¿Qué consecuencias ha tenido y tendrá la pandemia en la salud mental de nuestros menores de edad…? ¿Qué ocurría en los hogares cuando todos estábamos confinados? ¿Cómo ha influido en problemas como los intentos de suicidio, autolesiones, trastornos de alimentación, duelo…? ¿Cómo han evolucionado problemas que vienen sufriendo como el maltrato familiar o la violencia de género…? ¿Qué relación han tenido con la tecnología y cómo esta ha influido en los motivos de peticiones de ayuda que recibe ANAR? ¿Qué secuelas habrá para los niños/as y adolescentes que les ha tocado vivir esta emergencia excepcional y prolongada?
AUTOLESIONES E IDEACIONES SUICIDAS, ANSIEDAD, DEPRESIÓN Y TRASTORNOS DE ALIMENTACIÓN EN MENORES DE EDAD ALCANZAN CIFRAS RÉCORD A CAUSA DE LA PANDEMIA
“Durante el Estado de Alarma, la Fundación ANAR fue declarada operadora de Servicios Esenciales. Logramos el reto: ayudarles en el momento más difícil, cuando estaban aislados y nadie más podía hacerlo, recibiendo 166.433 peticiones de ayuda de toda España. Conseguimos atender 11.761 casos graves”, explica Benjamín Ballesteros, director de Programas de Fundación ANAR.
La gravedad de los casos se refleja en el elevado número de intervenciones de emergencia: 2.277 a lo largo de todo 2020, con una media de 6 diarias. Esto supone un incremento de los casos de urgencia alta (39,1%) y de máxima gravedad (55,6%). Asimismo, se confirma una mayor duración de los problemas: el confinamiento y el aislamiento han provocado que se cronifiquen, llegando a un 51,5% aquellos casos que venían sucediendo desde hace más de un año.
“La pandemia ha generado un ‘cóctel molotov’ en los hogares que explica el incremento de los problemas graves en niños, niñas y adolescentes: el confinamiento del núcleo familiar en un espacio pequeño, la presión en las familias por el trabajo -bien por el sobreesfuerzo del teletrabajo, o por incertidumbre o problemas económicos- o la ausencia de otros lugares protectores como el colegio o el médico. Además, el miedo por la pandemia y el duelo por seres queridos, entre otros muchos factores. Desde el principio de la pandemia alertamos de que todo esto estaba ocurriendo y ahora vemos las consecuencias”, advierte Benjamín Ballesteros.
Se incrementan las secuelas psicológicas por el Covid: durante el confinamiento se disparan la ideación suicida (+244,1%), ansiedad (+280,6%), baja autoestima (+212,3%) y depresión/tristeza (+87,7%). Los trastornos de alimentación aumentan un 826,3% durante las primeras salidas. Y con la vuelta al cole: autolesiones (+246,2%), agresividad (+124,5%) y el duelo (+24,5%)
“Las consecuencias del COVID-19 han generado en niños/as y adolescentes una gran frustración fruto de la indefensión y desesperación que explican el porqué de que muchos/as adolescentes han aumentado sus ideaciones y tentativas de suicidio durante el confinamiento y han utilizado mecanismos de autorregulación emocional dañinos con el fin de lograr la reducción de su ansiedad, como las autolesiones con la vuelta al cole o los mecanismos de compensación propios de los trastornos de alimentación, que se han disparado coincidiendo con las primeras salidas”, revela Diana Díaz, directora del Teléfono/Chat ANAR.
ANAR también ha detectado un incremento de los problemas asociados a la tecnología que pasaron de un 23,2% a un 29,9%, afectando a temáticas como grooming, ciberacoso, violencia de género, pornografía/ prostitución infantil, trastornos de la alimentación, autolesiones, ideaciones e intentos de suicidio y otros problemas psicológicos.
Además, durante el confinamiento y las primeras salidas despuntaron las dificultades relativas a separación, custodia y régimen de visitas (confinamiento: +42,3%; primeras salidas: +51,9%) y también crecen las consultas relativas a ayudas sociales y pobreza infantil, alcanzando la diferencia más aguda en el confinamiento (+307,2%), llegando a representar un total de 139 casos con esta problemática.
Junto con el informe, ANAR ha lanzado una serie de recomendaciones ante la necesidad de actuar por la gravedad de estas tendencias. Entre estas, destaca la propuesta de la aprobación de un Plan de Acción o Contingencia, en consenso con las demás administraciones públicas e instituciones necesarias, para aplicarlo ante situaciones futuras similares a la de esta pandemia.
Además, se plantea, entre otras medidas: la necesidad de elaborar una estrategia para la erradicación de la violencia sobre la infancia y adolescencia; incorporar un mayor número de profesionales en el área de salud mental; la declaración como servicios esenciales los diferentes servicios destinados a la prevención, detección, protección y asistencia de los niños, niñas y adolescente frente a la violencia o la agilización en la creación de los Juzgados especializados en infancia y familia que prevé la Ley Orgánica de Protección Integral a la Infancia y Adolescencia a la violencia, que entró en vigor el pasado 25 de junio.
INTENTO DE SUICIDIO Y AUTOLESIONES
Adolescente de 16 años
“He tenido dos intentos de suicidio, además de autolesionarme… Creo que la situación de la cuarentena me está viniendo grande. Llevo un par de días que siento que el mundo se me viene encima…”
VÍDEO
El director de programas de Fundación ANAR, Benjamín Ballesteros, y la Directora del Teléfono ANAR, Diana Diaz, resumen y valoran los principales resultados de este estudio.