El Día Internacional de la Niña es una fecha clave para abordar los desafíos y obstáculos a los que tienen que enfrentarse millones de niñas en todo el mundo.
11 de octubre de 2024
A pesar de los avances en derechos humanos, millones de niñas siguen siendo víctimas de situaciones que limitan su desarrollo, salud y libertades fundamentales. Desde el acceso desigual a la educación hasta los matrimonios forzados y la violencia de género, las niñas tienen que enfrentarse a graves desafíos.
En este post, te presentamos 10 datos impactantes que te ayudarán a entender la gravedad de esta realidad y, lo más importante, a inspirarte a ser parte del cambio. Estos datos no solo revelan las injusticias que viven, sino que también nos recuerdan que la igualdad es una lucha que no ha terminado.
1.- Matrimonios forzados
Según UNICEF, el matrimonio infantil se refiere a cualquier matrimonio formal o unión informal en la que al menos uno de los cónyuges es menor de 18 años. A pesar de que esta práctica ha disminuido a nivel global —hace diez años, 1 de cada 4 niñas se casaba siendo menor de edad, mientras que hoy la cifra es 1 de cada 5—, sigue siendo un problema extendido.
Las niñas obligadas a casarse antes de los 18 años ven cómo sus sueños y oportunidades de desarrollo se desvanecen. Muchas de ellas enfrentan embarazos en la adolescencia, una de las principales causas de muerte entre niñas de 15 a 19 años en países en desarrollo.
El matrimonio infantil perpetúa, además, el ciclo de pobreza y la desigualdad de género. Las niñas que dejan la escuela para casarse pierden el acceso a la educación, lo que limita su capacidad para alcanzar la independencia económica y las condena a una vida de dependencia.
2.- Violencia de género
Una de cada tres niñas en el mundo ha experimentado algún tipo de violencia antes de cumplir 18 años, lo que constituye una de las violaciones más extendidas de los derechos humanos. Esta alarmante realidad abarca violencia física, sexual y psicológica, afectando a niñas de todas las regiones, sin importar su nivel económico o contexto social.
3.- Derecho a la salud sexual y reproductiva
Millones de niñas en todo el mundo carecen de educación sexual integraly de acceso a servicios básicos de salud sexual y reproductiva, lo que las expone a graves riesgos de salud y afecta a su bienestar general. En muchas comunidades, hablar sobre salud sexual sigue siendo un tabú, lo que significa que las niñas no reciben la educación que necesitan para tomar decisiones informadas sobre sus cuerpos. Esta falta de información y acceso a servicios como anticonceptivos, atención prenatal o cuidados médicos relacionados con la salud reproductiva, provoca que muchas niñas tengan que hacer frente a embarazos no deseados a edades tempranas, con consecuencias graves para su salud física y mental.
4.- Menstruación y exclusión
La menstruación sigue siendo un tema cargado de estigmas y tabúes en muchas partes del mundo. Millones de niñas se ven obligadas a faltar a la escuela durante sus períodos debido a la falta de acceso a productos menstruales adecuados, infraestructura sanitaria básica y por miedo a ser avergonzadas o estigmatizadas. Esta exclusión temporal se convierte en una barrera adicional a su educación y desarrollo personal, limitando su capacidad para participar plenamente en la vida escolar y social.
5.- Mutilación genital femenina
La mutilación genital femenina (MGF) es una de las violaciones más atroces de los derechos humanos que sufren millones de niñas y mujeres en todo el mundo. Se estima que alrededor de 200 millones de niñas y mujeres vivas hoy en día han sido sometidas a esta práctica en más de 30 países, principalmente en África, Oriente Medio y algunas regiones de Asia. La MGF implica la alteración o extirpación parcial o total de los órganos genitales externos femeninos por motivos no médicos, y se realiza generalmente en niñas durante su infancia y adolescencia en condiciones generalmente poco salubres.
6.- Trabajo infantil
Cerca de 160 millones de niños y niñas en todo el mundo están involucrados en alguna forma de trabajo infantil, y las niñas a menudo son más vulneradas por las peores formas de explotación y abuso. Aunque el trabajo infantil afecta tanto a niños como a niñas, las niñas enfrentan desafíos únicos debido a la naturaleza de las tareas que suelen desempeñar y a los riesgos adicionales relacionados con su género.
7.- Impacto de la pobreza en las niñas
La pobreza afecta de manera desproporcionada a las niñas, limitando sus oportunidades de educación, salud y protección. En las comunidades más vulnerables, las niñas suelen ser las primeras en sufrir las consecuencias de la falta de recursos, ya que las familias en situación de pobreza extrema a menudo priorizan la educación y el bienestar de los niños varones, dejando a las niñas en desventaja. Esta desigualdad en el acceso a los recursos perpetúa el ciclo de pobreza y exclusión, ya que las niñas que no pueden ir a la escuela tienen menos oportunidades de salir de esa situación en la edad adulta.
8.- Derecho a la identidad de las niñas
El derecho a la identidad es fundamental para el pleno desarrollo de las niñas, pero en algunos países, muchas no tienen acceso a un certificado de nacimiento o a documentos de identidad. Esta falta de documentación oficial tiene consecuencias devastadoras, ya que impide que puedan acceder a derechos básicos como la educación, la salud y la protección legal frente a abusos y explotación.
9.- Explotación sexual de las niñas
Las niñas representan una alarmante proporción de las víctimas de trata de personas con fines de explotación sexual en todo el mundo. El 99% de las víctimas de trata con fines de explotación sexual son mujeres y niñas, lo que refleja una grave crisis de derechos humanos que afecta desproporcionadamente a las niñas más vulnerables. Este tipo de explotación no solo destruye sus vidas, sino que perpetúa un ciclo de violencia, abuso y marginación del que es extremadamente difícil escapar.
10.- Cambio climático y derechos de las niñas
El cambio climático afecta desproporcionadamente a las niñas y mujeres jóvenes. Las desigualdades preexistentes, como la pobreza y la falta de acceso a recursos básicos, exacerban su vulnerabilidad ante fenómenos climáticos extremos como sequías, inundaciones y desastres naturales, que cada vez son más frecuentes debido al calentamiento global.
Uno de los impactos más visibles del cambio climático en las niñas es el aumento de la inseguridad alimentaria. En muchas comunidades rurales y en países en desarrollo, las niñas y mujeres son las principales responsables de recolectar agua y alimentos para sus familias. Con el cambio climático, los recursos se vuelven más escasos, lo que significa que las niñas deben caminar distancias más largas para acceder a agua potable, exponiéndose a riesgos de violencia y abuso durante el trayecto.
El texto reproducido más arriba es un resumen del post publicado en el blog de Amnistía Internacional. Para acceder al texto completo utilizar ESTE ENLACE