Estudio sobre el Ocio Infantil en la Comunidad de Madrid

Fecha: Enero-Junio 2011
 

Equipo investigador: GSIA, Grupo de Sociología de la Infancia y la Adolescencia

Directora del equipo: Dª Lourdes Gaitán
 

Entidad contratante: Instituto Micropolix de Estudios de Ocio Educativo Infantil
 

Objetivos:
El estudio está orientado a conocer:
•    El concepto que tienen los niños sobre el juego, el ocio o el tiempo libre, así como el concepto que sostienen los adultos (madres y padres).

 
•    Cómo utilizan los recursos de ocio y tiempo libre y cómo les gustaría utilizarlos. Y cuál es también esta visión en los padres.

 
•    Quién decide dicho uso, cuándo, cómo y en qué temas, reglas y pactos latentes o explícitos entre padres e hijos. 

 
•    Qué diferencias existen en cuanto a sexo, edad y clase social.
Metodología:

 
El estudio constará de dos fases
1ª Cuantitativa
    Se delineará el perfil general de la población infantil en la Comunidad de Madrid.

 
2ªCualitativa
    Destinada a explorar las percepciones, actitudes, expectativas y opiniones de los propios niños y niñas, así como de padres, madres y otros adultos de interés (profesores…).
Además se incorpora un enfoque novedoso en cuanto al papel que juegan los niños en la investigación, ya que participarán en las diferentes partes del proceso.

Los resultados de la investigación se harán públicos a partir de julio







 Instituto Micropolix de Estudios de Ocio Educativo Infantil se crea para activar y fomentar la investigación, el debate y el intercambio de opiniones y experiencias que ayuden a generar conocimiento sobre el ocio de los niños y niñas profundizando en las características del ocio educativo infantil.
 
Es una entidad sin ánimo de lucro  que tiene como destinatarios de sus actividades a toda la comunidad educativa, formada por docentes, directivos, padres , alumnos… para fomentar actividades de ocio infantil de calidad que complemente la imprescindible labor que realizan los centros escolares y las familias. 


Micropolix, desde su apertura en diciembre de 2008, ha recibido  más de 350.000 visitas de niños y niñas entre 5 y 14 años. 
Micropolix es por tanto un proyecto asentado, y necesita reflexionar y profundizar en las características del ocio dirigido a la infancia. 

Por ello El Instituto Micropolix de Estudios del Ocio Infantil ha confiado en GSIA uno de sus primeros estudios propios sobre el Ocio Infantil

COLOQUIO: “CON EL DEDO EN LA PANTALLA”

El pasado 21 de enero de 2011se celebró, en El Espacio Pozas (Cruz Roja), El coloquio “CON EL DEDO EN LA PANTALLA”, sobre el uso y consumo de las nuevas tecnologías en la infancia y la adolescencia.
Organizado por Gsia, Grupo de Sociología de la Infancia y la Adolescencia, del Colegio de Politólogos y Sociólogos de Madrid. 

Presentado por Justina de Pablo, miembro del citado grupo.

En él participaron como ponentes invitados:
José Miguel Marinas Herrera. Catedrático de Ética y Filosofía de la UCM
Iván Rodríguez Pascual. Profesor de la EU de Trabajo Social de Huelva
Jorge Flores Fernández. Fundador y director de “Pantallas Amigas”.



Al inicio del coloquio los ponentes invitados presentaron sus respectivos trabajos e informes, desde  tres perspectivas diferentes, de la “relación” que supone el uso y el consumo de las nuevas tecnologías (a partir de este momento TIC) por la infancia y la adolescencia.

De las aportaciones de los tres invitados se pueden señalar los siguientes puntos de reflexión en esta “madeja relacional” que surge de la interacción TIC- infancia y adolescencia:

- En la “sociedad de la cultura del consumo”, en la que se encuentran inmersos niños/as, adolescentes y adultos; el consumo de las TIC “anula la conciencia de las propias posibilidades”.

 
- Los niños/as y adolescentes reciben esta cultura consumista entre la agenda mediática en la que están inmersos y la agenda de sus propias vivencias.

 
- El consumo de la información que facilitan las TIC comienza a crear nuevas categorías sociales en los que los límites y perfiles entre la infancia y los adultos se difuminan y se hacen ambiguos.

 
- En el discurso mediático de la interacción TIC- Infancia y Adolescencia; siempre se presenta a las TIC como un factor de riego para la infancia y la adolescencia. Factor de riesgo que se resuelve con una postura de protección adulta frente a las competencias de la infancia

 
- La variable que explica el riesgo de las TIC para la infancia es la manera en la que el niño se “construye como usuario” y una alternativa para conseguir la seguridad de la infancia frente a las TIC es la construcción de los niños y adolescentes como sujetos de derechos (“ciclo del empoderamiento”). 

 
- La relación TIC- sociedad  genera nuevos derechos para adultos, niños y adolescentes (derecho al olvido).

 
- Las variables que ofrecen las  TIC (información, anonimato, creatividad y globalización) las hacen catalizadoras de la construcción de la ciudadanía digital de la infancia y la adolescencia.


- Dos experiencias prácticas de la “construcción de la ciudadanía digital de la infancia y la adolescencia” presentadas por Jorge Flores.“Pantallas Amigas”:
1- “Netiquetas joven para Redes Sociales”-  pautas de convivencia on-line (consideración y respeto por los demás usuarios, preservar la privacidad ajena y contribuir al buen ambiente en la Red) que sirven para el ejercicio de la ciudadanía digital.
2- “INTERNET amiga”- actividades didácticas on- line con tres ejes y temas a abordar:
- Descubre: Identificar y difundir usos enriquecedores y positivos de Internet e indagar sobre las múltiples alternativas de ocio, cultura y aprendizaje que no son conocidas.
- Opina: Reflexionar y concienciar sobre los Derechos de La Infancia en el “contexto de la Red” además de potenciar el Derecho a la participación.
- Actúa: Adoptar una actitud proactiva sobre el ciberbillyng (origen y consecuencias) y contraponer derechos y deberes en el marco del ciber-acoso. Todo ello plasmado en 10 ciber-derechos.



En el posterior coloquio y debate entre ponentes y público se aclararon “mitos” del discurso mediático de la interacción de las Tic, infancia y adolescencia (las TIC suponen los mismos riesgos y oportunidades tanto para adultos como para niños y adolescentes). Se coincidió en que las TIC suponen una nueva “madeja relacional” en todos los órdenes sociales, con nueva generación de derechos y deberes.

A modo de conclusión se señaló que esta “nueva realidad virtual” que han creado las TIC, abre un nuevo escenario relacional que precipitará cambios sociales en toda la estructura social; pero que sobre todo, en el caso de la infancia y la adolescencia apunta que a que supone el primer escenario donde parecen “disfrutar” de un  status de ciudadanos.
 También se señaló que la interacción Tic- infancia y adolescencia está suponiendo en otros instituciones sociales exclusivas de la infancia (escuela), “tensiones”  y “nuevas realidades” que piden reflexión y nuevas propuestas.

Promover el Acogimiento Familiar entre niños < de 6 años

El Gobierno modificará el Código Civil para propiciar el acogimiento familiar, al menos, entre los niños y niñas menores de 6 años

Madrid, 27 ene (EFE).
El Gobierno ha presentado hoy a las Comunidades Autónomas un conjunto de propuestas sobre la nueva Ley de Protección de la Infancia, para promover el acogimiento familiar como medida prioritaria frente a la atención residencial de los menores, cuyo anteproyecto pretende aprobar este semestre.

Durante la primera Conferencia Sectorial de los Servicios Sociales de este año, el Ejecutivo ha mostrado a las Comunidades Autónomas los temas prioritarios que quiere incorporar en el anteproyecto, que incluye la modificación de la ley de Enjuiciamiento Civil y el Código Civil, según ha explicado la secretaria general de Política Social y Consumo, Isabel Martínez.

"En el proyecto de ley queremos reforzar la garantía jurídica del menor, redefinir la situación de amparo y desamparo de los menores y mejorar la tutela de los menores que viven en los centros institucionalizados para reducir los periodos de estancia en estos centros de menores y fomentar la figura del acogimiento familiar, además de reducir los tiempos de espera para la adopción nacional", ha explicado Isabel Martínez.
La nueva legislación redefinirá la figura de la familia acogedora para adaptarlo a modelos de otros países de nuestro entorno, ha destacado la responsable de política social.
"Nos parece que hay demasiados niños internados en centros y creo que deberíamos ir a fórmulas que son mucho más efectivas y garantistas en los derechos de un menor; está demostrado que un menor donde mejor está es con la familia, sobre todo los niños de entre 0 a 6 años no deberían estar en centros y los que estén, que sean los mínimos".

CURSO SOBRE DERECHOS DE LA INFANCIA IMPARTIDO POR EL GSIA

En colaboración con la ONG ACSUR-Las Segovias, de Castilla-La Mancha, el Grupo de Sociología de la Infancia y la Adolescencia ha llevado a cabo el curso BASES PARA UNA INTERVENCIÓN CON LA INFANCIA Y LA JUVENTUD DESDE UN ENFOQUE DE DERECHOS.
El curso se ha desarrollado en dos fines de semana de noviembre y diciembre pasados, en dos localidades distintas de la región. El alumnado ha estado compuesto por 24 personas, la mayoría de ellas profesionales en activo en distintos campos de atención a la infancia.
El programa desarrollado contempló los siguientes temas:
  • Un nuevo enfoque para comprender la infancia: los niños como actores sociales, la infancia en la estructura social.
  • Bienestar social, derechos y políticas para la infancia.
  • Derechos y participación: la Convención de los Derechos del Niño. Mecanismos de control.
  • Políticas de infancia en Europa y España.
  • Desigualdad social y pobreza infantil.
  • La infancia en la Cooperación al Desarrollo.
  • Taller de proyectos con un enfoque de derechos de infancia.
La evaluación global del curso por parte de los alumnos ha sido de 4,56 puntos, sobre un máximo de 5 puntos.

COLOQUIO DEBATE - CON EL DEDO EN LA PANTALLA

El grupo de sociología de la Infancia y Adolescencia (GSIA) organiza el próximo viernes día 21 de enero a las 17.30 en el Espacio Pozas, un coloquio sobre las Nuevas Tecnologías en la Infancia y Adolescencia.


En él, expertos de la talla de Jose Miguel Marinas Herrera, Iván Rodríguez Pascual y Jorge Flores Fernández, profunfizando en aspectos de  consumo, utilización y fomento de la ciudadanía, desde una visión de derechos de la infancia y la adolescencia.

El Tribunal Constitucional rechaza la enseñanza en casa

La sentencia precisa que la libertad de enseñanza se circunscribe a la facultad de enseñar libremente fuera del horario escolar, pero sin “perjuicio” del deber de escolarización
La Sala Primera del Tribunal Constitucional ha denegado a unos padres malagueños la posibilidad de enseñar a sus hijos en su propio domicilio, sin escolarizarlos en un centro educativo.

Una formación ajena al sistema de enseñanza obligatoria por motivos pedagógicos “no está comprendida” en ninguna de la libertades educativas del artículo 27 de la Constitución.
Comunidad Escolar. Madrid.

La sentencia especifica que la Constitución no prohíbe que el legislador configure un sistema de enseñanza básica obligatoria “como un periodo de escolarización de duración determinada” y queda “excluida” la posibilidad de enseñar a los hijos en el domicilio familiar en lugar de proceder a escolarizarlos.Un matrimonio malagueño defendía que sus hijos, menores de edad, tenían en casa una educación mejor que en los colegios públicos con 30 o 40 alumnos por clase. Además, revelaban que los niños hablaban cinco idiomas y recibían clases de música, lengua, ciencias, matemáticas y una formación ética. Tras hacerse pública la sentencia del Tribunal Constitucional, los padres han exigido un nuevo modelo de edición, ya que consideran que los colegios constituyen un sistema de “obediencia y sumisión”. Florián Macarro, el padre de Tolox (Málaga) que presentó el recurso, opina que la escuela no enseña a los niños a ser personas autónomas y que tampoco fomenta la igualdad entre personas, sino la competitividad lo que, a su juicio, constituye una lacra para la humanidad.

Libertad de enseñanza
“Las escuelas no tratan de dar a los alumnos una educación bien hecha, sino una cabeza bien llena”, afirma y revela que su hija, cuando era pequeña, le pidió ir al colegio y decidió voluntariamente abandonarlo al cumplir 13 años porque “se aburría y no aprendía nada”. Según este padre, “se trata de conseguir que los padres que no quieran que sus hijos acudan a la escuela puedan disponer de otras alternativas”.Mientras que los magistrados del Tribunal Constitucional consideran que la facultad de los padres de elegir una formación ajena al sistema de enseñanza obligatoria por motivos pedagógicos “no está comprendida” en ninguna de la libertades educativas del artículo 27 de la Constitución, que reclaman los padres en el recurso de amparo. Además, precisan que la libertad de enseñanza se circunscribe a la facultad de enseñar libremente fuera del horario escolar pero sin “perjuicio” del deber de escolarización y la facultad de crear un centro docente cuyo proyecto educativo se ajuste mejor a “sus preferencias pedagógicas o de otro orden”.

Gratuita y obligatoria
Este fallo señala que la opción de escolarización obligatoria no viene requerida por la propia Constitución, sino que es una opción legislativa que la Carta Magna no prohíbe. Además, puntualiza que el legislador (las Cortes Generales) ya resolvió sobre la escolarización obligatoria con la Ley Orgánica de Calidad de la Educación (vigente cuando se presentó el recursote amparo en 2005), donde se establecía que la enseñanza, además de gratuita y obligatoria, incluía 10 años de escolaridad, desde los 6 a los 16 años. No obstante, el Tribunal Constitucional matiza que “no cabe descartar otras opciones legislativas que incorporen una cierta flexibilidad al sistema educativo y, en particular, a la enseñanza básica” a la vista del artículo 27 de la Constitución. La sentencia, de la que ha sido ponente la hasta ahora presidenta del Tribunal, María Emilia Casas, también explica los motivos por los que se rechaza el supuesto de que la negativa a escolarizar fuera por razones morales o religiosas: “la imposición del deber de escolarización de los niños entre 6 y 16 años constituye un límite incorporado por el legislador que resulta constitucionalmente viable por encontrar justificación en otras determinaciones constitucionales”.

Derechos constitucionales
Así como, concreta que la configuración de la enseñanza básica obligatoria como un periodo de escolarización determinada no afecta a los derechos constitucionales de los padres. “Incluso en el caso de que así lo hiciera, habría de considerarse una medida proporcionada que encuentra justificación en la satisfacción de otros principios y derechos constitucionales”. Sin embargo, los magistrados insisten en que la Constitución no consagra “directamente” el deber de escolarización ni otros aspectos más concretos de su régimen jurídico.Inicialmente, la fiscalía reclamó en el Juzgado de Coín (Málaga) la escolarización inmediata de los niños. El Juzgado ordenó en 2003 que los niños en edad escolar obligatoria fueran a clase, porque el artículo citado de la Constitución no permite a los padres negar el derecho y la obligación de participar en el sistema oficial de educación, sin valorar la calidad de la enseñanza que recibían. De igual modo, se manifestó la Audiencia Provincial de Málaga ante el recurso de los padres, al subrayar que la escolarización estaba integrada en el concepto básico del derecho a la educación.

Socialización
Tras conocer la sentencia, Mario Bedera, secretario de Estado de Educación y Formación Profesional, ha afirmado que es “fundamental” que los niños asistan al colegio para su socialización. “Pensamos que cuando los niños van al colegio, además de aprender, también se socializan, aprenden comportamientos de grupo que nos parecen fundamentales. El niño se educa fuera del colegio, pero éste tiene una parte que dentro del ámbito familiar, con los padres y los hermanos, no se puede producir”. También ha señalado que los casos en España de jóvenes que alumnos que sólo reciben educación en casa son absolutamente minoritarios, por lo que ha negado que “requiera una regulación”. Así como, indica que la sentencia dice que “los complementos o lo que quieran hacer las familias, puede ser fuera del horario escolar”. Para Bedera, “aprender a compartir o la puesta en común son cosas tan fundamentales para un niño, como la parte de los conocimientos y las destrezas y habilidades, que tiene que ir asumiendo y aprendiendo a lo largo de su vida académica”

Coloquio "Con el Dedo en la Pantalla"


COLOQUIO DEBATE

"CON EL DEDO EN LA PANTALLA”

Ponentes:
José Miguel Marinas Herrera
“El consumo de las nuevas tecnologías en la infancia y la adolescencia”

Iván Rodríguez Pascual
“Las nuevas tecnologías y sus retos y oportunidades para la infancia”

Jorge Flores Fernández
“Fomento de la ciudadanía digital responsable en la infancia y la adolescencia”

Modera:
Justina de Pablo, Grupo de Sociología de la Infancia y la Adolescencia.

Coloquio-debate entre ponentes y participantes.


Tendrá lugar:
.- el viernes, 21 de enero a las 17.30h.
.- en el “Espacio Pozas(C/ Pozas Nº 14- Metro Plaza de España).


COLEGIO DE POLITÓLOGOS Y SOCIÓLOGOS DE MADRID. GRUPO DE SOCIOLOGÍA DE LA INFANCIA Y LA ADOLESCENCIA. C/ Ferraz, 100 (Paseo de carruajes) 28003. MADRID Tfno. 656319643. gsiacolpolsoc@gmail.com, gsiainfanciayadolescencia@gmail.com,  http://gsia.blogspot.com/,



Relaciones Intergeneracionales en las Redes Sociales

Los Padres ya estamos en las Redes Sociales,
qué pasa con los nativos digitales!

Una "Guerra Intergeneracional", "guerra fría", "guerra caliente", simplemente convivencia y buen rollo.

Replicamos aquí este artículo del País, que nos presenta qué está comenzando a pasar con el derecho a la privacidad de los niños y adolescentes, cuando los padres están comenzando a usar las redes sociales


Ups!, mi madre está en Facebook
Las redes sociales ponen a prueba la relación entre generaciones - Los padres quieren seguir a sus hijos para supervisar su vida - Los expertos, divididos ante la presión a la intimidad del menor

MARÍA R. SAHUQUILLO 12/01/2011

Tienes 30 años, pero tu madre no sabe que fumas. Hasta ahora. Alguna fotografía etiquetada en Internet te ha delatado. Jamás tu padre pudo escuchar, salvo de refilón y por accidente, las conversaciones picantes que tienes con tus amigos. Desde hace unos meses estás seguro de que las lee. Todo, de la mano de Facebook y otras redes sociales. Lo que comenzó siendo un espacio para universitarios, jóvenes y adolescentes se ha convertido en un lugar plural en el que convive gente de todos los perfiles y en el que interactúan personas de tres generaciones. Con sus ventajas y desventajas. Como la mezcla de contactos. Y eso no gusta a todas las edades. Muchos adolescentes se quejan de que esta supone una invasión del que consideran su espacio virtual por parte de sus progenitores, a quienes acusan de espiar sus perfiles y ser indiscretos en sus comentarios.

Educar en privacidad
El perfil del 77% de los menores no está protegido, es visible por cualquiera
"La vida en las redes es como estar siempre en un patio de vecinos"
El 70% de los que tienen Facebook han pedido ser 'amigos' de sus hijos
"Es como ponerle un micro para oír sus conversaciones", alerta un experto
Cada vez son más padres los que solicitan entrar en el círculo de amigos de sus hijos. Este paso les otorga, como a cualquier amigo virtual salvo restricción específica, permiso para seguir sus charlas, publicaciones y ver sus fotografías. Así, para algunos progenitores, las redes sociales son como asomarse a la ventana de la vida social de los hijos, algo que, probablemente, de otra forma nunca hubieran logrado.
Pero no solo ellos están en Facebook, Twitter, Hi5 ... Jefes y compañeros de trabajo comparten espacio en Internet. Incluirles en las redes sociales significa abrir una rendija a la vida y la personalidad fuera del espacio laboral. Y no todos son conscientes de lo que supone. Para algunos expertos esa convivencia virtual fortalece las relaciones familiares y laborales. Para otros, sin embargo, no hace sino perjudicarla. Todos ellos avisan: cuidado con los datos, los comentarios y las fotografías compartidas en la Red.
Odio que mis padres estén en Facebook. No a la invasión de padres en las redes sociales. Cero padres en Facebook... Grupos como estos, contra la entrada de progenitores en las redes sociales proliferan. Tienen una explicación: alrededor del 70% de los padres que tienen Facebook -una de las redes sociales con más usuarios, 500 millones en todo el mundo- ha enviado a sus hijos una solicitud de amistad. Y la contraparte: el 39% de los hijos que aceptó la petición les rechazaría si pudiera, según una encuesta realizada por la consultora Nielsen para la compañía de servicios digitales AOL. La investigación -realizada con una muestra de 1.024 padres y 500 adolescentes de entre 13 y 17 años- revela que en el 41% de los casos aceptar la amistad de los padres en la Red es requisito indispensable para tener permiso para usarla. Y más allá, según los autores del estudio, un alto porcentaje de los padres utiliza las redes sociales para ver cómo se comportan sus hijos.
Artemio Baigorri, profesor de Sociología de la Universidad de Extremadura y miembro del Observatorio de Cibersociedad, sostiene que muchos progenitores que hasta ahora veían con auténtico pánico la erupción de las redes sociales y el uso que sus hijos hacían de ellas han perdido el miedo y han pasado directamente a la ofensiva. "Han empezado a utilizarlas, muchos de ellos simplemente para ver qué son. Otros directamente para controlar", dice. Sin embargo, hace una precisión: "Ese salto a la Red se ha producido, sobre todo, en las clases medias. No olvidemos que no todo el mundo tiene acceso a Internet y que muchos padres siguen siendo analfabetos digitales".
Padres curiosos, temerosos y controladores ha habido siempre, dice, pero para este sociólogo experto en tecnologías de la información las redes sociales han logrado que el porcentaje de estos que intentan averiguar qué hacen sus hijos a través de las redes sociales sea mucho mayor que los que antes se daban un paseo por las zonas de botellón o por las puertas de las discotecas para ver qué hacían sus hijos. "Facebook y otras redes similares facilitan y modifican las relaciones sociales. También entre padres e hijos como ya hizo el teléfono móvil, un instrumento que se ha convertido en cordón umbilical con la familia que ha generado más libertad pero también ha incrementado el control hacia los hijos", dice Baigorri, que sostiene que la exposición de la vida en las redes sociales nos retrotrae a las sociedades rurales de hace décadas en las que el ojo del padre o del grupo sobre el comportamiento del individuo era total. "Es como vivir permanentemente en un patio de vecinos", considera.
El uso y la necesidad de control paterno, sin embargo, dependen de la edad. No es lo mismo el uso que hace de ella un adolescente de 13 años que un joven de 18. Tampoco los peligros a los que se enfrentan -y las armas para hacerles frente- son los mismos. Ni los miedos de los padres.
Rosalía de Miguel permite que su hija Ana, de 14 años, esté en una red social con una condición. "Que me agregue como amiga para que yo también vea qué se hace en esas páginas", cuenta. La chica ha cumplido el trato, pero su madre reconoce que a la adolescente no le hace mucha gracia tenerla en su lista de amigos. "Yo no le hago comentarios públicos, pero admito que quizá no sea del todo guay que tus amigos vean que tienes a tu madre en tu página. Están en un momento y en una edad en el que no se dan cuenta de los riesgos que entraña Internet y quieren su libertad y privacidad ante todo. Yo no busco quitársela ni invadirla, solo compartir con ella un espacio que está siendo cada vez más importante en su vida", dice De Miguel.
Guillermo Cánovas, presidente de Protégeles, una organización de protección de la infancia ante las nuevas tecnologías , no está de acuerdo con la visión de De Miguel. "Vemos bien que los padres entren en las redes sociales para ver su funcionamiento y los riesgos que estas suponen. Que las conozcan. También es conveniente que lo hagan para que puedan hablar el mismo idioma que sus hijos, para saber si es fácil acceder a un perfil, o ver una fotografía si no estás agregado como amigo; pero existe un límite, hay que conjugar eso con la privacidad de los menores", dice. "Permitir su acceso al círculo de amigos, que unos padres observen las conversaciones que están teniendo sus hijos en una red social es como si pusieran un micro en el banco del parque en el que se reúnen para escuchar lo que hablan con sus amigos. De hecho, ningún padre se plantearía hacer eso en el patio del colegio", añade.
Apunta otro detalle: "Aquellos padres que entran en el perfil de su hijo tienen que tener en cuenta que están invadiendo no solo la privacidad de este, sino también la de otros menores cuyos padres, además, pueden no estar de acuerdo con que un adulto, a pesar de que sea el padre de un amigo de su hijo, pueda ver las conversaciones o las fotografías de sus hijos". Además, sostiene que su presencia puede coartar la libertad del menor: "Si tiene a su padre agregado tendrá en cuenta que puede ver todos los comentarios que haga, por ejemplo".
Cánovas explica que lo importante es educar a los menores para que aprendan a utilizar las redes sociales, si se hace así, dice, no hay por qué tener miedo. "Se trata de que los perfiles de los menores de 18 años sean, por defecto, privados. Así lo ha solicitado la Comisión Europea y las empresas ya se han comprometido a ello. También se debe concienciar a los propios menores de que solo acepten como amigos en las redes sociales a personas que conozcan físicamente. Si aceptan y cumplen estas dos normas no es posible que extraños entren en sus perfiles", dice el presidente de Protégeles.
Los miembros de esta organización, que imparte talleres para padres y menores, ponen un ejemplo que refleja los riesgos de la Red: "Antes de compartir una foto en Internet tienes que pensar si te apetece que la vea tu familia, o tu jefe dentro de 10 años... Una vez que la imagen está en la Red, aunque la hayas subido de forma restringida a ciertos usuarios, puede ocurrir que se difunda en ámbitos que no habías pensado. Un amigo puede copiarla, por ejemplo, y distribuirla...", explica Cánovas. Teóricamente los menores de 14 años no pueden tener un perfil en las redes sociales, pero en la práctica este dato es difícil de comprobar y los perfiles de adolescentes de 13 años y menos existen. De hecho, el perfil del 77% de los menores que usan las redes sociales no está protegido y es visible al resto de los usuarios, según datos del Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información.
Alonso Hurtado, abogado especializado en nuevas tecnologías, sostiene, sin embargo, que el contacto entre los menores y sus padres en las redes sociales puede ser positivo. "En la medida en que sea el menor libremente quien acepte al padre como contacto, está bien. Todo depende de la finalidad para la que el padre busque ser contacto del menor; no tiene por qué ser para espiarle, sino simplemente para tener también un vínculo en las redes sociales que son cada vez más parte de la vida", dice.
Comprende la incertidumbre y la curiosidad de los progenitores por ver a qué dedican el tiempo sus hijos en la Red. También por conocer con quién hablan en ella. "Un padre pregunta a su hijo con quién va al parque y a qué. En Internet es lo mismo", dice.
Un estudio realizado por investigadores de la London School of Economics y publicado en el Journal of Youth Studies entre universitarios de 21 a 26 años revela que los jóvenes conciben su perfil de red social y su círculo de amigos virtuales como su mundo privado. Y dentro de esta privacidad los padres no son bienvenidos, afirman. Las razones son varias, desde la vergüenza a que los padres puedan ver fotografías o comentarios comprometidos hasta la preocupación de que la madre se vea expuesta y se vuelva vulnerable en la Red. Por esta razón, son muchos los que preferirían no agregar a sus padres como amigos. Aunque los encuestados también reconocen que si estos se lo pidieran lo harían para no herir sus sentimientos.
Así lo ha hecho Héctor Freire. Cuando hace un año se fue a vivir a Londres su madre le envió una solicitud de amistad de Facebook. "Hombre, mucha gracia no me hacía, sobre todo porque no me apetecía que viera mis fotos o algunos comentarios... Pero me daba cosa decirle que no", cuenta el joven de 22 años. La aceptó, y después se enteró de que podía restringir su perfil para que algunos usuarios no vieran toda su información: los comentarios en su muro, sus fotos o vídeos... Así lo hizo. "Creé grupos y así decido qué quiero compartir con cada quien. A lo mejor no me apetece que mi madre o algunos amigos vean determinadas fotos o comentarios", cuenta. Una vez hecho esto encuentra muy práctico el contacto a través de la red social: "Mi familia sabe que estoy bien, ven lo que hago y me ahorro el típico correo electrónico eterno en el que hace unos años hubiera tenido que contar punto por punto hasta lo que he comido".

Educar en privacidad
- Las webs de redes sociales como Facebook o Tuenti tienen ya más de 900 millones de usuarios en todo el mundo.
- Los expertos recomiendan educar a los menores sobre la privacidad de las redes sociales. Un buen método para algunos consiste en comenzar a utilizarlas con ellos. Así los padres conocen un poco más estas páginas y ayudan al menor a configurar la privacidad de su perfil.
- Los menores de 18 años deben tener un perfil privado al que puedan acceder solo los amigos a los que hayan agregado. Además, se recomienda aceptar únicamente a gente a la que se conozca físicamente.
- La mayoría de las redes sociales permiten configurar los perfiles de tal forma que se pueden crear grupos a los que se otorga ciertos derechos: ver fotos o no, poder comentarlas, leer los comentarios que hacen otros amigos en su perfil...
- Antes de subir un vídeo o una fotografía o permitir que se etiquete, los expertos recomiendan hacerse esta pregunta:
¿Querría que su familia viese la imagen? ¿Y su jefe dentro de diez años?

Niños Trofeo, el precio de hacer de los hijos unos campeones

TVE acaba de emitir el documental "Niños Trofeo".

Documental que cuenta la historia de cuarto niños en busca del dinero y la fama, empujados por sus familias
Criar un ganador supone sacrificar la infancia de los niños y su relación familiar


Son niños trofeo, pequeños por los que sus padres hacen una gran apuesta y muchos sacrificios y a los que se presiona desde la niñez con un único objetivo: que ganen y sean los mejores.
Pero, ¿qué precio deben pagar estas familias para darles a sus hijos y a ellos mismos la posibilidad de triunfar?. Niños trofeo cuenta los sacrificios de cuatro niños y sus familias en busca de la gloria y muestra la realidad de que por cada campeón que surge, miles de niños quedan en el camino emocionalmente machacados y rota la relación con sus padres.

"Ganar es lo único que me importa. Para mí es cuestión de vida o muerte", dice Ian, el padre de un joven golfista de once años al que apodan "El lobo" y que lleva practicando golf todos y cada uno de los días de su vida desde que cumplió los cinco años.
Ganar es lo único que me importa. Para mí es cuestión de vida o muerte.
Ian está seguro de que su hijo es el nuevo Tiger Woods, por eso ya no le lleva al colegio. Él y su mujer sólo tienen un objetivo en sus vidas: la búsqueda de la gloria de "El lobo".

"Ser el segundo apesta"


"Ser el segundo apesta, ¿verdad?. Odiamos a los segundones. Es peor que ser el último", bromea Andy, el padre de Billie, otra joven promesa del golf al que, sin embargo, increpa duramente cuando el niño falla. "Hoy me avergüenza ser tu caddie. Me has decepcionado".
Charlie es un boxeador de quince años que no conoce la derrota. Larry, su padre, ha convertido la casa en un gimnasio, el jardín en un ring a tamaño real y en su cuarto ha puesto una sauna. Hace nueve meses que su mujer no pudo aguantar más y se marchó.
La carrera de Eden en el tenis empezó cuanto tenía cuatro años. Su padre se gasta todo lo que tiene en clases y profesores para su hija. Es su gran inversión, pero en ocasiones duda sobre la repercusión que esto puede tener en la relación con su hija "A veces parece algo profesional. Parecen negocios", reconoce.