La Procuraduría General de la Nación ha emitido una fuerte condena ante lo que considera una situación intolerable de violencia contra la infancia en Colombia, subrayando el contraste entre este grave problema y las disposiciones de protección y prioridad de derechos para niños, niñas y adolescentes consagradas en la Constitución y la legislación colombiana.
07 Abr, 2024
El ministerio Público ha recalcado la obligación de padres, sociedad y Estado de asegurar la protección integral de los niños, niñas y adolescentes - crédito Colprensa |
Este órgano de control ha hecho énfasis en que, contradictoriamente, muchos menores son sometidos a distintas formas de maltrato precisamente por aquellos que deberían garantizar su seguridad: sus padres y cuidadores. Además, ha señalado una serie de situaciones de riesgo adicionales, como el matoneo escolar, el abandono, el trabajo y el matrimonio infantil, así como el reclutamiento forzado por grupos armados, entre otros, que amenazan el bienestar de la juventud colombiana.
Datos alarmantes respaldan estas afirmaciones. Informes recientes indican un elevado número de menores afectados por muertes violentas y suicidios, así como una alta incidencia de casos de violencia intrafamiliar. Estas cifras destacan la vulnerabilidad específica de los niños y adolescentes frente a tales agresiones.
“Los registros del Boletín Estadístico del Instituto de Medicina Legal de diciembre 2023, en donde 607 menores de edad, la mayoría adolescentes (531), fueron víctimas de muerte violenta, (47) en etapa de primera infancia y (29) en infancia; periodo en el que también se registraron 280 casos de suicidio. En enero de 2024, (44) fueron los casos reportados por lesiones fatales, 40 de los cuales fueron de adolescentes”.
El Boletín Estadístico del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar indicó que 69.660 menores de edad ingresaron a Procesos de Restablecimiento de Derechos (PARD) por diversas razones, siendo las principales la omisión o negligencia y la violencia sexual. Entre enero y febrero de 2024, se registraron 7.433 nuevos casos.
Por tanto, la Procuraduría ha urgido a entidades gubernamentales clave y al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar a adoptar medidas efectivas de inmediato, con el fin de mitigar estos factores de riesgo y mejorar la protección y garantías de los derechos de los menores.
Para cerrar, la entidad reafirmó la importancia primordial de resguardar la integridad personal de niños, niñas y adolescentes como una responsabilidad ineludible del Estado, la sociedad y las familias, instando a un esfuerzo colectivo y persistente para prevenir cualquier forma de amenaza o violación de sus derechos fundamentales.
El triste panorama de Antioquia
En La Estrella, Antioquia, se ha dado un caso que ha alarmado a la comunidad: un hombre de 27 años fue detenido en un motel en compañía de dos adolescentes, un hecho que actualmente está siendo investigado por las autoridades. Este individuo fue llevado a una Unidad de Reacción Inmediata (URI) para los trámites legales pertinentes, mientras que las menores están recibiendo atención psicosocial para evaluar su estado de salud y bienestar. La rápida actuación de la policía, motivada por información previa sobre actividades sospechosas, permitió la intervención oportuna en este caso, subrayando la importancia de la vigilancia y pronta respuesta ante situaciones de riesgo para menores.
Este no es un hecho aislado en la región, ya que se han reportado otros incidentes preocupantes en Antioquia, incluyendo la detención en Medellín de un joven colombo-australiano de 19 años acusado de abusar de un niño de 12 años. Este caso siguió a otra situación alarmante vinculada al turismo sexual con menores. La captura del sospechoso se produjo después de que el menor afectado buscara ayuda, lo que llevó a su rescate y a la posterior investigación del acusado. Estos incidentes han resaltado la necesidad de una mayor conciencia y acciones concretas para proteger a los menores de potenciales abusadores, especialmente en el contexto de la era digital y la facilidad de contacto a través de redes sociales.
Estos eventos han conmocionado a la comunidad y han puesto en evidencia la cresciente preocupación por la seguridad de los niños y adolescentes en la región, enfatizando la urgencia de implementar políticas más estrictas y reforzar los mecanismos de prevención y denuncia para combatir el abuso infantil y garantizar un entorno seguro para los menores.
*Esta nota fue hecha con ayuda de inteligencia artificial