necesitan naturaleza y juego al aire libre,
para una mejor vuelta a las aulas y para todo..

Con esta primera entrega, EL PAÍS comienza una serie de reportajes 
en los que pedagogos, psicólogos y educadores darán orientaciones 
para aprovechar y disfrutar las vacaciones.
Beatriz Lucas,
RECUPERAR LA INFANCIA EN EL VERANO DE LA COVID | 1,

Niños de la escuela bosque Nenea, en Lugo
Niños de la escuela bosque Nenea, en Lugo
“¿Conoces algún fontanero que de vacaciones se lleve la llave inglesa?¿O un médico que se lleve a la playa el fonendoscopio?¿Por qué entonces nos empeñamos en que los niños en vacaciones hagan tareas regladas? Dejad en paz a los niños, necesitan recuperar su infancia y que los mayores se relajen”. La que habla es la voz de la experiencia: Valle Curiel, 69 años. Y 41, a pie de aula. Esta maestra zaragozana jubilada y abuela de cuatro nietos que ha tenido que pasar confinada con algunos de ellos los últimos meses cree que el nivel de hartazgo de las familias y los estudiantes ha llegado a su límite. “Sería preferente adelantar la vuelta y repasar antes que amargarles el verano, es contraproducente. Ahora necesitan mucho aire libre y mucho jugar, correr y saltar y hacer barrabasadas con otros niños”, concluye Curiel.
Cuando a Guille, de ocho años, le preguntas por su plan ideal de vacaciones no necesita pensar: “A Galicia, al campo y a la playa, con la prima. Allí haremos lo de siempre, mantis, saltamontes... Vamos... jugar”. Y si le preguntas por sus padres: “Pues que vengan para hacernos la comida y por si alguien viene para secuestrarnos”. Un buen salvaje, pero con escudo protector.
Y si esto lo dicta el instinto y el criterio de los niños, la ciencia lo avala con creces. El director de la cátedra de Neuroeducación de la Universidad de Barcelona, David Bueno, explica que encomendarles tareas en vacaciones puede tener, incluso, el efecto contrario al que se busca. Irónicamente, recomienda que para mejorar el rendimiento académico, se dejen de hacer cosas académicas. “El cerebro tiene sus propios ritmos estacionales y busca la desconexión y la diversión en verano. Está programado para desconectar en el verano porque así se lo hemos enseñado. Si alteramos este ritmo, podemos perjudicar la vuelta al cole porque no habrá desconectado. Es lo mismo que los adultos: sin descanso, sin vacaciones, el rendimiento baja mucho y nos arriesgamos a tener alumnos con episodios de depresión, y así no estamos en buenas condiciones de reanudar las clases”, explica Bueno.

1. Naturaleza y aire libre

Pero ¿qué necesita en verano un estudiante que ha pasado 104 días atrapado, lejos de sus amigos y alejado de su escuela para recuperar la infancia robada?
Bueno apunta que es prioritario acercarse a la naturaleza. “Nuestro cerebro no está adaptado para estar encerrado tanto tiempo, y eso puede perjudicar a la plasticidad neuronal que establece conexiones neuronales y es indispensable para el aprendizaje. Las investigaciones han demostrado que el contacto con la naturaleza activa estos procesos. Por ejemplo, los niños que atraviesan zonas arboladas para ir al colegio aprenden mejor y tienen mejor recepción de los conocimientos que los que solo atraviesan bloques de casas. También la naturaleza se relaciona con el optimismo, hasta tal punto que en los hospitales que se ven árboles por la ventana se reducen los días de ingreso”, explica este especialista sobre el aprendizaje del cerebro. “Después de una primavera tan dura el optimismo, el aire libre, tener vistas amplias, montaña, mar, paisajes naturales son fundamentales para que la vuelta sea más saludable y puedan aprender mejor”, apunta el experto de la Universidad de Barcelona.
La naturaleza es también una garantía de felicidad o, al menos, de recuerdos felices. Cuando a un adulto le preguntan por sus mejores recuerdos de infancia, en un 90% de los casos está presente la naturaleza, la autonomía y el grupo de amigos. Eso es lo que lleva escuchando 15 años la pedagoga de la naturaleza Heike Freire en sus talleres. “Recuerdan la naturaleza porque en ella han vivido experiencias fuertes, desafíos que te plantea a veces enfrentarte a la naturaleza. Cuando te ibas con la bici y la pandilla del pueblo a la montaña, siempre pasaba algo: uno se caía, otro se perdía, otro encontraba un animal herido... Y esas dificultades en las que tienes que desenvolverte con los recursos a tu alrededor te sirven para construir tu identidad y marcan la vida de adultos. Han vivido aventuras, dificultades que han superado y les han llevado a desarrollar capacidades ante la adversidad”, explica la pedagoga.

Varios niños juegan libremente en la naturaleza en La Violeta, en Galapagar.
Varios niños juegan libremente en la naturaleza en La Violeta,
en Galapagar.Gema Cotallo
Elisa Hernández de Pablo, responsable de Medio Ambiente de La Casa Encendida de Madrid, explica este año que ha optado, en lugar de hacer talleres en el centro cultural, por llevar a los chavales a la naturaleza, de manera casi terapéutica, en un campamento con cinco salidas en las que cada día vuelven a casa a dormir. Está pensado para 20 chavales de 13 a 17 años y tomarán todas las precauciones necesarias para garantizar su seguridad. “Tras meses conectados a un mundo virtual, este verano toca observar los ritmos naturales, oxigenar el cuerpo e inspirarnos en la belleza que surge espontáneamente. No podíamos imaginar un verano sin un momento de desconexión, de conocer a amigos y amigas nuevas, un espacio para sentirse libres y creativas”, explica. Un plan en el que ofrecerán un desarrollo personal a través del contacto y aprendizaje en el medio natural, participar de actividades de voluntariado ambiental o descubrir entornos cercanos a la ciudad donde explorar montañas, ríos y bosques para sacar al buen salvaje que todos los chavales llevan dentro.

2. Libertad y jugar hasta aburrirse

Zöe Readhead es la directora de la escuela libre Summerhill, un proyecto educativo centenario en el que los niños con procesos participativos son quienes deciden qué estudian, cómo lo estudian y lo que ocurre en su escuela. Y que se autodenomina la “democracia infantil más antigua del mundo”. Y ella tiene claro que lo que ahora necesitan los estudiantes es libertad para recuperar su infancia. “Han sufrido mucho y han vivido sometidos a millones de normas y ahora necesitan recuperar su esencia y hacer lo que les apetezca, jugar, correr, dormir, comer chocolate, y los adultos debemos dejarles en paz, evitar estresarles con mil actividades. Debemos darles la libertad, la confianza y la autonomía que les hemos arrebatado”, asegura por teléfono Readhead, desde Summerhill, donde permanecen confinados 14 adultos y un estudiante asiático que no pudo volver a su casa por culpa del cierre de fronteras.
El juego es también clave en este proceso: “Es la manera que tienen los niños de aprender para hacerse adultos y, si les robamos eso y no se lo devolvemos, sufrirán un bloqueo emocional en su vida adulta”, asegura Readhead. Lo respalda el neuroeducador David Bueno: “El juego libre y el aburrimiento estimulan la creatividad, obligan a tomar muchas decisiones”. Y con ellas y cometiendo equivocaciones es como aprende y se ejercita el cerebro.
“Como padres, lo mejor sería abrir la puerta y que salgan fuera a jugar y se busquen la vida”, señala el experto. Y ante el clásico y constante “me aburro, ¿qué hago ahora?”, habría que preguntarles qué quieren hacer, añade, y solo si la insistencia es insoportable, darles varias opciones. “Si un niño no sabe qué hacer con su tiempo, de ninguna forma deberíamos pensar qué hemos hecho para limitarle tanto que no sea capaz de tomar decisiones de su propio tiempo y espacio libre”, concluye Bueno.
La especialista en crianza respetuosa y educación en la naturaleza Gema Cotallo cree que tras este proceso necesitamos retomar la naturaleza. “Estamos demasiado esquematizados y metidos en estructuras con contenido programado y el ser humano necesita más autonomía, más libertad, más juego espontáneo como motor de aprendizaje y también los límites que los iguales les aportan”, asegura.

3. En familia y con otros niños

La pedagoga Heike Freire añade otro ingrediente para la misión de recuperación de la infancia: “Buenos compañeros de juego de edades diversas que tengan que cuidarse entre ellos”. Ese es precisamente uno de los aspectos que han cuidado desde la asociación Ylatierra en su propuesta de campamentos urbanos en la naturaleza de La Casa Encendida, como explica Emi Bueno, educador medioambiental: “Socializan con el telón de fondo de la naturaleza y desconectan de las tecnologías. Las actividades y dinámicas los conectan emocionalmente con el entorno con los cinco sentidos: escucha de sonidos, textura de las plantas, canto de las aves, y dialogamos sobre ello”.
Además del grupo, la familia puede ser una aliado en este proceso con tiempo de calidad y con cuidados respetuosos: “Los niños necesitan adultos que estén pendientes, pero les dejen autonomía y libertad para vivir aventuras”, explica Heike Freire. ¿Y dónde ponemos el límite sin fiscalizar? “Cada padre debe medir el hueco que necesitar dejarle a su hijo para que pueda crecer”, asegura la pedagoga. Además, vivirlo en familia tiene un valor añadido. Los padres en el entorno natural suelen estar más relajados, lo que resulta un aliciente para los hijos. “Descubren otro tipo de padres, dejan de ser el que te mete prisa y da órdenes todo el rato, el que riñe. En verano, en el campo, las madres y padres están genial y redescubren a la persona que es realmente su padre al que ves y disfrutas desde otro lugar”, explica la especialista en pedagogía verde.
El neuroeducador David Bueno habla también de lo importante que es que los padres se diviertan. “Somos su referente y nos imitan. Si nos pasamos el día tirados en el sofá con el móvil, harán lo mismo. Deben vernos disfrutar, divertirnos, reírnos, con ellos o sin ellos y que nos impliquemos en su diversión en momentos puntuales, que compartamos con ellos”, señala Bueno. Pero para ello hay que hacer un ejercicio para cambiar la mirada. “Muchas veces, los padres y las madres, cuando observan a sus hijos, los juzgan, buscan el problema más que la virtud. Pero debemos cambiar el punto de vista, maravillarnos, porque los niños son una maravilla de la naturaleza, hay que observarles como una flor preciosa, dejando que nos sorprendan, son extraordinarios y debemos saborear eso, disfrutarlo”, concluye Freire.

4. ¿Y si....?

El especialista de la Universidad de Barcelona explica que en caso de que se quiera reforzar algún contenido, debe ser de forma lúdica, amena, divertida y sin que el cerebro sea consciente de que está trabajando para el colegio. “Nunca actividades obligatorias ni regladas. Por ejemplo, lo ideal son planes en familia, con amigos, bajo un árbol y en los que haya que resolver acertijos, juegos de mesa en familia, leer historias juntos, o un concurso de cocina en la familia, por ejemplo”, dice Bueno.
Montserrat Poyatos es profesora en Madrid y ha tratado de aplicar la máxima de que con las actividades propuestas aprendan sin darse cuenta. Tiene claro que sus alumnos necesitan descansar. “Necesitan actividad física, desarrollo emocional... Imagínate que nos vuelven a confinar en octubre y los hemos tenido en verano haciendo cuentas, sería para matarnos”, dice esta profesora de un colegio público. Pero también es consciente de que algunos alumnos necesitan, al menos, coger un lápiz para evitar que la desconexión sea tal que se les haga demasiado cuesta arriba el regreso. Por eso las recomendaciones que les ha dado es que piensen en lo que les gusta y, cuando les apetezca, traten de disfrutarlo e investigarlo con revistas o libros en la biblioteca. “Que hagan lo que les pida el cuerpo, y que, si quieren, les escriban una carta o postal a los amigos, o les propongo que hagan un diario de su verano, pegando hojas, flores, tiques, dibujando lo que les apetezca para compartirlo en septiembre con el resto”, concluye.
Cuando a Lucas, de nueve años, le preguntan qué quiere hacer con su verano, lo piensa, lo mastica y lo escupe: “Jugar en el bosque, con amigos, y animales salvajes”. ¿Y sus padres? “Que nos dejen en paz y vengan a buscarnos a la semana”.

Parentalidad positiva y detección de riesgo y desprotección.... Webinar, Escuela Verano, OIA.

Webinar organizado por la D. Gral. de Infancia 
con la colaboración del Observatorio de la Infancia 
en Andalucía.
Día 14 de julio a las 17:ooh

La Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación apoya cada periodo estival a las entidades del Tercer Sector para la celebración de las escuelas de verano, como una de las medidas que se desarrollan en la lucha contra la pobreza infantil. En estas escuelas se acoge de forma especial a niños, niñas y adolescentes (NNA) que viven en zonas desfavorecidas o se encuentran en situaciones de riesgo o exclusión social.

La Convención sobre los Derechos de la Infancia reconoce el derecho al descanso, al juego y a las actividades recreativas propias de su edad, por lo que, en estos espacios, además de garantizar que cada niño/a tenga la alimentación adecuada, se llevan a cabo acciones complementarias de carácter socioeducativo que favorecen su inclusión social.  A través de ellas, los niños y niñas reciben un refuerzo de los contenidos curriculares- de ocio y tiempo libre-, valores, hábitos saludables relativos a la alimentación e higiene, talleres deportivos, de reciclaje, de manualidades, de teatro, de playa, piscina, etc.  actividades que desarrollan la imaginación y creatividad.

Las escuelas de verano como espacios de esparcimiento y aprendizaje ofrecen una oportunidad ideal para que las personas encargadas del cuidado de los NNA lo hagan desde un enfoque de derechos y aplicando una parentalidad positiva.

También, el equipo profesional de las escuelas, debe ejercer la responsabilidad de la detección de situaciones de riesgo que puedan afectar a la salud física y emocional de la infancia, informando en caso de que sea necesario hacerlo.
En este seminario nos acercaremos a estas dos últimas cuestiones.

OBJETIVOS
-          Sensibilizar sobre el buen trato a la infancia desde un enfoque de derechos y la promoción de la parentalidad positiva.
-          Informar sobre el procedimiento de actuación ante situaciones de riesgo y desamparo establecidos en el Decreto 210/2018, de 20 de noviembre.
-          Dar a conocer el funcionamiento de la Aplicación SIMIA.

CONTENIDOS
1.      La protección a la infancia desde el enfoque de derechos y el ejercicio positivo de la parentalidad.
2.      Detección de situaciones de riesgo y desamparo: cumplimentación de la hoja de notificación de posibles situaciones de riesgo y desamparo de la infancia y adolescencia.
3.      Funcionamiento de la "APLICACIÓN SIMIA".

DIRIGIDO A
-          Personal de las escuelas de verano en Andalucía.
-          Profesionales de la atención a la infancia y adolescencia.

METODOLOGÍA, FECHA Y LUGAR DE REALIZACIÓN
- Seminario virtual en el canal de YouTube del Observatorio de la Infancia en Andalucía 
el día 14 de julio de 2020 de 17:00 a 19:00.
https://www.youtube.com/user/observatorioinfancia/videos

SECRETARÍA E INSCRIPCIÓN
Es una actividad formativa gratuita financiada por la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación. 
Si desea inscribirse puede hacerlo desde aquí

Secretaría:
Helga Martín. Observatorio de la Infancia de Andalucía. Tlf: 600 14 09 52. observatorioinfancia.easp@juntadeandalucia.es


Tendencias de Investigación en Intervención Social...


Orgambídez Ramos, Alejandro . Editor,
Borrego Alés, Yolanda . Editor,
Vázquez Aguado, Octavio. Editor,


Acceso al índice de esta publicación, en la que merece una atención especial el 7º apartado: 

"INFANCIA, INVESTIGACIÓN E INTERVENCIÓN SOCIAL: HORIZONTES METODOLÓGICOS EN DIÁLOGO / Iván Rodríguez Pascual. Marta Martínez Muñoz."

Este libro pretende ser una herramienta de trabajo para todos los investigadores y profesionales interesados por la investigación en el ámbito de la intervención social.
Ofrece un conjunto de textos que permiten conocer las tendencias actuales de investigación social, tener información sobre los métodos y las técnicas que se están utilizando, las estrategias de análisis de la información, los resultados obtenidos…sobre áreas que resultan de gran interés para investigadores, profesionales, estudiantes y responsables de instituciones públicas y privadas de intervención social.
Tener acceso a los resultados más relevantes de estas investigaciones, será de gran ayuda para mejorar el conocimiento de la realidad y abrirá también posibles nuevas líneas de investigación en las que profundizar.
El desafío es doble: la intervención social debe basarse en el conocimiento, pero también la investigación debe convertir en objeto de conocimiento las prácticas de intervención. Quelas decisiones que tomen los profesionales, así como las agencias de intervención respondan al mejor conocimiento disponible en cada momento. Y, al mismo tiempo, que la sociedad conozca, y aprecie, los logros de la intervención social puestos en valor por la investigación.

A todo ello quiere contribuir el presente volumen.


IVº Plan de Acción contra la ESIA en España para el Cuatrienio 2021-2024.

 Fuente: FAPMI-ECPAT España  

El IV Plan de Acción contra la ESIA de FAPMI-ECPAT España se presenta como una propuesta integradora que aborda de forma complementaria y transversal todas las facetas de la problemática de la ESIA, situando a la infancia y la adolescencia en el centro de todas sus actuaciones.  Contribuye  a la construcción de un marco integral y holístico para la prevención y atención a una problemática que afecta a decenas de niñas, niños y adolescentes en nuestro país.
.- IV Plan de Acción contra la Explotación Sexual Infantil y Adolescente en España (2021-2024). Resumen ejecutivo.

.- IV Plan de Acción contra la Explotación Sexual Infantil y Adolescente en España (2021-2024). Informe completo.
Alejandra Pascual Franch y Selma Fernández Vergara / FAPMI-ECPAT España (17/06/2020)
FAPMI-ECPAT España.

  - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 
Una campaña para la prevención de la violencia sexual online 
contra niñas, niños y adolescentes.

 Los datos recientes a nivel internacional y nacional han alertado de un aumento significativo de los casos relativos a la explotación sexual online de la infancia y la adolescencia. De hecho, desde que Internet empezó a globalizarse, se ha venido alertando de las facilidades que ofrecen las tecnologías interactivas para acceder a niñas, niños y adolescentes, así como para producir y distribuir material e imágenes de abuso sexual infantil. Pero lo anterior se ha visto exacerbado en el contexto de la pandemia de la COVID-19 debido a la situación de confinamiento, por un lado, por el aumento en el uso de medios digitales por parte de niñas, niños y adolescentes, el mayor consumo de este tipo de materiales por parte de las personas agresoras debido al mayor tiempo pasado en casa y por otro, por la adaptación de los delincuentes sexuales a estas nuevas circunstancias.

Por otro lado, ya veníamos de un escenario donde el número de victimizaciones de niñas, niños y adolescentes se venía elevando año tras año, lo que da cuenta de la necesidad de continuar invirtiendo esfuerzos a todos los niveles, y especialmente centrados en la prevención y la difusión de recursos para la notificación de posibles casos.

"En Primera Persona", presentación serie de videos sobre familias vulnerables/covid-19 en algunos países de Latinoamérica.

"En Primera Persona" es un proyecto audiovisual que da voz a los problemas actuales que sufren las familias vulnerables en Guatemala, Colombia, Bolivia, Perú y México.

"En Primera persona" es un proyecto audiovisual que busca dar voz a las familias que viven en las áreas más vulnerables de América Latina.
¿Qué dificultades están enfrentando las familias de los sectores más precarios durante la pandemia? ¿Cómo se reorganizan las comunidades? ¿Qué estrategias nuevas están adoptando y qué alternativas proponen?
Los invitamos a ver la serie de testimonios completa en el canal de Youtube.

La serie de testimonios aborda los efectos agudos y generalizados de la pandemia en las familias que viven en hogares superpoblados donde los servicios básicos son a menudo deficientes y los padres están subempleados o desempleados. Los videos también proporcionan información sobre las reacciones de la comunidad al presentar líderes de la comunidad y sus esfuerzos de intervención.

El  proyecto En Primera Persona arroja luz sobre experiencias y narrativas individuales, pero habla de las formas en que las comunidades están trabajando para contrarrestar los efectos de COVID-19 para ayudar a las familias necesitadas. Muchas de estas comunidades están recibiendo apoyo para hacer frente a los efectos de la pandemia de mes de la campaña de comidas, que proporciona alimentos de emergencia y suministros de salud de una oportunidad en la vida. Los videos serán publicados en esta página semanal.

Equidad para la Infancia se une A Chance In Life para expandir el proyecto “En Primera Persona”. Gracias a esta asociación  llega a cinco países de Latinoamérica y recolecta más de 15 testimonios que irá publicando en nuestras redes sociales y las de A Chance In Life durante las próximas semanas.

Video acceso de Todos los Santos

Video acceso Angela Parra


COVID-19: Bienestar de infancias, mujeres y familias en riesgo

A Chance In Life


Niños de corral:

¿Por qué es importante la libertad de un niño para viajar y jugar sin supervisión?.
Una disminución en la actividad física de los niños no es una tendencia nueva. 

Negin Riazi*, 

El Informe de ParticipACTION 2020 recientemente publicado reveló  que los niños canadienses obtuvieron una puntuación  D + por "actividad física diaria",  una F por "juego activo"  y una D- por "transporte activo". 

Solo el 39% de los niños y jóvenes canadienses alcanzan los niveles recomendados de actividad física.
COVID-19 ha resultado en grandes interrupciones de la vida cotidiana, incluyendo el cierre de escuelas, parques infantiles y parques, que también han limitado el lugar donde los niños pueden jugar, estar activos y estar en la naturaleza, escriben Negin Riazi , Universidad de Columbia Británica y Guy Faulkner , Universidad de Columbia Británica. .

Movilidad de los niños

Estudiamos la movilidad independiente de los niños: la libertad del niño para viajar y jugar en su vecindario sin la supervisión de un adulto . Durante la pandemia, la movilidad independiente de los niños puede ser más esencial que nunca.
La movilidad independiente brinda a los niños muchas oportunidades para experimentar su entorno. Los niños con la libertad de viajar independientemente son más activos físicamente . Sin embargo, la movilidad independiente también proporciona una variedad de beneficios para la salud mental y el desarrollo, incluida una evaluación de riesgos mejorada, una mayor confianza en sí mismo y mejores habilidades de orientación.
La oportunidad de viajar solo o con amigos les permite a los niños desarrollar mejores habilidades para tomar decisiones. Obtienen la competencia para navegar en su entorno de manera segura y reaccionar de manera apropiada ante incidentes inesperados como perderse. Los padres que permiten la movilidad independiente de sus hijos les están dando confianza para navegar por el mundo por su cuenta.
En la pandemia actual, la movilidad independiente puede ayudar a los niños a obtener acceso al mundo exterior. Con muchos padres trabajando desde casa, el tiempo al aire libre de los niños puede estar inextricablemente vinculado a cuando los padres tienen tiempo para realizar actividades físicas al aire libre después del trabajo o entre reuniones.

Diferentes cantidades de espacio, movilidad.

No todos los niños tienen acceso a un patio trasero en casa y pueden tener oportunidades limitadas para mantenerse activos. Los niños con movilidad independiente tienen más oportunidades de mantenerse activos caminando o en bicicleta (patinando, patinando o patinando) a varios lugares cercanos a la casa, como el parque local, el patio de la escuela o arriba y abajo de la cuadra del vecindario.
Nuestra investigación destaca que no todos los niños tienen la misma cantidad de movilidad independiente . Por ejemplo, descubrimos en una encuesta a unos 1,700 padres en Vancouver, Ottawa y Trois-Rivières, Que., Que la propiedad del automóvil tuvo influencias negativas en la movilidad independiente de los niños. También el idioma hablado en casa además del inglés o el francés. El idioma que se habla en el hogar puede reflejar normas sociales y culturales, que pueden afectar la movilidad independiente al influir en la toma de decisiones de los padres.
Otra investigación ha señalado que la movilidad independiente a veces es mayor en los barrios socioeconómicos más bajos debido a las diferencias en las normas sociales y los estilos de crianza . La forma en que se puede apoyar la movilidad independiente para los niños con discapacidad es menos segura sin una infraestructura adecuada.

Menor riesgo de COVID-19 al aire libre

Nuestra comprensión de COVID-19 está cambiando rápidamente y la incertidumbre sobre el riesgo para nuestros hijos es estresante. Columbia Británica ahora ha entrado en la Fase 2 de su plan de reinicio y uno de los resultados es la reapertura de parques, playas y parques infantiles.
La Canadian Pediatric Society señala en un informe del 29 de abril que " el principal factor de riesgo para adquirir la infección por COVID-19 en la infancia es la exposición en el hogar ", o contraerla en viviendas compartidas. Es menos riesgoso estar afuera que adentro si se mantiene el distanciamiento físico.
Para apoyar el distanciamiento físico, las ciudades de todo el mundo están reasignando el espacio vial para caminar y andar en bicicleta , abriendo espacios verdes e iniciando zonas libres de automóviles .
En Vancouver , el ayuntamiento votó recientemente para reasignar un mínimo del 11 por ciento de las carreteras de la ciudad al " espacio público centrado en las personas ".
En algunos lugares, los entornos locales pueden estar haciendo un mejor trabajo que otros para aliviar las preocupaciones de seguridad de los padres sobre dejar que sus hijos salgan y jueguen.

Construyendo la movilidad independiente de los niños

Aquí hay siete pasos que puede seguir para ayudar a su hijo y a todos los niños a desarrollar su movilidad independiente.
Obtenga más información sobre nuestra investigación a través de nuestro documental, Running Free . Dicho a través de los ojos de tres familias, explora el concepto de movilidad independiente de los niños, los beneficios de la movilidad independiente para la salud física y mental. Desafía a los espectadores a considerar soluciones para disminuir los niveles de movilidad independiente.
Conozca las restricciones de COVID-19 en su área. Converse con su hijo sobre cómo estar afuera de manera segura sin dejar de seguir las pautas de distanciamiento físico e higiene, tales como: no contacto físico con otros; permanecer a dos metros de distancia; use una máscara cuando vaya a las tiendas; lávate las manos regularmente.
Participe con sus hijos y su comunidad para discutir y abordar las barreras a la movilidad de los niños. ¿Cómo sus hijos, y todos los niños en su comunidad, experimentan movilidad? Conozca y apoye la promoción y planificación para comunidades más inclusivas que apoyen equitativamente la libertad de movimiento y juego de todos los niños.
Empezar temprano. Mientras más tiempo pase su hijo en el vecindario con usted, más familiarizado estará con las calles, los vecinos y el medio ambiente. Con usted, su hijo puede aprender a cruzar la calle de manera segura, andar en bicicleta y superar situaciones inesperadas. Mientras esté fuera, hable con su hijo sobre lo que harían si se perdieran y cómo pedir ayuda o encontrar el camino.
Conozca a su hijo Cada niño es diferente en términos de madurez, confianza y dónde viven. No hay una edad específica en la que un niño debe tener movilidad independiente. Los padres y los niños deben entablar conversaciones para determinar cuándo un niño está listo para explorar su vecindario sin la escolta de los padres y ayudar a su hijo a desarrollar las habilidades para hacerlo de manera segura.
Desarrolle familiaridad con su vecindario. Es beneficioso conocer a sus vecinos, qué lugares están cerca, como espacios verdes, parques infantiles o tiendas, y a quién puede pedir ayuda su hijo si lo necesita. ¿Hay una tienda en la esquina donde un niño que está listo podría enorgullecerse de practicar medidas adecuadas de higiene, uso de máscaras y distanciamiento físico, y hacer un viaje corto para recoger un artículo?
Pruebas de carrera. Una vez que usted y su hijo hayan establecido su disposición, ¡es hora de realizar pruebas! Comience con pequeños pasos. Camine o vaya en bicicleta con su hijo: ayuda a todos a familiarizarse con el vecindario y los lugares de interés. Practique llegar a varios destinos con su hijo abriendo el camino y cruzando la carretera donde sea más seguro. Una vez familiarizado con el vecindario, su hijo puede practicar cómo llegar a varios lugares solo o con sus hermanos, el perro de la familia, con un teléfono celular (o un walkie-talkie) o con un amigo físicamente distante.
Cuando los niños están afuera, " se mueven más, se sientan menos y juegan más" , interactúan con el entorno y aplican su creatividad. Todo esto es beneficioso para su estado físico, salud mental y desarrollo social. Apoyar a los niños para que sean móviles de manera independiente puede ser una solución importante para proteger la salud y el bienestar de los niños.La conversación
*Negin Riazi , PhD Candidato en KinesiologíaUniversidad de Columbia Británica y Guy Faulkner , Presidente de Salud Pública Aplicada y Profesor, Escuela de Kinesiología, Facultad de Educación, Universidad de Columbia Británica
Este artículo se vuelve a publicar de The Conversation bajo una licencia Creative Commons. Lee el artículo original .