Las aventuras de Beekle, el amigo (no) imaginario
Desde 1967, cada 2 de abril, coincidiendo con la fecha del nacimiento del escritor danés Hans Christian Andersen, se promueve a nivel mundial gracias al IBBY (The International Board on Books for Young People), la celebración del Día Internacional del Libro Infantil. Un día de fiesta que busca promocionar los buenos libros infantiles y juveniles, y sobre todo la lectura entre los más pequeños de la casa. Aquí os dejamos 10 recomendaciones que llegan con la primavera, libros llenos de vacas, jardines mágicos, humor, superpoderes y delirantes viajes.
Cada año, una sección nacional del IBBY tiene la oportunidad de ser
la patrocinadora de este día y selecciona a un escritor representativo y
a un reconocido ilustrador de su país para que conjuntamente elaboren
el mensaje y el cartel que se dirigirá a todos los niños y niñas del
mundo y que se distribuye por infinidad de bibliotecas, centros
escolares y librerías para que se promueva la celebración de este día.
Este año el país elegido ha sido Brasil y los autores que han elaborado
el mensaje y que se puede leer y descargar desde aquí han sido la escritora Luciana Sandroni y el ilustrador Ziraldo.
El Día de Libro Infantil suele pasar desapercibido, y eso que tiene
un público mayoritario que son grandes y buenos consumidores. Los
colegios deberían hacerle un hueco, darle mayor protagonismo y casi
equipararlo con la celebración del Día del Libro, el 23 de abril. Sería
una buena manera de conocer a los autores e ilustradores de todos esos
libros que alimentan y despiertan sus sueños. Una buena forma para
aprender a valorar y a visibilizar los esfuerzos que se requieren para
que un buen álbum ilustrado o un libro juvenil consiga llegar hasta sus
pequeñas manos. A veces, la celebración de este día se les queda a sus
protagonistas un pelín grande y quizá aburrida y descontextualizada,
porque se les vende de forma poca atractiva. Para conseguir buenos
lectores no debemos saltarnos la casilla de inicio, que es la de los
libros infantiles ilustrados, y la siguiente, la de los libros
juveniles. Semillas necesarias para que nazcan buenos lectores y amantes
de los libros. Unas casillas apasionantes donde debemos mencionar y dar
a conocer los nombres de los autores y de los ilustradores, de qué
países proceden sus historias, igual que hacemos cuando hablamos de los
libros en general. Cada vez que contamos un cuento deberíamos
mencionarles sus nombres y sus detalles. Porque los tienen que conocer,
porque sin los autores y sus circunstancias no existirían las historias.
Todos los niños y niñas tienen derecho a ser lectores y los adultos que
estamos a su alrededor tenemos la obligación de promocionar y ofrecer
todo el apoyo necesario para que esto pueda ser posible.
Me encanta celebrar este día que para mí inaugura la primavera. Y
descubrir las novedades que van llenando las estanterías de las
librerías con buen rollo y energías renovadas. Así que aquí van estas
diez primeras flores de esta larga primavera de novedades que se nos
avecina. Nos van a servir para llenarnos de alegría y optimismo, y van a
contribuir sin duda a seguir fomentando nuestro amor por los buenos
libros infantiles.
‘¿Dónde está Tomás?’. Micaela Chirif y Leire Salaberria. Ekaré.
¿Te gusta esconderte y soñar? ¿Te gusta buscar un rincón secreto y
adentrarte en un lugar maravilloso que te va a llevar a vivir nuevas
aventuras? A Tomás le pasa exactamente lo mismo que a ti, le chifla
esconderse y soñar. Su mamá lo busca en cada rincón de la encantadora
casa roja donde viven. Y Tomás va andar viajando lejos, muy lejos…, pero
sin alejarse apenas nada de su mamá. Cada página te va a llevar a
nuevos remotos parajes acompañados del entrañable Tomás.
Ilustración del libro ‘Un jardín’.
‘Un jardín’. Isidro Ferrer y María José Ferrada. A buen paso.
El señor Wakagi sueña con un jardín, y cada noche se va a transformar
en los seres que habitan ese jardín. Se convierte en rana, conejo,
zorro. Y, a medida que se va acompasando al ritmo de la naturaleza, se
hace lluvia y viento… Todo esto va a pasar hasta el día en que el señor
Wakagi se da cuenta de que ese jardín ha sido su escuela. En este
delicioso lugar, el lector va a ir saboreando las palabras de la poeta
María José Ferrada y verá cómo se despliega ante sus ojos el jardín
entero en un maravilloso friso creado por Isidro Ferrer. Un despliegue
en el que cada elemento desaparece para dar vida al siguiente, en un
recorrido continuo y sin interrupciones, como cada instante que compone
una vida.
‘Las aventuras de Beekle, el amigo (no) imaginario’. Dan Santat. Cubilete.
¿Y si los mejores amigos se encuentran más allá de tu imaginación?
Todos tuvimos un amigo imaginario, algunos incluso aún nos acompañan.
Esta historia comienza en una lejana isla mágica, donde nacen los amigos
imaginarios. Nuestro protagonista va a esperar pacientemente a que un
niño lo elija para jugar, pero los días pasan y pasan y nadie viene a
buscarle. Así que decide ir él mismo a buscar a ese niño… ¡al mundo
real! Este álbum combina la narración clásica con unas espectaculares
imágenes para crear esta estupenda historia sobre la amistad, la
imaginación y el valor para encontrar un lugar propio en el mundo.
Ilustración de ‘El pequeño jardinero’.
‘El pequeño jardinero’. Emily Hughes. Impedimenta.
Esta pequeña historia nos traslada a un pequeño jardín, que no parece
gran cosa. Pero para su jardinero lo es todo. Emily Hughes nos trae la
conmovedora historia de un muchacho apenas más grande que su mascota que
se siente incapaz de afrontar el trabajo que supone cuidar de su
exuberante jardín. Un buen día decide pedir ayuda y aquí todo cambia.
Impedimenta publica esta delicia de historia sobre la perseverancia, el
entusiasmo y la fuerza del amor, que hará las delicias de los más
pequeños y que a los más mayores logrará emocionar. Emily Hughes llena
de vida este jardín gracias a sus vibrantes ilustraciones, llenas de
matices e impresionantes colores.
Ilustración de ‘¿Y mi sombrero?’
‘¿Y mi sombrero?’ Masanobu Sato. Pastel de Luna.
Desde la colección Lejano Oriente de la editorial Pastel de Luna nos
llega esta divertida historia de un extraño animalejo que ha perdido su
sombrero. En este libro nos enfrentamos a un largo viaje donde los
lectores tendrán que seguir una serie de pistas que le ayuden a
encontrar el sombrero, que ha salido volando y aparece camuflado en
todos los paisajes de este viaje. Este libro va a despertar la
curiosidad y la capacidad de observación de los más pequeños.
Fantásticas ilustraciones en blanco y negro, llenas de detalles y
sutilezas. Si os apetece viajar hasta lugares remotos y fantásticos,
este es vuestro libro.
‘Un hada descontrolada’. André Bouchard. Edelvives.
¿Qué pasaría si tuvieras superpoderes pero fueras un pelín travieso?
Seguramente tratarías de gastar alguna que otra bromilla. Marga ha
recibido un fantástico regalo por su cumpleaños, un flamante disfraz de
hada y superpoderes con la capacidad de poder transformar cualquier
cosa. O eso cree ella. Sin embargo, algunos trucos que realiza guardan
extraordinarias sorpresas e imprevisibles consecuencias. Un libro lleno
de humor, vida y ternura, para dejar escapar más de cien carcajadas…
Sobre todo cuando llegues al final.
‘¿Quién compra un rinoceronte?
‘¿Quién compra un rinoceronte?’. Shel Silverstein. Kalandraka.
Este clásico de 1964 que nos rescata Kalandraka es un imprescindible.
Con una propuesta estética muy sencilla a base de dibujos sin colorear,
sorprende y cautiva por su sentido del humor, su frescura y la
habilidad de su autor para plantear argumentos disparatados bajo una
aparente seriedad. Desde el momento en que se abre este libro, te das
cuenta de que ni un gato ni un perro son ya las mascotas ideales. Un
rinoceronte tiene millones de ventajas que las demás mascotas no tiene.
De este libro hay que destacar el gran trabajo de traducción de Miguel
Azaola, que no sólo ha respetado la rima de la versión original, sino
que además reinterpreta con ingenio el texto de Silverstein manteniendo
la estructura en verso.
‘La primera aventura del Ratoncito Pérez’.
‘La primera aventura del Ratoncito Pérez’. José Carlos Andrés y Betania Zacarias. NubeOcho.
No lo puedo evitar; siento debilidad por las historias de José Carlos
Andrés, sobre todo cuando tienes la posibilidad de que sea él mismo
quien te las cuenta. Nunca te pierdas un cuentacuentos capitaneado por
él, pero ten cuidado, porque te puede utilizar como ayudante. En esta
ocasión, la historia que nos trae José Carlos viene de la mano de las
magníficas ilustraciones de Betania Zacarias, con la que compone un
maravilloso tándem para desvelarnos la primera aventura del Ratoncito
Pérez. Una historia llena de humor para saber qué sucede cuando un niño
pierde un diente. Muy pocos conocen la verdadera historia. ¿Quién podría
imaginar que todo comenzó bajo el mar?.
‘Cuando las vacas flotan’. Ximo Abadía. Takatuka.
A veces nos empeñamos en tener atrapado aquello que por naturaleza
necesita libertad. Un buen día, un niño llega contento a casa con un pez
dentro de una bolsa que le acaba de tocar en la feria. Es feliz con su
pez…, hasta que se va a dormir y empieza a soñar y le despierta el
cencerro de una vaca surcando el cielo. Entonces va a descubrir con
sorpresa que todo empieza a flotar: los bomberos recorren el cielo en
busca de incendios, el cartero persigue su bicicleta que ha echado a
volar… ¡Todo flota! Hasta él mismo. Una preciosa metáfora sobre el orden
natural de las cosas y la irreductible fuerza de la libertad.
‘El mejor libro para aprender a dibujar una vaca’
‘El mejor libro para aprender a dibujar una vaca’. Hélène Rice y Ronan Badel. Barbara Fiore.
Un libro muy pequeño, pero que esconde una historia muy grande. Este
álbum nos explica dos infalibles técnicas para aprender a dibujar una
vaca. Algo que aparentemente resulta muy fácil. El primer método es muy
sencillo, sólo hay que seguir cuatro instrucciones con mucha atención.
En cambio, el segundo método requiere un poco más de paciencia. Hay que
plantar una semilla de diente de león y dejarla crecer hasta que
aparezca una vaca. Porque todo el mundo sabe que a las vacas les encanta
el diente de león. Un delirante y encantador libro, lleno de humor y
con un final sorprendente para el deleite de niños y adultos. Logrará
sacarte un par de sonrisas, que vienen muy bien para afrontar esta
primavera.