No se puede negar el derecho a la educación con base en el incumplimiento por parte de Axan de reglas disciplinarias, estereotipos, modas....
Fuentes SPD noticias
y El País
¿Qué tan poco en serio nos tomamos a los derechos humanos
que prefiere privarnos de nuestra educación, a revisar su concepción estereotípica e inconstitucional del género?cuando seguimos creyendo que "las reglas" son lo que dicta una escuela
“Mi hijo Axan tiene cuatro años y por alguna razón le gusta mucho su cabello largo”. Así comienza la carta de una mexicana en la que explica que una escuela le negó acceso a su hijo por usar el cabello a la altura del cuello. En su reglamento, la escuela privada, en Hermosillo, Sonora, exige a los niños usar cabello corto y esto le fue notificado a la madre de Axan, A. de la Maza (como prefiere ser identificada) a mediados de 2015.
“Se entiende que si un niño tiene el cabello largo no merece recibir educación”, escribió en la carta publicada en change.org en septiembre de 2015. “¿Tengo derecho a decirle a mi hijo que debe cortarse el cabello para poder ir a la escuela? ¿Cómo explicarle que su derecho a la educación depende de un estereotipo de género?”
El caso fue difundido en medios nacionales como El Universal, Milenio, Excelsiory Animal Político, lo que hizo al hashtag #AxanDecide trending topic en esas fechas. También despertó un debate en las redes sobre qué tanto podía decidir el niño sobre su apariencia a su edad. Entre la discusión también surgieron amenazas de agresión física y muerte a De la Maza. Por esta razón declinó nuestra petición de entrevista.
En agosto de 2015, De la Maza envió su carta y una denuncia formal al Consejo Nacional para prevenir la Discriminación (Conapred), órgano con las facultades para concluir si la escuela violó los derechos humanos de Axan.
El 2 de mayo Conapred notificó a De la Maza que falló a su favor. “El reconocimiento del derecho a la educación de Axan no puede dejarse de lado o restringirse por la regulación heteronormativa”, se lee en el documento. Estefanía Vela, una abogada e investigadora que apoya a De la Maza en su denuncia, difundió la resolución en Twitter la tarde del 3 de mayo de 2016.
#AxanDecide y gana: Escuela deberá pagar 96 mil pesos por daños
¿Qué tan poco en serio
nos tomamos a los derechos humanos cuando seguimos creyendo que "las
reglas" son lo que dicta una escuela que prefiere privarnos de nuestra
educación?
El pasado 22 de septiembre de 2015, autoridades de la escuela IMARC le impidieron el acceso a sus instalaciones a Axan, un niño de 4 años al que le gusta llevar el cabello largo.
Hasta que el pequeño se cortara el cabello, podría acceder al derecho de educación,
un derecho universal y prioritario inscrito en la Constitución y
avalado en la Suprema Corte de Justicia de la Nación de la siguiente
forma:
"Tanto las instituciones privadas como las públicas tienen la obligación de acatar estos mandatos constitucionales. También
tenemos el derecho a la educación y los menores cuentan con el derecho a
que las decisiones que los impactan sean tomadas con su interés
superior en mente".
En este sentido, la madre de Axan sabía perfectamente cuáles eran los derechos del niño y que estos estaban siendo vulnerados. ¿Cómo explicarle a un niño de esa edad que su derecho a educación depende de un estereotipo de género?, decía.
Así, publicó una petición en change.org para decir "no" a los estereotipos de género, misma que se viralizó rápidamente, dividiendo opiniones en todo el país.
El asunto se polarizó a tal punto que sólo podía verse, por un lado, a
los que decían que Axan estaba haciendo berrinche y que la madre lo
toleraba y, por otro, a los que querían que el niño volviera a la escuela, respetando su libertad de apariencia.
Con respecto a los primeros, comentó Estefanía Vela Barba:
"Esta manera de pensar es engañosa. La madre no está proponiendo un mundo sin reglas; está proponiendo un mundo con reglas apegadas al marco de los derechos humanos".
Y así fue. El proceso duró ocho meses, pero al fin, #AxanGanó y la sentencia se dio a conocer este 3 de mayo. En ella se afirma que los estereotipos de género vulneran los derechos humanos cuando una connotación negativa segrega o excluye al otro.
Además, se deja claro que las instituciones educativas, públicas o privadas condicionan los derechos humanos desde el momento en que prohíben a los niños llevar el cabello largo en sus reglamentos.
#AxanDecide sobre su libertad de apariencia y #AxanGanó el libre ejercicio de sus derechos. De acuerdo con CONAPRED, la escuela deberá pagar 96 mil 239 pesos por daños y adaptarse a las normas de la Constitución mexicana.
Algo realmente bueno sale de todo esto, además de enseñarle a un niño
de apenas cuatro años que los derechos humanos no son de papel y que las particulares no están por encima de la ley. Miles de menores deberían conocer el caso Axan.
Para nosotros, también nos deja el goce de que al menos en este caso,
los derechos humanos no dependieron de un "contrato entre
particulares". Sin embargo, deberíamos respondernos la siguiente
cuestión:
¿Qué tan poco en serio nos tomamos a los derechos humanos cuando seguimos creyendo que "las reglas" son lo que dicta una escuela que prefiere privarnos de nuestra educación, a revisar su concepción estereotípica e inconstitucional del género?