Debido a las diferencias en los datos sobre personas sin hogar entre países europeos, es difícil proporcionar una cifra de niños y jóvenes sin hogar en Europa
Elisa Brey
10 de octubre de 2024
En Francia, según UNICEF, sí hay niños en la calle. De hecho, a 29 de agosto de 2024, fueron identificados 2.043 niños sin alternativa habitacional. Esta cifra supondría un 120 % de aumento respecto de 2020.
En España, parece que también habría niños en la calle, al menos sin hogar, en situación de infravivienda o sin vivienda habitual. Su realidad residencial parece invisible, no hay cifras oficiales. La Encuesta sobre Personas sin hogar del INE, en 2022, no recoge datos sobre los menores de 18 años.
No obstante, para los años 2019 y 2020, Cáritas ha identificado más de mil niños viviendo en una familia sin vivienda habitual en España. Esta cifra corresponde tan solo a la población que atiende la red de Cáritas.
Es posible que la cifra sea mayor, por dos motivos. Habrá niños sin vivienda habitual, no acompañados por Cáritas. Desde entonces, además, el incremento de los precios del alquiler pudo suponer un aumento de la población sin vivienda habitual, incluyendo niños.
Informes del Comité de Derechos del Niño y del Estado español
Para tener información actualizada sobre el derecho a la vivienda de la infancia en España vamos a recurrir a los informes elaborados para el VII ciclo del procedimiento de informes periódicos de España ante el Comité de Derechos del Niño de Naciones Unidas. Durante este procedimiento se revisa el trato que recibe la infancia en España en distintos ámbitos. Aquí nos centraremos en el de la vivienda.
En febrero de 2023, el Comité de Derechos del Niño presentó a España una lista de cuestiones previa a la presentación de informes. Allí se hace mención en dos ocasiones a la vivienda, pero las recomendaciones se quedan en un plano general al pedir que se garantice el acceso a una vivienda digna y el suministro de energía. Se menciona también la necesidad de “suspender todos los desahucios de familias con hijos a cargo hasta que se les encuentre una alternativa habitacional”.
En marzo de 2024, España presentó el informe del Estado parte, como primera respuesta al Comité de Derechos del Niño. Se encuentran tres referencias a la vivienda. Se menciona el Plan de Acción Estatal para la Implementación de la Garantía Infantil Europea (2022-2030) para reducir la infravivienda.
También se habla del acceso a la vivienda mediante iniciativas específicas: una es el Plan Operativo para la Protección de los Derechos Humanos de mujeres y niñas víctimas de trata, explotación sexual y mujeres en contextos de prostitución 2022-2026. La otra es el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
¿Qué dicen los informes alternativos?
De febrero a agosto de 2024, se publicaron once informes alternativos sobre los derechos de la infancia en España. Nueve se presentaron directamente al Comité de Derechos del Niño. Ninguno se dedica en exclusiva al derecho de la infancia en materia de vivienda.
En los informes del Consejo General de la Abogacía del Estado y del Defensor del Pueblo no se hace mención a la vivienda, las alternativas habitacionales o los desahucios. La vivienda no parece una cuestión de Estado.
Por el contrario, la Fundación Raíces y la Plataforma de Organizaciones por la Infancia sí abordan la cuestión.
Con un informe de carácter transversal, la Plataforma dedica un apartado específico a vivienda y otro a pobreza energética. Para garantizar los derechos de la infancia en materia de infancia, la Plataforma fija tres objetivos:
1. Acabar con la infravivienda y el chabolismo en un plazo máximo de seis años.
2. Suspender todos los desahucios de familias con hijos a cargo mientras no haya una alternativa habitacional.
3. Promover la construcción y rehabilitación de vivienda de alquiler social.
En cuanto a la pobreza energética, la Plataforma hace dos recomendaciones:
1. Conceder automáticamente el bono social eléctrico a la infancia en situación de vulnerabilidad.
2. Garantizar que toda la infancia tenga acceso al suministro de energía, sobre todo en los asentamientos.
Pero, para abordar ambas cuestiones, la actuación responsable de las administraciones públicas es fundamental. Ya en 2022, la Asociación Provivienda abría la puerta a este debate con su informe Derechos humanos, infancia y vivienda: una aproximación jurídica.
La vulnerabilidad residencial de la infancia gitana y migrante
En la actualidad, dos grupos sociales muestran especial vulnerabilidad residencial. El primero es la infancia gitana: en 2023, un 50 % de la población gitana menor de 16 años vivía en una infravivienda.
El segundo grupo es la infancia migrante. En su informe, la Plataforma expresa su preocupación por la infancia migrante en situación de calle. Es un riesgo cuando llegan a la vez muchas personas migrantes a España. Existe también un riesgo de sinhogarismo para adolescentes extranjeros no acompañados, por la falta de apoyos institucionales y familiares.
Según la Fundación Raíces, algunos niños migrantes tutelados huyen de los centros de acogida por la violencia que ahí sufren. A raíz de ello, se quedan durmiendo en la calle y desaparecen del sistema de protección. Otro grupo en riesgo son los niños cuya minoría de edad no es reconocida por España. Algunos se mantienen en situación de calle para no estar en centros de adultos, no adecuados para ellos.
La Fundación Raíces recomienda, además, “impulsar medidas específicas de acceso a la vivienda y al empleo centradas en las circunstancias especiales de los jóvenes extutelados”. Así, se refiere a los riesgos de sinhogarismo que enfrentan los jóvenes extranjeros extutelados cuando cumplen los 18 años.