¿a qué llamaremos Nochebuena? ¿quién va a poder decir a los niños: ¡hoy es Navidad! ?

       Y LOS OJOS DE UN NIÑO

 

Cuando otra vez el odio empuña la violencia
y pone cara al pesebre de la Noche de paz,
y una lumbre oscura de palabras de fuego
funde todos los símbolos de luz del árbol familiar,
¿a qué llamaremos Nochebuena? ¿quién
va a poder decir a los niños:
¡hoy es Navidad! ?
 
Cuando otra vez la guerra reverdece
e imágenes de muerte invaden nuestra tele,
y las noticias nunca ofrecen buenas nuevas,
y las caras del dolor son bolas en nuestro árbol,
¿a qué llamaremos Nochebuena? ¿quién
va a poder decir a los niños:
¡hoy es Navidad! ?
 
Cuando un niño descubre el dolor de otros niños
que sufren y padecen una violencia extrema,
y gritan fuerte ¡mamaaaaá!, mas no existe consuelo,
y su alma se desangra y el mundo es un infierno,
¿a qué llamaremos Nochebuena? ¿quién
va a poder decir a los niños:
¡hoy es Navidad! ?
 
Pero es ya Navidad.
 
En silencio o por hábito invocamos la paz,
y nos duele el dolor de saber que es en vano;
y la vida no vale y la paz es un sueño vacío
en un mundo sin alma, lobo el hombre del hombre.
 
Pero hoy que es Navidad al decirlo temblamos;
y en silencio evocamos que en el portal un niño
no lo tuvo más fácil en un mundo hostil siempre,
salvo mientras se es niño y los ojos no entienden,
hasta el día en que descubren que ser feliz no es fácil.
 
Y por eso en Navidad maquillamos el mundo
de color y de luz, de esperanza para ellos,
por ver si el sol naciente los acuna en los brazos
de un futuro mejor, de borrón y cuenta nueva,
de año nuevo de bien, si otro mundo es posible.
 
Y ¡Feliz Navidad! nos deseamos con palabra sincera,
y ¡feliz! repetimos como esperanza y sueño,
¡feliz!, en un tiempo de familia y de gozo
y añadimos ¡paz!, evocando a esos niños…
 
Y soñamos que es cierto
que los sueños se cumplen, que se vuelven verdad
con amor, con entrega, con trabajo y esfuerzo,
y los ojos DE UN NIÑO. 

Heliodoro Fuente Moral.

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DEJEMOS
QUE LOS NIÑOS VIVAN EN PAZ.

VIIº informe en la serie 
"No a la guerra contra la infancia" 
de Save the Children. 14 de diciembre.

Este es nuestro séptimo informe en la serie "No a la guerra contra la infancia" de Save the Children

Cinco años después de nuestro primer informe, cada vez más niños y niñas están afectados por conflictos, con consecuencias devastadoras para sus vidas y sus futuros. El análisis de este informe se basa en datos actualizados sobre el número de niños y niñas que viven en zonas de conflicto, realizados por el Instituto de Investigación para la Paz de Oslo (PRIO), en el análisis de Save the Children del informe anual de 2022 del Secretario General de las Naciones Unidas sobre niños y conflictos armados, y en nuestro mapeo del número de graves violaciones en los informes sobre infancia y conflictos armados de 2005 a 2022.

En 2022, alrededor de 468 millones de niños y niñas, uno de cada seis, vivían en zonas de conflicto, lo que supone un aumento del 2.8% desde 2021. Se registraron 27,638 violaciones graves contra menores, la cifra más alta desde 2005, con un promedio de 76 violaciones diarias. La República Democrática del Congo encabezó la lista como el peor país para ser niño o niña, seguido por Malí y Myanmar. 

El reclutamiento y uso de niños fue la segunda violación más verificada, con 7,610 casos en 2022. 

Se observa un preocupante aumento en el acceso a servicios básicos y protección para miles de niños y niñas. Los ataques a escuelas y hospitales aumentaron en un 74%.

Descarga el informe 'No a la guerra contra la infancia: Dejemos que los niños vivan en paz':

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