Como usuario de lo que se conoce comúnmente como “centro de menores”
voy a compartir lo que estamos viviendo y cómo nos sentimos por las
etiquetas que se nos colocan.
Primero, no es un centro de menores, es
una unidad familiar por motivos que muchas veces no tienen que ver con
nuestro comportamiento, sino por el de los familiares. Nos etiquetan
como niños no sociables, maleducados, inadaptados o como pequeños
delincuentes.
Debido a esto, tenemos que hacer grandes esfuerzos para
adaptarnos en el colegio, en el instituto y en la comunidad. Para
nosotros es más difícil hacer amigos y entrar en pandillas porque nos
miran con recelo y/o porque los padres no quieren que sus hijos se
relacionen con chicos de “centros”.
Pero no todo es tan malo; por
suerte, contamos con la ayuda de nuestros educadores, que nos aportan la
ayuda y el amor que nuestras familias no pueden o no saben darnos y los
queremos. No somos malos chicos, dadnos una oportunidad antes de
etiquetarnos.
Álvaro Edu Ayang Ekua. Santander.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Danos tu opinión, Escribe tu comentario, AQUÍ