Se inicia demanda colectiva contra el cártel de los libros de texto.

La entidad presenta este lunes una denuncia colectiva contra estas compañías, con la intención de que se sumen a título individual familias de todo el país y puedan solicitar la devolución de parte del dinero que, consideran, han estado pagando de más desde 2012, cuando se produjo el pacto, hasta 2018, cuando supuestamente terminó.
Desde la Giner de los Ríos acusan a las editoriales de imponer "precios sin mucho más control por parte de la administración". Además, consideran que las familias han sido "las más perjudicadas" por estas actuaciones porque "han asumido este coste de forma mayoritaria".

El fin de la trola de los "Ninis".

Tal vez ese odio que carcome la lengua a los que se escudan en discursos anti-Thunberg no sea tan distinto al que hace diez años llenaba las páginas de opinión de la prensa con insultos hacia los llamados 'ninis'. 
Los mismos que hoy se ríen de que una chica con trenzas lidere una lucha que ni siquiera se han molestado en entender son aquellos que quisieron hacernos creer que mi generación, la millennial, estaba conformada por vagos que ni estudiaban ni trabajaban ni sentían pasión por otra cosa que por sus lloriqueos.

Hasta el mismo 2017 teníamos que leer a columnistas como Antonio Navalón arremetiendo contra los que entonces rondaban la veintena y la treintena, "millennials, dueños de la nada", decía en su polémico artículo de El País, y se atrevía a añadir: "me encantaría conocer una sola idea millennial que no fuera un filtro de Instagram o una aplicación para el teléfono móvil. Una sola idea que trascienda y que se origine en su nombre. Porque, cuando uno observa la relación de muchos con el mundo que les rodea, parecen más bien un software de última generación que seres humanos que llegaron al mundo gracias a sus madres".

Pero que lo 'nini' era una trola parece estar quedando bien claro a las puertas de 2020, cuando los que nacieron a finales de los 90 y principios de los 00 han decidido no dejar que un grupo de señores les culpe y les insulte públicamente por errores que no han cometido. Puede que Greta Thunberg, nacida en 2003, sea la cabeza visible de su generación, pero junto a ella hay un montón de nombres que desde distintos ámbitos están cuestionándolo todo.

Pienso en Emma González, activista estadounidense nacida en 1999, que emocionó a miles de personas con su discurso contra las armas en el #March4OurLives. 
Pienso en María José Bejarano de Oliveira, boliviana nacida en 2001, activista climática como Thunberg pero también preocupada por representar las voluntades de los pueblos indígenas a los que representa. 
Pienso en Sandra, Nuria, Lucía Fernández, Lucía Adrián y Paula, españolas nacidas entre 2003 y 2004, que se han hecho mundialmente conocidas tras crear la revolucionaria aplicación When&Where, con la que pretenden ayudar a que crímenes machistas como los de Laura Luelmo o Diana Quer no vuelvan a ocurrir. 
Pienso en Hunter Schafer, estadounidense nacida en 1999, conocida por su papel en la serie Euphoria y también activista transgénero. 
Pienso en Simar Singh, nacido el año 2000 en la India, y uno de los promotores de UnErase Poetry, una plataforma feminista de difusión de poesía... 

Y pienso también en Renata Flores, peruana nacida en 2001, cantante de trap que ha revolucionado la escena musical por cantar en quechua.
Renata Flores es al mundo del arte lo que Greta Thunberg al mundo del activismo climático. En Perú muchos la han criticado por utilizar las redes sociales para lanzar su mensaje. 
 La han criticado por salir en la tele. 
Por mezclar la lucha feminista con la lucha antirracista como hizo con su canción Tijeras. 
La han criticado por demostrar que se puede ser muy joven y tener mucha conciencia, en definitiva. 
Porque parece que eso es lo que nos molesta. 
Eso es lo que verdaderamente nos asusta: 
dejar de entender los códigos de los que vienen, 
tener que aprender a pedirles perdón, a veces, por lo que en nuestro momento no supimos hacer, 
escuchar a alguien que tiene más sensibilidad que nosotros, 
darle la razón, acompañarle, 
¿de verdad es tan difícil?.

¿Escuela de ricos, escuela de pobres? Cómo la concertada y la pública segregan por clase social.

El análisis de todos los centros de España y la renta de sus vecindarios 
explica cómo la desigualdad afecta al sistema educativo.
 Cinco conclusiones sobre la segregación educativa.


Gema y Teresa viven en el mismo barrio del sur de Madrid, Vallecas. Gema, madre de dos mellizos, los lleva a un colegio público; Teresa lleva al mayor de sus hijos a un concertado. Ninguna de las dos ha elegido el centro público que tiene más cerca de casa.
La primera ha renunciado al que estaba a cinco minutos para ir a uno que está a más de 20: "Toca coger coche o autobús, pero es un cole distinto, sin deberes y con decisiones asamblearias". Teresa, que es arquitecta y acaba de mudarse al barrio, solicitó ese mismo centro, pero no quedaban plazas. Optó por un concertado. Se decidió por motivos parecidos. Las dos admiten, y los profesores del centro lo confirman, que a la salida del cole se nota un ambiente distinto de los públicos del resto del barrio: el nivel sociocultural es más alto. Ambas han encontrado un centro con padres y madres parecidos a ellas.
No son casos aislados. En España hay 20.000 colegios públicos de primaria y secundaria y otros 9.000 entre concertados y privados. Pero los estudiantes no son iguales en todas partes: las brechas de renta y clase social que encontramos entre pueblos y barrios se reproducen —si no se amplifican— dentro de los colegios. Los centros educativos están segregados por las características de sus padres, como su riqueza o sus estudios, y lo normal en cada escuela es encontrar niños de orígenes sociales parecidos. Este fenómeno lo vemos cuando comparamos escuelas públicas y concertadas, pero no solo ahí: los datos del informe PISA demuestran que en la red pública también se segrega.

A continuación, hemos extraído cinco conclusiones sobre la segregación educativa en España, usando datos de las características de 33.000 niños, la ubicación de 21.000 colegios y la renta de las 35.000 secciones censales a su alrededor.

“Sobreproteger a los niños es desprotegerlos”. “Me apeo del ‘hiperchurumbelismo”

La hiperpaternidad, un coñazo para los hijos y otro para los padres.

Ana Pantaleoni,

Eva Millet, autora de 'Hiperniños', 
pide a los padres "que se relajen" 
y subraya que la educación "no es un maratón"

Más Información:



Tengo sensación de cierto alivio. La experta me dice que con tres hijos y un oficio como el de periodismo difícilmente tengo tiempo de criar hijos perfectos o hiperniños. A la más pequeña le acabo de dar de merendar cruasán de chocolate y un helado, a la mayor le he dejado ver cuatro capítulos seguidos de una serie americana, y su padre pierde muchas horas de su vida llevando al mediano al fútbol en la otra punta de la ciudad. Todo eso me lo callo delante de la experta.

¿Qué es un hiperniño? 
Contesta Eva Millet, autora de Hiperniños (Plataforma Actual):
Es el producto de una crianza intensiva, de una absoluta dedicación de los padres al niño, pero una dedicación más enfocada a ver el hijo como un producto. Tienen de antemano un plan establecido para ese niño incluso antes de nacer. Es un modelo norteamericano. Este niño es el absoluto rey de la casa, el Luis XIV. Es el modelo altar, se le rinde culto, se le da todo, se le consulta todo pero, por otro lado, tiene una presión brutal para triunfar. Son niños hiperprotegidos, que gestionan mal la frustración, que se muestran muy poco autónomos. Es un fenómeno del primer mundo”.

¿Cuáles son los síntomas? 
“Cuando es incapaz de hacer algo que le tocaría hacer sin ayuda del adulto. El ejemplo son los deberes. Cada vez hay más niños que no saben hacer los deberes sin sus padres, y cada vez más padres que los hacen para subirles la nota. Otra característica son los miedos, y uno cada vez más común es el miedo a equivocarse, el miedo a fallar. También la ansiedad y el estrés, que son estados de los adultos, que cada vez se detectan más incluso en niños. Se ve un poco la crianza de los hijos como un campo de entrenamiento, porque cada vez hay que llevarlos a más sitios, son infancias muy estresadas”.

El último informe del Estudio del Plan Nacional sobre Drogas en España, detalla Millet, ha detectado que uno de cada seis adolescentes calmó sus tensiones ante un examen o una ruptura tomando ansiolíticos. Los tranquilizantes por primera vez superan al alcohol y al tabaco como droga de inicio.




Millet explica que los hiperpadres han entrado en la escuela y los colegios están apabullados. Padres que se meten en el AMPA para cambiar el menú, padres que montan grupos de WhatsApp para criticar al profesor… “Me cuentan profesores que encuentran niños que escuchan la palabra NO por primera vez en la escuela, que llegan con muy pocos límites, que no duermen, que se caen en el patio y se quedan inmóviles a la espera de que alguien los levante…”.

Pregunto a Clara Blanchar, compañera de EL PAÍS, impulsora (como yo) del blog De Mamas and de Papas y también madre: 
“La mera descripción del hiperniño estresa y angustia. Claro que queremos lo mejor para nuestros churumbeles, pero precisamente porque mis hijas (primer mundo, clase media) tienen de todo y fácilmente, considero importante poner en valor la capacidad de espabilarse y ser autónomas. Consultarles y tenerlas en cuenta, vale. Pero elegir… a veces sí; y otras, te comes la verdura porque es lo que hay. Y recordarles que son unas privilegiadas; que comparadas con otras realidades, esto es Disneylandia. Hace tiempo que me he apeado de esta infinita competición por ‘lo más’. Me cuesta, porque la presión (mía y ajena) es intensa y el sentimiento de culpabilidad por no hacer más acecha, pero intento relajarme, consciente de que juego en otra liga (en la que también hay buenas escuelas, extraescolares y campamentos). Y buscar espacios para que hagan lo que más mola de ser niño: jugar y jugar y jugar, si puede ser al aire libre y con primos y amigos, mejor”. 
 Blanchar piensa en su amiga Mariluz: “Es la reina del mambo de apearse del hiperchurumbelismo. Ha pasado hasta del inglés (¡les ha borrao!) y el curso pasado, al ver el ritmo y el nivel de fiestas de cumple que llevaba su clase solo tres meses después de comenzar el curso, decidió bajarse del tren y llevarse a cuatro amigas a dormir a casa. Yo hace años que lo hago y triunfo”.

Cuesta creer que la generación que Millet llama del niño mueble sea ahora la que produzca hijos altar. No entiendo que aquellos niños que no tuvieron fiestas de cumpleaños en room escapes ni vacaciones de verano para ver tortugas en Costa Rica ahora se maten por buscar los campamentos más especializados o elijan la guardería que enseña mandarín. Por el camino, y eso es cierto, los padres y las madres han perdido autoridad. “Yo veo que es un fenómeno cada vez más extendido. La media de hijos es 1,3 por pareja, los tenemos más tarde y hemos pensado cómo van a ser, además las madres contamos con experiencia laboral. Una cosa de la hiperpaternidad es que el hijo se gestiona y tú importas herramientas del trabajo para educar; tenemos más recursos y además existe la competencia entre familias. Hay un terror a que tu hijo se crea que va detrás porque este modelo está basado en la precocidad. Al final ejercer de padre o de madre es un maratón. Un fenómeno muy curioso es hablar en plural: “hemos aprobado, hemos suspendido, nos hemos enamorado…”, explica Millet, que muestra una imagen que se repite: el niño que baja del bus y entrega a su madre/padre la mochila para que la cargue o el que persigue a su hijo bocadillo en mano por el parque para que lo mordisquee.

El alivio se transforma progresivamente en agobio conforme avanza la conversación. ¿Tan mal lo estamos haciendo? “Hay miedo a poner límites porque seremos unos fachas. Afecto y límites son los pilares de la educación. Lo que tenemos que hacer es relajarnos. Nos hemos complicado la vida de forma innecesaria. Hay que pensar que la educación es a largo plazo y que tú no eres enteramente responsable de lo que le va a pasar a tu hijo. Abogo por confiar en nosotros, pero también en los hijos”.

Fin de la conversación. 
Dos mensajes me quedan claros: 
no pienso llevarle la mochila a mis hijos nunca más 
y voy a poner límites. 
Aunque hoy vuelvo a equivocarme. La merienda vuelve a ser chocolate.

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Los niños desobedecen la infancia feliz:

Déspotas e idiotas utilizan un mito de la modernidad 
para atacar a Greta Thunberg y su generación.
Según la idea que sustentan los adultos: 
los niños tienen que ser siempre felices y totalmente inocentes, 
protegidos de las atrocidades y también de los sentimientos humanos.
Esta infancia sólo puede existir apartada del mundo, entre muros.
No porque los muros la protegen. Sino porque los muros impiden 
que todos descubran que solo existe a costa de silenciarla.
Y entonces surge esta nueva generación que reivindica voz y escucha. 
La niña de las trenzas les muestra a Trump y los demás 
que se niega a colgarse en la cara una sonrisa de querubín, 
mientras ellos defecan en el mundo en que vive y vivirá. 
Los adultos obscenos la atacan, insinuando que las niñas como Greta están "perturbadas"...

Greta Thunberg, en una marcha en febrero.
Greta Thunberg, en una marcha en febrero. AP
Cuando Donald Trump ataca a Greta Thunberg en Twitter, burlándose de su performance para desviar la atención del contenido de lo que dice, manipula un mito popular: la infancia solo feliz. La sueca de 16 años pronunció en la Cumbre del Clima de la ONU: "La gente está sufriendo. La gente se está muriendo. Ecosistemas enteros se están colapsando. Estamos en el comienzo de una extinción masiva. Greta tenía la cara contraída y el cuerpo trémulo de indignación. El más poderoso negacionista del clima la atacó: "Parece una joven muy feliz desando un futuro brillante y maravilloso".

Es interesante darse cuenta de las armas que se usan contra Greta. Al inspirar una huelga escolar que moviliza a millones, la adolescente amenaza los intereses de corporaciones poderosas como la del petróleo. Pone en riesgo ganancias multimillonarias. En un año, consigue hacer lo que los científicos del clima no han podido en treinta. ¿Y qué hacen los déspotas elegidos? Utilizan la infancia contra la niña.

La felicidad de los hijos, que sustenta el ideal de los padres, es una marca de la infancia de este momento histórico. Los pequeños tienen que ser siempre felices y totalmente inocentes, protegidos de las atrocidades y también de los sentimientos humanos. Los callan, muchas veces con medicamentos. Cualquier sufrimiento es una señal de patología. Esta infancia solo puede existir apartada del mundo, entre muros. No porque los muros la protegen. Sino porque los muros impiden que todos descubran que solo existe a costa de silenciarla.
Y entonces surge esta nueva generación que reivindica voz y escucha. La niña de las trenzas les muestra a Trump y los demás que se niega a colgarse en la cara una sonrisa de querubín mientras ellos defecan en el mundo en que vive y vivirá. Los adultos obscenos la atacan, insinuando que las niñas como Greta están "perturbadas". Si estuvieran sanas, verían que el futuro que les espera es un paraíso. Exigen que Greta y su generación brinquen como corderitos de Disney ante la catástrofe que se anuncia, para no fastidiar los juegos del hambre de los adultos.
La emergencia climática ha hecho que los niños salgan del lugar donde los han encarcelado por tanto tiempo. El concepto de infancia ya ha empezado a cambiar, ahora por la voz de los protagonistas. Greta todavía va más allá al asumirse como Asperger y anunciar su diferencia como un "superpoder". No como una enfermedad, ni trastorno, ni síndrome. Los "Aspies" se anuncian "atípicos" ante una supuesta normalidad. Los déspotas llaman a esta niña "retrasada" y "enferma mental". Los niños y los enfermos mentales sufren el mismo prejuicio brutal: no saben lo que dicen.

Que los déspotas elegidos y los idiotas inútiles pataleen. 
Los niños desobedecerán la infancia para garantizar un futuro. 
No necesariamente feliz, pero al menos posible.

Traducción de Meritxell Almarza.

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SEMANAS DE TEATRO 2019. ENCUENTROS ENTRE TEATRO Y ESCUELA.

SEMANAS DE TEATRO 2019


.Noviembre del 7 al 24 de Noviembre. 
RESERVA TUS FECHAS!!

Pinchando en los siguientes enlaces encontrarás toda la información.
Para cualquier duda contactar po tfno al 810529986 / 659774991
o por mail sitn.ae@gmail.com / aeduca@accioneducativa-mrp.org


Semanas de Teatro 2019
Calendario de Actividades

Información compañías.
Formación con Suzanne Lebeau.
Formación con Tr3s Social.





Después de toda esta andadura Acción Educativa da por concluida una larga etapa: 32 ediciones de Semanas Internacionales de teatro para niños y niñas. Después de tanto tiempo han cambiado muchas cosas en torno al teatro infantil, ya no nos encontramos donde empezamos hace 32 años, así que hemos hecho un proceso de reflexión de dónde deberíamos estar.
Consideramos que nuestro lugar debe ser más desde la formación y acercamiento a maestros y adultos que son los que acercan a los niños al teatro. Y todo ello para formar buenos espectadores y no meros consumidores de propuestas que a veces suelen pasar sin dejar un mínimo rastro en la memoria de la gente. Formar parte de la consolidación de las artes en la comunidad y, por tanto, en la escuela como lugar de transmisión de la cultura. Para ello entendemos fundamental la formación de formadores en esta área, ausente en los centros de profesores, desde un lugar de intercambio de experiencias y encuentro entre profesionales del teatro y de la educación. Extenderlo así mismo a todos los demás lugares donde se forman los profesionales que tienen relación con el teatro y la infancia como escuelas de magisterio, módulos de educación infantil o la propia RESAD, fomentando así el intercambio entre jóvenes adolescentes, estudiantes y profesionales tanto del área educativa como del área de las artes escénicas.
En este primer encuentro la temática planteada son LOS TABÚS, los temas que evitamos tratar con la infancia y juventud privándoles así del conocimiento, construcción y desarrollo de partes esenciales de la vida en su formación. Cómo la sociedad está imponiendo una educación “burbuja” que les aísla de la realidad, cómo se están modificando los cuentos tradicionales que son reflejos de los miedos y preguntas de la infancia, como hurtamos determinados espectáculos a los niños y jóvenes.  
Queremos que el hecho teatral no sea algo aislado sino que una a gentes de aquí y de allá; a niños, jóvenes y adultos, a la escuela y al teatro, que establezca redes que propicien un mayor conocimiento desde todos los implicados y que esto suponga una mayor exigencia de calidad en el hecho teatral así como la posibilidad de acercarse al teatro de la misma manera que nos acercamos a por el pan cada día.
Así, con toda la reflexión realizada y fundamentación nos embarcamos en este nuevo proyecto, con la consistencia que nos proporciona toda nuestra andadura. Y como proyecto lo entendemos, no como un punto de llegada, sino como un punto de partida.





Necesidades, intereses y preocupaciones de la población adolescente escolarizada en la ciudad de Madrid.

Resultados del estudio.


CONCLUSIONES

Ámbito familiar
• El 58,2% de los adolescentes calificala relación con su familia de sobresaliente (9o10).
• Entornoal 6% de los adolescentes no se sienten bien cuidados ni seguros en sus familias.
• En cuantoa la situación económica de su hogar, la mayor parte consideran normal, ni rica ni pobre, aunque se observan diferencias importantes en función del nivel de desarrollo de los distritos y titularidad de los centros.

Ámbito escolar
• En el colegio, la satisfacción general con el centro en el que estudian es alta (un 69,4%), aunque es mayor en lo referente a las relaciones con los compañeros que con los profesores y, sobre todo, con las calificaciones. También se observa un mayor grado de satis facción en los centros privados.
• A un 45,9% las clases se le hacen aburridas.

Entornourbano
•Un 71,7% manifiesta estar bastante o muy satisfecho con las condiciones de su barrio en general. No obstante, las diferencias por distrito son acusadas. 

Relaciones de amistad
• La valoración global de las relaciones de amistad es muy positiva, ya que un 83,2% las puntúa por encima del valor7delaescala. Las mayores dificultades las encuentran en la expresión de opiniones y sentimientos.

Ámbito personal
•La mayoría de los adolescentes muestran sentimientos positivos ; sin embargo aparecen síntomas depresivos entre el 6 y el 22%, según los síntomas.

Ámbitosocial y político
•Los/las escolares muestran su preocupación por los grandes temas sociales, con especial atención al racismo y el hambre. Las diferencias más acentuadas por sexos se dan, en la presión por el físico, el machismo y el respectoaladiversidadsexual (mayor enlaschicasqueenloschicos).
• En cuanto a la política, se muestran escépticos (únicamente el 28,1% opina que se preocupan de la ciudadanía) ymás escépticas las mujeres quelos varones. Utilizanlas redes sociales y televisión como principales  fuentes de información para lapolítica.
•Hay una percepción moderadamente positiva respecto a si el Ayuntamiento tiene en cuenta su opinión (saldo positivo de más de 10 puntos). En cualquier caso, los instrumentos concretos de participación son poco conocidosentresus destinatarios(un16,3%haoídohablar deellos)

Hábitos alimentarios y salud
• El 28,2%afirmahaber realizadodietaenalgunaocasión.
• De entre los adolescentes mayores de 15años, la mayoría noseconsideraactivosexualmente, un58,2%del
total. Sin embargo, entre los que sí lo sonse aprecia un elevada proporción de conductas de riesgo (un 78,7% las ha realizado en alguna ocasión).

Actividades diarias, ocio y  tiempo libre
• En cuanto a las actividades de tiempo libre, las más frecuentes son el uso de redes sociales y el visionado de videos y material audiovisual y el tiempo de estudio autónomo.
• Respecto a conductas de riesgo, algunas se presentan con elevada frecuencia, como fumar o consumir bebidascombinadas. También es preocupante el consumo de cannabis y de otras drogas.

Accesos

Revista HDIA, Septiembre 2019.

Hablando de Infancia y Adolescencia.



La Asociación GSIA edita una publicación periódica  y  digital
que analiza la actualidad recogida por los medios 
en relación a la infancia y la adolescencia, 
aportando nuestro propio enfoque 
con distintos secciones, artículos y columnas de opinión.


Revista del Mes de Septiembre 2019.


El mejor país del mundo para ser niña o niño.

Los ‘movimientos de niños, niñas y adolescentes por el clima’ con sus constantes convocatorias de huelgas están escribiendo una parte fundamental de la historia de los movimientos sociales globales de niños y niñas. La convocatoria de la huelga mundial del 27 de septiembre se realizó en 150 países, como culmen a una semana de movilizaciones en  todo el planeta. 

De la denominada Generación Z se ha escrito mucho sobre su uso intensivo de las Tecnologías de la Información y de la Comunicación, su hiperconectividad a Internet, su capacidad para trabajar en red de manera global, o su disposición para colaborar en proyectos culturales, sociales y políticos. A todo esto, ellos y ellas mismas, han demostrado que no se trataba simplemente de una generación atrapada en los entornos digitales, han sabido ocupar las calles del mundo para reclamar en los 
espacios públicos.  

Se han quitado este estigma social de estar únicamente interesados por las “pantallas”, y han demostrado que también son capaces de convertir las pantallas en pancartas, en centenares de miles de pancartas. 

Se han quitado otro estigma social sobre su brecha digital con las generaciones de adultos y adultas. Han demostrado saber invitar a las personas adultas a que les acompañen en sus demandas climáticas tanto en las calles como en Internet. Constituyendo un movimiento integrado  de abajo a arriba.   

Equipo GSIA .  

Acceso números anteriores de la Revista "Hablando de Infancia y Adolescencia".

Cuando los padres ponen en riesgo la imagen de sus hijos,

Sharenting.


Puede que el término resulte poco conocido, pero la mayoría de madres y padres (y por descontado los abuelos) lo practican, aún sin saberlo. Están orgullosos de sus hijos, y consideran que cada fotografía y vídeo merece ser compartido. ¿Dónde está el problema? 


Si tenemos hijos/as, basta con entrar a la galería de nuestro móvil para que aparezcan cientos de momentos capturados día a día. ¿Nos paramos a pensar cuántas imágenes y vídeos realizamos con nuestros adorables protagonistas? ¿Y cuántas enviamos a través de aplicaciones de mensajería o publicamos en redes sociales?

Por qué aparece el término ‘sharenting

Los tiempos han cambiado, y lo que antes era un lujo excepcional y complejo, hoy es una acción cotidiana, accesible y rápida. Hacemos fotografías a diario, más si en el hogar hay menores de edad. Después, resulta difícil resistirse a compartirlas. Es habitual ver cómo en los medios digitales abundan las imágenes de bebés, niños y adolescentes. Como dato, con solo seis meses de edad, el 81% de los bebés tiene presencia en Internet.
El término sharenting es la unión de conceptos como compartir y paternidad (en inglés ‘share’ y ‘parenting’), y surge debido a que, en relativamente poco tiempo, se ha comenzado a percibir los efectos de estos nuevos hábitos, sobre todo en lo relativo a la imagen de los menores. El problema entonces es, en parte una cuestión de cifras (cuando se difunden demasiados contenidos en los que aparecen los menores), pero también de contenido (cuando se expone al menor en situaciones que se pueden malinterpretar, que pueden considerarse poco favorecedoras o incluso humillantes). Como consecuencia, se pone al menor en riesgo.
Imagen foto a bebe

Puede parecer que compartir una o varias fotos ‘graciosas’ de nuestro hijo/a en un grupo de mensajería familiar o en nuestro perfil de redes sociales, es un gesto inocente que no tendrá mayor repercusión. Pero es un contenido sensible por el mero hecho de afectar a la imagen de un menor, y pasa a formar parte de una cadena de difusión de información: nosotros la enviamos, un par de familiares la comparten con terceras personas, y estas a su vez con otras tantas. Puede llegar a manos de alguien desconocido, que sin conocer a tu hijo/a, decida publicarlo en la Red o simplemente guardarlo en su móvil.
Por tanto, esa pérdida de su privacidad que asumimos al difundir su imagen en Internet implica riesgos graves, como el uso malintencionado de imágenes y vídeos por parte de desconocidos, ciberacoso escolar, suplantación de identidad o grooming, entre otros.
Varios medios han publicado noticias de casos de menores que han denunciado o se han enfrentado a sus progenitores por la cantidad y el tipo de imágenes que compartían sobre ellos/as en sus redes sociales. La protección de la propia imagen, y hasta qué punto el menor tiene derecho a decidir sobre la suya, han generado debate y dudas en estos últimos años. Lo que sí se ha demostrado a estas alturas, es que no todas las personas disfrutan con la exhibición de su vida privada en Internet, y los menores pueden no estar de acuerdo (ahora o en el futuro) en compartir esta información.

Reflexionar sobre la necesidad de compartir

imagen móvil con InstagramLa rápida evolución de la tecnología y su entrada en los hogares es la causa de que nos hayamos visto desbordados por la multitud de opciones disponibles a la hora de compartir datos personales, imágenes y vídeos. Internet y sus aplicaciones nos lo ponen cada vez más fácil, y tenemos que entender que, a menudo, existen intereses detrás para que hagamos pública cada vez más información.
Además, existe cierta presión social que también fomenta este hábito. Los propios familiares y amigos suelen insistir en que nunca son suficientes fotos, más aún ahora que vivir en diferentes ciudades o barrios, o incluso países, es algo bastante habitual. Vemos como personajes de referencia en las redes sociales, famosos o nuestras amistades, también lo hacen. Parece que ‘lo normal’ es plasmar cada segundo de las vidas de nuestros hijos/as en Internet.
¿Nos extraña que los menores puedan llegar a sentirse abrumados al descubrir con los años, que cientos de contenidos propios están al alcance de cualquiera en Internet? Además, hay que ser conscientes de que es una situación que no puede deshacerse por completo: algunas imágenes y vídeos pueden ser imposibles de eliminar o recuperar después de ser compartidas.

¿La solución pasa por blindar la imagen de los menores?

Son muchos los que desearían una respuesta contundente, pero la realidad, actualmente, es que es una cuestión personal que cada uno debe valorar. Ahora bien, hay algunos aspectos que sí se pueden delimitar.
La normativa actual especifica que siempre debe prevalecer el bienestar del menor, y que este puede decidir sobre su propia imagen a partir de los 14 años, según la Ley de Protección de datos de carácter personal. Esta también puntualiza que cuando otros menores aparecen en la imagen, siempre debemos tener el permiso de sus responsables legales para poder compartirla.
Así, podemos afirmar que, con la ley en la mano, es nuestra obligación reflexionar sobre las imágenes o vídeos que compartimos, plantearnos si nuestra forma de proceder conlleva riesgos para nuestros hijos/as, si ellos/as están de acuerdo con esta práctica, o si lo estarán en el futuro. La conclusión en la mayor parte de los casos, implica cambiar en cierta medida nuestros hábitos, buscar un equilibro y reducir la exposición de los menores en Internet.
¿Parece un panorama demasiado estricto? Lo cierto es que existen multitud de alternativas para compartir nuestros recuerdos multimedia. Podemos optar por sistemas de difusión más limitados, como grupos o perfiles privados en los que solo estén nuestros familiares o amigos más cercanos. También podemos imprimir las imágenes o crear álbumes para mostrarlos en persona, o enseñarlas desde el propio dispositivo.

Imagen niño con abuelos leyendo libro
Otra forma de reducir riesgos, es limitar la exposición procurando que no siempre se pueda reconocer al menor en la imagen (por ejemplo retratándole de espaldas, o solo una parte del cuerpo). Ya son muchos los instagramers o youtubers que eligen esta técnica para poder compartir su día a día de una forma más respetuosa.
En cualquier caso, la difusión de imágenes de otra persona siempre debe ser consensuada, y nuestros hijos/as también merecen ser partícipes de esta decisión. Preguntarles y pedir su opinión sobre las fotos que vamos a compartir, es darles un buen ejemplo y fomentar un buen hábito. Dentro de unos años, serán ellos los que tengan que hacer un uso responsable de las imágenes de sus amigos o sus parejas.

Complementariamente, una buena práctica es enseñar a las personas que tienen acceso a las imágenes de nuestros hijos/as la forma adecuada de gestionarlas. De nada vale que nosotros hagamos un esfuerzo por proteger su privacidad, si nuestros familiares y amigos terminan publicándolas en sus perfiles de redes sociales. Por eso es importante explicarles qué pueden hacer con las imágenes y vídeos que les enviemos o que ellos mismos graben, haciéndoles ver por qué es importante proteger su intimidad.
Disfrutar de la tecnología y las opciones que nos ofrece para guardar nuestros recuerdos familiares, no es incompatible con la seguridad y el bienestar de nuestros hijos/as. La moderación y el sentido común son la clave.

¿Os habéis planteado estas cuestiones en familia? ¿Habéis sufrido algún problema en la Red por compartir este tipo de fotos? Podéis contarnos vuestra experiencia en los comentarios.

Declaración sobre las Responsabilidades de las Generaciones Actuales para con las Generaciones Futuras.

UNESCO,                                                                                     


12 de noviembre de 1997.                                                



La Conferencia General de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, en su 29ª reunión celebrada en París del 21 de octubre al 12 de noviembre de 1997,

Teniendo presente que en la Carta de las Naciones Unidas los pueblos han expresado solemnemente su voluntad de “preservar a las generaciones venideras del flagelo de la guerra” así como los valores y principios que consagran la Declaración Universal de Derechos Humanos y todos los demás instrumentos pertinentes del derecho internacional,

Tomando en consideración las disposiciones del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, y del Pacto Internacional de Derechos Cívicos y Políticos, aprobados el 16 de diciembre de 1966, y las de la Convención sobre los Derechos del Niño aprobada el 20 de noviembre de 1989,

Preocupada por la suerte de las generaciones futuras ante los desafíos vitales que plantea el próximo milenio,

Consciente de que en esta etapa de la historia corren peligro la existencia misma de la humanidad y su medio ambiente,

Poniendo de relieve que el pleno respeto de los derechos humanos y los ideales de la democracia constituyen una base esencial para proteger las necesidades y los intereses de las generaciones futuras,

Afirmando la necesidad de establecer nuevos vínculos equitativos y globales de colaboración y solidaridad entre las generaciones y de promover la solidaridad intrageneracional con miras a la perpetuación de la humanidad,

Recordando que las responsabilidades de las actuales generaciones para con las futuras ya se han mencionado en distintos instrumentos, como la Convención para la Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural, aprobada por la Conferencia General de la UNESCO el 16 de noviembre de 1972, la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y el Convenio sobre la Diversidad Biológica aprobados en Río de Janeiro el 5 de junio de 1992, la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo aprobada por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo el 14 de junio de 1992, la Declaración y el Programa de Acción de Viena aprobados por la Conferencia Mundial de Derechos Humanos el 25 de junio de 1993, y las resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre la protección del clima mundial para las generaciones presentes y futuras aprobadas desde 1990,

Decidida a contribuir a la solución de los problemas mundiales actuales mediante una cooperación internacional reforzada, a crear las condiciones para que la carga del pasado no comprometa las necesidades ni los intereses de las generaciones futuras y a legar a éstas un mundo mejor,

Resuelta a actuar para que las generaciones actuales tomen plena conciencia de sus responsabilidades para con las generaciones futuras,

Reconociendo que la tarea de protección de las necesidades y los intereses de las generaciones futuras, en especial mediante la educación, es fundamental para el cumplimiento de la misión ética de la UNESCO cuya Constitución consagra los ideales “de la justicia, la libertad y la paz” fundados en “la solidaridad intelectual y moral de la humanidad”,

Teniendo presente que el destino de las generaciones venideras depende en gran medida de las decisiones y medidas que se tomen hoy y que los problemas actuales, comprendidos la pobreza, el subdesarrollo tecnológico y material, el desempleo, la exclusión, la discriminación y las amenazas al medio ambiente, deben resolverse en beneficio de las generaciones presentes y futuras,

Convencida de que existe una obligación moral de formular, para las generaciones presentes, unas reglas de conducta que se inscriban en una perspectiva amplia y abierta al porvenir,

Proclama solemnemente, en este día 12 de noviembre de 1997, la presente 

Declaración sobre las Responsabilidades de las Generaciones Actuales 
para con las Generaciones Futuras

Artículo 1 Necesidades e intereses de las generaciones futuras


Las generaciones actuales tienen la responsabilidad de garantizar la plena salvaguardia de las necesidades y los intereses de las generaciones presentes y futuras.

Artículo 2 Libertad de elección

Es importante tomar todas las providencias necesarias para que, respetando los derechos humanos y las libertades fundamentales, las generaciones presentes y futuras puedan escoger libremente su sistema político, económico y social y preservar su diversidad cultural y religiosa.

Artículo 3 Mantenimiento y perpetuación de la humanidad

Las generaciones actuales deben esforzarse por asegurar el mantenimiento y la perpetuación de la humanidad, respetando debidamente la dignidad de la persona humana. En consecuencia, no se ha de atentar de ninguna manera contra la naturaleza ni la forma de la vida humana.

Artículo 4 Preservación de la vida en la Tierra

Las generaciones actuales tienen la responsabilidad de legar a las generaciones futuras un planeta que en un futuro no esté irreversiblemente dañado por la actividad del ser humano. Al recibir la Tierra en herencia temporal, cada generación debe procurar utilizar los recursos naturales razonablemente y atender a que no se comprometa la vida con modificaciones nocivas de los ecosistemas y a que el progreso científico y técnico en todos los ámbitos no cause perjuicios a la vida en la Tierra.

Artículo 5 Protección del medio ambiente

1. Para que las generaciones futuras puedan disfrutar de la riqueza de los ecosistemas de la Tierra, las generaciones actuales deben luchar en pro del desarrollo sostenible y preservar las condiciones de la vida y, especialmente, la calidad e integridad del medio ambiente.

2. Las generaciones actuales deben cuidar de que las generaciones futuras no se expongan a una contaminación que pueda poner en peligro su salud o su propia existencia.

3. Las generaciones actuales han de preservar para las generaciones futuras los recursos naturales necesarios para el sustento y el desarrollo de la vida humana.

4. Antes de emprender grandes proyectos, las generaciones actuales deben tener en cuenta sus posibles consecuencias para las generaciones futuras.

Artículo 6 Genoma humano y diversidad biológica

Ha de protegerse el genoma humano, respetándose plenamente la dignidad de la persona humana y los derechos humanos, y preservarse la diversidad biológica. El progreso científico y tecnológico no debe perjudicar ni comprometer de ningún modo la preservación de la especie humana ni de otras especies.

Artículo 7 Diversidad cultural y patrimonio cultural

Las generaciones actuales deberán velar por preservar la diversidad cultural de la humanidad respetando debidamente los derechos humanos y libertades fundamentales. Las generaciones actuales tienen la responsabilidad de identificar, proteger y conservar el patrimonio cultural material e inmaterial y de transmitir ese patrimonio común a las generaciones futuras.

Artículo 8 Patrimonio común de la humanidad

Las generaciones actuales han de utilizar el patrimonio común de la humanidad, según lo define el derecho internacional, sin comprometerlo de modo irreversible.

Artículo 9 Paz

1. Las generaciones actuales deben velar por que tanto ellas como las generaciones futuras aprendan a convivir en un ambiente de paz, seguridad y respeto del derecho internacional, los derechos humanos y las libertades fundamentales.

2. Las generaciones actuales deben preservar a las generaciones futuras del flagelo de la guerra. Con ese fin, han de evitar que las generaciones futuras sufran las consecuencias perjudiciales ocasionadas por los conflictos armados y otros tipos de agresiones y la utilización de armas, contrarios a los principios humanitarios.

Artículo 10 Desarrollo y educación

1. Las generaciones actuales han de legar a las futuras las condiciones para un desarrollo socioeconómico equitativo, sostenible y universal, tanto individual como colectivo, en particular, mediante una utilización justa y prudente de los recursos disponibles a fin de luchar contra la pobreza.

2. La educación es un instrumento importante para el desarrollo de los seres humanos y las sociedades. Debe utilizarse para fomentar la paz, la justicia, el entendimiento, la tolerancia y la igualdad en beneficio de las generaciones actuales y futuras.

Artículo 11 No discriminación

Las generaciones actuales deben abstenerse de realizar actividades y de tomar medidas que puedan ocasionar o perpetuar cualquier forma de discriminación para las generaciones futuras.

Artículo 12 Aplicación

1. Los Estados, el sistema de las Naciones Unidas, otras organizaciones intergubernamentales y no gubernamentales, los particulares y los organismos públicos y privados han de asumir plenamente las responsabilidades que les incumben en la promoción, especialmente mediante la educación, la formación y la información, del respeto de los ideales consagrados en la presente Declaración y fomentar su pleno reconocimiento y aplicación efectiva por todos los medios apropiados.

2. Teniendo presente la misión ética de la UNESCO, se invita a la Organización a difundir la presente Declaración lo más ampliamente posible y a adoptar todas las medidas necesarias en sus esferas de competencia, para sensibilizar al público a los ideales que en ella se consagran.